Pues la verdad es que no, no es demasiado normal que la gente tenga más de dos ojos, o algo raro por ahí, tienes que ser más cuidadoso o podrías acabar en problemas.
-Normalmente lo soy... pero me has retado - digo sacándole la lengua.
Klaus niega con la cabeza. – No te he retado, simplemente te he dicho que el hecho de que pudieras hacer eso no me sorprendía, yo también tengo habilidades curiosas, pero no intento sorprender a la gente…
-Bahh- digo, ya le enseñaré a este lo que son habilidades.
Klaus le mira con cara de pocos amigos. – Si vuelves a hacer algo así entando yo contigo te arranco la cabeza, y no es una forma de hablar… - Klaus estaba con uno de los puños cerrados, no le gustaba que el chaval se tomara tan a la ligera lo que acababa de hacer.
-Me gustará ver como me arrancas las cabezas... - digo irónico.
Klaus vuelve a sonreír. – Con esa actitud no te costara mucho convencerme… deberías ser más educado y consciente de tus actos.
-Lo intentaré... - digo - por cierto, ¿qué poder tiene tu amiga? - parece que la camarera no se inmutó por mis ojetes.
Parece ser que puede leer la mente, y modificarla a su antojo, también puede proyectar sus pensamientos, es un poder interesante.
-Y que lo digas - digo fijándome en la chica.
Nuestros pensamientos no están a salvo con ella… tendremos que tener cuidado con lo que pensamos. – Klaus se quedo mirando a la chica para ver si volvía ya con su caña.
- aqui tienes- digo volviendo con la caña que me habia pedido- y esto de mi parte- le doy un plato con algo de comida y un papel con un numero de telefono
Klaus coge el papel y al ver que esta el numero de la camarera sonríe. La mira a los ojos directamente y le dice. – Ya que me das tu número también podrías darme un horario de cuando sales o algo por el estilo, ¿no crees?
- Puede que mas tarde lo aga- digo dandome la vuelta y volviendo a la barra.
Me da su número pero no me dice cuando llamarla… Querida eres muy problemática… Klaus coge del plato un poco de comida y empieza a tomársela distraídamente mientras vuelve a mirar por la ventana.
-Bufff... - suspiro, era evidente que a la camarera le gustaba Klaus.
- Es una mujer muy problemática, ¿no crees? Es mala, le gusta hacerse de rogar. – Klaus se queda mirando a la camarera. ¿Quieres hablar conmigo de lo de los poderes? ¿O quieres hablar de otra cosa?
podemos hablar de muchas cosas
Eso puede ser interesante… me gusta que podamos hablar de cualquier cosa, eso es bueno…