Partida Rol por web

Aquello no era nada bueno, antes de darse cuenta ya estaba cubierto de hielo y completamente inmóvil. Se intentó sacudir con desesperación intentando salir de aquella coraza de hielo que le aprisionaba, pero sin éxito. Si hubiera podido, habría gritado.

- ¿Es éste el final? -

Alex se acercó lentamente hacia vuestros cuerpos congelados, se detuvo a un escaso metro y sonrió mientras se cruzaba de brazos.

- Yo desperté el poder del Sol Dorado años atrás, todo su poder me pertenece, soy su portador legítimo y nadie va a cambiar eso... nunca antes había usado tanto poder como ahora ¿y sabéis qué? me siento más vivo que nunca, tengo la vida eterna, la rebosante juventud, y ahora la satisfacción de ver como os vais asfixiando lentamente, después tan solo tendré que romper el hielo y saquear vuestros cadáveres hasta encontrar los medallones y por fin, esta historia, habrá acabado -

Trato de responder pero mi cuerpo no aguanta, noto como mi mente se apaga sin que pueda evitarlo...

--- He..he fracasado...- pienso mientras mi mente se apaga- Acre...confio en ti....

El hielo nos había cubierto por completo y nos oprimía cada vez más. Pero podía resistir ese estado, no iba a permitir que aquel hombre nos derrotara.

Todavía hay mucho que se puede hacer... Deja que piense que te ha vencido, Erik me decía a mi mismo, para darme fuerzas.

Si rompía el hielo tras un rato, tenía una oportunidad de volver a atacarle. Si todos lo hacían a la vez, quizá podíamos acabar con él y salir vivos de ésta.

Se sentía asfixiado bajo la capa de hielo y completamente atrapado, seguro de que allí morirían todos tal y como les amenazaba aquél individuo. Absorto en la cercanía de su muerte no encontraba sentido al resto de sus palabras.

En su desesperación intentó volver a utilizar sus poderes contra él, cualquier cosa serviría, pero era incapaz de concentrarse, y cada vez veía todo más borroso a su alrededor.

La sonrisa no se le borraba del rostro, seguía esperando, pacientemente, como un ser hambriento que yace a que su presa esté cocinada en su punto.

- Cuando estáis callados no parecéis tan amenazadores - comentó mientras os miraba directamente a los ojos.

El hielo se endurecía cada vez más y apretaba. Se había creado un pequeño hueco delante de mi nariz que todavía me permitía respirar. No podía girar la cabeza para ver a mis compañeros, pero el no oírles me hacía suponer que estaban en mi misma situación.

No podia menearse y eso no era lo peor, aquel villano iba a salirse con la suya...

---Mercurio....señor de las aguas...escucha mi ruego y pon los medallones lejos de su alcance, entierralos en las profundidades del oceano donde nunca pueda conseguirlos....- pienso cerrando los ojos me concentro en mi suplica con la esperanza de que alguien la responderá y de que nuestro sacrficio no será en bano.

Se le agotaban las fuerzas, y ya era incapaz de continuar resistiendose al hielo que le apresaba. Mientras asumía su destino el mundo se desvanecía ante sus ojos y apenas podía pensar con claridad.

- ojalá madre se encuentre bien en casa... -

Y tras tu plegaria tan solo quedó oscuridad...

Y tras tu plegaria tan solo quedó oscuridad...

Asi mueren los héroes ¡ con un ultimo acto heróico! XDD