Partida Rol por web

-Bienvenido o gran Dios de los ladrones esperamos que te unas a nuestro bando confío en que usted nos ayudara a ganar esta batalla-

Decía mientras miraba al que los ladrones tenian como un gran señor y de verda que se veía esplendoroso con las joyas de que tenía.

-Te saludo Belerofonte,es esplendido que estes aqui.¿Que habeis pensado hacer hasta el momento?

-Bueno hasta ahora lo primero que necesitamos es armamento que funcione contra los Dioses y Ejercitó para la gran batalla, aunque una emboscada contra el gran zeus le bajaria la moral a los demás dioses si logramos derrotarle-

Decía mientras miraba a Hermes decepcionado por no tener mucho del plan de batalla.

-Mmm,todo se esta poniendo tan dificil,que es complicado tener una idea que realmente funcione...

Notando aún mi sangre caliente, y ansioso de entrar en una nueva guerra, no se si sabiendo para vengar mi ego, o para salvar a la humanidad, acepto como una gran verdad la necesidad de armas divinas.

-Necesitariamos demasiadas armas, deberiamos formar un gran grupo, y crear un ejercito. Tendremos que aplastar a los dioses bajo el peso de nuestras sandalias, y no dejar piedra sobre piedra en el Olimpo.

-Paciencia joven patroclo,entiendo tu postura pero deberiamos ir con mas cuidado al principio,y sobre todo ahora que los dioses no han organizado nada todavia...

 Puse mi mano sobre el hombro de mi amigo, para calmarlo:

 - Escucha al Dios, esta es una guerra que requiere paciencia y calma para poder obtener la victoria, no podemos permitirnos cometer un error.

Escucho la voz de Aquiles, y contengo parte de la furia que me impulsaria montarme en  una cuádriga y subir al mismísimo Olimpo a azotar a los dioses de la forma que se merecen.

Me siento con los brazos cruzados y le respondo.

-Tienes razón, intentaré no guiarme por mis impulsos esta vez.

El siempre tuvo mas cabeza que yo en estos casos.

Tras un largo silencio, me levante de mi asiento y mire a Aquiles a los ojos

- Tantos años provocando la ira de los dioses y ahora al borde de la destruccion de nuestro mundo te vuelves blando- vuelvo a tomar asiento y con un gran suspiro para liberar la tension.

- Hermes, a que se debe la colera de nuestros dioses? no creo que la unica solucion sea batallando, tenemos opcion a la diplomacia? - Baje la mirada y me cubri la cabeza con mis manos - No nos fiemos del Emisario y tampoco de la bella Afrodita, Recordar de donde proceden!-

Claro, yo podría convencer a mi padre para que hable con Zeus pero no se a que va tanto odio contra los humanos.

Dije levantando la voz por primera vez.

Aunque no creo que zeus este muy contento con migo esta no puede ser la única solución, la guerra siempre sera para mal sin ningún beneficio

Me levantó y digo.

-Oigan no creen que es mejor confiar al menos en ellos. ¿auqnue tambíen me gustaría saber por que la irá de los dioses ante nosotros?-

Luego me sientó y espero a ver si Hermes respondé.

Jasón por fin despierta de su sueño y se incorpora para hablar al respecto, por algún motivo aunque estuviera durmiendo estaba muy al tanto de lo que ocurría.

Compañeros, estos Dioses están contactando con nosotros, pero no tengo claro que confiar ciegamente en ellos sea lo mejor que podemos hacer. Por otro lado, no nos queda mucha alternativa de momento. Debemos intentar averiguar todo lo que podamos ahora mismo. 

Me pregunto si Hefesto accederá a crear algun arma...

Héctor entra en la gran estancia y observa a los allí reunidos. Se queda mirándolos, con los brazos en tensión, preparado como una bestia acorralada.

Creo que aquí no seré bien recibido.

¡Heroes y guerreros! Seguramente gozareis dándome muerte de nuevo, al igual que yo lo haría acabando con vosotros -dice mirando a Patroclo- pero este no es el momento indicado para ello. Debemos dejar de lado nuestras disputas provocadas por los antojos de los dioses, unos dioses que ahora se han inclinado por vernos muertos, por acabar con nosotros uno a uno. Debemos de alzarnos en armas contra sus voluntades caprichosas, debemos luchar por nuestras vidas, ¡luchar contra el destino que pretenden imponernos! -grita tratando de alentar los ánimos de los presentes -¡luchar por nuestra existencia y la de nuestros seres queridos!¡No son nuestros amos!¡No pueden controlarnos!¡Y nosotros podremos matarlos y lo haremos!

Siiiiii!!!... Grite con entusiasmo, hasta que una idea me llego a la cabeza

Pero, no es necesario matarlos, podemos hacer lo que Zeus hiso a su padre, Mandarlos al Tártaro, encerrarlo como un animal encaprichado.

Dije seriamente esperando que no sea algo imposible, pero para eso pregunte a Hermes

Es eso posible?

 Al ver a Héctor, no dije nada, pero tenía sentimientos encontrado hacia él, sin saber que hacer al respecto. Pero fuera lo que fuera, debía de intentar mantener un trato cordial con él, debido a la batalla que se avecinaba.

 Al pensar en ello, no pude evitar sonreír para mi mismo, pensando como la muerte me había cambiado y me había hecho más reflexivo... Supongo que no hay nada como perder todo lo que amas, incluida tu vida, para hacer ver la vida de otra manera.

 Entonces pienso en mi dulce amor, Briseida, y me pregunto donde estará y que estará haciendo...

Aparece Héctor y comenta sus ideas, a lo cual, yo me levanto y le contesto:

-Maldito troyano!, coraje no te falta al venir a esta reunión sabiendo quién está aquí, y me sorprende muchísimo que Aquiles o Ulises no te haya dicho nada, pero tranquilo, que ya te lo diré yo.

Con lágrimas en los ojos de rabia, desenfundo mi espada.

-Espero que este mismo coraje no se te pierda cuando tengas a un dios al alcance de tu espada. No voy a tomar represalias contra ti, por lo menos de momento, ya que somos pocos, y todos deberemos ser necesarios, pero no te equivoques, que no estoy retrocediendo, sino tomando carrerilla, algun dia me vengaré, y los dos lo sabemos.

Temblando de la impotencia, guardo la espada, y me dirijo al público asistente:

-Héctor tiene razón, hemos de atacar, y en mi opinión,  donde mas les duela, y es matando a un dios grande, el mas grande, a Zeus. Hemos de arrancarle el corezón de su pecho, y morderselo mientras late. Una vez esté muerto, intentarán suplir su puesto, y entrarán en guerra entre los mismos dioses, y se matarán los unos a otros, además de que eliminando a Zeus, nos tendrán miedo, y eso es lo que ha mantenido a la humanidad a raya durante tanto tiempo, el miedo.

Cojo aire mientras me paseo, y prosigo:

-Si le encerramos donde sea, sabemos que se escapará y sobrevivirá como una cucaracha, y cuando se escape, su ira contra toda la humanidad será brutal. Parlamentar con él, jajaja, ¿a escuchado a alguien Zeus que no fuese a si mismo durante eras?, además, de que claro está, perdemos el factor sorpresa, y en esta batalla puede llegar a ser primordial.

Mientras Patroclo habla, me levante de mi asiento y abofeteo al chico

- Veo que incluso despues de la muerte sigues siendo un crio, en mi presencia no quiero discusiones o peleas, como bien dices somos pocos, pero uno de nosotros es lo bastante insensato como para enemistar a todos, destruir a un dios, adelante! alguien nos tiene que gobernar desde el olimpo,sino contestame a esta pregunta, quien nos traera el dia o la noche?- 

Volvi a mi asiento, esperando una respuesta de Hermes mientras observo a mis compañeros

-Por favor,calmaos guerreros,podemos tratar temas,pero,por favor,de uno en uno.

¿Hablar con diplomacia? Si estais de acuerdo,podriamos probar...pero no se si a estas alturas,los dioses aceptarian o se volverian contra nosotros.Perseo,estais en vuestro derecho de no fiaros de ninguno de nosotros,mas cuida bien tus palabras,no soy ni sere tan inmoral.

Me levanto y paseo... lo que han dicho me trae una idea a la cabeza, puede que sea absurda o puede que no...

La idea del tártaro no es tan absurda, pero que os parece en vez de encerrarles... utilizar aquello que está alli y lo único que es mayor que un Dios??

Hablo de los TITANES, seres incréíbles, hasta Hercules tuvo problemas con ellos, no obstante puede que logremos la forma de hacer que esten de nuestro lado.

Me quedo parado mirando a todos esperando alguna contestacion.

Mire a Patroclo

- Yo no tengo intencion de matar a ninguno de estos heroes y no permitire que ninguno muera a manos de otro heroe-

Volvi a mirar a Hermes a los ojos - Como puedo saber que no intentais engañarnos, aun los dioses no provocaron nada, su ira no nos golpeo- Mi mirada bajo y con lamentacion - Tan solo dame una prueba de lo que decis Afrodita y tu es cierto, porque si esta reunion es de matar a dioses, creeme que sere el primero en matar a uno, mi familia esta en juego -