Partida Rol por web

La habitación es blanca, con los rodapiés y los marcos de las puertas de madera albina, una puerta marron, abierta, deja paso a un pasillo, y al final de este, otra puerta, que no se puede abrir. En la sala principal, una gran ventana dividida en tres por líneas de hierro pintado de blanco, suelo con parqué, de color madera clara, y en el centro, una esfera negra, que llega por la cintura a un hombre de estatura media....

Que coño es este sitio???, ¿y como hemos llegado hasta aqui??....

Esta totelmente atemorizado, su gran bigote tiembla, y al parecer, su dignidad tambien, porque esta a punto de cagarse encima.....

De la esfera comienzan a salir múltiples rayos de colores, dibujando de arriba a abajo una figura esbelta, incluso dibujando los mínimos detalles de los músculos, venas, ojos, etc...Tras terminar se puede observar un tipo de cabellos blancos, ojos verdes,y un rostro un tanto adormilado.Llevaba una camisa blanca con las mangas levemente remangadas al igual que por fuera sobre sus vaqueros grises oscuros.

Cae arrodillado a cuatro patas, pasándose la mano por la cara, de arriba a abajo, con un gran sentimiento de angustia y agobio.Tenía ganas de devolver pero no tenía nada para echar.Tenía unos pocos sudores, que con el paso de los minutos van desapareciendo.Se arrodilla algo más firme, aunque aún por dentro estaba totalmente descompuesto.Arrastrándose por el suelo utilizando sus pocas fuerzas, llega hasta una de las paredes de la sala, donde apoya su espalda y respira hondo.Mira las palmas de sus manos algo atónito y sorprendido, aunque su rostro no expresara nada.Parecía muerto debido al poco uso a lo largo de los años.

-¿C...como?- suena una voz más o menos grave en la sala.Se lleva una de sus manos a la cabeza-.Que...dolor...- dice intentando recordar.

-¿Dónde estoy?....Sólo recuerdo...mucha gente en el vagón y...un gas.......gritos y...muerte- se queda un momento callado.Alza su mirada y observa una sala blanca, por ahora nada fuera de lo normal, aunque había algo que realmente llamaba la atención.Una esfera que nunca en su vida había visto.Además de reluciente parecía estar hecha de un material resistente y de alta tecnología.Intentando comrprender que hacía eso ahí en medio, gira su cabeza hacia las ventanas de la sala.Estas le dejaban ver las vistas, en las cuales destacaba la torre de Tokyo sobre el resto de edificios.

-Todo esto, es....ilógico.Necesito un pitillo....- dice con un medio suspiro.Se palpa uno de los bolsillos de sus baqueros y se saca una bonita pitillera plateada.La abre, coge uno y se lo coloca en la boca, cerrando la pitillera y volviéndola a meter, para a continuación sacar un mechero del otro bolsillo y encendérselo.Le da una calada y poco a poco echa el humo mirando hacia arriba, intentando relajarse.Sus ojos, van bajando poco a poco hasta ponerse sobre la figura de un hombre más o menos de mediana edad.

-¿Usted sabe algo?- le pregunta vagamente aunque en el interior la curiosidad rebosaba.

Como si de un escaner se tratase, la silueta de la joven se empieza a crear a partir de rayos rojos que salen de la bola..... la mujer termina de aparecer tumbada en el suelo.... llora desconsolada...

No.... por favor.... no..... De pronto se para en seco, y deja de llorar, como si se hubiese congelado en microsegundos....

¿Donde estoy... y quienes sois vosotros?

-Eso me pregunto yo......- le responde a la joven, tras ver como había aparecido.Gracias a ella, ya habí tenido la oportunidad de ver como había llegado a ese lugar.Era como una especie de escaner, algo realmente inusual y jamás nunca visto.

-Soy detective, y en mis ratos libres ejerzo de inspector de policía por si el principal falla....- le informa a la chica que parecía estar bastante afectada.

-Me llamo Joriya Tokome, encantado de compartir estos momentos con usted,¿ señorita...?- le explica con itnención de conocerla mejor y así establecer un contacto más personal.Era una situación difícil y debían estar más juntos que nunca par apoder sobrevivir a lo que le spodía esperar.

Señorita Katoó, Sayo, encantada de conocerle..... Esto debe de ser algun hospital, o algo parecido.... porque, lo ultimo que recuerdo, es que me iba a morir...

La chica llora de nuevo, la lagrima resvala lentamente por su mejilla hasta la comisura del labio, donde desaparece....

-Mmmm, piénselo bien, señorita Katoó.Teniendo en cuenta que aunque la baja economía del país en la cual aún estamos sumerjidos, lo que nos provoca en un estado de completa recesión debido a una continua bajada de los precios y a la poca demanda.A pesar de esto, los hospitales de Japón, están totalmente capacitados como para poseer las instalaciones adecuadas, buen material y buena tecnología como para atender correctamente a los pacientes.La sala en la que nos encotramos, no entra entre las características que tengo en mente sobre una habitación o sala de hospital.Además de que esa extraña esfera negra, allí situada en el centro de esta sala, es poco usual y puede que forme parte de todo ese embrollo.Aunque dígame, usted recuerda al igual que yo que lo último que recuerda es mucha gente,y de pronto un budista, que puede que perteneciera a una secta o también que fuera por sólo,hablara algo sobre almas, Buda, cielo y tierra.Tras esto, todo es confuso, recuerdo levemente la imagen de un humo que envolvía el vagón, y puede que sea el cuasante de todo esto...- le explica argumentando poco a poco y sacando diversas hipótesis como lo haría un verdadero detective.

-Como usted y ocmo yo, puede que vayan apareciendo más personas.Esa bola nos proyecta mediante diversos rayos de colores.Es decir, una tecnología como vista hoy en día.Puede que sean efectos especiales de alguna película en la cual podemos estar, o sólo un sueño.Es difícil de explicar.Por ahora no tenemos suficientes pruebas como para resolver este problema...- le termina por decir.

-Por cierto....- se queda pensativo-¿....que habrá sido del sospechoso al que andaba buscando....?- murmua pensativo.

Nuevamente la bola comenzó a destellar, emitiendo luces multicolores que dibujabando con sumo detalle a una persona viva.

El recién llegado es un joven con el pelo desordenado y de color castaño oscuro, de complexión delgada y bastante alto. Sin embargo, al llegar a la habitación se encontraba reducido a su mínima expresión. Como enrrollado en si mismo el joven aún apretaba los puños y los párpados.

¡Merde! Fue la primera palabra que salió en su llegada. Poco a poco se empezó a desdoblar, su primera reacción fue palparse, al parecer estaba entero. Sudando como un puerco intentó incorporarse con cierta dificultad, logró mantenerse parado por unos 3 segundos y volvió a caer al suelo, esta vez aterrizó con su parte posterior, quedando sentado de espalda a la bola - una posición un poco más noble que la primera -

Frente a él se encontraban 3 sujetos, que creyó haber visto en algún lugar, sin embargo todo parecía ser un sueño y no prestó demasiada atención a sus memorias. Gritos y más gritos era lo único que recordaba, luego palabras sin sentido y silencio.

Un sujeto de pelo blanco terminaba una frase en japonés, así que había una alta posibilidad que siguiera en Japón, por esta razón buscó en sus bolsillos el tan preciado libro de "Ayuda al turista en Japón" y buscó la frase más apropiada para la situación. ¿Qué ha pasado aquí? fué lo que soltó en un japonés bastante desprolijo.

Ante su momento de duda e incertidumbre, una nueva figura era dibujada por la esfera.Un joven que por su apariencia parecía estar bien alimentado y bien sano.Una de las primeras palabras que suelta es de origen frances, al igual que su mejorable acento japonés, que ambas causas denotaban que era un extranjero.No podría hablar como siempre contra un objetivo que no podría poseer su misma fluidez y menos riqueza vocabularia.

-Usted, ¿estuvo en el vagón?- le dice claro, distinguiendo cada palabra.Le da una calada a su cigarro, dejándolo entre sus labios, y soltando el humo con sumo tranquilidad.

El zumbido de la esfera volvió a comenzar y al cabo de unos instantes una joven había sido materializada en el centro de la habitación con el brazo en alto, como si se estuviese agarrando a algo, y la cabeza levemente girada hacia su derecha, una mueca temible dibujada en sus rasgos

...mire pervertido, si vuelve a tocarme el culo llamaré a la polic... -se quedó a media frase, su cara transfigurada por una gran confusión- ¿D-donde estoy? -miró a todos lados, entre asustada y perpleja- ¿Q-quienes s-son ustedes?

Rápidamente la duda dió paso de nuevo a la furia, y la muchacha retrocedió hacia la puerta al tiempo que se encaraba con los desconocidos- ¡Yo os he visto antes! ¡Estabais en el vagón, como ese asqueroso que me acosaba! -soltó un gritito de angustia cuando comprendió lo que significaba eso- Me habéis golpeado por detrás y traido a este lugar mientras estaba inconsciente... -levantó la mirada suplicante- Por favor, dejad que me vaya, no se lo diré a nadie ¡os lo juro!

Entonces el extraño láser volvió a ponerse en funcionamiento, esbozando en el aire la figura de un viejo que se sentaba en un asiento inexistente

¿Como estará mi nieto? Hace siglos que no le veo, seguro que ha crecido un mon... su pensamiento fue interrumpido cuando cayó de culo al suelo, desaparecido el sitio donde se apoyaba.

¿Que signific...? -su ojos se pasearon por las blancas paredes- Esto no es el metro... -susurró con voz estrangulada, al parecer demasiado traumatizado para poder formular en su cabeza nada más complejo que eso

¡Aaah! -el aullido de terror de Yuka resonó con fuerza en el apartamento- ¡¿Es que además me habéis drogado?! -blandió su bolso hacia ellos- ¡Apartaos de mi, cerdos! -al tiempo que golpeaba a aquel degenerado del pelo blanco con fuerza

Nadie te ha atado, y no creo que nadie de aqui le haya tocado el culo señorita, ahora, haga el favor de calmarse.... No nos conviene a ninguno que la sitiacion se desmadre.....

  Bien, yo tampoco creo que sea un hospital, y lo de la esfera del centro de la sala da la seguridad a la teoria del pelo-blanco, pero si tuviese que decir a que se parece, diria que a una habitacion normal sacada de un escaparate de IKEA....

Carraspea lentamente, y se afana por devolver a su estado su maltrecha ropa....

La joven negó con la cabeza desesperada- ¡No intentes confundirme! ¡¿Como si no estoy aquí?! -se volvió hacia el hombre de pelo canoso al que había estado pegando y le dió un codazo en la tripa, para después correr hasta la puerta como si su vida dependiese de ello ¡Tengo que salir de aquí! Aferró el picaporte con todas sus fuerzas, pero éste no se movió ni un centímetro ¡No!

Le da otra clada, consumiendo una pequeña parte del cigarro, observando tranquilo y paciente como la gente iba apareciendo.

-Ya entiendo....He podido deducir al igual que la joven del gorro, todos procedemos de aquel vagón.No hace falta que se moleste en responderme joven....- le dice al que creía de procedencia francesa.

-Bueno....en mi opinión, creo que cuando nos tranquilicemos deberiamos presentarnos....- se levanta ayudándose de la pared y recorre la sala, hasta adentrarse por una puerta, la cual le llevaba a un pasillo y este a una puerta.Mira la manibela, dudoso.Coloca su mano de esta y ejerce presión, sin embargo la puerta no se abre.Una mueca de fastidio se dibuja en su rostro.Mientras anda por el pasillo intenta abrir toda puerta que se le presenta, pero obtiene el mismo resultado.Vuelve nuevamente a la gran sala encontrándose a aquellas personas, dejando tras de sí un rastro de humo que poco a poco va desapareciendo.Echa un vistao general, hasta que su mriada se topa con las grandes ventanas, observando su rostro reflejado en estas.Se va acercando a estas, hasta colocarse a uno centímetros.Le da otra calada a su cigarro y se lo quita de sus labios.

-La torre de Tokyo....- dice intentando deducir algo.Su mano se coloca sobre el borde metálica d ela ventana, intentando abrirla, pero obtiene el mismo resultado.

-Estamos encerrados.....- dice con un suspiro.

-Creo que lo mejor sería presentarnos.Así lograremos salir de este problema cuanto antes y nos resultará más fácil....Empiezo yo.Me llamo Jiroya Tokome y en el último sitio que estuve antes de despertar aquí, era el vagón del metro...- se da la vuelta esperando alguna respuesta.Aún sentía algo de dolor en su zona torácica, aquella muchacha debía controlar sus acciones.

-Señorita, no lo intente.Yo tambien fui pero no tuve resultado alguno....

Un hombre de pelo blanco le había preguntado algo sobre el vagon, sin embargo, mientras se animaba a responder la pregunta, una joven apareció impulsada por las luces y comenzó a patalear y gritar cosas que no alcanzaba a comprender del todo. Posteriormente apareció un viejo asegurando que esto no era el metro - gran observación, no? -. Finalmente y tras la interrumpción de otro señor mayor la joven paró el escándalo y el hombre de pelo blanco volvía a hablar instándolos esta vez a que se presentaran, frase que entendió inmediatamente debido a que era una de las primeras en su libro.

Mi nombre es Tristan Dómine - dijo nuevamente en un japones no tan desprolijo como el anterior. Al parecer había usado esa frase varias veces antes.

El aire faltaba y poco a poco sus ojos comenzaban a cerrarse, ya no podía oír nada, salvo los gritos de la gente que poco a poco comenzaban a desaparecer y el silencio comenzaba a reinar. Se arrastró hacia un tubo donde un joven vestido de negro intenta ponerse de pie y queda recargado en el metal frió, cerrando los ojos y sin poder comprender que había pasado... tomar el tren nunca pareció ser tan peligroso, ser asaltado, golpeado o cualquier otro asunto. Aun era increíble morir de una forma tan extraña, aunque por los tiempos de guerra es de comprenderse.

Unos minutos después empieza a ver una luz, pero es extraño en un instante todo comienza a oscurecerse y al final siente que sus pies faltan, pero poco a poco todo vuelve a lugar, de repente cae al piso de rodillas, el tubo de metal donde habia quedado ya no estaba, el piso no era el del metro y pero el silencio reinaba nuevamente. Al alzar la mirada logró ver a varias personas, no recordaba a ninguna de ellas, pero vagamente perecia que las habia visto.

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Al mirar alrededor nota que todo esta fuera de lugar, se pone de pie y se coloca en la ventana, mira la torre de Tokio y esto se volvía más complicado de entender. Se sentó, serró los ojos y espero a que esto fuera un sueño o mínimo intentar entender todo lo que había sucedido.

Tras el joven, la esfera vuelve a ponerse a funcionar, recreando un pequeño más o menos trajeado con un toque bastante juvenil.Aparece tirado en el suelo bocabajo.Se queda unos segundos inmóvil y poco a poco comienza a reaccionar.

-Ugh...ugh...- dice intentando levantarse con sus delgados brazos.Logra ponerse a cuatro patas, pero tenía mucha angustia y no sbaía si tiraría el desayuno allí mismo.Temblaba levemente allí tirado, inentando recordar.Su cerebro se pone en funcionamiento rápidamente, utilizando su memoria fotográfica.Diversas imágenes recorren su mente.Mucha gente, estaba en el metro, y hacía mucho calor.De pronto, comenzaron a escucharse gritos, y la gente se caía al suelo.Un señor parecía hablar de Buda.Se tira al suelo y se coloca debajo de los asientos, intentando ocultarse de todo el barullo, pero a partir de ese momento, todo se ve oscuro.Logra levantarse, pero se lleva las manos a la cabeza, le dolía bastante.Se quita las gafas y se las limpia utilizando su camisa, para volvérselas a colocar.Alza la vista y lo primero que se encuentra es una extraña esfera, reluciente y parecía ser dura.Da un vistazo general a toda la sala encontrándose a diversos individuos que se hayaban en aquel momento en aquel vagón.Su mirada se para en las grandes ventanas, por donde entraban los rayos del sol, iluminando la sala, y dejando ver la grandiosa torre de Tokyo.

-Que......- se queda unos momentos pensativo.

-Me acuerdo de vosotros, estabais en aquel vagón....Pero....¿qué hacemos aquí....?- se rasca la cabeza dudoso a la espera d euna respuesta que no encontraria.

-Esperad, no me lo digais.Es una película, ¿a que sí? O tal vez ese señor budista pertenecía a algún grupo sectario, y lo único que ha pasado es que hemos sido víctimas de un acto terrorista.....Si no recuerdo mal, lo último que vi fue un extraño gas.Y si mi mente no me falla, los nazis en la segunda guerra mundial utilizaban cámaras de gas para exterminar a los judios.Si contamos con la situación en la que nos encontrabamos, es decir, un vagón paracticamente todo cerrado, hecho de metal y el calor del ambiente, era suficente como para realizar la función de cámara, y por ello solo faltaba soltar el gas....Bueno es simplemente una hipótesis que se me acaba de ocurrir...- les explica aún penstaivo.

Al ver un juego de luces irrumpiendo en su penumbra de sus ojos cerrados, los abre y empieza a ver como un niño esta apareciendo por medio de un láser que proviene de la esfera negra, todo resultaba algo increíble y al escuchar las palabras del joven, se da cuenta que en verdad ya habían experimentado la misma muerte.

César se levanta y comienza a caminar hacia la esfera negra, creía que solamente era un adorno muy friki. Se aproxima y comienza a tocar la esfera para probar su consistencia y golpeándolo para comprobar su dureza. -Una aleación muy extraña, no parece estar hecha de algún material conocido, nunca había visto algo parecido- se dijo así mismo mientras estudiaba a tan extraña esfera.

-Al parecer es perfectamente esférica no parece tener ninguna irregularidad y parece estar completamente sellada