Partida Rol por web

Al decir aquello de que siempre estaba preciosa sonreí y negué con la cabeza, pues estaba claro que no creía que fuera así, pero él siempre sabía como animar a una chica para que al menos tuviera ganas de arreglarse un poco.

- Eso es porque no me has visto recién levantada, cuando no tengo nada más que hacer que quedarme quieta en el sofá...

Quizás fuera que eso de la fama no estaba hecha para mí, porque yo era una persona bastante sencilla y de costumbres aún más normales, pero... para actuar sobre un escenario valía cualquiera con un poco de maquillaje y algo que entretuviera a la gente.

- De todas formas gracias... creo que si me lo repites otras trescientas veces más igual me lo empiezo a creer...

Estaba claro que bromeaba con el tema, podía verlo en la expresión que se me quedaba siempre que me decía cosas de esas.

- ¿ Que me acosen? - Quitando a cuatro babosos que de esos había en todas partes, no me había tocado aguantar afluencias masivas de hombres ni nada parecido. - Pues por el momento no me he sentido acosada, pero te tengo para defenderme ¿ no? - Le guiñé un ojo con toda la complicidad del mundo, pues en esos tres meses le había cogido mucho cariño.

- Oye y tú ¿ qué te vas a poner? Tienes que estar guapo también! Unos pantalones ceñiditos, una camiseta negra y unas botas de esas con hebillas... Seguro que te hacen un club de fans si sales así...

LLego al hotel aun ensimismada, aun no me creo que mis padres me hayan dejado venir, prometo no odiarlos tanto a partir de ahora, mientras busco mi habitacion llevo puesto mi ipod en el que escucho mis canciones favoritas de la cantante y me aprendo las letras. En el concierto voy a darlo todo, voy a saltar y a gritar hasta quedarme afonica..

Llegas muy justa al hotel, apenas 1 hora antes de que sea la fiesta para conocer a la cantante y su grupo, puedes pasar de ella, pero es gratis y abra comida, ademas es una buena forma de pasar el tiempo hasta la noche, antes de ir al concierto.

- No tenia pensado cambiarme de ropa- Aquello sin duda me gustaba muy poco, tener que vestirme para el concierto, arreglarme antes para la fiesta, yo no se podía decir que vistiera mal, tampoco era ningún pijo, sencillamente me ponía la que me gustase y salía sin pensarlo, muchas veces no conjuntaba y siempre estaba pasado de moda, pero a mi nunca me había importado todo aquello, ni siquiera ahora que tenia algo de dinero me compraba ropa cara, no veía la necesidad de ello- No me dirás que no te gusta lo que tengo puesto- lo que si me importaba era su opinión, como si lo que ella pensara pudiera influir en algo, como si me hiciera sentir mejor su aprobación.

- Por cierto no me desafíes a decirte que estas muy guapa 300 veces, por que sabes que si es necesario te lo diré 500, aunque aun así dudo que me hagas ningún caso- solté una pequeña risa mientra me acomode en un sillón a la espera de que ella se cambiara, no tenia ganas de ir a ningún lado y no creía que le molestara que me quedara allí tirado mientras ella se cambiaba, además así podría aprovechar para ensayar un rato, me había traído el violín de mi casa, aquel que estaba destrozado, que

pareció que ni siquiera podía producir sonidos, era de mis preferidos.
Creo que no cambiaria ninguno de mis instrumentos viejos y rotos por anda del mundo y aquel violín en especial, sonaba mejor que nada de lo que pudiera tocar y tenia ese aspecto tan frágil que me hacia pensar que era parte de mi, como si fuera mi yo en forma de instrumento, una talento sin igual, bajo una carcasa fea y destartalada.

Al llegar a mi habitacion dejo mis cosas me ducho y me arreglo un poco, despues decido ir a la fiesta a ver que tal esta, Antes de ello dejo constancia en twiter de lo que hago nadie se va a creer que este haciendo esto de verdad, antes de salir me acuerdo de coger la camara de fotos, tengo que inmortalizar esto..

Si bien Mariano ya vivía en Nueva York y cerca del hotel, a los 17 años cualquier oportunidad para estar alejado de tus padres es buena, de modo que con una pequeña valija y una mochila salió de su casa para subir al taxi que lo estaba esperando para llevarlo al hotel.

Sentado en el asiento trasero del taxi, Mariano pensaba en cómo se daban a veces las cosas. ¡El ni siquiera era tan fanático de Emily Harper en realidad! Muchas otras personas hubiesen aprovechado más ese premio, pero el ganador había sido él y pensaba disfrutarlo al máximo.

Estaba pensando en que la mayoría de los fanáticos de Emily, por más bella que ella fuera, eran mujeres, y que pensaba aprovechar su posición de "ganador del premio", cuando vio que había llegado al hotel.

Nada más abrió la puerta del taxi un muchacho quiso ayudarlo con la valija pero Mariano se negó, agradeciendo, y fue hasta la recepción.

_Buenos días. Mi nombre es Mariano Cano, soy uno de los ganadores del concurso de Emily Harper -dijo al recepcionista-.

Me quedé con la sensación de que a parte de estar nervioso a Anders le pasaba algo, así que cuando se sentó le miré y tras negar con la cabeza para mi misma me puse delante de él, de cuclillas en el suelo apoyando las manos sobre sus rodillas, eso sí, sin quitarle el ojo de encima.

- Siempre estás mono... - Dije con una sonrisa de lo más sincera.

Tras ello mi cara cambió a una de esas en las que sabes que pasa algo y estás esperando a que te lo cuenten.

- Dime que pasa anda. ¿ Qué sucede? ¿ Estás así por los nervios?

Moví un poco sus piernas con mis manos, como queriendo que se despabilara.

- Con los pantalones apretaditos estás más sexy, como todos los hombres... - Volvía a bromear, aunque en cierta forma era verdad que pensaba eso y él lo sabía.

El recepcionista te da la bienvenida y recoje tu entrada, la que te identifica como ganador del concurso, te llevan a tu habitacion, es una habitacion completamente de lujo, grandisima, y todo a gastos pagados, la fiesta para conocer a la cantante es dentro de una hora, asique tienes tiempo para cambiarte y demas o tomar algo, el concierto es por la noche y como iras acompañado de la cantante no tienes ninguna prisa.

Khaterine llega a la fiestra, va muy bien arreglada, y entra sola.

en la fiesta hay poca gente por ahora, solo 2 chicos y una chica, ninguno son del grupo, por lo que deduces que tiene que ser gente que gano el concurso iugal que tu.

No pudo evitar sonreír cuando ella se puso cerca de mi, mirándome como había hecho tantas otras veces- Bueno sencillamente estoy algo mas nervioso de lo normal, es un concierto en directo y yo solo se tocar gracias a mi habilidad si de repente desapareciera o algo, ni siquiera se que seria capaz de hacer, y no te quiero fallar hoy- Todo aquello era cierto, pero estaba nervioso por mas cosas que no sabia si contarle, ella era una chica firme, que tenia confianza en si misma y yo si ella no estaba cerca, seguía siendo el niño estupido con el que todos se metían, y ni siquiera estaba seguro de lo que yo mismo pensaba.

- Mira qué suerte tenemos James. ¡Otra chica guapa! - digo sonriendo a la nueva. - ¡Hola, encantado de conocerte! Pasa y tómate algo. Hay barra libre. -

Vuelvo la mirada a Katty: - Sí, salí en la revista people, y en alguna más, pero como te dije el famoso es mi padre. Si te apetece después del concierto puedo enseñarte alguna de las escenas extra de sus películas, tengo varios dvds arriba en la habitación. - sigo sonriendo. - Incluso puedo conseguirte alguna foto suya autografiada. - el truco de las escenas extra de mi padre casi siempre funcionaba... me preguntaba si esta vez...

 Levanté una ceja, era más que obvio lo que Michel pretendía, ligar con Katty, pero, por alguna razón, algo me decía que no le iba a ser tan fácil. Luego fijé mi atención hacia la chica nueva... Desde luego era cierto que también era guapa... Aunque supongo que ellas podían decir lo mismo de nosotros, aunque esté mal que yo lo diga.

- No gracias, creo que nos yo tan fan de tu padre como para eso- esa forma de descara de intenciones no me gustaba nada, y por nada del mundo iría con el a su habitación y mucho menos ahora.

Bueno, quizá luego conseguiría que cambiara de opinión: - Vale, te dejo el concierto para que te lo pienses. Estoy convencido de que nos podemos divertir mucho. - Sigo sonriendo y me giro hacia James la nueva. Katty se hace la difícil pero caerá... al final todas lo hacen.

Doy un trago a mi zumo y echo un vistazo de nuevo a la nueva chica. Sí que es guapilla también.

Me pregunto si estará aquí por el mismo extraño concurso que estamos los demás. Todo esto es muy raro

 La respuesta de Katty era tal y como yo esperaba, ella había vislumbrado la intenciones de Michael y le había puesto freno. Me acerqué a la barra libre y cogí una Coca-Cola y luego me dirigí a ella, procurando que él, que se encontraba distraído con la otra chica, me oyera:

 - Lo siento, algunos hombres no piensan con la cabeza.

 La disculpa era, debido a ser criado por una mujer, en nombre de todos los hombres del planeta.

-Aish...!

Me resultaba incluso algo tierna toda aquella inseguridad que tenía pero lo que sí que quería que tuviera claro era lo que estaba a punto de decirle.

- Mira Anders. Si estoy aquí es porque te he conocido a ti y por mucho que te empeñes en decirme que no quieres fallarme, no vas a poder hacerlo, pues aunque no lleguemos a nada, has conseguido que cumpla mi sueño. ¿ vale?

Le puse otra de esas carillas con la que esperaba que aquello me valiera.

- Si no me sirve, ya he ahorrado lo suficiente como para poder tirar una temporada y poder ir a un conservatorio y estudiar algo más de lo que sé... es mucho más de lo que verdaderamente pensaba alcanzar, así que tú por eso tranquilo.

Seguía allí acuclillada pues me importaba más que él estuviera bien que hasta aquel concierto.

Sin poder evitarlo me fui poniendo rojo a cada palabra que decía, además me miraba con su carita de persona inocente lo cual hizo que me quedara completamente desarmado, por muy inseguro que estuviera, por mucho miedo que pudiera tener, ella y esa forma de mirarme me habrían levantando siempre el animo, nunca podía resistirme.

- Vale dejare de pensar así- no me quedaba otra que darme por vencido.

Sin mas me adelante hacia ella y le di un beso, en la comisura de la boca sin llegar a tocar sus labios pero casi rozándolos, ni siquiera sabia por que lo había hecho, sencillamente me había apetecido, era como si todo aquello pudiera resolverse de esa forma tan absurda, una forma infantil como mínimo, pero por alguna razón me daba ánimos.

- Y vete a cambiarte que si no llegaremos tarde y entonces si que nos echaran la bronca de verdad- retrocedí rápidamente después del beso y le dije eso, a la espera de que no se hubiera molestado.

En cuanto se empezaba a poner un poco rojo sabía que mis palabras estaban comenzando a tener efecto y aunque ya debía de haberme acostumbrado a esas reacciones que no sabía de dónde salían nunca, pues era como si nunca fuera capaz de ver por dónde me iba a venir, me sorprendió cuando me dio aquel beso y aunque le sonreí, hizo que yo me pusiera roja, sobretodo porque hubiera sido capaz de besarle en aquel momento, aunque no lo hiciera.

Me puse de pie cuando me echaba, sin borrar la sonrisa de idiota que se me había quedado y queriendo cambiar de tema al igual que había hecho él, añadí:

- Pero ponte otra ropa hombre! Que no te cuesta tanto!

Le guiñé un ojo y riéndome después fui a cambiarme dejándolo ahí sentado, pues sino segurísimo que llegaríamos tarde como él decía.

Al final termine por hacerle caso, me levante y fui a mi habitación a cambiarme de ropa, no sabia muy bien que ponerme asíque me puse sencillamente lo mas nuevo que tenia, una camisa de vestir blanca, unos pantalones vaqueros, que no me quedaban muy ajustados, jamás tenia ropa ajustada, y por ultimo unos zapatos de vestir negros que por lo menos no me hacían daño en los pies, me peine un poco, aunque mas despeinándome que realmente arreglándome el pelo, y regrese a la habitación de Emily para ver si estaba lista.

- Lista- dije abriendo la puerta de su habitación sin ningún reparo.

Me estaba poniendo las botas cuando Anders abrió mi puerta, sin llegar a haberme puesto presentable del todo por lo que le miré como si le hubiera pasado algo, sobretodo, porque estaba con una pierna sobre la cama y la falda que si la hubiera tenido un poco más arriba hubiera estado en ropa interior.

- Pensaba que te había pasado algo... - Me terminé de atar la bota antes de nada y luego me volví a poner de pie. - Coincidimos hasta en el color de la ropa.

También había optado por el blanco aunque esto sólo fuera para antes del concierto, porque así con los focos me moriría de calor.

- Me retoco el maquillaje y nos vamos ¿ vale?

Salí corriendo hasta el baño y no tardé mucho en estar lista del todo, por lo que salí así a la fiesta en cuestión. A mí nadie me había dicho como tenía que vestirme y creía que así iba presentable.