Partida Rol por web

El concierto esta proximo a empezar y ya escuchas los gritos de la gente desde fuera, Anders esta nervioso como un flan, opero es algo que tienes seguro, tambien sabes que puedes confiar en el y que no errara ni una nota

No tardé en olvidarme de todo lo que había sucedido aquella tarde para centrarme en el concierto y la verdad, es que eso me vino bastante bien, pues había dejado de preocuparme de cosas que yo creían que no iban conmigo. Ya estaba arreglada para salir al escenario, esperando ir lo suficientemente bien como para llamar la atención de la gente.

Aunque claro, tenía otro modelito preparado para más tarde, pues la puesta en escena no era obra mía, sino de alguien que acostumbrada a dedicarse a esas cosas.

- Anders tío, tenemos que hacerlo muy bien esta noche! - Le dije acercándomea él. - No te pongas demasiado nervioso y déjate llevar, que como mucho lo hacemos muy mal y tenemos que salir corriendo. ¿ Te acuerdas de donde vivo si eso ocurre? - Estaba bromeando, tratando de que mantuviéramos la calma un poco.

- Ahora mismo no me acuerdo ni de donde vivo yo- digo temblando - Pero tranquila puedo tocar y quiero hacer algo especial esta noche, olvídate de lo que estaba previsto tocar- aquello era sin duda la mejor idea de mi vida, y también la peor de todas no tenia ningún sentido lo que hacia y como poco estaría metiendo la pata de sobre manera- Tu canta la canción que quieras la que te apetezca yo quiero darle a todas una nueva melodía- ahora llegaba la prueva de la verdad

No le iba a decir que no hiciera lo que quisiera, pues estaba claro que si de alguien me fiaba para cualquier cosa era de él, pero le avisé de lo único que no podía hacer.

- Recuerda que no queremos que acaban llorando o dormidos ¿ vale? - Le guiñé un ojo divertida.

Le dije que empezaría cantando una de las que habíamos compuesto entre los dos, una de esas que empieza de forma melódica y luego va tomando ritmo hasta casi estallar a nuestro alrededor, aunque lo de estallar lo decía precisamente porque pasaba de tener notas tristes a verse muchos y diversos colores de repente, como si echaran un montón de botes de pintura sobre el aire y esa pintura se quedara flotando.

Antes de salir aún tenía que hacer otra cosa.

- Anders... - Me acerqué de nuevo a él y le besé como ya había hecho en la habitación.

Cuando voy a replicarle que yo no sabia que podía hacer llorar a la gente me besa, y vuelve a dejarme completamente paralizado, hasta cierro los ojos para devolverle el beso, pero esta vez soy yo el que busca su lengua y la abraza con fuerza, aquello era algo a lo que sin duda podría acostumbrarme fácilmente.

Un poco despues me separo ligeramente pero sin dejar de abrazarla- Tenemos un Concierto que dar-

Salís al concierto y parece que el publico esta muy animado, muchos gritan EMILY, y parece que esta completamente lleno, algo que sin duda os da confianza.

Cuando Anders empieza a tocar, entiendes por fin a que se refería, no reconoces ninguna nota de las que toca, pero en el mismo instante en que las toca te hace sentir mejor que nunca, llena tu cuerpo de tranquilidad y te da ganas de cantar, algo que haces en el acto.

La gente al principio parece algo extrañada, esperaba escuchar las canciones del disco, pero enseguida rompen en gritos de júbilo, parecen estar disfrutando incluso mas que si fueran las canciones que conocían, y a cada nota que dais, a cada palabra que sale de tu boca, parecen más y mas entusiasmados por aquel concierto.

Cuando termináis lo previsto, no dejan de gritar pidiendo mas, una y otra vez os piden mas, muchos os arrojan cosas, algunos flores, otros tiran su ropa interior al escenario

Finalmente decidís darles una canción mas de la que improvisas tu también creando un espectáculo de luces y colores, que sabes que solo tu y Anders sois capaces de ver, pero que os deja tan llenos de energía que podrían haber pasado 40 horas y seguiríais radiantes.

Quien diga que no se puede trabajar y divertirse a la vez era porque nunca había estado sobre un escenario como aquel, pues aquella noche incluso bromeé entre canción y canción con el micrófono en la mano. Seguramente, nunca lo había dado todo de aquella manera, pero me lo pasé genial y me sentía tremendamente bien, aunque yo sí veía de quién era obra, y sin duda, era de Anders y de su música.

Si hubiéramos seguido tocando ninguno de los allí presentes se hubiera llegado a mover del sitio en mucho tiempo, pero era el momento de acabar y tras aquella vuelta a una canción que no conocían, nos despedimos con esa que siempre es la que conoce más la gente y espera oír.

Para cuando volvimos a estar en los camerinos, estaba radiando, contenta y más feliz que nunca y saltando me abracé a Anders, esta vez contentísima como ya había hecho en muchas otras ocasiones.

- Ha quedado genial!! - Le dije apretándole incluso demasiado efusivamente. - Genial!!

Estaba emociono cargado de energía, me sentía pletórico, había sido estupendo, ni siquiera parecía estar nervioso, las notas salan como por si solas, era algo genial, lo mejor que había visto nunca, disfrutaba de una forma que nadie abría logrado comprender y Emily, ella hacia que cada palabra que salía de su boca fuera sin duda sensacional.

-Si a estado genial- le devolví el abrazo pero con menos fuerza que el suyo – Les has visto incluso arrojaban ropa al escenario-

Era un sensación genial, me sentía tan bien, que me lance a besarla una vez mas con fuerza, pero esta vez al mismo tiempo la abrace y la levante un poco del suelo.

Me reí tan sólo hasta que me besó pues luego tuve que responder a aquel beso, aunque tuve que parar de besarle al notar como me levantaba del suelo, porque me faltaba el aire y me daba la risa a la vez.

- Ha sido lo más!! - Estaba tan contenta que no me lo podía ni creer.

Aún tuvimos que pasar otro rato hablando con la gente que había hecho posible, aunque mi idea era huir de ahí tan pronto como fuera posible, pues aunque había sido genial, después de aquel largo e intenso día necesitaba un poco de tranquilidad y una ducha de esas eternas que no terminaban nunca.

Además, cada vez tenía más presente la propuesta que le había hecho a Anders pues sus besos me resultaban de lo más adictivos...

Pasamos un rato aburrido tras el concierto, había que salir firmar autógrafos, cosa que yo no hice en ningún momento, no me interesaba para nada, teníamos que hablar con periodistas decir que estábamos agradecidos, un sin fin de cosas que hacían que el día volviera a ser cargante, pero ahora yo estaba radiante de felicidad asíque no me importo demasiado.

Finalmente llegamos de nuevo al coche que debía llevarnos al hotel, y hay fue cuando todo empezó a ser raro, el conductor pregunto donde queríamos ir, no quería ir a hotel, pero tampoco sabia si decir a casa de Emily, aunque ella lo había propuesto antes seguro que ya no quería y yo no me atrevía a decirlo sin saber lo que pesaba, preferí esperar y ver su decisión.

Sin duda yo también me divertía bastante más tocando y cantando que con aquello de ser simpática y de firmar autógrafos, pero lo que estaba claro es que un grupo sin seguidores no iba a tener ningún éxito así que traté de regalar a todo el mundo buenas palabras y buenas formas, incluso bromeé un poco. La cosa había salido tan bien que no me costaba nada hacerlo.

Mi compañero seguro que lo pasó un poco peor que yo con ello, pero al final se acostumbraría.

Cuando al fin conseguimos meternos en el coche que nos iba a sacar de allí preguntó que a donde nos llevaba y por mi parte, tenía muy claro que no quería volver a aquel hotel así que ni me lo pensé, pues Anders me había dicho que se quedaría en mi casa así que... esa fue la dirección que le di al taxista.

Mi piso no era gran cosa, casi, demasiado poca cosa, pero para mí sola me llegaba y estaba a gusto en él, aunque fuera alquilado. Quizás, si nos iba bien la cosa podría comprarme uno, pero normal, no quería nada exagerado porque jamás había sido demasiado ostentosa, aunque eso sí, que fuera algo grande con una de esas habitaciones destinadas solo para guardar ropa.

Emily da su dirección y yo no puedo evitar estar nervioso, no era la primera vez que estaba en ella mni mucho menos, alguna vez incluso habiamos ensallado alli, pero era la primera vez despues de besarla y eso era extraño una situacion muy rara, yo no sabia como reaccionar ni que esperaba ella de mi, vamos que hiciera lo que hiciera no dejaria de darle mil vueltas a la caebza en toda la noche.

Solo de pensar esto ya empezaba a dolerme la cabeza, tenia que calmarme y ser un poco mas flexible y razonar con logica, yo era una persona inteligente, bueno no demasiado, pero si lo suficiente como para saber que si ella habia dado su direccion es que queria que fuera con ella, y que no le importaria que pasara la noche con ella ni que volviera a besarla.

Cuando llegamos a su casa yo sali del coche caminando casi como una maquina de resorte antigua, parecia que no era mas que un palo que se movia por inercia.

- Entra....mos-

Él apenas había abierto la boca en todo el camino y no sabía ni lo que estaba pensando, pero bueno, que no tenía que pasar nada si no quería que sucediera, que no iba a obligarlo a base de latigazos a que pasara la noche conmigo.

Al ver que tartamudeaba me di cuenta que estaba nervioso y negué con la cabeza, como le hacía siempre que le veía en ese plan.

- Anders... ¿ quieres tranquilizarte? Ya se ha acabado el concierto y esta es como si fuera tu casa, así que puedes relajarte... no voy a morderte. - Al menos no su no me dejas, claro. - Por suerte esto último lo pensé sin mirarle porque sino seguro que me lo hubiera visto en la cara.

En cuanto entramos dejé las llaves donde siempre, sobre el mueble destartalado que había a la entrada y me dirigí a la cocina, dejando que Anders eligiera donde acomodarse.

- ¿ Quieres tomar algo? Tengo zumo, coca-cola, agua y alguna cerveza.

Ella tenia razon tenia que relajarme como fuera por que de lo contrario se pensaria que soy idiota, habia estado alli mismo miles de beces y no pasaba nada, sabia donde estaban las cosas que hacia alli, hasta habia visto su ropa tirada por los suelos en alguna ocasion que la habia pillado sin avisar, que importaba estar hay ahora, ella era la misma y yo tambien.

- Sabes que yo no bebe alcohol, una cocacola- digo recuperando mi tono de voz normal - Pero si quieres emborracharme no te costara mucho- aquello era algo que estaba acostumbrado a decirle, algo normal, como tenia que ser, no podia seguir siendo una estatua, por que con ella era cuando yo mejor estaba y sin ella sencillamente volvia a ser el chico aburrido con el que todos se metian.

Antes de que terminara de responderme le estaba dando la coca-cola, pues en el fondo sabía cual sería aquella respuesta que me daba siempre.

- Yo que sé, igual decidías cambiar esa respuesta.. - Dije sonriéndole y dándole la coca-cola directamente en la lata, que era como la bebía siempre. Para mí preferí un zumo que no estuviera en la nevera, mejor del tiempo, pues había estado cantando mucho rato y ahora me tendría que cuidar la garganta un par de días.

Como siempre, tras pasar por la nevera terminamos los dos frente al sofá encendiendo la tele, aunque estaba claro que a esas horas o nos enganchábamos al canal de la teletienda o no íbamos a ver nada que nos fuera a gustar.

- ¿ Sabes que mañana ya tendrás tu propio club de fans? - Le dije sólo para meterme un poco con él. - Has estado tremendo! - No era u cumplido si no la verdad más absoluta.

- Mucho que meto que el club de fans sera tuyo- digo con una amplia sonrrisa- No se si te diste cuenta pero la mayoria de la ropa que tiraban las mujeres era para ti, creo que eres un idolo lesbico o algo asi- le saco la lengua cuando termino de hablar en plan niño pequeño.

La television era aburrida y yo estaba recostado en el sofa mirando sin mas, a esas horas no encontrariamos nada interesante, pero siempre era facil distraerse, aunque ese dia no lo parecia, por mucho que quisiera ignorarlo ella seguia alli y no podia evitar mirarla de otra forma, siempre era perfecta pero ahora, era como si sintiera ganas de arrojarme sobre ella, algo que tenia que apartar de mi cabeza por que necesitaba que ella diera el primer paso, aunque no entendia por que, podria lanzarme seguro que si no queria se reiria de mi y ya esta, pero sencillamente estaba aterrado.

Entrecerré los ojos cuando dijo aquello del lesbianismo, porque a mí las mujeres no me habían interesado nunca como él bien sabía, al menos, creía haber dejado claro que era bien hetero, sobretodo cuando había metido mi lengua en su boca, pero... quizás necesitaba que se lo recordaran.

- Eso era lo que me faltaba precisamente... aunque quién sabe... igual lo pruebo y luego me gusta... - Me eché a reír sin poder evitarlo.

De ahí se hizo uno de esos incómodos silencios, pues yo estaba demasiado cortara para acercarme a él y él jamás se acercaría a mí... era demasiado previsible para esas cosas.

Más silencio y mi dedo comenzó a dar golpecitos en el brick que tenía en las manos. Levanté la cabeza y le miré y luego volví a mirar a la tele.

- Me siento un poco idiota... - Dije divertida mientras veía algo que parecía un rallador de verduras en la tele, aunque no le estaba haciendo demasiado caso precisamente.

Segui mirando a la televisión, los silecios incomos se seguian y yo prestaba la misma atencion a ala television que podria prestar estando durmiendo, mis ojos la miraban, pero nisiquiera veia lo que estaban emitiendo, estaba centrado en darle vueltas, me lanzo no me lanzo, espero no espero, que hacer que no hacer, parecia un niño de 4 años que no sabia tomar decisiones, pero cuando ella dijo que se sentia una idiota no pude mas.

Rompi a reir sin poder conternem y luego la mire - Sabes creo que los 2 somos idiotas- definitivamente ella era perfecta hasta en los mementos dondo pero estaba uno ella tenia las palabras correptas.

- Sabes, yo quiero besarte y quiero abrazarte y que se quiero lanzarme sobre ti ahora mismo, no se que es lo que quieres tu pero creo que si me quedo quieto y no me arriesgo a decirtelo y lanzarme sobre ti sere un verdadero idiota-