Partida Rol por web

La cara de Nacho no transmitía nada tras su exploración inicial. Miró a Mei e hizo un gesto de asentimiento, que cualquiera podría haber adivinado como una respuesta a algo que ella le dijera.

Volvió nuevamente los ojos a la doctora. La escrutaba con su mirada. De pronto sonrió.

Al llegar corriendo vieron una escena sacada de una peli de fantasía, entonces cuando Baltazar habló le miró de reojo a con una mezcla de sorpresa y sarcasmo en la cara, para luego soltar un resoplido de resignación.

—Pfffff, pues a lo mejor no estábamos tan mal allí encerrados, en un día aquí llevamos un golem de madera y un dragón, a este paso mañana supongo que nos tocara enfrentarnos a Thanos.

David agachó la cabeza y empezó a correr hacia la zona que parecía estar atacando el dragón, no sabia que iba a hacer, pero si había alguien allí atrapado intentaría echar una mano.

          En silencio Ororo niega con la cabeza ante la pregunta de Nahuel cuando se acerca a ella, entonces el y todo aquel que la mire vera que lleva colgado un letrero muy visible que dice:

            - Reunión importante para todos y cada uno de los Ángeles en el comedor dentro de la siguiente hora! -.   Entonces Ororo mira de reojo al par de chicas y les sonríe, antes de escribir al reverso del letrero:

           - Como y dónde están el resto de chicos escapistas?

Al aparecer en la entrada de las aulas, las piernas le fallaron y cayó de rodillas. Un ataque de tos sacudió su escuálido cuerpo. Se cubrió la boca con ambas manos y al apartarlas vio una mancha de sangre. Alex levantó la mirada y vio a una chica que hizo que sintiera un escalofrío que recorrió su espalda. 

Se sentía muy débil y le dolía muchísimo la cabeza, pero no podía dejar de buscar a Lee... Bora le había dado esa misión y si no lo conseguía, todos acabarían muertos...

- ¿Lee...? - Preguntó cuando la tos pareció darle un respiro. - Tengo que encontrar a Lee... Hay un dragón... En el lago... - Consiguió decir y empezó a incorporarse, apoyándose en el marco de la puerta. Estaba mal, pero no iba a rendirse...

Me pongo en movimiento hacia el lago pero cuando David hace su broma sobre seguir encerrados me detengo y lo miro con seriedad.

No vuelvas a decir eso ni de broma, vivir encerrado es peor que morir, siempre preferiré morir libre y de pie, que vivir encerrado y de rodillas, me deje la piel intentando salir de ese lugar y prefiero enfrentarme a diez de esos dragones que volver a ese puto centro. - digo evidentemente cabreado para luego continuar mi camino, sin mirar atrás.

Al escuchar las quejas de Baltazar David bajó un poco el ritmo, pero sin detenerse y alzó la voz para que le escuchase.

—Que si, que si, que viva la revolución— Dijo alzando el puño mientras corría. —Pero yo prefiero no morir ni de pie, ni de rodillas y mucho menos calcinado, y los que están allí abajo tampoco. Así que corre y ya te indignaras después.

Ejem.... Carraspeo para llamar su atención. ¿Me estabas buscando? Sonrío, algo tímidamente. Me han dicho que puedes entrenarme. Me llamo Megamax.... Eeeeeeh, bueno, Max es mi verdadero nombre. Sin saber muy bien como proseguir hago una ligera inclinación de cabeza. Encantado de conocerte, Dan.

Y me quedo a la espera de su respuesta con esa sonrisa tímida marcada en mi rostro.

Esforzando mi cuerpo tanto como podía al ver como un dragón quería matarnos corrí como nunca lo había hecho hasta finalmente llegue a Yoo. No fue hasta entonces que lo que me había gritado cobro sentido en mi mente.

—¿Mi poder? Pero… y si…—Aun estaba dudando por lo que acababa de ocurrir. ¿Qué ocurriría si salía mal nuevamente y les empujaba de nuevo o algo peor? Toda duda de mi cabeza se disipo cuando el dragón volvió a escupir llamas en la pelea.—Vale, lo intentare.— Si no lo hacia Denzel  y todos nosotros acabaríamos como simples cenizas.

Cerré los ojos intentando centrarme en hacer lo que había hecho con la hoja y el agua a una escala mucho mayor. No sabía si lo estaba consiguiendo así que nerviosa apreté los puños hasta que note una punzada de dolor provocado por mis propias uñas clavándose sobre mi piel.

Mis ojos se abrieron debido al dolor, aquello no ocurriría de manera normal, no debería ser capaz de dañarme con la barrera establecida… a no ser que se hubiera separado de mi cuerpo. De forma tintineante la barrera que tenía sobre mí se había separado formando una pequeña esfera que difícilmente nos incluía a Denzel, Yoo y a mí misma. Las paredes de la esfera temblaban como si de un fino cristal  a punto de romperse se tratara.

Las emociones de aquel momento eran conflictivas en mi misma, si bien había conseguido separar e incluso manejar aquella barrera de mi cuerpo sin dejar fuera a mis compañeros, sabía que aquella esfera difícilmente resistiría un puñetazo. Mucho menos  el ataque de un dragón.

—¿Que ha quemado a alguien? —Mi rostro se paralizó. Aquello ya no era divertido—. ¡Tenemos que detenerlo! —Pero ¿cómo? Mi poder sería inútil contra un dragón. Al parecer, lo mejor era buscar a Lee. ¿Dónde estaba?

Por suerte, Gina parecía tener la respuesta a su paradero.

—Pero… ¿en qué parte del bosque? —¿Ir a buscarla no sería como buscar una aguja en un pajar?

Nahuel y Ororo aparecieron, y parecían no ser conscientes de lo que ocurría.

—¡Nahuel, Ororo! ¡Hay un dragón en el lago! ¡Tengo que encontrar a Lee! —exclamé, alterada y nerviosa—. Alex está buscando a Lee, pero se ha ido sola. No sé dónde está Arturo —dije a Ororo con urgencia.

Dicho eso, no perdí más tiempo y salí corriendo al exterior del edificio, a toda velocidad.

Las palabras y la reacción de Eileen lo dejaron algo confundido y miró a Ororo y Gina con un gesto de que demostraba lo que le sucedía, luego supuso que se debía tratar de alguno de los poderes de los rescatados, se encogió de hombros y miró a Gina a para ver si ella estaba dispuesta a escucharlo o si debía volver en otro momento.

            - Vayamos para ayudarles y para buscar miembros de la banda de los Ángeles allí! -      Escribe Ororo en el cuaderno que llevaba para mostrarle al resto tras escuchar sorprendida lo dicho por Eillen, entonces se despide y sigue a la chiquilla al bosque 

Nahuel saludó a las chicas con un gesto de su mano y se quedó esperando por Gina

Denzel sonrió a Ilia, aun en toda aquella situación, sacaba fuerzas de flaqueza para mostrar su apoyo a la muchacha.

-No te preocupes, estoy seguro de que nos protegerás.

Le dijo mientras intentaba pensar una manera de enfrentarse a esa cosa.

Tenía los nervios a flor de piel, hacía mucho que su poder no se activaba así, de hecho, era la primera vez que invocaba algo tan grande, si no fuera porque por culpa de aquello estaban en peligro hasta estaría orgulloso de poder crear algo así.

Por desgracia, en ese momento lo que sentía era bastante pesar, pese a que no lo quería mostrar, en su mente no dejaba de darle vueltas a que los del centro tenían razón, en el salón de clase también se había armado porque se había descontrolado el poder de alguien, realmente, por mucho que le pesara podían llegar a ser un verdadero peligro.

Aunque aquellos pensamientos se los guardaría para el en aquel momento, los ánimos no estaban como para chafarlos aún más, en aquel momento lo que necesitaban era encontrar la manera de parar a esa criatura.

-Sé que quizás debería de dar yo ideas, pero… es la primera vez que hago aparecer algo tan grande, alguna idea de cómo hacerlo desaparecer ¿Quizás dejándome inconsciente?, no tengo ni idea de que pasara si pierdo la consciencia la verdad.

Baltazar aun estaba bastante lejos del lago, por lo que sigue corriendo internandose en el sendero del bosque que le llevara al lago, David a su lado corría algo mas rápido. Los dos chicos terminaron llegando a una zona mas cercana al lago (en la actualización que va después de la próxima mas o menos llegais, es por temas de cuadrar tiempos con los demás), sin embargo, podían ver mucho mas claro lo que sucedía.

Al borde del lago Illia había desplegado su barrera mientras estaba siendo agarrada por Yoo, al lado de estas dos y también envuelto en la barrera estaba Denzel. En el lago Han parecía estar preparando una gran lanza de hielo mientras Bora en ropa interior disparaba aparentemente para tratar de distraer al dragon con una pistola

La mujer sonríe levemente y empieza a hablar:

Te equivocas… tu tienes un poder especial. Llamas a otros seres de otro plano a nuestro mundo… no como el niño de las cartas que las materializa, ni como el que crea efectos sobre si mismo, no, tu eres realmente peligrosa, eres como un portal a otro mundo que podría traer a criaturas que podrían destruirnos a todos, pero… esas criaturas te hacían caso a ti, unicamente a ti.

Decía la mujer, parecía que no le importaba demasiado que le escucharan:

Esa inyección buscaba matarte… cuando aquella teletransportadora apareció solo quedaba una solución, no podíamos dejar a algo tan peligroso como tu descontrolado, teníamos que controlarte o… destruirte

Charles puede ver una imagen pero es bastante confusa y apenas puede verse demasado, es desde le punto de vista de la doctora, esta mirando un tanque en donde hay una chica metida, aunque no ve quien es, rápidamente la imagen cambia ya que la mujer mira a un lado, allí puede ver a un hombre que ha sido atravesado por los restos que se han desprendido de una explosión. En su interior siente en ese momento odio, rabia y pena

Nacho no era capaz de sentir nada mas, parecía que la mente de la doctora era demasiado para el o quizás había “interferencias” y no podía leer su mente

Gina observa como la pequeña se marcha corriendo y solo alza los hombros para dar un gran bostezo, se notaba que se acababa de levantar, mira a Nahuel y dice:

Ahora iba a prepararme algo para desayunar, si quieres puedes contarme lo que sea, ¿o tu también quieres ir a ver al famoso dragón?

Comentaba mientras entraba en el comedor bostezando