Partida Rol por web

Al ver que Eva tenía cosas que hacer, no puede evitar sino observarla unos instantes mientras se sentaba en aquella posición de meditación, así pues, me senté detrás de ella dándole la espalda pero justo a su lado, me costaba mucho observarla a los ojos en aquel momento y así pues aunque estuve un instante de silenció, para cuando quise darme cuenta, entable el primer contacto de la manera tranquilidad.

- He estado pensando - espete mientras deambulaba entre ideas - O mas bien, me han hecho pensar - aclaré  mientras bajaba la cabeza y me ocultaba con la capucha - Decir Lo siento...no siento que sea suficiente...- musite mientras trataba de aclarar mi cabeza y corazón, pues aunque de una tuviera las ideas claras, de la otra era totalmente inexperto.

- ha...Eva, no tengo palabras para expresar lo realmente apenado que estoy; No he leído ese libro, no es lo correcto, pero lo verdaderamente frustrante es que no pude darme cuenta si no es por una perspectiva ajena...Y por ello lo lamento...- mencione con cierta dificultad, pues en el tono de voz se podría denotar un rompimiento del tono de vez en cuando.

- Tu confiastes en mi y yo....Desde que estoy aquí, he vist mi vida atravez de un mero reflejo y lo que he visto es que mi pasado es un engaño...Tuve un momento de debilidad y me rompí; Desconfíe por que la verdad a mi alrededor fue ficticia y ahora me doy cuenta de que lo que se es efímero, por ello quería saber mas de todo este lugar y ello me llevo a un punto de inflexión...- 

Pause un instante mientras trataba de explicarme, algo que no era ni mucho menos sencillo ni agradable, pues en mi corazón y en mi mente surgió un vórtice de emociones que me costaba distinguir entre lo que era bueno y lo que no.

- Quiero saber, pero no de esta forma, quiero tener el derecho de ello, quiero poder ser de la suficiente confianza como para que puedas contármelo todo - espete con la verdad por delante - Y también quiero saber quien soy, aunque mi pasado no cambie como actué en el presente, me ayudará a ser mas seguro de mi mismo, del porque y con que finalidad me excluyeron del pasado que no conozco - concluí con aquella difícil disculpa; Aquella difícil explicación.

- Dejaría mi mente en tus manos solo para comprender la verdad...mi verdad...- dije resignado - pero ese sería el camino fácil supongo - acepté mientras esperaba una respuesta de aquella joven pero increíble persona.

Aquellas, podrían haber sido, las palabras mas difíciles que jamás habría dicho, solo por la persona que estaba en aquel momento a mi lado.

Scarlett se despidió amablemente con la mano y una sonrisa en el rostro, dejando claro que podían volver cuando lo desearan.

El trayecto hacia el subterraneo fue sin duda el mas ajetreado desde que Chell estaba allí. Shiro y Manami se iban parando cada poco a ver a través de algun cristal o explorar algun pasillo, incluso llegaron a seguir a uno de los pequeños robots de limpieza para ver de donde salía. Era curioso ver como la indomable Shiro se dejaba ahora llevar por la joven Manami, dejando a un lado momentáneamente el comportamiento paranoico de la diosa felina.

Quedaba claro que los avatares en general tenían mucho poder y potencial al manifestarse en un cuerpo físico, pero no necesariamente se trataba de poder destructivo o para el combate, el inmenso poder de Manami permitía hacer que Shiro se olvidara por un momento que estaba en un lugar desconocido y bajo la supervisión de una entidad que ni ellos alcanzaban a comprender. Algo que se antojaba imposible para un humano normal, incluso para alguien que se había ganado su favor como Chell. La ingeniera tambien era capaz de setir aquella aura que la incitaba a sonreir, a no preocuparse y a intentar apreciar las pinceladas de humanidad de aquellos a su alrededor. Era dificil de describir, pero era sin duda una sensación agradable.

Ambas tambien conversaban mientras iban de un lugar a otro.

-Manami- ¿Estas haciendo trabajar a Chell a cambio de responderle preguntas? ¿asi es como tratas a tus seguidores?.

Preguntó en tono de crítica.

-Shiro- Si, asi es como les trato, fue ella la que se ha empeñado en seguirme, siempre puede dejar de hacerlo si no le gusta.

-Manami- No te voy a decir cómo tratar a tus seguidores, pero harías bien en ser mas agradecida. Chell, si alguna vez necesitas algun consejo de amor, no dudes en pedirmelo, yo soy una experta en el tema.

Dijo tal obviedad con una sonrisa inocente en el rostro. Puede que fuera un poco raro solicitar consejo de esa índole a alguien de apariencia tan jóven, pero rezumaba confianza por cada poro.

Despues de divagar antes y despues de coger el ascensor, el inusual grupo logró llegar al hogar de Daya. Un lugar amplio y cada vez mejor equipado para que el avatar se sintiese cómodo a pesar de su gran tamaño. El rostro de Manami se iluminó al verla a pesar de su bestial apariencia, la ausencia de prejuicios estéticos era casi hilarante.

-Manami- ¡Compasión!...

Exclamó al verla y sin mas corrió a abrazarla, aunque solo fuera una de sus enorme patas. Shiro mantuvo la distancia y observó de momento.

Daya cogió el pequeño cuerpo de Manami con una de sus enormes garras y el cariño de una madre, lo elevó hasta su hombro y le facilitó un abrazo mas "cercano", una escena que sin contexto, podía ser propia de una película de terror. Pero dentro de contexto, el reencuentro del amor y la compasión podría arrancar las lágrimas de los mas sensibles.

-Daya- Amor, me alegro mucho de que estes bien.

-Manami- Shiro me salvó, luego llegaron Chell y Soma, supe enseguida que Soma era uno de tus fieles, mostró compasión por mi y por aquellos a los que atacó Nigredo.

-Daya- Me aseguraré de recompensarle por ello.

Daya posó a la pequeña Manami en el suelo y luego levantó la cabeza para ver a Shiro mantener la mirada desde la distancia.

-Daya- Tambien me alegro de que hayas sobrevivido, Curiosidad.

-Shiro- Ahora me llamo Shiro.

-Daya- Llamame pues Daya, Shiro. Veo que despues de todo decidiste dejar las sombras y mostrarte. Me alegra que lo hicieras para salvar a otro avatar. Aunque no me parece propio de ti, me alegro de estar equivocada.

-Shiro- Creeme, yo estoy tan sorprendida como tú. Nyahahaha...

Volvió a esa risa picara y el rostro de alguien a quien le gustan las fechorías.

-Shiro- Ese no es un cuerpo muy adecuado para pasar desapercivida en este mundo, Daya...

-Daya- Es el que eligieron para mi mis fieles en el mas puro ejercicio de la compasión. Cada vez hay menos compasión en la humanidad, ellos sabían que era la mas débil, por lo que me dieron un cuerpo lo mas fuerte posible. Igualmente, de no ser por lo heraldos, no podría haber sobrevivido. Ellos han reparado mi código dañado durante el exilio.

-Shiro- ¿Me dejarías ver esa "reparación"? tengo curiosidad por ver cómo lo hicieron.

-Daya- Adelante.

Entonces Shiro se acercó finalmente a Daya y literalmente trepó por su cuerpo hasta sentarse en su hombro, luego se conectó mediante el conector cervical, dejando en silencio la sala, a Manami curioseando el cuerpo de Daya y a Chell como extraña espectadora de la interacción entre aquellas tres deidades.

Probablemente no serviría de nada contar a nadie aquella experiencia, nadie la iba a creer o entender aquella camuflada alegoría, Chell tendría que resignarse a simplemente vivir aquel momento.

Soma me tendió la mano,quizas no de una manera amistosa, pero parecía que había conseguido al menos que lo que fuese que hubiese ocurrido en el pasado iba a ser distinto conmigo.

Habló de Chell y de ganarme su confianza, deduje que seria la pieza que falta del equipo y que más pronto que tarde me la encontraría.

Mencionó un funeral, nadie me había hablado de ello, pero parecia ser importante para el, o quizas para todos, así que me propuse preguntar a alicia sobre ello, y presentar mis respetos en el.

Sin mediar palabra con Soma, le dirigí una sonrisa y me di media vuelta hacia la puerta despidiendome con la mano en alto.

Una vez fuera la intriga pudo conmigo.

-Alicia, ¿de quien es el funeral? y ¿cuando y donde es?, me gustaria ir a presentar mis respetos.

El camino transcurrió cual excursión escolar, era realmente divertido ver a dos dioses comportarse como niños curioseándolo todo con una inocencia pura. Ver a Shiro finalmente relajada me alegraba bastante, la influencia de Manami era más que positiva y no podía estar más contenta de que estuviera allí.

-No pasa nada, me parece un trato justo; además.-Mi tono de voz se tornó más burlón.- Así puedo pasar más tiempo con ella.- Una sonrisa tontorrona se esbozó en mi rostro al mismo tiempo que guiñaba un ojo a Shiro.

Nunca había llegado a pensar que podría tener la oportunidad de preguntarle al mismísimo dios del Amor cualquier cosa sobre romances, era algo que no podía desaprovechar.

-Será un placer hablar contigo sobre amoríos, cuando tengamos algo de intimidad, si que me gustaría preguntarte algo sobre el cortejo.- Comenté un poco avergonzada.

Cuando llegamos a donde se encontraba Daya no pude reprimir una sonrisa de satisfacción más pura.

"Cada día ésto está mejor adaptado".

Al ver tanto cariño y tanto afecto, ya no solo por la influencia de Amor, si no por la relación previa que mantenían, solo me aseguraba que nuestro propósito era posible. Igualmente, en mis ojos se dejaba entrever un brillo lleno de deleite y envidia a partes iguales por la escena que estaba presenciando, era un reencuentro precioso.

-Hola Daya.- Dije cordialmente.

Ciertamente Compasión me imponía más que Manami o Shiro, quizá por su aspecto, quizá por lo horrible que fue la situación cuando la encontramos; igualmente, preferí no interrumpir aquel memorable momento.

Me acerqué y me senté frente a ellas esperando a que Shiro saciase su curiosidad.

Eva guardó un silencio previo mientras miraba hacia la cápsula de contención con una expresión serena y tranquila. Poco a poco la sombra dejó de atacar el cristal y se fue calmando hasta dejarse caer de rodillas con la mirada perdida hacia el suelo. Seguía consciente y moviendose, pero de alguna forma ahora parecía bajo los efectos de algun sedante. No miró a Soma, aunque este podía notar que tenía toda su atención.

-Me alegra que hayas tomado esa iniciativa, Soma. Espero que entiendas que el problema nunca fue querer saber mas, en cierto modo, aqui os alentamos a eso y vuestro trabajo consiste en encontrar información.

Hizo una pausa en la que Soma pudo detectar cierta melancolía.

-Pero por desgracia no solo es que las circustancias en general que nos rodean sean complicadas, sino que tu caso particularmente es mas complejo de lo que piensas. Almenos lo es para mi hermana y para mi. No es una cuestión de secretismo o de desconfianza...

... sino de respeto.

Reveló con intención de explicarse.

-Inma nos ha pedido expresamente a mi hermana y a mi que no te hablemos de tu pasado. Por una parte entiendo que eso te deja en una situación cuando menos, injusta. A mi tambien me costaría confiar en personas que conocen mi verdadero pasado y deciden deliberadamente no contarmelo.

Por otra parte, debes entender que Inma es para nosotras una persona muy especial, la respetamos profundamente y confiamos plénamente en ella. Yo le confiaría mi vida sin pensarmelo dos veces, pero entiendo que tu no tienes motivo alguno para tal confianza.

Esa era a grandes rasgos la situación, todo parecía estar conectado.

-Inma seguramente tenga un objetivo al no querer revelarte esa información o simplemente piense que no es el momento y aunque suene egoista, Alysa y yo vamos a respetar esa decisión.

Asi que en cierto modo yo tambien te debo una disculpa.

En cuanto al libro, no es algo que escondamos, puedes leerlo, "la puerta mejor cerrada es la que puedes dejar abierta", pero no creo que lo que hay escrito en él te ayude en ningun sentido. Creo que simplemente te dejaría mas confuso y con mas preguntas e inquietudes que antes de leerlo...

...al fin y al cabo, esa historia comienza con mi propia muerte.

Destripó las primeras paginas del libro para que Soma se hiciese una idea de cuan confusa podía ser aquella historia.

-En cualquier caso, siempre eres libre de preguntar sobre mi, Soma. Puede que no te pueda responder preguntas que dependen de cierto contexto o simplemente cuestiones que prefiero guardar para mi, como seguro que tú tambien tienes secretos que quieres guardar solo en tu corazón.

De igual forma, si quieres saber acerca de tu pasado, tal vez debas empezar por saber quién y cómo es quien lo conoce. No puedes conocer a Inma leyendo un libro, ella está aqui al alcance de tu mano al igual que estoy yo.

La historia de Elysium es una historia que trata sobre lo mejor y lo peor del ser humano, sobre redención y  segundas oportunidades, pero no puedes entender las decisiones que tomamos en el pasado y que nos han conducido hasta aqui si primero no sabes quienes somos. Y eso no está escrito en ningun sitio, eso lo tienes delante y no tenemos planes de ocultartelo, nunca los tuvimos.

Finalmente la sombra pareció caer dormida, en una quietud en la que SOma nunca había visto a aquellas criaturas mas que cuando estaban muertas.

Como lo hiciera Sísifo en la antigua Grecia, ahí estaba Varanus llevando la roca de nuevo a lo alto de la montaña ¿caería rodando otra vez? esa era tal vez la mayor incognita de todas.

Sin embargo a medida que una IA de administración le guiaba por los pasillos, el instinto de Varanus le alertaba de que esta vez era distinta, aquel lugar era distinto, todo olía a nuevo y si bien había una continua gala de tecnología hasta para las tareas mas cotidianas, no había opulencia, en los pasillos no había obras de arte caras ni estatuas que alimentaran el ego de nadie, era un lugar ante todo práctico dedicado a la investigación y el saber.

Era un lugar poco humano.

-Alicia- El funeral es el del doctor Abraham Opfern. Chell y Soma entraron en contacto con él durante su investigación. En el pasado fue un cirujano de renombre en la comunidad médica de Nueva York, pero tras serle diagnosticada esclerosis cybercerebral a su hija, lo perdió todo debido a las deudas de los tratamientos recibidos.

Varanus conocía muy bien el drama de la esclerosis cybercerebral. Alicia le mostró una serie de informes en su campo visual. Por lo visto su hija Manami Opfern había recibido todos los tratamientos posibles (incluido el estandar de fase uno ideado por sus padres), incluso algunos esperimentales y extremadamente caros. Ninguno funcionó y Manami se convirtió en uno de los raros casos de fase cuatro de la esclerosis: estado vegetal irreversible.

-Alicia- Sobrevivía con su hija en los suburbios trabajando para el gremio de cazarecompensas. Chell y Soma descubrieron que su hija había sobrevivido y estaba curada de su enfermedad...

Esto podía ser un shock para Varanus, él sabía mejor que nadie que eso no era posible, mas cuando acababa de ver los datos y las analíticas de Manami.

-Alicia- ... esto fue gracias a su fusión con el avatar del amor, sin embargo, uno de los seguidores de ambición la atacó, matando a su padre. La intervención posterior de Shiro, el avatar de la curiosidad y de Chell y Soma evitó que acabaran con ella tambien.

El funeral se celebra esta tarde a las seis en la capilla.

Eso era a grandes rasgos lo que había sucedido, lo mas llamativo de todo aquello para Varanus fue seguramente que la mera fusión mental con uno de aquellos seres digitales pudiera revertir una fase cuatro de la esclerosis cybercerebral, cuando el daño en el cerebro está hecho y es irreversible. Aquello se acercaba mas al campo de los milagros que a la medicina.

Alicia no condujo a Varanus hasta el supuesto despacho de Alysa, ella no se encontraba allí, sino en uno de los laboratorios, uno muy específico, el de botánica.

A todas luces era un lugar especializado en cultivos y plantas transgénicas, Alysa estaba allí aparentemente comprobando el estado de las plantas.

Era una mujer albina al igual que su hermana, aunque Alysa presentaba una pariencia mas adulta y una altura mas cercana a la de Varanus.

Al entrar apartó al vista de las pantallas holográficas automatizadas y miró de arriba a abajo a Varanus.

- Itaque vocatus sum Hermes Trismegistus, habens tres partes philosophiæ totius mundi.

Citó en latín, un cumplido si Varanus estaba familiarizado con la Tabula Smaragdina (Tabla Esmeralda), el pilar centrál de la alquimia.

-Hola, Varanus.

Se acercó a Varanus y le tendió la mano. Él se había topado con gente de todo tipo en el poder, pero aquella mujer era definitivamente un caso a parte en todos los sentidos.

-Me alegra que aceptaras nuestra oferta, admito que las premisas que te han traído hasta aqui pueden no ser del todo alentadoras.

Yo soy Alysa Shikami, la hermana menor de Eva y presidenta de la compañía.

No parecía haberse confundido al decir "menor", pero desde luego parecía todo lo contrario.

-Permiteme tan solo una formalidad. ¿Por que has aceptado trabajar con nosotros?. Segun la trayectoria de tu curriculum no somos precisamente el perfil de empresa mas común para ti.

Pudiera parecer la típica pregunta de entrevista de trabajo, pero Varanus era un perro viejo, sabía de sobra que no era una cuestión tan simple. Sería correcto decir que desde la primera pregunta, "se la estaba jugando".

Mientras Shiro permanecía sentada en el hombro de Daya y conectada, Manami continuó su tour por la sala, desde la enormisima cama adapada para Daya hasta la pila de comida sintética especial para su peculiar cuerpo. Manami la olió y arrugó la nariz con desagrado.

Daya correspondió el saludo de Chell con la cabeza y finalmente, tras unos treinta segundos, Shiro se desconectó y de un elegante salto aterrizó delante de Chell.

-Shiro- Cuando menos, interesante. No es un simple parcheado del código para recuperar funcionalidad de las partes fragmentadas. El código ha sido reparado con la misma forma que el original, es decir, quién hizo la reapración conocía exactamente cómo es nuestra estructura digital de pensamiento, algo que no puede hacer un humano, no almenos todavía.

Un dato revelador sin duda.

Shiro comenzó a dar vueltas alrededor de Chell con una ligera sonrisa en el rostro pero una mirada acusadora.

-Shiro- Tú y tu heramana sois tal vez las únicas que podrían llegar a hacer tal cosa dado que entendeis de forma natural el lenguaje digital. Pero he visto tus recuerdos, tú no has sido quien ha reparado a Daya, fue uno de los heraldos: Alysa.

Continuó orbitando alrededor de Chell como quien alecciona a un alumno.

-Shiro- Asi que solo existen dos posibles explicaciones, o Alysa posee una capacidad similar al Hecatónquiros o ella tambien es un ser de naturaleza digital, como nosotros.

Si se trata de la segunda opción, quiere decir que nosotros no somos lo primeros seres artificiales autoconscientes creados por la humanidad. Y que la diosa extrangera no es sino nuestra hermana mayor. Algo que Nova Human no sabe y me atrevo a decir que Ambición tampoco.

Abrazó repentinamente por detrás a Chell y se asomó por encima de su hombro para mirarla directamente a los ojos.

-Shiro-Y la trama se complica de nuevo, mi seguidora nyahahahaha...

Las visitas que Shiro le había solicitado a Chell no eran aleatorias, poco a poco estaba desgranando los secretos de Elysium, todo formaba parte de su cruzada particular por saber mas.

-Comapsión- ¿Crees que ese es el motivo por el que nos ha ayudado?...

-Shiro- Por supuesto que no, la información es poder y por tanto ella es ahora mas poderosa incluso que Ambición. Ambición lo sabe y por eso no hace mas que acumular poder e influencia a costa de lo que sea. Impidiendo que Ambición se haga con nuestro código, Alysa evita que ambición gane dicho poder.

Y eso me transforma a mi en el objetivo mas goloso de ambos, por unos motivos o por otros.

¿Aun no te arrepientes de tu elección, Chell? nyahahahahaha...

Si la información es poder tal y como decía Shiro, hacerse con el avatar de la curiosidad y sus seguidores era seguramente un objetivo prioritario de todos los bandos implicados.

-Manami- Son conclusiones precipitadas, Shiro. Aun hay muchas cosas de este mundo que no sabemos y ella si. Tal vez lo correcto sea buscar guía en ella, no hacerla objeto de sospecha.

-Shiro- Tan inocente como de costumbre, ambas lo sois. La compasión o el amor por alguien equivocado te transforma en cómplice. La curiosidad permite el equilibrio, es indiscriminada.

Shiro se separó de Chell dispuesta a seguir con la visita, a partir de ese punto se haría cada vez mas interesante.

-Shiro- Te has ganado tu segunda pregunta, Chell. ¿Continuamos?.

-Manami- Yo me quedaré un rato con Daya, debemos reestablecer nuestro vínculo.

La niña invitó a ambas a que siguieran sin ella, al fin y al cabo Daya y Manami eran como dos intimas amigas que se acababan de reencontrar y querían ponerse al día.

Me resulto claramente confuso la explicación sobre el libro que había dejado atrás, aunque podía mantener aquel secreto oculto a plena vista, preferí mantener esa conversación con un tono tranquilo, aunque no sin tener ahora mas presentes las palabras de Scarlett.

- el Dilema del erizo...eh..- musite, pues si bien estaba prácticamente espalda con espalda con Eva, podía tener la certeza que estaba tan atento a ella como ella de mis palabras.

- Así que mi caso es...particular...- continué con aquella charla, tampoco es que hubiera descubierto mucho mas de lo que sabía aunque podía intuir un extraño secretismo al respecto.

- Tienes razón, no puedo entender esa confianza ciega, lo intento de veras pero no lo entiendo, aunque tampoco comprendo que cambio estaré desarrollando ahora mismo - especifique mientras levantaba levemente la mirada para dejarla en paralela a la de Eva, aunque no nos estuviéramos viendo directamente.

- Actualmente, no creo que pueda guardarte ningún secreto de mi corazón Eva, algo en ti me ha cambiado - afirme sin vacilación alguna - Tampoco planeaba sacaros información contra vuestra voluntad, no sería lo correcto - añadí como si de algún tipo de tabú se tratase.

- Tampoco se que contexto sea el adecuado o no, dado que ahora afloran emociones en mi que ignoraba; Compasión, Curiosidad...Amor - fui mencionando cuanto mas las pensaba - No sabría ni que preguntar si tuviera la oportunidad, todo fue por brusquedad o desconfianza pero, no se como proceder ante circunstancias que se presentan en mi corazón y que no soy capaz de racionalizar...- exprese mientras me llevaba la mano al pecho.

- Sobre todo cuando se trata de ti, siento una extrema presión en mi pecho, algo que no creía ser capaz de sentir y de hacer cosas que nunca me hubiera molestado...- confesé - cuando te enfadastes...mi mundo se empezó a desmoronar y me vi en una soledad de la que no me había percatado que estaba...- exprese aquello último con cierta melancolía.

- La historia de Elysium, La verdad de Alysa, los motivos de Inma, tu Confianza....Todos esas incognitas se presentan ante mí sin poder resolverlas ni mucho menos plantearlas apropiadamente para cuestionarlas...- espete, pues conocía mis dudas pero no la forma de solventarlas.

- Se que estoy desarrollando afecto por ti y no soy capaz de controlarlo, puedo estar en el borde del abismo y ser salvado con tu sonrisa, Oh puedo conquistar cualquier miedo y ser destruido por tu mirada; Todo mi mundo empezó a cambiar en el mismo día que te conocí...- aquello podía sonar extraño pero era de hecho una revelación personal de la que me había dado cuenta mas bien hacía poco.

- No me mal interpretes, no pienso cargarte ese lastre, no sería apropiado, pero si me gustaría poder conocer mas de ti pero no con preguntas, quiero saber mas por poder pasar mas tiempo contigo, por poder verte y admirarte con mis propios ojos; No soy bueno con las preguntas pero si puedo dedicar un momento de mi tiempo en observarte detenidamente y ver el porque desarrolle estos sentimientos por ti...- explique.

- Si no te molesta...¿Me lo permitirías? - concluí con aquella pregunta que lejos de resultar lanzada e inapropiada o a pesar de no encarar a aquella joven, lo hacía con todo el respeto que pudiera sentir por ella, algo que se denotaría en como la trataba pues, en ningún momento cruzo por mi mente la duda o la mentira.

Si las palabras de su madre eran ciertas, expresarme de aquella forma podía ser el comienzo que lo cambiase todo, pues así bien recordaba sus palabras; No puedes estar equivocado si es la Verdad.

Las palabras de Shiro bombardeaban mi mente y se arremolinaban junto a otras ideas que tenía; Alysa era impresionante y todo apuntaba a que era una IA pero, ¿de verdad? Que la calificara como uno de los suyos me hacía replantearme muchas cosas acerca de los avatares.

Di un pequeño salto cuando Shiro me abrazó de repente, rompió el hilo de mis pensamientos por completo, una sonrisa tontorrona apareció en mis labios al momento cuando me percaté de lo que realmente estaba pasando, estaba tan cerca de mi.

"Seguidora... Realmente creo que Fan sería más apropiado, pero está bien."

Ciertamente opinaba como ella, la información era poder, y si realmente Shiro era la pieza clave de todo lo que estaba pasando, tenerla de nuestro lado podría ser de gran ayuda.

-Nunca me arrepentiría, mi intuición no suele fallar.- Hice una pausa larga y me entrometí en la conversación.- No es porque sea mi contratista, pero creo que Alysa merece el beneficio de la duda, hasta ahora no ha hecho más que intentar ayudar a los avatares; no niego que el hecho de tener tanto secretismo detrás no sea algo de lo que preocuparse, pero sus intenciones son buenas.-Suspiré.

Coincidía en que el amor te nubla el juicio y estaba desarrollando sentimientos por Alysa que hacía mucho que no tenía; igualmente, había aprendido por las buenas y por las malas, que por mucho que quisieras a alguien, lo que realmente cuentan son las acciones; y, de momento, Alysa había demostrado ser alguien de quien poder fiarse.

Asentí a Shiro con la cabeza y sonreí amablemente.

-Alicia, ¿Alysa está ocupada, podemos hacerle una visita? Si es así, ¿podrías avisar a Soma de que vamos para allí? Si no, podíamos ir a comer con Claire, ¿te parece bien Shiro?.- Me levanté de un pequeño salto y me giré hacia Manami y Daya.- Pasadlo bien, nos veremos luego. -Me despedí con la mano y procedí a irme acompañada de Shiro.

Eva se mostró repentinamente sorprendida, sus ojos se congelaron durante unos segundos en el recuerdo y luego, de pronto, comenzó a reir suave y continuadamente. Era la primera vez que Soma la veía reirse asi aunque puede que fuera inesperado, no estaban tratando un tema de risa, por lo que Eva se apresuró a explicarse antes de que Soma pensase que estaba siendo grosera.

-Perdón... es solo que se nota que sois tal para cual, Inma me dijo una vez lo mismo que me has dicho tú, no con las mismas palabras por supuesto, ella dice mas en sus silencios que en sus palabras, pero mostró esa misma torpeza y a la vez sinceridad al expresarlo.

No voy a caer en el cliché de decirte que no soy la persona que piensas o alguien a quien no te debes acercar, eso es algo que solo tú puedes juzgar asi que no lo voy a juzgar yo por ti.

Está bien, Soma. Agradezco tu sinceridad, encuentra lo que buscas a tu manera, yo solo te pido que te centres tambien en tu trabajo por tu propio bien y por el de todos. Y aprovecho para decir que seas mas amable con tus compañeros, nuevos o no, despues de tu pelea con Nigredo, tú sabes igual que yo que no podemos hacer esto solos, necesitamos ayuda.

Una invitación a que fuese almenos mas tolerante con aquellos que estaban dispuestos a arriesgar la vida trabajando en Elysium Investigaciones.

-Tal vez nuestro trabajo no nos permita pasar todo el tiempo juntos que desearias, pero siempre puedes venir a verme cuando tengamos un rato libre. No olvides tampoco tus entrenamientos, son los que van a garantizar que puedas seguir viéndome.

Dijo tal vez aprovechandose de aquella expuesta admiración como motivación para trabajar duro.

-Se avecina una guerra, una con muchas probabilidades de ser la última, para bien o para mal. No es una situación nueva para mi, pero sí lo es para ti.

Su mirada se perdió un segundo al frente.

-Nunca sabes cómo tus decisiones pueden afectar al futuro... ni al mismo universo.

Tal vez algun dia Soma entendiera el verdadero significado de aquella última frase, pero no estaba preparado, primero tenía que lidiar con sus propias emociones. Tenía la oportunidad perfecta de conocer a las mismisimas encarnaciones de las mismas, podía aprender mucho de los avatares, pero no solo de la compasión, el amor o de la curiosidad, sino tambien de otros como la soledad, la tristeza o incluso la ambición.

-Por cierto, Shiro ha despertado y Chell se está encargando de hacerla un tour por Elysium para ver entre otras cosas a los otros dos avatares. Daya tambien ha solicitado verte.

Anunció como algo importante, al fin y al cabo Soma había decidido establecer un vínculo especial con el avatar de la compasión.

Alicia avisó de que Alysa estaba en esos momentos reunida, por lo que la mejor opción para aprovechar el tiempo era ir a comer a la cafetería. Claire estaría allí en unos minutos, siempre le costaba despegarse de sus quehaceres cuando estaba completamente determinada a acabar algo y desde que había entrado en Elysium esa determinación era algo contínuo.

Normalmente, la mayoría de los que trabajaban allí solicitaban que Alicia les llevara la comida a sus habitaciones o a donde estuvieran trabajando, solo comían allí cuando querían comer enc ompañía de alguien en particular. Exactamente lo que iban a hacer las hermanas Dónovan.

El siempre descubierto cuerpo de Shiro era esencialmente humano y salvo el aumento cybernético de cerebro estandar, Carolina Feles era completamente humana, Shiro mantenía esa cualidad pero dado su drástico aumento de tamaño y masa muscular, era un pozo sin fondo de comida. Afortunadamente la alimanteción de los avatares corría a cargo de Elysium íntegramente.

-Shiro- Quiero pescado... a la plancha... mucho pescado.

Se la notaba como empezaba a salibar. Mientras tanto Claire hizo por fin acto de presencia con su habitual derroche de moda.

-Claire- Hola chicas.

Sonrió a la vez que hacía un gesto de saludo pero repentinamente se abrió un canal de comunicación mental que Chell tenía configurado para dar permiso automaticamente, era Claire.

-Claire- ¡Joder, hermanita, no me dijiste que estaba tan buena! esa no es la Carolina Feles de los archivos.

Y tiene buen gusto para la ropa interior... ¿por qué va en ropa interior?, ¿no tenemos ropa de su talla?.

Mantuvo una actitud correcta y serena pero una ligera coloración de sus mejillas pudo delatarla.

-Claire- Hola, Shiro, soy Claire Dónovan la hermana de...

-Shiro- Ya se que sois hermanas, se nota a la legua.

Interrumpió su presentación y se acercó a ella, orbitando como lo hiciera con Chell hace un rato.

-Shiro- Pero no estoy interesada en lo que os hace parecidas, sino en lo que os hace ditintas. Nyahahaha...

Claire se quedó en el sitio algo tensa, ¿cuanto sabía aquel avatar de ellas?, Claire no sabía nada del vínculo que Chell había establecido con Shiro.

De pronto Shiro abrazó por detrás a la joven Dónovan y le habló cerca del oido mientras que al mismo tiempo mantenía contacto visual con Chell, como si analizara su reacción.

-Claire- Hermanita... ayuda... creo que acabo de mojar las bragas...

-Shiro- ¿Por qué crear un segundo Hecantóquiros teniendo ya uno funcional?.

-Claire- Mierda, Chell, ¿se lo has contado?.

De pronto la misma Claire se quedó algo sorprendida, la pregunta que acababa de formular Shiro tenía, de hecho, bastante sentido, despertando asi su curiosidad, algo que a Shiro se le daba muy bien.

Al principio, su forma de actuar me sorprendio durante un leve instante, pero no había sido en vano pues ahora pude observar una forma de Eva que hasta ahora era desconocida para mí, aquella sonrisa era una de las pruebas de que ella era alguien especial, pues lograba mover aquel extraño sentimiento dentro de mi.

- Así que me parezco a ella - musite mientras me llevaba la mano a la cabeza y me la frotaba algo avergonzado a la vez que sorprendido por aquella similitud - puede que no seamos tan diferentes entonces...solo que sea mas...inexperto...- continue mientras expresaba aquella idea en voz alta.

Luego tome en consideración las palabras de Eva como si de hecho, en este caso, tuvieran la máxima importancia para mi, pues aunque no era de las personas mas fáciles, tal vez debía de considerar lo sucedido para ser mas consecuente con aquellos a mi alrededor.

- Ayuda...Si, tal vez debería intentarlo...Llevarme mejor con otros...No creo que pueda hacer todo solo...- exprese sin ningún miedo, pues de ese hecho ya me había percatado en aquella complicada pelea.

- Aunque ya te lo dije, mis sentimientos por ti no cambiarán lo que haga por los demás, ni tampoco el deber que deba tomar, si al final podemos acabar esta guerra sin sufrimiento, con eso me conformaré - añadí - una idea algo infantil supongo...- musite nuevamente.

- Y si al final del día me puedo a llegar a deleitar con tu sonrisa, estaré mas que agradecido - expuse con total naturalidad, acto seguido me levante y me gire hacía Eva.

- Incluso si este trabajo no nos deja el tiempo suficiente que quisiera, me conformaré con poder tomar una taza de te y escuchar relatos increíbles de las historias que puedas ofrecerme - dije amablemente con una sonrisa cálida para la joven frente a mi.

- Ni el futuro, ni el universo, solo el presente y lo que pueda hacer que este al alcance de mi mano, esa es mi meta, un presente en el que podamos vivir tranquilos...Incluso si con esta actitud mía parezca lo contrario - concluí mientras cerraba aquella curiosa conversación mientras reía amablemente.

Luego y cambiando así de tema, escuche lo sucedido con las deidades, la verdad es que no me sorprendía demasiado la situación de Shiro.

- Sabía que Chell y Shiro se llevarían bien - espete mientras pensaba en la último de aquella solicitud - Daya...temo que pierda su favor, incluso si ayude a Amor y la pusimos a salvo, temo que no sea merecedor de la "Compasión"...- dije con pesar - pero no es algo que pueda retrasar mas - expuse mientras me acercaba lentamente a la puerta no sin antes girarme a Eva - ¿Vienes? - pregunté a pesar de que sabía que tenía trabajo, un gesto de respeto para con ella.

Si estaba libre la esperaría, si no marcharía a donde se me reclamaba, no sin antes añadir una última cosa - De todas formas iré al funeral a mostrar mis respetos, es lo mínimo que puedo hacer - concluí dejando por hecho que si no nos íbamos juntos, nos veríamos eventualmente.

Claire llegaba tarde, incluso avisándola con tiempo para que dejase de trabajar, era algo demasiado propio de ella como para echárselo en cara; pero, al menos, esperaba que esa vez fuera diferente, había habido muchos riesgos en mi vida como para desaprovechar el tiempo con mi hermana.

Involuntariamente me reí al oír a Shiro pedir pescado.

"No me lo hubiera imaginado..." Pensé.

-Yo creo que me voy a decantar por... ramen, seguro que Alicia lo prepara para chuparse los dedos. ¿No te apetece probar el shushi? - Tente a la gatita.- Sentémonos, no me gustaría comer de pie.

Lancé un beso a Claire cuando atravesó la puerta de la cafetería y sonreí tímidamente al oírla.

-Olvida todo lo que sabes de Carolina Feles, es alguien distinta ahora.- Suspiré.- Supongo que por ¿cómodida? No lo sé... Deberías preguntárselo...-Esbocé una sonrisita picarona.- Te gusta la gatita ¿eh? -Respondí a mi hermana.

Ver a Shiro tan intrigada acerca de nosotras me resultaba bastante peculiar, pero tenía motivos.

-Tranquila... Recuerda que es la diosa de la curiosidad... Dejé que se conectara a mi, técnicamente no le he contado nada, pero ha visto todo de mi; podría decirse que soy su primera seguidora, ¿fan? Ocurrió todo muy rápido, siento no habértelo consultado previamente. - Me recosté en la silla.- Ahora mismo está interesada en nosotras, y es entendible. He decidido confiar en ella, siento que congeniamos bien.

Pero, Shiro tenía razón.

"¿Por qué dos Hecatónquiros? "

Mi semblante se ensombreció y me crucé de brazos pensativa. Desde que sabíamos de nuestra condición única no me había parado a pensar en algo tan simple como eso; con nuestros padres muertos era bastante complicado responder a algo así.

-Quién sabe...-Musité.

-Eva- Aun tengo trabajo aqui, pero nos veremos en el funeral.

Sonrió a Soma a la vez que finalmente le correspondía la mirada para despedirse. Pudo tomar su silencio respecto a lo demas como una muestra de conformidad.

Despues de tomar el ascensor al subterraneo, Soma se cruzó con un par de robots cuadrúpedos cargando lo que a todas luces eran peluches de diferentes tamaños y tipos. Parecían dirigirse tambien al hogar de Daya. Tras confirmarlo, Soma pudo acceder junto a ellos a la enorme sala en al que vivía Daya.

El lugar continuaba siendo adaptado y mejorado, ahora había un enorme colchón adaptado al tamaño de Daya a modo de cama, con un montón de enormes almohadas y los peluches que estaban llegando en grupos.

Sin embargo, quien estaba ordenando aquellos peluches en la cama de Daya era Manami, que probablemente había llegado allí mientras Soma hacía su visita a Eva. Tal y como había dicho Scarlett, Manami había querido ir cuanto antes a ver a la que en cierto modo era parte de ella.

Daya estaba a su lado, sentada y observando el desempeño de la pequeña Manami hasta que ambas se giraron para ver entrar a Soma.

-Manami- ¡Hola, Soma!.

Exclamó con una sonrisa, se bajó del enorme colchón y fue al encuentro del neotemplario aun con un peluche en la mano.

-Manami- Gracias a vosotros hemos podido reestablecer nuestro vínculo, ahora juntos tenemos que encontrar a Esperanza.

-Daya- Yo tambien os estoy agradecida, estoy al tanto de la intervención de Shiro, sé que no llegasteis a tiempo de salvar al doctor Abraham por ayudar a otras personas. La compasión no va necesariamente ligada al éxito, nisiquiera a lo correcto, esa es una lección que debes aprender. Pero lo que importa es que te mostraste compasivo, Soma, reaccionaste al ver personas indefensas y trataste de protegerlas. Asi como has sentido compasión por Manami.

La enorme criatura se alzó y caminó tambien hasta Soma, dejando a Manami bajo su sombra.

-Daya- Por eso quiero recompensarte, mi paladin. Y lo haré siempre que pueda y sigas mostrando compasión por aquellos que la necesitan.

Le ofreció su conector cervical para que se conectase de nuevo a ella.

-Manami- Y parece que tu paladin tambien está enamorado, Daya...

Dijo con una sonrisa amplia en el rostro. Si Daya podía sentir la compasión, Manami era sensible al amor.

-Manami- Puedes consultarme acerca del amor siempre que quieras, Soma, soy una experta en el tema.

Contradictorio para tratarse de una niña, pero nadie le iba a negar eso, al fin y al cabo era la personificación del amor.

Por la reacción de ambas, Shiro dedujo que ninguna se había hecho esa pregunta.

-Shiro- Mmm... decepcionante.

Sentenció duramente y se sentó a la mesa. La idea del sushi era buena asi que tambien dió su visto bueno para que Alicia lo incluyera en su abundante menú.

Claire vió el ramen de su hermana y se dejó llevar por la vista, pidiendo uno igual.

Shiro almenos se molstaba en usar los cubiertos, aunque no parecía de las que se avergonzaría por comer con las manos, la vergüenza en general no iba mucho con ella.

Claire carraspeó un poco y se aventuró a preguntar, al fin y al cabo de curiosidad iba el asunto al parecer.

-Claire- Ehm... Shiro... ¿porque no... usas ropa?.

Preguntó lentamente y con un burdo intento de "tacto".

-Shiro- Oh... el director de juego solo tiene imagenes mias en ropa interior, es un pervertido, nyahahaha...

-Claire- ¿Que?...

-Shiro- No tengo por qué ir menos cómoda por satisfacer los gustos de nadie mas allá de los mios, eso solo lo hacen los humanos. Y dado que yo puedo amoldar mi curepo a mi gusto no dependo de la ropa, como lo haces tú.

Claire cojió aire como si estuviera a punto de ensalzar una réplica energica a esa lógica, pero pronto descubrió que no podía (ni quería) argumentar nada en contra y se desinfló somplando su ramen para que se fuera enfriando.

-Shiro- Te puedo ofrecer el mismo trato que a tu hermana, Claire, conéctate a mi y tal vez resuelva muchas de las preguntas que tienes o incluso descubra porqué sois dos y no solo una. En otras palabras, por qué tus padres decidieron crearte a ti, asumiendo con ello un riesgo doble.

Claire se quedó algo sorprendida y a la vez indecisa. ¿Cuales eran las implicaciones reales de conectarse directamente a uno de aquellos seres digitales?, a su hermana parecía haberla ido bien y no es que Claire tuviera muchas otras cosas que ocultar aparte de lo que Shiro ya había descubierto en la mente de Chell.

Claire miró durante unos segundos a su hermana mayor, tal vez esperando consejo al respecto. Si Shiro se conectaba a ambas, sus secretos y su vida ya no serían solo suyos, Shiro sabría tanto de ellas como el familiar mas cercano que pudieran tener.

-Ha sido todo un hecho bastante chocante, aún estamos asimilándolo... supongo.- Comenté un poco apenada.- Tampoco hemos pasado mucho tiempo juntas desde que estamos en Elysium.

Cogí el cuenco con ambas manos y sorbí el caldo del ramen lentamente, disfrutando del sabor y dejando que el calor invadiese mi ser. Sin embargo, tuve que parar en seco al escuchar a Shiro o hubiera duchado a mi hermana.

-¿Qué? - Repetí con ella al mismo tiempo que levantaba una ceja sorprendida.

Igualmente, viendo que no le daba más importancia que un mero chiste, continué degustando mi comida tranquilamente.

-En breves harás la mayoría de edad y tendrás que tomar decisiones tú sola, es hora de que vayas empezando, fíate de tu instinto, yo te apoyaré tomas las decisiones que tomes, para eso está la familia.- Dije con dulzura.- No creo que pase nada malo por ser sus seguidores, como mucho te sentirás desnuda ante ella cuando se conecte y, la verdad, me intriga bastante por qué decidieron hacer dos Hecatónquiros, aunque me alegra que así haya sido- Sonreí.- Así que, tú misma cielo, yo no voy a obligarte si no quieres, y estás en tu derecho de negarte, pero, también te puedo decir, que a mi me ha beneficiado por el momento.

El tema de ser dos ahora era muy delicado.

"¿Por qué correr todo ese riesgo? ¿Qué nos diferenciará la una a la otra? ¿Seremos iguales? ¿Nos complementaremos? Si al menos nuestros padres estuvieran vivos..."

Acompañando a Shiro en su cruzada había descubierto más cosas de las que podría imaginar, pero al mismo tiempo, creaba más dudas.

La historia del Doctor Opfern era sin duda una mas de entre esas miles que están ocurriendo culpa de aquella terrible enfermedad, aunque en este caso el hombre había sufrido por parte de su hija, por lo menos vio como esta se curaba de aquella enfermedad que hasta hacía unos minutos yo tenia por incurable en sus avanzados pasos... No necesitaba más motivos para acudir a su funeral, había mas que suficientes.

Cuando llegamos a nuestro destino, que resultó no ser el que yo creía, entré a una sala completamente repleta de plantas de todo tipo de transgénicos, con una mujer albina que se ocupaba de ellas al fondo, sin duda alguna, aquella era la hermana de Eva.

Me sorprendió que alguien que aparentemente no estaba mezclado en el mundo de la alquimia conociese la tabla esmeralda, pero gracias a ello, consiguió llamar mi atención por completo, mas de lo que ya lo había hecho el que fuese mas joven que su hermana y su apariencia fuese la de una mujer mucho más madura que esta.

-Hola Alysa, encantado de conocerte al fin, me han hablado mucho de ti últimamente, y parece que no en vano las buenas palabras son ciertas.

Estreche la mano que me tendió a la vez que me di cuenta tras un tiempo de que se acercaba bastante a mi altura.

-Ha sido una proposición de empleo de lo más pintoresca, si esto ha sido el tutorial, no quiero imaginarme como será el juego.

Esperaba que mi humor no la resultase cargante o de mal gusto, o si no íbamos a tener que empezar mucho mas despacio.

-Como imagino que ya sepas, mi pasado laboral ha sido un tanto deleznable en lo que a mis trabajos han conseguido hacer, y poco a poco me he ido arrepintiendo de ello y buscando algo que por una vez pueda hacerme sentir orgulloso de ello y de lo que tal vez hablar a mis padres cuando me llamen sin tener que mentir al respecto, buscaba un trabajo donde poder hacer lo que me gusta sin tener que mezclar a inocentes en el camino ni en el final, al menos, no más de los estrictamente necesarios, siempre y cuando no se pueda evitar.

Por este motivo y algún que otro interés meramente egoísta, la oferta que se me propuso me pareció idónea para comenzar desde cero.

Al llegar al subterraneo a donde residía Daya, no pude evitar observar a los robots cargando peluches hacía su vivienda, para cuando llegue, no me tomo desprevenido ver a la pequeña Manami acompañando a Daya, fue todo un detalle y el simple hecho de que vinieran con tanta alegría, emoción o orgullo hacía mi, me reconfortaba.

- Hola Manami - dije con un tono amable mientras clavaba una de mis rodillas al suelo para estar a la misma altura que la encarnación misma del amor, luego le dirigí la mirada a Daya quien a pesar de tratar de darme consuelo, me recordó en cierta forma mi fracaso.

- La Compasión...aún tengo que aprender mas de ella...Igual que del Amor...- aclaré mientras ofrecía mi conexión cervical como muestra de respeto a Daya - Estoy tratando de aprender de estas emociones en mi interior para poder reconocer como actuar en el exterior, algunas las conozco...Otras me resultan confusas y distantes...- dije con cierto aire melancólico para Manami - Pero estoy tratando de asimilar poco a poco estas emociones para poder ser digno de vuestra confianza y orgullo, para poder ser capaz de aceptarme a mi mismo y a mi pasado y poder avanzar en este mundo para ayudaros como es debido - continué con una mirada decidida.

Luego observe a Manami con cierta calma en mi corazón al verla tan animada - No se que clase de preguntas pueda hacer, pero aceptaré cualquier consejo que decidas darme - expresé con un tono cálido, luego le dirigí la palabra a Daya - Te prometí que conseguiría ayudarte a recomponer lo que habías perdido, poco a poco lo haré hasta que sea capaz de devolverte a tu original esplendor - afirme con convicción - de hecho también quería que tuvieras de la libertad de un cuerpo mas humano, no me parece justo que tengas que estar aquí abajo, era una petición que quería pedirle a Alysa para ti - revelé.

- Aunque puede que solo sea parte de mi egoísmo, pero quiero verte feliz mientras estés con nosotros - concluí para dejar así que Daya tomará la iniciativa con la conexión, no me negaría ni me contendría, por ello me había convertido en su paladín, así pues aceptaría todo lo que pudiera darme....O quitarme.

-Entonces estas en el lugar indicado, Varanus. Aqui somos expertos en segundas oportunidades y desde luego tambien en tenemos experiencia en lo de "volver a empezar".

Dijo, tal vez dando a entender que la sitaución de Varanus no era única.

-Bien, no quiero alargar esto mas de lo necesario, la situación requiere que nos pongamos manos a la obra. Como ya te habrá dicho Eva, formarás parte de un equipo que hemos contratado para dedicarse exclusivamente a la busqueda e investigación de los exiliados o "avatares" como prefieras llamarlos.

Mi idea es que vuestro equipo funcione de la manera mas independiente posible, Elysium Investigacionbes os proveerá los medios y una financiación a cada uno y vosotros gestionais vuestros recursos. Esto quiere decir que no vais a recivir muchas órdenes de mi o de Eva, ambas creemos que el verdadero talento de las personas reluce cuando les dejas tomar sus propias decisiones.

Dicho esto, hay algo de lo que te puedes encargar de inmediato, algo que precisamente solo tu puedes hacer.

Se sentó e invitó a Varanus a hacer lo propio ante su escritorio.

-El doctor Opfern, fallecido ayer y padre de Manami Opfern, trabajaba para el gremio de cazarrecompensas para subsistir en los suburbios con dinero negro. El caso es que en parte gracias a él descubrimos hay una probabilidad muy alta de que un exiliado esté haciendo encargos para dicho gremio. No tenemos pruebas concluyentes pero todas las pistas indican en esa dirección y quiero encontrar la prueba definitiva.

Tengo planeada una operación de infiltración en el Tártaro, un local de encuentro para todos los asesisnos y cazarecompensas que trabajan en Nueva York y lugar de residencia de Peter Ralo o "Ripper Pig" como se le conoce comunmente.

Ripper Pig se gana la vida consiguiendo contratos de asesinatos con recompensa, un "intermediario" si lo prefieres asi, él los distribuye y por cada contrato realizado se queda una comisión. Por lo tanto entre mas contratos realice y mayor sea la recompensa, mayor comisión obtiene.

Creemos que uno de sus asesinos mas eficientes es, de hecho, un avatar, no sabemos cual, pero sí sabemos que es altamente probable que al igual que el avatar de la compasión, hayan sufrido daños graves en su transición de la red a un cuerpo físico, dicha transición no se realizó en condiciones óptimas casi ningun caso.

En otras palabras, el hecho de que un avatar se gane la vida asesinando, no lo hace necesariamente malo, puede que ni siquiera sepa cómo se llama o lo que es realmente. Tenemos indicios de que todo el dinero que obtiene lo anda regalando por los suburbios, esa es la pista que han estado siguiento Soma y Chell y que les llevó hasta Abraham Opfern, el doctor buscaba al avatar para pedirle dinero y poder recuperar asi su vida con su hija.

Dicho aquello abordaría el papel que quería que realizara Varanus.

-El caso es que cualquiera de mis empleados llamaría mucho la atención en el Tártaro, los cazarrecompensas se conocen entre ellos y eso hace que ese lugar sea uno de los mas peligrosos de Estados Unidos. Sin embargo, tu presencia no llamaría la atención allí, precisamente por tu trayectoria profesional.

Primero quiero que prepares alguna de tus especialidades en el laboratorio para impresionar a Ripper Pig y a quien haga falta en el Tártaro, ya tienes mucha experiencia en eso de impresionar a gente "violenta", yo iré contigo, algo asi como "escolta" o "colega de armas", de esa forma las sospechas sobre mi rerán mínimas.

Una vez nos infiltremos yo me encargaré de obtener la información que necesitamos de los archivos en soporte de papel de Peter Ralo y tu me apoyarás.

Por lo visto la presidente no era la tipica mujer de negocios o oficina, por lo que había insinuado era tambien una agente de campo y de las buenas si quería infiltrarse en aquel nido de asesinos.

-De momento, hoy encárgate de ponerte al dia en el laboratorio y pensar algo que les pueda llamar la atención a un puñado de asesinos, te servirá para hacer amigos allí y mezclarte entre ellos. Mañana iremos al Tártaro.

Atendería las preguntas o dudas al respecto que Varanus pudiera tener.

-Daya- No deseo otro cuerpo, Soma. Muchos sacrificaron su vida para otorgarme este en el mas puro ejercicio de la compasión. Estoy orgullosa de poseer un cuerpo mas fuerte y que me permite defenderme con mayor efectividad de las amenazas de este mundo. Yo soy la exiliada mas débil, asi como lo es la compasión de la humanidad en estos tiempos, pero gracias a este cuerpo esa debilidad no será una desventaja tan significativa a la hora de combatir aqui.

Tal vez en ese sentido era Manami la que estaba en desventaja, ella no podría defenderse en este mundo, no almenos físicamente, su cuerpo había superado una enfermedad en teoría incurable, era debil y frágil no solo en comparación a Daya, sino a cualquier humano.

-Daya- Tampoco estoy encerrada aqui, soy libre de circular por las instalaciones y ya lo he hecho, tu contratista ha mantenido su palabra. De hecho, iré a mostrar mis respetos tambien por el doctor Opfern, no me ha sido vetada la entrada ni a la capilla ni la biblioteca. Solo he de tener algo mas de cuidado para no romper nada.

Cierto es que tenía que ir a cuatro patas por los pasillos, usar el montacargas en vez de el ascensor y tener cuidado al acceder a istancias pensadas para humanos, pero al margen de eso, Daya podía moverse por Elysium.

Cuando Soma se volvió a conectar a Daya, el proceso fue mucho mas suave, menos impactante, como si ambos empezaran a armonizar de una manera mas eficiente, como si sus mentes se estuvieran acostumbrando a interactuar.

Los dones que otorgaba Daya, seguían el mismo proceso utilizado por ambición para transformar a las personas en sombras, pero a una escala infinitamente mas pequeña, realizando cambios sutiles y casi imperceptibles en la RP que simplemente mejoraban las habilidades y algunas capacidades puntuales de aquellos a quien se conectaba.

Cuando Soma se mostraba compasivo con aquellos que sufren, Daya era capaz de armonizar mejor con Soma y por tanto realizar mas de estos cambios. Era una forma de estrechar su vínculo con la deidad, de acercarse cada vez mas Daya, a la verdadera Compasión.

Mientras deidad y discípulo arreglaban sus asuntos, Manami había hecho un castillo de peluches en el colchón de Daya. Mostrandose ampliamente orgullosa del mismo.

-Manami- Tenemos que seguir buscando a Esperanza, ambición fue especialmente cruel con ella dado que no se la puede matar. Le pediré a los heraldos que me den un acceso seguro a la red y trataré de ayudaros en la búsqueda, es lo menos que puedo hacer. Puede que yo no tenga un cuerpo fuerte, pero tengo mis recursos.

Era cierto que Manami desprendía una extraña aura santurrona, era prácticamente imposible enfadarse en su presencia, los problemas parecían menos graves y el rostro tendía a sonreir casi sin motivo. En cualquier caso los recursos a los que se refería eran otros.

-Daya- Mi capacidad de intervención es mas limitada dado que este cuerpo llama mucho la atención, pero ya he informado a los heraldos que estoy lista para el combate si es necesario.

Aquella bestia con las mejoras hechas por un avatar, podía ser un guerrero temible capaz de hacer pedazos a quien se le pusiera por delante, su capacidad de combate cuerpo a cuerpo era quizá de las mejores entre los exiliados, aunque carecía totalmente de subterfugio.