Partida Rol por web

La muchacha estaba tan asustada por las reacciones de sus compañeros de instituto que momentaneamente había perdido el habla, por lo que para comunicarse con aquel muchacho esta simplemente negó con la cabeza varias veces, haciendo que sus cabellos volaran en el viento.

-N... No... -Dijo finalmente con un hilo de voz, por si no había quedado claro- ¿Z...Zombies?. ¿Q-Quieres decir "Los Caminantes"?. ¿"Los Muertos Vivientes"?. ¿"Los Mordedores"? ¿"Los Creepers"? ¿"Los que vagan"? ¿"Los Apestosos"? ¿"Los Cuerpos Fríos"? ¿"Los Infectados"?... -Había mil nombres de zombies.

La carrera de ambos chicos acabó de sopetón al ver como la cocina no era, precisamente, un lugar tranquilo. Park intentó ojear por encima de las cabezas de los demás y los muebles de la habitación, hasta que finalmente encontró una puerta al fondo. La salida de aquella pesadilla. Muchos otros intentaban correr hacia aquella puerta y los dos chicos no podían quedarse rezagados.

—¡Vamos Soo-jin, saldremos por la puerta! —agarró la mano de la joven fuertemente y comenzó a correr intentando esquivar todo lo que se ponía por delante. El suelo estaba resbaladizo, por lo que intentaba apoyarse en los muebles y las paredes. En más de una ocasión una sartén casi le da en la cara.

Apartaba y empujaba a los demás, a todos aquellos que pudieran ser un estorbo para llegar hasta la salida, a los monstruos que trataban de comerse a sus compañeros o a las cocineras que se defendían. El instinto de supervivencia era lo que le hacía que actuase así, quería vivir y no morir en aquella cocina.

Hikari fue escuchando a sus compañeros como cuando lo hacía cada vez que un profesor daba clase: se trataba de recolectar datos, analizarlos para aprender mejor un problema. Esta situación requería cabeza fría, aunque realmente fuera tan dantesca que daba dolor de estómago.

-Si son zombies ya no son nuestros compañeros… no nos reconocen más que como alimento. Sobre lo de la cabeza, es que en las películas parece muy fácil pero atravesar el cráneo, inutilizar el cerebro, no es sencillo. Tiene que ser algo contundente y… ni siquiera sabemos con certeza si son zombies.

Cuando sintió golpes en la puerta, pensó por un momento que se trataba de Kim, pero eran dos compañeros más.

-Tenemos que dejarles entrar –dijo –luego podremos también averiguar algo más sobre todo esto.

La chica hablaba pausadamente y escondía el gran miedo que atenazaba su garganta. Pensaba en su padre, en su hermano y en los amigos que aun no habían venido al aula. “Oh Kim, Cristian, Tetsuo… ¿dónde os encontráis?”.

No parecía un gran plan, ni siquiera sabiamos si el aula estaba libre y yo habia dejado a Hikari atrás. Pero Cristian no quería entenderlo como siempre esperaba que lo siguiera a ciegas y fue exactamente lo que hice.

Cerré mis ojos y me dejé arrastrar por el incluso si eso significaba atravesar el espacio que esas dos chicas hambrientas estaban ocupando.

El espectáculo es dantesco por todo el instituto, Young está aterrorizada ante lo que ve, no tiene mucho tiempo para pensar qué hacer, entonces actúa, se dirige hacia las escaleras para subir dos plantas en dirección al laboratorio.

Quizás allí pueda encontrar algo con lo que poder hacer frente a esos monstruos y, con suerte encontrará alguno de sus compañeros en estado "normal", si mal no recuerda algunos de ellos fueron hacia la azotea

La chica mira con cierta desconfianza al principio, pero despues parece mas confiada y baja el bate mientras dice:

Va... vale... me llamo Gil Da Ran y soy de la clase 2-1

La chica se aparta aparentemente para que el chico pueda entrar sin problemas, ambos escuchan entonces algunos golpes en la puerta que da al gimnasio, pero por suerte esta estaba cerrada, Da Ran se asusta y dice:

¿Son ellos verdad? Los chicos que estan fuera... pude escaparme, pero... ¿vendran a salvarnos verdad?

El chico mira a Hyo ri algo extrañado, entonces la coge de los hombros y la zarandea un poco como para espabilarla y dice:

Espabila... zombis, de los que muerden a la gente y se los comen, no se si son esas cosas que dices, pero cualquiera que te vea te va a atacar y va a intentar comerte

El chico examina a la chica unos momentos, parece buscar algo, entonces dice:

¿No te han mordido verdad?

La cocina era un caos y los chicos trataban de escapar de alli. Rapidamente se dirigen hacia la puerta, pero por el camino tienen que esquivar no solo a los zombis, sino tambien a las personas que tratan de defenderse. Pueden ver como incluso algunos chicos se esconden debajo de las mesas quizas pensando que podria ser un lugar seguro para ellos.

Una chica zombi se les hecha encima, logrando tirar al suelo a Jun, sin embargo, gracias a que Soo-jin le da una fuerte patada en la cabeza esta no llega a morder a Jun.

Vamos Jun, tenemos que llegar fuera

Ambos chicos se levantan y corren hacia la puerta; sin embargo, al atravesarla pueden ver que el exterior no es mucho mejor, desde donde estan pueden ver casi la totalidad del patio delantero y trasero en donde las escenas de caos se repiten al igual que en el interior del edificio

¿A donde vamos? ¿ Que hacemos? Estan por todo el instituto... ¿y si tambien estan en la ciudad?

La chica parecia realmente asustada, jadeaba y estaba al igual que el empapada por le agua que habia caido del sistema antiincendios de la cocina y el comedor

Al escuchar aquello la chica se pone de pie y gritando dice:

¿Dejarles entrar? ¿Estas loca? ¿Como vamos a abrir la puerta? No... no puede entrar nadie mas, demasiado que habeis entrado los ultimos que habeis entrado... seguro que les han mordido y son zombis

El chico mira a la chica de la rebeca rosa y dice:

¿Pero no ves que estan bien? tenemos que dejar que entren antes que alguien mas llegue y les muerda, venga Hikari abre la puerta para que puedan entrar

La chica los mira a todos y parecia algo asustada

¿Pero y si tiene razon y les han morido? meteriamos aqui a un par de zombis y estariamos en peligro

Mientras discutian sobre si dejar entrar o no a los chicos Hikari podia escuchar como pedian que les dejaran entrar y golpeaban la puerta

Los chicos tomaron la decision de tratar de ir a su clase, sin embargo, para ello tenian que pasar justo por donde estaban aquellas dos chicas que habian terminado de dar cuenta de su compañero. En cuanto se acercaron las dos chicas les salieron al paso lanzandose contra ellos dos como si fueran dos bestias salvajes en pos de su presa

La chica comienza a correr y subir las escaleras, por fortuna para ella los zombis parecen estar entretenidos con otros chicos y ninugno va tras ella hasta que llega a las escaleras que llevan a la segunda planta, cuando empieza a subirlas un zombi parece verla y corre hacia ella siguiendola.

Al llegar a la segunda planta puede ver como la escalera que lleva a la tercera parece estar sin nadie aunque en la tercera planta se escuchan los mismos gritos y sonidos que en plantas inferiores, mientras que en la segunda planta frente a ella puede ver a Cristian y a Ji eun que tienen frente a ellos a dos chicas zombis

Al parecer para Seul-ki Lee esto de estar en pleno apocalipsis zombie le había quitado todo tipo de admiración por los conocimientos de la joven Hyo-ri Yie acerca de nombres alternativos a la palabra "zombie", por lo que era normal que este no celebrara los conocimientos de la muchacha... o simplemente ni le interesaba de antes.

-Que no... -Insistió de nuevo apartándolo de cerca suya.- ¿Y a ti te han mordido?. Ya sabes lo que dicen, un ladrón cree que todos son de su condición...

La joven no parecía del todo preocupada por aquella situación que la rodeaba, que los muertos se levantaran de sus tumbas era una constante que ella, desde muy joven, había previsto. A fin de cuentas sus padres trabajaban en una funeraria local... y ella estaba segura que de ahí no venía el brote.

-Esto es culpa de la Funeraria del Chino ese. -Dijo con seguridad- Tratando de imitar los ritos Americanos de enterramiento, la "Funeraria Pal Mao". -Pal por compañero, y Mao por el nombre del chino- Pues en la funeraria de mis padres yo siempre me dedicaba a atar los cordones de los zapatos entre sí, para que esto nunca pudiera pasar. Los Zombies al levantarse se caerían al suelo y no podrían andar.

Suspiro de alivio, parecía que se había logrado calmar un poco -Soy Kenzo Harima del 2-5- dijo como presentación con su voz ronca y comienza a entrar, es entonces cuando sus compañeros arremeten contra la puerta, instintivamente se voltea hacia el ruido y cubre con su gran cuerpo a la chica de forma protectora.

-Imagino que las autoridades ya se estarán movilizando, creo que no tardaremos en escuchar las sirenas- le comenta para calmarla, pero él comienza a sentir que la realidad se alejara mucho de sus palabras, su mente en ese instante no tiene idea de cómo debería actuar y su estómago empieza a hacer los ruidos característicos de cando se tiene hambre.

-Al menos parece que en este lugar podemos estar a salvo- sus músculos se relajan y vuelve su mirada a la chica -estaremos bien- aunque sus palabras suenen seguras no las cree realmente y lentamente lleva su mano a uno de los bates -¿Has logrado almorzar?- le pregunta tratando de cambiar el tema.

Dos opciones bajar por unas escaleras donde nos esperan una decenas de compañeros salvajes que nos quieren comer o enfrentarnos a dos y buscar refugio... opción clara enfrentarnos a dos y buscar después a nuestras amigas.

Como me enseñó Kim Soo-jin trato de proyectar a una de las compañeras hambrientas contra la otra y así hacer hueco para que nosotros podamos pasar y superar a las zombies.

Confía en mi, te protegeré... trato de calmar a mi amiga sabiendo que está pasando miedo.

Hikari entendía la reticencia de sus compañeros a dejar entrar a estos chicos pero no iba a dejarse llevar por el pánico. Se aproximó hacia la puerta y, tratando de permitir que ingresen, explicó en tono contundente:

-Vosotros mismos dijisteis que hay cosas de los zombies con las que no parecen cumplir, como eso de seguir moviéndose aunque golpeen su cabeza. ¿Entonces cómo podemos asegurar que sea tan fácil convertirse? -no pretendía sonar sabionda, así que se explayó mejor -apenas sabemos nada excepto que, hasta que se comporten como esos locos, siguen siendo nuestros amigos. ¿O vamos a dejar que sí mueran? Porque eso es más seguro: afuera son carne de cañón. 

Los miró expectante, ella de todos modos tampoco sabía nada, solo que tenía que intentar comprender esto antes de abandonar a un chico o chica indefenso como ella misma.

-Por Favor, permíntame dejarles entrar. Tampoco podemos sobrevivir solos a esto... sea lo que sea esto.

"¿Qué es 'esto' porque la verdad que parece una película de terror."

Sus palabras calaron hondo en mi, fue exactamente lo que mi hermano había dicho antes de encerrarme en el baul para protegerme de los tipos que lo terminaron matando. Empecé a hiperventilar y mi garganta irritada amenazaba con volver a convertirse en una alarma de gritos ininterrumpidos, sin embargo usé toda la fuerza de voluntad que tenía en mi para cerrar la boca y no complicar más nuestra situación.

- Si me agarran solo corre- dije en un murmullo usando buscando con desesperación algo que nos fuera a servir como arma mientras intentaba no ser una piedra en el zapato de mi amigo.

Al llegar a la segunda planta veo como Cristian y Kim son acosados por dos zombies, las escaleras parecen limpias, pero en el piso superior también se oyen gritos.
-"Cristian, Kim!"- Les grito -"Qué diablos está pasando? Iba al laboratorio, seguidme"- Exclamo dirigiendome hacia el laboratorio

Ambos salieron del comedor casi arrastrándose. Jun se giró y cerró la puerta si no veía a nadie cerca de poder salir.

—Quizás podamos salir del instituto, ya veremos como está todo en la ciudad —dijo mientras señalaba hacia la salida del instituto. 

Quizás en la ciudad todo estuviese igual, o incluso peor. Pero había una posibilidad de que no fuese así, de que alguien hubiese puesto orden. Jun cogió la mano de Kim soo-jin y comenzó a correr hacia la salida del instituto, la misma verja que había cruzado hace unas horas para entrar en el instituto.