Partida Rol por web

El guerrero observo con una sonrisa en la cara el cuerpo destrozado de la araña.

Al fuego? y quitarme el placer de aplastarlas? ja!

 Justo en ese momento noto como una araña me mordia en el brazo, y con un rapido movimiento la golpeo dejandola aplastada en el suelo

Observáis el armario destrozado y ardiendo por culpa del golpe de la araña. Una botella rota esta haciendo de combustible y las llamas cada vez son mayores y mas fuertes...

Si eso hace una de las botellas... ¿que harán las restantes cuando el fuego las reviente?

Mientras la araña gigantesca se retorcía por el suelo intentado apagar las llmas que la consumían y una de las pequeñas se metió por la bota del enano y la otra correteaba a sus pies...

El enano se sentia cansado a causa del mordisco de la araña.

-¡Drako!..- el joven notaba que la constitución del enano empezaba a disminuir, se le notaba pálido y en fuerzas bajas.

-Tenemos que retroceder, esto va a explotar..- gritó lo suficiente para que le escuchara el enano.

Se encaró al gigantesco arácnido tras haber esquivado su ridículo ataque con sus belludas patas pero el fuego ardía demasiado cerca como para atacar con precisión.
El fuego se reflejaba en su rostro, pero no podía apartar la mirada de la gigantesca criatura que tenía enfrente, así pues poco a poco su intención era apartarse del fugo dando cortos pasos hacia tras sin quitar ojo a aquel arácnido..

El enano siente otro pinchazo mas.

Maldita sea!!

Alzando el hacha otra vez, descarga un potente tajo contra una de las arañas que lo acababa de morder, dejándola junto al resto de sus compañeras muertas, aplastada en el suelo.

Y una mierda me largo yo de aquí, lo primero es acabar con estos bichejos.

El crepitar del fuego aumento y el ruido empezaba a ser evidente…

Las araña salto al abdomen de Sebastián y empezó a corretear por su cuerpo buscando donde morder nerviosa y acelerada… y al poco clavando sus colmillos en la espalda del joven batidor…

Mientras la pequeña araña, seguía rondando las piernas del enano que cada vez estaba mas pálido y sudoroso….y a golpetazos del escudo la apartaba poco a poco

-¡Cabezota! Esto va a explotar...- casi sin poder terminar la frase nota como pierde estabilidad al ser mordido por aquel arácnido. Balanceó su cuerpo para que la araña cayera de su espalda pero su brazo no respondió debido a la mordedura..

-¿Como vas enano?.. Aquí hay una que me está dando problemas..- comentó al errar su ataque como si el fuego no estuviera a su alrededor en aquellos momentos.

El enano mira de reojo a Sebastian con cara de mala leche

Son simples arañas, acabaremos con ellas en un momento.

Acompañando sus palabras de un golpe de su hacha a la araña que quedaba cerca de él partiendola en dos, al terminar con el insecto se fue a la carrera a ayudar a su compañero en apuros.

Deja de llorar y acaba con ella de una vez

De un golpe con su hacha el enano manda por los aire la araña que aterriza por breves segundos dentro del armario... y como si fuese una bala de fuego improvisada la explosión del armario la catapulta por el pasillo que acabáis de venir...

El fuego lo inunda todo...

Estaba teniendo problemas el Batidor contra su adversario arácnido, y por si fuera poco el fuego que él sabía que tarde o temprano iba a explotar, inunda por completo la zona sin darle tiempo a reaccionar como es debido, a pesar de su gran destreza.

Churrascado de pies a cabeza aún amarra su espada con algo de fuerza y la levanta tímidamente para dejarla caer sobre la araña probablemente mas churrascada que el propio Sebastian..

-Muere maldita..- dijo con una voz ahogada y entrecortada.

La explosion pillo al enano por sorpresa, sentia el fuego en su cara, como cuando estaba en la forja, y eso le reconforto, y gracias a eso, incluso achicharrado se lanza a la carga contra la araña que acosaba a su compañero, pero su heridas le jugaron una mala pasada.

El infierno desatado a vuestro alrededor ilumina toda la estancia, las arañas consumidas estan totalmente carbonizadas en el suelo, no queda ningu rastro de las telarañas ni del armario, en su lugar una pira ardiente que llega hasta el techo...

heridos y debiles por el veneno os planteais como seguir...

Todo parecía ir a peor. Ese tozudo enano debería de haber echo caso a Sebastian. No importa, en cualquier caso vencimos a esos malditos arácnidos.

-Eres un completo cabezota querido enano..- dice contemplando el numerito que ha creado el fuego. Con un brazo sobre su abdomen para frenar la sangre y evitar el dolor se saca una poción que compro a aquel timador en la tienda de Aritma.

Débil desenrosca el tapón y se lleva el líquido a la boca gastando las últimas fuerzas que le quedaban.

Es una pocion de sanar... estas a tope.

borratela

El enano se acerca a Sebastien y le mira con una sonrisa en los labios, su cara esta ennegrecida por el fuego y se le ha quemado las puntas de la barba.

Ves como no teníamos que irnos, y perdernos el maravilloso calor en nuestros rostros!!! Oh parecía la santa gloria de los hornos de mi ciudad natal!!! ademas mira, hemos acabado con todas las arañas jajaja

Incluso achicharrado, envenenado y cansado el enano era capad de sacar algo bueno del infierno que habían sufrido por su culpa.

Bien, ¿por donde seguimos?

Vuestras ropas estan enegrecidas y ahora las tres salidas estan libres...

Una vez liberado de su misteriosa prisión, Sebastian vuelve a enfundarse su espada manchada por el líquido oscuro de aquellas criaturas. Toma una poción y arroja el frasco vació con fuerza hacia algún rincón apartado de la cueva, tras lo cual dirige una terrible y sádica mirada al arácnido muerto.

-No me voy a quedar sin mi premio, bichejo- susurra mientras se a examinarla.

El Batidor analiza con ojo crítico el cuerpo de la araña, buscando algún tipo de apéndice, garra o diente que poder incorporar a su colección de trofeos...

-Yo seguiría por los pasadizos estrechos..- Añade mientras busco algo de valor sobre la criatura contestando a la pregunta del enano.