Partida Rol por web

Martín ha muerto.

Blanca no está muy segura de qué le parece eso. No lo vió morir, por lo que su deceso se confunde con la enredada fantasía que ahora está viviendo... Se sorprende (y no gratamente) al ver que no siente pena. Quizás esta "aventura" la está cambiando más de lo que quisiera admitir...

Como fuera, es bueno ver a la gente con que ha compartido esto. Le alegra ver que Hache está bien, al igual que Helena. El contexto "meta" del bar temático de piratas con piratas disfrazados de piratas le hace sentirse mareada... así que no tiene mucho tiempo como para quedarse en la alegría. Y el comentario de John le saca de una vez de sus cavilaciones.

Creo que estamos bastante pasados ya del "no me importa". Nos importe o no, estamos metidos en esto... y creo que deberíamos intentar al menos solucionar el problema de la persona que falta. Lo de Martín es una lástima... pero no creo que aún estemos libres de peligro.

Nosotros fuimos a visitar a La Corte (una de las Casas) - explica- porque Harper, amigo de Helena, nos dijo que Martín había dado los muebles de su piso. La Corte replicó raptando (y golpeando) a una señora que trabaja o vive, no recuerdo, en Las Cavas Calizas. Dicen que lo hicieron porque los muebles son de la Casa... supongo que lo interpretaron como un robo y un insulto... al parecer, todo para ellos es insultante (creo que tiene que ver con que son una Casa nueva, y parece que la Reina, madre de Randoll, los elevó como Casa hace no mucho tiempo). Ya les digo, son muy muy sensibles y paranóicos. Así que no creo que debamos tomarnos esto a la ligera.

Al saber de esto, vinimos con Randoll para tratar de arreglar el entuerto y liberar a la señora (puesto que, al parecer, cada piso representa a una Casa)... pero hubo un derrumbe (que nos pareció bastante orquestado) y perdimos de vista a Randoll y Harper. Así que aquí estamos. Menos el Príncipe, el amigo de Helena y la señora que vinimos a rescatar, quienes probablemente estén en manos de LaCorte... y quizás se me está pegando lo paranoide, pero tengo un mal presentimiento sobre todo esto.

No sé ustedes, pero creo que necesito un trago...- finaliza, tratando de encontrar dónde y a quien puede ordenarle un cuba libre (ya que estamos en un bar de piratas, ¡ron será!)

La cabeza me retumba enormemente y no ayuda nada el traqueteo que parece que me lleva de un lado a otro. Oigo voces pero no tengo muy claro lo que dicen, un pensamiento cruza por mi mente: "secuestrada, he sido secuestrada" y me entran ganas de reír pensando la sorpresa que se van a llevar al ver que, ni tengo dinero, ni le intereso a Robert, que si lo tiene...

Trato de incorporarme para mirar a mi alrededor.

Por un momento me planteo ir a ver qué está pasando en ese callejón, pero entonces me acuerdo de que lo que haga esta gentuza no es mi punto problema. Mis asuntos están ahí dentro, y mejor acabar cuanto antes para poder ir al Faro. Me colocó el pelo y la camisa, y entro en la taberna dando un fuerte empujón a la puerta. ERIK HA LLEGADO!!

"¡Oh dios mío! Vamos a morir... estan todos locos pienso cuando oigo el discurso del Rey Jeronimo, cuando veo como reaccionan todos sus ¿subditos? y cuando, al final, entran con a Helena inconsciente. -Martin está muerto... muerto...- murmuro para mi recordando la primera vez que lo vi, la primera vez que los vi a todos, y lo que pensé entonces...

Cita:

¿¿porqué no lo hice?? me digo a mi misma, mientras me contesto que tampoco hubiese servido. Apenas escucho lo que dice John, porque estoy distraída, pero sí le oigo y noto, en su voz, que algo pasa... algo más que lo que nos pasa a todos, es obvio. Pero, de momento, Helena es la que está peor, así que me acerco con un botecito de gotas de Remedio de Rescate de Flores de Bach -Helena, soy Carmen Maria, abre la boca, voy a darte unas gotas... solo es homeopatía, tranquila-

Nadie saldrá de aquí hasta que el Cónclave nos de una respuesta.

El famoso conclave. Al menos ahora sabían porque lo de las seis caras. Blanca lo había explicado de coña, así que no había mucho más que añadir. También ha tenido una idea excelente: -Yo quiero un mojito- dijo acudiendo a la barra con ella. Es todo tan extraño... y el lunes clase -A ver como pienso en “perspectivas uno” metido en este tinglado sobrenatural. Ojala mi casa sea rica y me ponga un sueldito por investido.- Aunque sospechaba que eso no iba a ocurrir. De todas maneras mejor tener estudios. A ver donde ibas luego con "20 años de experiencia como investido en el faro prodigio" en el curriculum. Hasta donde sabia los faros mágicos no eran muy comunes.

Había otra posibilidad: que ahora matasen a uno de cada una de las otras cinco casas a lo mejor eso era más sensato que investir a un nuevo “chosen one” para esta panda de lunáticos.

Veo una cara sobre mi y, aunque me resulta familiar no soy capaz de ubicarla.

-Helena, soy Carmen Maria, abre la boca, voy a darte unas gotas... solo es homeopatía, tranquila-

Carmen María, si, mi vecina, ¿¿mi vecina?? Entonces ¿qué ha pasado? ¿estoy en casa? ¿estoy soñando? Las preguntas comienzan a agolparse en mi cabeza pero no puedo hacer que mi boca las pronuncie, todo da vueltas. Finalmente puedo balbucear

- Carmen María... ¿Qué... qué ha pasado?- miro a mi alrededor tratando de encontrar algún punto de referencia, algo que me ate a la realidad pero el efecto que consigo es justo el contrario- ¿Donde... estamos?

-Entiendo Manny, entiendo. Lo de la doble moral está muy de moda y...- estoy hablando tan plácidamente con mi amigo el taxista cuando todos nuestros compañeros irrumpen en la sala.

Uno detrás de otro, mi querido John, la pitonisa, la princesa de cabellos dorados, Culebra y silencioso Rob. Van acompañados por un hombre apuesto, me suena de algo, quizá de alguna de mis salidas nocturnas por Eivissa o algo así. Estoy apunto de hablar con el cuando todo se desmadra y empiezan a cantar, a gritar a... de todo vamos, y se me escapa...

Ah, mira. También está Helena en una carretilla, pobrecita siempre le toca la peor parte.

-¡Retrubción! ¡Ron! ¡Mujeres!- empiezo a gritar al son de los piratas. La muerte de Martin no llama mi atención, no porque me cayera mal ni nada así sino, porque ¿a quien se le ocurre meterse en un edificio cuyo portero es un enano con gafas de sol?. -¡A Martin le mató un enano!- digo sin venir mucho a cuento. Pongo voz misteriosa y empiezo a contar una historia.

-Iban los aventureros Piernaslargas, Amazona que cabalga a medianoche, Samurai, Lea la exploradora y SuperMartin, por las Cavas Calizas.- al decir Cavas Calizas miro a todos con una expresión de horror. -Iban buscando algo, no sabían muy bien el qué pero SuperMartin les guió hasta un edificio de tejado piramidal de color esmeralda. El grupo llegó cansado tras pasar innumerables peligros y allí... UN LEÓN que guardaba las puertas se lanzó contra ellos. El más fuerte del grupo consiguió zafarse de él y fue entonces cuando Lea domó a aquella fiera e hizo que se calmara con su dulce voz.

Fue entonces cuando Amazona, es decir yo, se fijó en todos los detalles que nos rodeaban, todo le daba muy mala espina, su sexto sentido hizo que nos dieramos la vuelta pero el poco cauteloso Martin decidió entrar... Vieron a un enano de garras afiladas, gafas oscuras y sombrero de vaquero cerrar la puerta tras él y no supieron más...

¿Por qué dejaron a su compañero entrar solo? Porque él lo quiso así. Quería el tesoro para él solo... no quiso hacernos caso.

La vuelta a la civilización no fue cosa fácil. Samurai tuvo que luchar contra dragones, Amazona cabalgó sobre unicornios, Hache usó su magia persuasoria para escapar de malvados bandidos y Lea tuvo que evitar espejismos que querían engullirla... Conseguímos así llegar hasta Las Termitas donde nos esperaba un apuesto chico, nuestro guía, Manny- guiño un ojo al taxista y le presento ante mis vecinos.

Hago un silencio para fijarme en las caras de mis amigos, no pretendo que me crean, así lo viví y así lo he contado y me he quedado tan ricamente.

-¡John! Te he echado mucho de menos- digo al joven abrazándole para calmarle, le noto algo nervioso.

Los demás cuentan también sus historias, no son tan molonas como la nuestra pero bueno, han debido pasarselo bien.

-¡Piratas! Martin era un cabrón, un hombre de malas maneras, rudo, impetuoso y codicioso. ¡Viva Martin!- grito para que los piratas aplaudan y nos inviten a unas rondas. Entonces es cuando caigo, ni pitonisas ni nada, ya decía yo que el olor a ron y a brea del segundo piso solo nos podía llevar a una historia de bucaneros...

Escucho todas las historias con atención. Sorprendentemente y a pesar de lo rebuscado de la historia, Anayansi a descrito perfectamente lo que hemos hecho desde que abandonamos la torre. En cuanto a la historia de los vecinos me parece extraño que por unos muebles se monte tanto revuelo, pero visto los visto, supongo que es normal. Sólo hay un par de detalles que no acabo de entender. ¿Qué es eso de las casa de lo que tanto habláis? ¿Por qué dicen que todos pertenecemos a una?

Mis pensamientos se suceden de esta manera y no por este orden seguramente:

- ¿Qué hago aquí? Vengo huyendo de la mafia y me encuentro con esto que es guatepeor. Mi vida corre más riesgo aquí que en la aduana, pero en fin, intentaré no tomar más decisiones precipitadas. 

- Martín no parecía un tipo muy sensato -estas reflexiones sí la comparto con los demás- y murió haciendo lo que más le gustaba: el héroe absurdo. Que se lleve tanta gloria como paz deja. 

- El Rey Jerónimo está jodidamente loco, como habréis podido observar. Y no es un loco tierno y divertido. Claramente creó él el derrumbe que nos separó de Randoll y Harper porque justo ocurrió en el momento en que parecía que iba a resolverse el conflicto 'diplomático'. 

Y por añadir algo más al resumen tan preciso que ha hecho Blanca...Los mendigos no son lo que aparentan en esta ciudad...Ni los piratas de pacotilla, parece ser.  

OCHI, yo tampoco entiendo muy bien lo de las Casas, pero creo que tú y yo pertenecemos a la misma por vivir en el mismo piso. Así que te invito a algo para celebrarlo. ¿Qué tomas? 

El abrazo de Anayasi cogió a John desprevenido. No estaba acostumbrado al contacto físico con desconocidos y a estos efectos, Anayasi lo era. Intentó ser natural y corresponder su abrazo, pero estaba demasiado tenso.

-Yo...también...os...te he echado de menos-contestó-,

¿Os acordáis de cuando veníamos...Pip...hizo algo?-siguió diciendo cambiando bruscamente de tema- Cuando Martin sacó a Elena del agua,...sacó un colgante y dijo algo. Fue la primera vez que oí lo de las casas y el cónclave. Luego Kantor nos contó...creo...cuando supe lo de esta casa y el contrato...sabía que era un regalo envenenado. Ahora creo...creo que preteden que ocupemos...recuperemos a esa secta. Y esas casas,. se estructuraba en casas en...en torno a un cónclave . Laverna me dijo que yo soy el embajador de la casa Altair.  Supuestamente en los trasteros de la torre hay...algo o lo habrá que nos dirá qué hacer. Yo...yo solo quiero...no quiero formar parte de esto pero hay que seguirle el juego a ese Jerónimo si queremos...salir. 

Lea sale de su ensimismamiento. No consigue ordenar su cabeza con todo lo ocurrido. No ha sabido encontrar aún un sentido y una explicación a los últimos días pero nota que ya ha pasado de asustarse a como Anayansi tomárselo como una auténtica película y disfrutarla. Es verdad que transformando la realidad de esa manera, lo que ocurre con el tal rey loco, los piratas y mendigos, las casas, los muebles de Martín? enserio? e incluso su muerte no le hacen estremecerse lo más mínimo o salir corriendo de aquel lugar de locos. No le extrañó cuando lo dijeron. Casi que medio se había despedido de él cuando decidió no hacerles caso y entrar... aunque tampoco imaginaba que fuese a acabar muerto.. 

Y ahora una vez allí con todos no sabe muy bien por donde empezar a preguntar. No entiendo muy bien lo de las casas..en mi piso viven también los niños.. eso que significa? Por cierto, dónde están ellos? 

El camarero con disfraz burdo de pirata, que va a resultar ser un pirata de verdad disfrazado de camarero disfrazado, mira a un mendigo con pinta de pirata o que... Bah... ya sabéis. El caso es que este hombre, que luego conocerán como Banana, da el consentimiento para que se sirva bebida. 

- Claro que sí, ¡no son rehenes ni nada por el estilo, ni van a intentar escapar de aquí ni algo igual de peligroso así que, como invitados, que beban de nuestros barriles! 

Al decir eso mira a Manny, otro con pinta de matón quien asiente muy expresivo. 

Están encerrados allí hasta que se decida qué hacer con ellos. Pero parece que La Corte está empeñada en querer que esta retención no sea mal vista. 

Mientras se sirven los primeros rones y el ambiente se relaja, Blanca y Rob se hacen preguntas acerca de cómo ha llegado Banana aquí. Y si él está aquí. ¿Dónde están Randoll, el mayor de los chicos de la Torre, y Harper y Filipa, los compañeros de la Barraca Esperanza de Helena quienes fueron víctimas de la atolondrada decisión de Martín de regalarles los muebles? La Corte se vio con el derecho de tomar la revancha y ahora las cosas parecen haber empeorado infinitamente con la noticia de la muerte de Martín. 

Helena también se siente culpable, una vez se termina de despertar del todo y la sitúan en qué ha pasado. Ella no se conforma con la versión imaginaria de Anayansi ni con la resumida de Blanca. Quiere saber todos los detalles así que durante la siguiente hora y media es capaz de hacerse una idea más acertada de lo que ocurre. 

Y ESTO ES LO QUE PASÓ HACE UNAS HORAS:  (y para no volver a escribirlo pongo en citas lo ya escrito) 

Samuel Kantor, el conserje y mentor de los chicos, se encontró ante la aparición de Harper en la Torre buscando a Helena, que había un representante allí de cada planta y por eso se vio con el derecho, al fin, de dar algunas respuestas. 

El estar todas las plantas representadas para tratar este asunto en concreto me da cierta libertad para tratar preguntas que os angustian desde anoche y para los cuales no dispongo ni de inteligencia ni de labia para contestar con quiebros o sutileza si me son formuladas de manera individual. 

Tras leer ese mensaje y según me habéis contado, parece evidente que La Corte se ha llevado a un durmiente... a una persona ajena al Reino... hay que hablar con ellos y enmendar este exceso de celo. Es importante usar la diplomacia y no la espada para que este incidente se resuelva sin derramar sangre...

Os habéis dirigido a mí en el pasado como si todos fuéramos parte de un mismo grupo que supiera y actuara según un plan establecido para con vosotros y la Torre. 

No podíais estar más equivocados puesto que no hay un grupo, sino seis. Las Seis Casas. 

Representan cada una una parte del Reino. Un Reino que ha quedado sin monarca. Un Reino unificado al borde del cisma y la ruptura frente a un enemigo en guerra más poderoso que nunca. 

Era necesario huir a Aquilea y hacer un gobierno de transición hasta que se produzca la coronación del nuevo Rey: ¡Randoll, hijo de Nirvana, Señor del Cisne será el Rey de Todo! 

 LaCorte es una nueva facción del Reino tras una guerra civil de hace pocas décadas. La antigua Reina finalmente les dio casa propia y les unificó con igual honores a las Seis Casas. Pero siempre han tenido cierta desconfianza hacia las Casas con más renombre y sienten no ser tratados por igual. 

- Además de un Gobierno de transición hasta que se produzca la coronación de Randoll, dado que nos mudamos a este mundo... a esta ciudad... necesitamos que todas las Seis Casas tengan sus representantes en este plano de la existencia. Para eso sirve la Torre de la Encrucijada. Para dar cabida a las Seis Casas. Dos vecinos por cada una de ellas. 

No os puedo decir aún nada del resto de Casas a las que pertenecéis los demás. LaCorte ha decidido presentarse ante vosotros, decir su nombre y significarse en nombre de Martín. El resto de Casas ha permanecido más discreta, acertadamente en mi opinión.  Prefieren que estéis preparados y tengáis contacto con lo que representáis de manera más casual y pausada. ¿Visteis vuestros trasteros? En ellos pronto aparecerá el nombre de vuestra Casa, su escudo, su localización y todo lo que os vaya preparando para el papel que desempeñéis. Hasta que en un momento dado... si lo deseáis... seréis INVESTIDOS. Y pasaréis a tener un papel activo de pleno derecho en las decisiones y en los dones y maldiciones de cada una de vuestras Casas. 

Todo eso va a ocurrir, John Smith, lo quieras o no. Vives en esta Torre. Has firmado el contrato y el Equilibrio de Antaño. Resignar esa responsabilidad sería abandonar la Torre y puede... puede que no sea un camino de ida y vuelta. La idea era que llegaríais a ese paso de una manera mucho más natural, entendiendo cada paso, sabiendo qué se estaba jugando en esta guerra. Pero el ataque del Caos a mi llegada y ahora este rompimiento de filas de LaCorte están precipitando las cosas... 

¿Entendéis ahora por qué estáis aquí de una manera totalmente azarosa? Solo el Azar podía decidir quién vendría a la Torre y qué Casa representaría para que jamás nadie viera una mano manipuladora en este Equilibrio. Para no despertar una sola susceptibilidad ni conflicto. El pacto entre las Seis Casas está en serio peligro... Las Casas Fundadoras, que ya tenían sus rencillas centenarias, no aceptan a las nuevas a las que tildan de no dignas. Seis ejércitos, seis gobernantes, seis maneras de entender nuestra existencia es lo único que nos salva de sucumbir ante el Caos. Y ahora esas Seis Casas comparten escalera y techo en la piel de unos desconocidos que sin haberlo pedido tendrán el poder de controlar el mismo universo.... 

¿Crees que Randoll, Alyssa y los demás eligieron nacer de su madre? ¿Ser infantes? Tampoco vosotros lo habéis pedido. Lo sé. Y eso es todo lo que se necesitaba para que se os otorgara. 

Si llegado el momento quieres no formar parte de esto, tendrás que hablarlo con el Cónclave, que es este Gobierno Provisional, o con vuestras Casas pero renunciar a esto nada más empezar... sería poner en peligro toda la misión... y temo que nuestras vidas. 

Pero entonces una ola gigante había interrumpido el relato que hacía unas horas Samuel Kantor contaba a Rob, Blanca, John, Carmen y Nathan. Un tsunami que había surgido de la nada y había golpeado el Faro Pródigo sin hacer más desperfecto que mojarles a todo. Pero su significado sí era grave. Era la forma que tenía la Torre de la Encrucijada de anunciar que alguno de sus habitantes había muerto. Samuel había tenido que dejarles para buscar al resto y ponerles a salvo. (Probablemente les siguió hasta las peligrosas Cavas Calizas) 

Y ESO ES TODO LO QUE OCURRIÓ

Un pirata sale al centro y empieza a entonar entonces una canción. Es una versión ronca y desafinada de "Singing in the rain" hasta que Manny le da una patada en el trasero y le tira al suelo

- ¡Idiota, te dije que cantaras "Las lluvias de Castamere", no esa! Joder, que aunque sean "nuestros invitados" parece esto un cumpleaños. ¡Algo de dramatismo hacía falta! ¡Que llevamos casi dos horas aquí! 

Todos ríen y entonces un pirata tapado con un enorme pañuelo se acerca a donde están Johm, Helena, Carmen y Hache

- Estad preparados. En un minuto tendremos que salir de aquí aunque me tenga que llevar a varios por delante

Le observan extrañados pero no es hasta que dice esto último y enseña el mandoble de un espadón que esconde bajo sus ropas, cuando reconocen que es Samuel Kantor. Ha vuelto a por ellos. 

Parece que ha venido a rescatarles. Pero viendo esas decenas de piratas flanqueando todas las salidas... ¿No será una misión suicida? 

Asisto a todo como si fuese un espectáculo donde están haciendo partícipes a los espectadores, es decir, a nosotros. No sé si es por el hecho de haber salido ileso de dos situaciones de peligro más palpables, como los dentudos y la banda del bate o simplemente por lo surrealista de la propia situación, pero todo me parece tan cómico que soy incapaz de asimilarlo como una situación real de peligro

Tras escuchar el relato de mis compañeros, llega el turno de Anayansi donde cuenta nuestras peripecias...con su especial sentido de la realidad. No dudo en asentir fervientemente y con rostro serio a cada una de las cosas que cuenta, a fin de cuentas, así es mucho más divertido.

Entonces...¿a que Casa pertenezco yo junto Blanca? Por favor, que sea una capaz de distinguir singing the rain de las lluvias de castemere

La presencia de Kantor me hace salir de mis ensoñaciones. Genial. A alguien se le ha tenido que olvidar poner en el anuncio del alquiler que se necesitaban personas atléticas y abstenerse sedentarios.

Soy grande. Soy lento. Si tenemos que salir corriendo, dudo que sea buena idea ponerme en primera linea. Estorbaré al resto. Me alejo de Samuel, supongo que él será el líder de la huída y así estorbaré menos.

- Blanca, ¿sabes que íbamos a verte?, algún día conseguiré llevar a buen puerto una de tus invitaciones...¿sabes algo más acerca de...nuestra Casa?

John confiaba en salvar la situación por las buenas.Escogerían a sus dos candidatos y luego se marcharían. Y si te he visto no me acuerdo. Pero de pronto tuvo que aparecer él; Kantor, haciendo el macarra.

¿Está loco? Va a hacer que nos maten a todos-pensó John-.¿Y porqué habríamos de seguirle? Se sentía engañado. Por todos, por quienes le habían hecho firmar aquel contrato sin advertirle de las consecuencias, por quienes lo retenían allí...no debía nada a nadie. Y respecto a sus captores, al fin y al cabo se había colado en su casa. No se lo podía reprochar.

Con la cabeza hizo un gesto dirigido a Kantor.-"no"-. De nada sirvió.

Cuando la cosa se complicó, prefirió mantenerse al margen a la espera de ver lo que hacían los demás. Tanto el Rey Jerónimo, como sus compañeros de la torre. Al fin y al cabo, él no era fuerte ni ágil. Llegado el momento, daría su vida por defenderse antes que dejarse matar pero prefería evitar el enfrentamiento dentro de lo posible. Darío parecía que tampoco era partidario meterse en el fregado, así que se mantuvo con él, distante. Miró al resto. Ninguno de ellos parecía un hombre de armas. 

Buenas John

Quería comentarte respecto a las decisiones que va tomando John. Cada vez está como más negativo, receloso y hasta acobardado por lo que ha ocurrido. Ha sido un cambio gradual pero viendo ahora la historia original del personaje, un investigador de lo paranormal tras lo que le ocurrió, me he perdido un poco en por qué está actuando y pensando de esta manera. ¿Es porque se siente estafado? ¿está desbordado? No sé, ha sido poco a poco pero no logro entenderle bien del todo. 

Tal vez, y de ser así me preocuparía más, es porque transmite cierta sensación de no disfrutar de la aventura que más que del personaje viene del jugador. Como si al jugador no le hubiera molado por dónde ha salido todo esto y estuviera algo reacio. 

Martín boicoteaba un poco haciendo el juego por su lado y tal vez por eso estoy algo más sensible con el tema pero como tampoco participas en el off topic ni pones notas al margen de tu interpretación que den lugar a que te está molando el juego, quería preguntarte un poco y que me comentaras con total sinceridad. 

¡Muchas gracias! 

PD: ¡Por Dios no te olvides de marcar bien a los personajes destinatarios! Jaja, desde que te lo dije has vuelto a ponerlo mal seis veces y en ocasiones puede ser importante ;)

Miro a Samuel con asombro, mientras habla, como quien ve un extraterrestre
-¿Te has vuelto loco???- digo susurrando lo más bajo posible
No sé qué tendrán pensado los demás pero yo, las escenas de acción ni siquiera las veo en el cine.
Son muchos y están locos, yo les voy a llevar la corriente hasta que nos dejen ir. Incluso aunque consiguiéramos pasar de la puerta, no lograriamos salir de Las Termitas.

¿Cónclave? ¿Casas? ¿El Orden de Antaño? Esas palabras empiezan a ser familiares. Es como jugar a un juego de Rol de los que se inventa Hirotsugu. Lo único que espero es que quién orquesta esta locura tenga más criterio que Hirotsugu o cuando salgamos de la taberna, si es que algún día salimos, nos encontraremos un dragón dorado con 2000 puntos de vida... Parece ser que las casas se organizan por pisos, así que decido dirigirme a Rob para preguntarle qué sabe él. Bueno Rob, parece que no sólo nos une el descansillo. También nos une la Casa. ¿No sabrás de que casa somos?

Te agradezco que me comentes esto porque no quiero dar lugar a malentendidos. Disculpa si esa es la impresión que he dado, pero para nada. Estoy disfrutando mucho de esta partida. Tanto la trama como los compañeros que me han tocado tienen un nivel indiscutible.

Sobre John,...bueno, sí, más que un investigador de lo paranormal, es una persona que intenta recuperar su pasado y descubrir porqué tiene esos sueños y pretende encaminar sus investigaciones a ese propósito. Esto no quiere decir que se sienta cómodo con lo paranormal. Al contrario, desconfía de todo aquello que no pueda controlar. Es extremandamente inteligente pero probablemente tenga síndrome de asperger o algún tipo de autismo raro, no diagnosticado, aunque muy leve lo cual se traduce en su aparente falta de empatía y sus dificultades para comunicarse. Y sobre todo, es muy desconfiado, rozando la paranoia. Efectivamente su reacción es gradual porque los hechos también lo han sido. Al principio le estaban regalando una casa en un entorno idílico y si bien le pareció raro, no parecía haber ningún peligro potencial. De pronto descubre que todo ha sido un engaño para meterlo en medio de una guerra entre sectas y evita posicionarse, primero porque en principio lo de meterse en sectas, como que no. Y segundo, porque en caso de hacerlo, no tiene claro cuál de las dos es la "buena". No es que pase de todo, es que no quiere comprometerse.

Pero sobre todo, John intenta ser práctico en todas sus decisiones. En este momento, su prioridad es salir de allí. Obviamente le parece más fácil cooperar con el Rey Jerónimo contándole cualquier chufla que liarse a mamporros estando en inferioridad numérica y teniendo en cuenta que es básicamente, un tirillas. 

Esas son más o menos las motivaciones del personaje tal como me lo he planteado. Si no te gusta y prefieres que lo reoriente, dime qué quiere que cambie. Me gusta tal como está, pero si no te viene bien o lo que sea, lo entiendo perfectamente. 

Lo de no participar en el off topic, no es por ser borde ni nada parecido. No tengo costumbre, simplemente. 

En cuanto a destinatarios, lo siento. Soy un desastre. De todos modos en este caso, es que pensé que estábamos todos. Intentaré fijarme más. 

Me alegro un montón, John. 

Para nada tienes que cambiar la orientación de tu personaje ni el modo de rolear, así como tampoco hace falta que escribas en el off topic. Es simplemente que la conjunción de todas esas cosas me hizo dudar si el reacio era John o el jugador y me preocupaba que no estuvieras agusto. Pero viendo que no es así, queda todo aclarado y me quedo contento. :)

De hecho, viene bien que haya alguien menos unánime en cuanto a hacer las cosas. Da variedad e incorpora nuevas tramas. Siempre que al final no le lleven al camino equivocado, como le pasó a Martin pese a mis advertencias. 

Gracias por tu respuesta. Yo también estoy muy agusto con tu nivel de juego y el de tus compañeros.