Partida Rol por web

Aaaay esto sí que no, ya me temía yo que el castillo iba a necesitar un buen barrido, pero me niego a una reconstrucción completa - Salto del cachivache metálico el que no he tenido tiempo de inspeccionar y corro hasta el primero de los brujos dándole una patada que el muy hábil esquiva, lo que ni se espera, ni esquiva es el cabezazo que le doy posteriormente, y que le hará ver las estrellas

- ¿Qué es esto? Nos están atacando en nuestro Castillo. Esto sí que no. Ahora os vais a enterar. - digo mientras avanzo hacia ellos esquivando los rayos rojos y plantandome delante del primero de ellos que se queda mirando con cara de asombro justo antes recibir un buen golpe ascendente en la mandíbula.

 -¡Atacan el castillo! ¡Adelante, a por ellos!

Sin decir más, salto desde la almena en la que me encontraba con mis alas extendidas para comenzar a planear y así poder atacar desde las alturas. Una vez en lo alto, me dejo caer contra el primero que vea desde detrás suyo y le endiño un buen puñetazo detrás de la cabeza.

Involuntariamente lance otro alarido estirando todos mis músculos a la luz de la luna, observando las maniobras de ataque de mis hermanos me lance al tiempo en picado hacia uno de los asaltantes de nuestra morada esquivando sus rayos rojos, dispuesto a no ceder ni un centímetro frente al enemigo.

Miré como aquellos humanos descendían desde ese avión gigante. 

Dominaron a los caballos, ya no me extraña que controlen a los pájaros pensé

Esperando que fueran a soltar más tonterías como el otro humano, me quedé sorprendido ante su afán de destrucción.

No me gusta dañar a nadie, pero si no me dejáis más remedio... ¡OS ENTERARÉIS!

Y me lancé contra el primer humano que pude, con el puño preparado para romperle la nariz o lo que fuera posible

No le gustaba su situación. Todo lo que habían conocido había desaparecido, su castillo estaba rodeado por aquellas extrañas construcciones, y se encontraban a merced de la bondad de un desconocido. Ha diferencia del resto de sus hermanos y hermanas gárgolas había entendido que aquel tal Xanatos, era lo que podría entenderse como el rey de aquel lugar, lleno de magia desconocida. Sin embargo no acababa de confiar, después de todo si se encontraban en esa situación era a causa de las acciones de los humanos...

Se encontraba meditando sus opciones cuando de repente apareció un extraño pájaro gigante, que abrió su boca dejando salir a los humanos que pájaro en su interior. Estos sin mediar palabra comenzaron a atacar el castillo lanzando extraños conjuros de luz. No entendía lo que estaba ocurriendo, pero evidentemente aquellos humanos no habían ido allí a hacer amigos, y que rompiesen partes de su castillo era razón mas que suficiente para que la ira le embargase.

Soltando un bramido de guerra, sus ojos se iluminaron con un color blanquecino, y sin pensárselo lanzo su gran masa sobre los atacantes golpeándolos con contundencia con sus puños y garras.

El ataque provocado por los magos de rayos rojos os encolerizó a todos y decidisteis defender vuestro viejo castillo con garras y dientes.

El primero en comenzar fue Luthien que golpeó a uno de los enemigos y quedó directamente inconsciente. Gargola saltó sobre otro de los enemigos con los ojos coléricos inyectados en sangre y totalmente brillantes, pero tuvo que rodar pues su enemigo logró esquivarle y aprovechando la confusión le atacó con el conjuro de luz que le abrasó una pierna.

Gárgola 3 se lanza planeando sobre otro de los enemigos y le asesta un golpe en toda la cabeza y lo tira a suelo. Este se levanta y apuntando de nuevo con el rayo le impacta en un ala y cae al suelo desestabilizado. 

Slink se encuentra con un enemigo que presa del pánico no reacciona, entonces le golpea con su puño y le estampa contra la pared rompiéndola toda la mandíbula y dejandolo practicamente muerto.

Enok y Equoor se lanzan juntos a por un mismo enemigo y el primero falla todos sus golpes pero Equoor consigue darle un buen golpe con su cabeza dura casi como la piedra. Entonces este mismo reacciona y lanza su magia contra Equoor que también logra esquivar.

Entonces un único enemigo al que habíais perdido de vista debido a la confusión se adentra en las almenas del castillo y le perdéis de vista.

Alguien debería ir a por el enemigo que ha escapado dije pensando en la situación. En un acto premeditado, me lancé en dirección del que huía para darle caza y averiguar por qué habían venido

Observo como el tipo ese ha entrado en las Almenas del Castillo y como Enok sale corriendo detrás suyo. Deja que Enok se encargue de él. Aquí tienes entretenimiento suficiente.

- Venga chicos. A por ellos. - grito saltando hacia el que está apuntando a Gárgola 3 pillándole por la espalda y golpeandole con todas mis fuerzas.

Cuando mi puño choca contra el ser, me resiento, hace bastante tiempo que no me muevo.... como más de diez siglos, y estoy demasiado acartonada, lanza su magia y consigo esquivar, la criatura está dañada y yo lanzo un nuevo golpe que espero le saque todas las piezas dentales de su sitio.

Al recibir el impacto, me desnivelo y caigo al suelo durante un instante... me noto lento, muy lento, afortunadamente hace falta algo más para que esos bichos acaben conmigo. Preparo mi puño una vez más y ataco con todas mis fuerzas.

Gárgola sintió la magia del humano impactando contra su pierna. Aquello le dolió bastante, pero era una gárgola, su aguante a las heridas era muy grande.

Saltando hacia adelante aulló de rabia y se abalanzo blandiendo el mandoble con fuerza contra el adversario que se había atrevido a herirle.
 

Siguiendo la voz de slinki me lance junto a él con el fin de atrapar a la criatura que abordaba nuestro castillo… ¿cómo se atrevían a perturbar nuestra morada? Y además a traición mientras no podíamos defenderla…esto tenía que ser castigado.

- Vamos hermano defendamos nuestro hogar.

Luthien ayuda a Slink y juntos se lanzan contra el enemigo que trató de dañar a Gárgola 3, pero falla en su ataque.

Gárgola volvía a atacar a su enemigo con su espada pero su enemigo lograba esquivar de nuevo el ataque. En un giro inesperado el extraño mago lanzaba otro rayo rojo pero también fallaba el disparo.

Gárgola 3 a pesar de estar herido por los rayos de su enemigo logra impactar con sus puños al lanzador de rayos y lo deja inconsciente. No había necesitado la ayuda de sus compañeros para liquidarle.

Slink como vio que Gárgola 3 había derrotado a su enemigo se lanzó a por otro de los que aún quedaban en pie y le asesta un buen golpe. A pesar de ello su enemigo sigue en pie y le lanza un rayo mágico que ágilmente esquiva.

Equoor por su parte actúa contra otro enemigo y lo elimina de un solo golpe haciéndo que todos sus dientes salten por los aires.

Enok se lanza tras su enemigo adentrándose en el castillo, cuando entra no logra ver por dónde se ha ido pues la entrada se bifurca en dos caminos.

Tan solo quedan dos enemigos, éste y el otro que también huye por algun otro lugar del castillo.

Al llegar a la bifurcación, miro para los dos caminos. Me paro dos segundos a alejar todo sonido de mi alrededor y centrarme en unas pisadas que se alejan...

Por allí solté cuando creí escuchar un sonido a lo lejos por uno de los corredores, y me alejé a toda velocidad por el camino

Huyen, han sido derrotados, no hay porqué ensañarse más - Equoor se agacha sobre el enemigo abatido y estudia sus túnicas y sus armas, mirandolo de arriba a abajo, y puestos, comprobando si aún seguía vivo por casualidad. ¿Porqué nos atacarían justo cuando despertamos? - Miro la luna, nuestra señora, nuestra protectora, la que nos da la vida, ojeo los bolsillos del asaltante y espero respuestas de mi alrededor