Viendo que todos parecen arreglárselas bien, trepo con el resto a la cornisa y miro lo que hay al otro lado, esperando a saltar para no caer sobre nadie de los que estén ya allí. Me lo tomo con calma pero sin perder la cabeza, para no terminar como Satoshi, que a este paso no terminara el día sin una fractura de regalo.
No hagáis ruido, a ver si logramos perderlos. Quizás no sean lo suficientemente listos como para hacer coincidir los echos de perdernos de vista y la ventana abierta.
Entonces dejo de poner posturitas y me doy el piro con el resto xD
Ariadne consigue llegar abajo sin novedad, y Miyako baja tras ella sin incidentes. Sin embargo, cuando Hiruma se dispone a bajar, aparecen los montruos al final del pasillo, aunque debido a sus fuertes gemidos se oyen mucho antes de que podais verlos. Estos os han seguido el rastro a traves del pasillo, puesto que solo hay una direccion. Aunque aun estan bastante lejos como para suponer un peligro, continuan su avance lento pero constante. A no mucho tardar se os echaran encima.
Youichi, si lo que quieres es saltar, tendras que hacer una tirada de FCO y otra de AGI.
Una vez Miyako esta abajo estoy mas tranquilo. Antes de que me dure mucho la sensación los “otros” aparecen directos hacia nosotros.
– Toshi, Tsutomu bajar de una vez. No nos queda prácticamente tiempo después os seguiremos Liam y yo pero comenzar ya a descender.
Liam permanece firme esperándolos aparentemente mas tranquila.
Miro hacia arriba a los que aun están llenando todo el sitio y a los monstruos que se acercan por el pasillo.Suspiro sin alegría mientras los observo con un ojo y al resto en la ventana.
Dentro de poco tendremos que decidir si luchamos o corremos chicos. Les susurro a los que como yo aun no han subido al alfeizar.
Cuantos monstruos buen master?.Un par tal vez? xD
Satoshi se incorporó sobre Aoki como pudo, intentando caminar sin que se le cortase la respiración. COmenzo a andar en direccion a los autobuses con una mueca de dolor en el rostro. Tenian que darse prisa todos y bajar, habia uqe llegar hasta el autobus.
Claaaaaaro, echadle las culpas todos a Satshi, panda de machistas ¬¬y aoki que? ah clarom es verdad, que es mujer...
tú eras el que estabas más cerca, espérate a que lleguemos hasta donde está ella, si no acaban antes con nosotros xDD
yo sigo esperando, si se acercan más, ya veremos xD
Yo también espero junto a Liam. ¿Por cierto juegan Toshi y Tsutomu? Porque sino no bajaran y nos arrollaran mientras esperamos que actúen.
Mientras van bajando, aunque algunos de ellos aun no se deciden a bajar, retrasandose en la parte superior, aparecen los montruos. Ya sabiais que vendrian por el ruido que hacian, pero ahora se acercan mas rapidamente, y reducen mucho la distancia. El primero, esta a menos de 3 metros de Liam, y seria capaz de lanzarse sobre ella si no reacciona rapido.
Cita:
Si, claro, solo un par. Jejeje
Se os va a echar encima medio Gran Hermano
Cita:
No, no juega ninguno. Uno aviso de que se iba, y el otro borro su cuenta y se fue sin mas. Es una lastima.
Describimos nosotros que bajan o tenemos que esperar que lo hagas. Era el motivo de la pregunta.
A ver que me aclare. Arriba no podemos subir porque todavía están los otros, que no bajan de el alfeizar ni a tiros y los monstruos a 3 metros....
Hay pasillo para seguir corriendo y probar con otra ventana?.
Al final tendremos que azuzar a los de arriba con los palos xD
Lo de los ausentes lo narro yo, pero cuando bajeis todos.
Youichi, creo que te has hecho un lio. ¿Arriba? ¿Pasillo? ¿Pero donde estas tu?
El problema era que Liam y Daichi se habían ofrecido para ser los últimos en bajar.
Ahora escribo proponiéndole a Liam bajar no0sotros si los demás no se acaban de decidir.
No paran de avanzar y algunos no acaban de decidirse.
– Liam bajemos nosotros. Sino quieren huir no podemos lanzarlos por la ventana.
Me asomo por ella buscando alguien que recoja el extintor. Si nadie se ofrece lo dejo caer donde no se encuentre nadie y comienzo a bajar.
– Baja tu también – le digo a Liam cuando mi cabeza esta a punto de ver sólo la pared mientras desciendo.
Yo es que en temas de localización dentro de este sitio hace mucho que me perdí.
Creía que estamos en uno de los pasillos, que estamos junto a una pared, debajo de una ventana, esperando como lelos a que los de arriba se muevan mientras los zombis llegan.
Ni aún con la muerte a sus espaldas son capaces de moverse con algo de rapidez.
-Malditos seáis.. Si no vais a bajar, dejad el paso libre para los demás-. Sé que los últimos en bajar serán los que queden más cerca de "ellos", pero no pienso arriesgar mi vida porque alguien no sea capaz de reaccionar con la suficiente rapidez.
Antes de que el primero de ellos se me acerque más, pego un salto hacia la ventana y me descuelgo con rapidez, siguiendo a Daichi. Antes de empezar a bajar, miro hacia arriba, donde aún faltan dos por bajar y les urjo a ello con la mirada. Será mejor que bajéis a tiempo... No quiero arrepentirme el resto de mi vida por haberos dejado atrás.
Pasando ya de todo y viendo que al final voy a ser el ultimo gilipollas que se quede atrás, subo por el hueco que han dejado Daichi y Liam. Me aseguro la barra para que no la pierda y sin mirar atrás, salto al exterior, decidido a que no se me coman los de dentro.
Demos una oportunidad a los de fuera.
No se si hay sitio o no, pero me las piro.
Recojo el extintor de donde ha caído y me coloco delante de mi hermana Miyako para protegerla. Saco una de las llaves y señalo a los autocares con ellas.
– No perdamos mas tiempo busquemos uno libre para huir en él.
Te lo envió así por si no los vemos desde aquí.
Recojo el extintor de donde ha caído y me coloco delante de mi hermana Miyako para protegerla.
Después de abrazarla saco una de las llaves de los autocares levantando el brazo en la dirección donde están aparcados todos los días.
– No perdamos mas tiempo busquemos uno libre para huir en él.
El cuerpo de Satoshi apoyado en el mío, hacía que caminara más lento, pero sabía que el estaba haciendo un gran esfuerzo en caminar.
-¿Crees que puedas caminar un poco más rápido?- murmuro a Satoshi en el momento en que miraba por encima del hombro percatándome del nuevo grupo de criaturas -debemos darnos prisa o nos atacarán. Están detrás nuestro- le digo en un tono un poco alarmante, intenté decirlo de una forma tranquila, pero era imposible, podríamos morir en minutos.