Partida Rol por web

Hace mucho frio y llueve a cantaros en medio del bosque.

Los truenos caen a vuestro alrededor y desde hace horas el canto de varios grillos es vuestro unico compañero.

Apesadumbrados por las recientes perdidas en vuestros grupos apenas sois conscientes del confluir de vuestros caminos hasta que os encontrais en una union de los mismos.

Por un lado van Alfred y Helmut y por el otro Nik.

Os mirais y es como si os conocierais de hace mucho tiempo aunque ... no es asi.

Solo que ... habeis estado soñando unos con otros... como si fuerais importantes en la Rueca de algun plan primordial.

La duda es si tal plan es Divino o Demoniaco...

La muerte de mis compañeros es rápida, no puedo saborear el dolor, pues tengo que escapar. La carrera es rápida, la persecución se acaba y no se lo que hacer, sigo moviéndome hacia esa dirección.

Mi paso el palpitar de mi corazón aumenta, la respiración se entrecorta, dos personas que ya conozco, pero que nunca he visto,  me miran con la misma expresión que yo.

-¿Os conozco, verdad?

Como si fuera ayer recordais veros en una enorme sala circular en lo que parecia un altar de invocacion a algun ser extraterrenal.

En medio de la sala veis una joven muerta de la que sabeis era virgen.

Los verdugos aparecen de la nada, sin rostro y portando unos enormes mandobles.

Uno a uno os parten por la mitad mientras vuestra sangre termina el conju..

Tras varias horas cabalgando junto a Helmut y bajo la lluvia llegamos a un cruce, una extraña figura se acerca desde uno de los caminos, a medida que se acerca una extraña sensación recorre mi cuerpo, me parece haberlo visto pero no se donde, su aspecto, su cara... ese sueño... allí lo vi, tumbado junto a nosotros justo antes del fatal final, por su reacción al vernos parece que él también nos reconoce, de que será? De lo mismo? Sus palabras se adelantan a las mías, le miro a la cara desde debajo de mi capucha, busco algo que pueda delatarlo como un mutante o un cazador de brujas, después de ver morir a Igor no me fñio mucho.

Creo que nunca hemos llegado a vernos pero también me parece haberte visto antes, diría que en un extraño sueño... Dejo que mis últimas palabras floten en el ambiente para ver su reacción. Mi nombre es Alfred.

Igor muerto...y nosotros vagando por las afueras...¿será este nuestro destino, estar perdidos hasta encontrar la muerte a manos de cazadores?

Un desconocido aparece por la foresta, mas...no es un desconocido. Es un recuerdo de un sueño, vuelto realidad.

-Sii...os recuerdo de un sueño...¿Quién sois, y qué hacéis aquí?-le pregunto al desconocido que se nos aproxima, perturbado por el recuerdo del sueño.

-Mi nombre es Nik, encantado- contesto, sin dilación- Yo, yo no soy nadie, bueno, si. Soy un Prófugo, un mutante maldecido, lo que hago es huir, supongo, que vosotros hacéis lo mismo, ¿no?

Otro maldito...hay algo que pareciera que nos está llevando de las narices, acercándonos...con qué propósito? ¿Nos beneficia, o será peor para nosotros? Dioses, ayudádnos!

-Estamos en fuga, asimismo. Ya ha muerto un compañero ante los cazadores. Ahora, buscamos la seguridad...la redención...no sé exactamente qué buscamos, pero sabemos que no podíamos permanecer en donde estábamos. Ya allí nos buscaban. Propongo que hagamos una pausa, e intentemos descansar, quizás intercambiar historias.-le digo a Nik.

-Mi nombre es Helmut, y mi compañero Alfred.-agrego finalmente, para beneficio de mi interlocutor.

Todos notais un escalofrio que os recorre todo el cuerpo.

Os sentis observados de repente, como si algo o alguien estuviera al acecho.

Nada ni nadie esta cerca... solo la sensacion.

Como un acto reflejo uno a uno os tocais el hombro... notando una ligera molestia... ¿Que era eso?

Un marca... hecha a fuego... ¿que era esto?

Un recuerdo lejano nubla vuestras mentes durante unos instantes...

Os veis desde arriba, vuestros cuerpos... vosotros... dias antes de que os recogieran vuestras salvadoras.

Los proyectiles del caos destruyendolo todo y provocando vuestra caida.

Y... unas figuras... vestidas con tunicas negras recogiendoos de los restos, deformes, mutados.

Os llevaron bajo tierra, ¿un sotano? y alli cantaron algo oscuro.... solo podia serlo por las entonaciones y el hedor a muerte...

Os marcaron... como ganado... la misma señal que todos llevan.... siendo de su propiedad ahora...

Luego como animales perdidos os dejan en los conventos y tras soltar oro a las maravillosas monjas os abandonan a vuestra suerte...

Todo empieza a encajar ahora... la pregunta es, ¿para que os necesitan?

 la conversación se corta, pues todos hemos sentido el escalofrío, y todos habíamos visto aquella extraña visión.

-¿Pero qué?- Exclamo, intentando buscar respuesta a algo que todos sabíamos que significaba.

-Nos han marcado...alguien nos ha elegido...para ellos, para oscuros propósitos...-musito, perturbado por las nuevas sensaciones.

-¿Dónde...dónde iremos ahora?-pregunto, confuso y triste...

Tras la visión noto algo dentro de mi cuerpo, no es nada maligno sino el ansia de saber más, quiero saber quin nos ha marcado y porqué, que me depara el futuro y de momento solo hay una forma de saberlo, Altdorf y esos cultistas.

Nosotros nos intentábamos dirigir a Altdorf en busca de algo más de información, durante nuestra huda de Middenheim unos hombres nos ayudaron a salir de la ciudad enviándonos a Altdorf. Miro los alrededores para intnetar ubicarme o ver algun edificio, donde demonios estaremos ahora? Y no hay duda de los que los tres nos encontramos en la misma situación si acabamos de ver lo mismo. Nik de donde venías tu?

-Vengo de Talabheim, tuvimos que huir de la ciudad, nos escondimos en el bosque, y cuando íbamos a entrar a una posada para poder comer, nos atacaron los cazadores, me dirigía también a Altdorf, no tengo ninguna relación con esa ciudad, pero algo me dice que debo ir.

Parece que perdemos a un compañero pero ganamos otro, espero que éste sea algo más listo que Igor y pueda servirme de ayuda, relamente nuestros caminos han de estar conectados por una fuerza oscura, mismos sueños, mutaciones, mismo destino... Sólo espero que ninguno de los dos se meta en mi camino e intente pararme.

Los sueños que estoy teniendo me han dejado bastante intranquilo, soy parte de un sacrificio? Eso solo era una imagen d elo que podría suceder o será mi final? Tengo que averiguar todo lo posible.

-Entonces, nuestro destino, para bien o para mal, se encuentra en Altdorf. Iremos hacia allá...y veremos que sucede. Por lo pronto, yo preferiría quitarme este estigma de encima...no mediante las artes de los sacerdotes de Sigmar. Todavía deseo vivir y caminar por el mundo.-digo, cabizbajo, removiendo con un palo las ascuas del fuego.

Me quedo mirando a Helmut tras sus palabras, Quitarse ésto? Sólo conozco una solución a las mutaciones y es la que sufrió Igor en la posada, la muerte. Ahora mismo hay pocas ocpiones, esconderse y vivir siempre con miedo o aceptar lo que somos y seguir avanzando.

Pues hacia donde tiramos para ir a Altdorf? De momento aun podemos utilizar los caballos pero no creo que les quede mcho tiempo si no conseguimos comida o les dejamos descansar.

-Asi pues, partamos hacia Altdorf, antes de que mi estómago deje de darme tregua- acepto, mientras monto en mi yegua de un potente salto

Seguis el camino juntos, unidos por un extraño destino.

Las marcas que portais os traeran problema si son vistas, pues muchos viejomundanos odian todo lo heretico y caotico.

Os cruzais con mercaderes, guardias y otra fauna humana de estos lares, pero ninguno repara en vosotros.

A lo lejos veis una gran humareda proveniente de la plaza de un pueblo... ¿una fiesta local?