Partida Rol por web

Destinada a albergar el manto de la traición, fuiste educada cercana a los trámites judiciales, que poco a poco afrontaban la separación y discusiones familiares.

Cuando pensaste que todo había acabado, la muerte de tu madre sobrevino en tu vida, como un jarro de agua fría.

Tus ojos nacarados, hervían entre lágrimas, mientras con una pluma, plasmabas ante un papel miles de preguntas sin parar, todas ellas diferentes… pero siempre una dirección, ¿por qué y quién?

Estuviste preguntando durante algún tiempo cuando al fin encontraste la solución, tus ojos parecían dibujar sobre el papel un trazo rectilíneo que ostentaría el símbolo de uno de los mayores demonios conocidos del averno.

Sin saberlo el nombre de Belzhebú y su simbología se repetían una y otra vez sobre el papel, y ante tus ojos, la imagen de la verdad se hizo cierta… Viste a tu padre, tratando con un ser con piel cetrina y cuarteada, y tras aquella conversación… como aquella criatura posaba una mano sobre tu madre y ésta caía fulminada sobre el suelo.

La ira y la furia se hicieron dueñas de tu ser, ahora solo esperas encontrar a tu padre y destruir su existencia con tus propias manos, o lo que quede de ella. Ningún semidemonio merece vivir, si fue uno de vosotros el que alzó su mano en contra de los tuyos, por ello intentarás que la muerte enarbole la bandera de la victoria sobre el lugar.

Oldland será sitiada por traidores que buscarán favorecer la entrada del averno sobre el mundo, y tú los ayudaras.

Entre tus pertenecías aquella pluma de plata, que utilizaras para que el Gran Señor del averno, muestre ante ti la verdad de los demás.

Pero esta vez no necesitarás tinta, pues la sangre del escriba será el lecho sobre el que se dibujen los trazos…. Trazos llenos de odio y venganza que recorrerás hasta el final con tu propio ser, ligando tu alma a ese momento tras el atardecer.

Tras leer un par de veces tu post, aún no me quedó claro qué soy... porfis, explicame

Digamos que eres el vidente oscuro o brujo... puedes ver la identidad de las personas, pero la ira y furía de la pérdida de tu madre, te hacen balancearte sobre el lado oscuro, por lo que iras en el bando de los traidores, si en tu periplo encuentras algun traidor, podrás unierte a él para aumentar fuerzas... XD

Ah ok, todo clarísimo ahora, ya noto que te encanta verme de mala malísima xD

La lluvia del primer día dejo una huella en vuestra piel, tal vez fuera el recuerdo de aquella anciana, que sin quererlo, en tan solo unos imnutos os hizo sentir vivos, unidos o traicionados por última vez.

Ahora era vuestro tiempo... el tiempo de reencontrarse con un destino que aunque perdido, aún estaba por emprender.

Es el tiempo de reescribir una historia, donde todos deben emprender su camino.... incluso tú... Eva

Yannic

La pluma entre tus manos escribe entre sangre un nombre que acabas de conocer, intentando buscar algo que te atraiga de él.

Las letras son claras, Yannick, será el elegido... esperas que tu libro conceda un nexo entre Belzhebú y tú... y no hace falta mucho esperar... pues tan solo bastan unos segundos para que el libro reaccione como queriendo incluso borrar el rastro de ese nombre.

Demasiado puro para un libro tan oscuro, demasiada inocencia en un tomo de traición. Entre sellos ocultos y oscuros se alza una visión encerrada en un circulo de sangre que muestra el rostro de Yannick y los sellos parecen indicar su mirada como la causa de tal repulsión.

Ante tí se muestra el Heraldo de la Noche, que intentará proteger por ahora, este mundo y esquivar la traición. Apoyando su mente en alguien que piensa cercano, dando un motivo a su acción.

Ahora estas segura, es él, el que os podría delatar... a vosotros traidores, ante los ojos de los demas.

Mucho has andado hasta esta tierra que parece latir ante un final impaciente, las puertas del infierno parecen clamar sangre, esperando el pago de vuestras almas para iniciar la destrucción de vuestra estirpe. Pero has combatido en suficientes batallas como para saber que su llegada no sería posible sin un traidor.

Fue por una traición que nació vuestra raza, y está escrito que la traición intentará abrir las puertas al ocaso, para romper vuestra suerte, y obligaros a caer bajo el filo del ejercito de los avernos.

Nunca creíste en las leyendas, y ahora no es el momento de empezar a creerlas, por ello, te ocuparas tu mismo de desvelar el rostro de la traición, rompiendo el efecto que daría culmen a vuestra existencia.

La Tierra de Oldland parece estremecerse ante la desesperación de un día funesto, pero tú no… Tú seguirás erguido, hasta que la muerte vele tu conciencia.

Pero antes de alzar el mango de tu hoz, busca alguien a quien seguir, alguien en quien apoyar tu mano y dar serenidad a tu mente. Esta será la última batalla, y ha llegado el momento de no estar solo.

La sombra de la noche, podrá borrar las huellas del camino, pero nunca podrá borrar la mirada del heraldo que guardará sus destinos.

Dime la verdad Low, eres abogado o juez o algo así y conoces bien la manera de hablar para que nadie te entienda.... ¿puedes por favor traducirlo a mi idioma? xD

La luz de la luna dejaba su huella sobre aquel libro que adoctrinado bajo el sello de Belzhebú, te revelaría alguna verdad, incluso puede que ligara tu alma a alguno si la traición brillara sobre su alma.

Sí, con Valfar

Escribes con tu propia sangre sobre aquel libro el nombre de Valfar... La sangre estiliza la caligrafía mientras deja correr un rastro carmesí sobre el papel, que pronto empieza a encerrarse sobre aquel oculto sello, que deja a Belzhebú el juicio sobre aquel que has depositado su nombre.

De nuevo en el aire se dibuja un antiguo sello, y dentro de él, la bruma dibuja el rostro de Valfar... El libro parece gritar de rabia y odio al escudriñar su alma, demasiado bien en tan poco espacio, demasiada bondad para tan poca alma.

En aquel efimero circulo ves a Valfar rodeado de un escudo, capaz de impedir el paso de la traición... será el mayor enemigo a batir si los traidores quereís ganar, pues solo su fuerza de fé podra parar vuestro ataque.

Otra imagen se cierra sobre el circulo, donde los labios de Valfar son besados, su cuerpo aderezado con miles de caricias y su mirada llena de un poder mayor, parece que ahora su vida también tiene un nuevo rumbo, la de proteger al resto, pero sobretodo a una persona, aquella a la que debe su incondicional amor.

Hastiado de tanta bondad el libro se cierra en tus manos, y desaparece ese circulo en el aire dejando tan solo un amargo olor en el aire. La información que has obtenido en estos días es importante, pero tambien lo sería transmitirla a uno de tus aliados, pero a cuál... si aún no los has encontrado.

En tu mente como susurrados se describe versos que detalla el destino de Valfar, dandote la información de su misión en esta reunión.

Tras la búsqueda de tu hermana, tan solo has encontrado el nombre de un lugar… Oldland. El lugar donde se supone, que tendrá lugar la destrucción de vuestra estirpe.

Al principio tu mismo te preguntas, que haces en este lugar, si parece que la muerte pronto campará a sus anchas por el angosto paraje. Pero tras cruzar el muro de su ciudad ahora comprendes el por qué.

La ciudad esta sumida en el miedo, y en la ansiedad, el final puede que esté cerca, si nadie hace algo. Y ese alguien debes de ser tú.

El asesinato de tu familia te demuestra que no solo podrías causar dolor con tu don, sino algo que deberías haber hecho, pero que la distancia te impidió hacer… proteger.

Es hora de proteger a todos y cuantos moren en el lugar, y que con inocencia pretendan silenciar aquella guerra, dándote algo de tiempo para tu búsqueda. Una tregua por Wedna.

Así que ahora debes ser firme en la última enseñanza que te dio la muerte de tu familia, en el último vestigio del legado de tu familia.

Olvida el dolor y la ira, y protege para tener un mañana… hazlo al menos por ella.

Intuyo que es el brujo? Ya sabes que me cuesta seguirte...

Entre hoy y mañana podrás hacer uso de tu don, si así lo quieres...

Como en las bodas, sí quiero jajajaja

Va en serio, con Elisabeth

De nuevo tu pluma susurra un nombre sobre aquel oscuro libro que guarda el alma de un demonio en el interior...

Poco a poco, una silueta estilizada por tu grafía da forma al nombre de Elisabeth... Y es el momento de aquel sello rojo vuelva a emerger, y dar forma a una reflejo de la verdad.

Bajo aquella cara sombría y aquel caracter avaro, se esconde la forma de la envida en su plenitud.

Envidia, de no sentir como los demás, envidia de no aprender a sentir sin ayuda como los demás, pero entre sus manos, un antiguo manuscrito capaz de guardar en su cuerpo, el alma de alguien a cambio de la mitad de su alma.

La mirada de Elisabeth mira a su alrededor, esperando encontrar alguien del que adoptar su corazón, a pesar de que eso signifique la muerte de parte de ella, o la muerte de alguien más...

Callada y apartada ha sido tu forma de caminar por la vida, dejando de lado todo aquello que tuviera que ver con la civilización. Akerbeltz y tú, erais un grupo cerrado donde no había sitio para nadie más, al menos por ahora.

Pero era un equipo que aún no estaba completo, pues pese a tu fuerza y a la tenacidad que ambos mostrabais, faltaba algo que rellenara el lugar donde se alojan los sentimientos.

Tus pasos eran inciertos, y aunque torpes, por fin llegaron a Oldland. Los rumores decían que pronto una gran batalla decidiría el futuro de vuestra estirpe, un futuro que probablemente terminara en un sangriento amanecer.

La raza de los semidemonios se preparaba para detener aquel debacle, mientras la mayoría sentía miedo dentro de sus corazones.

Miles de sentimientos que adoptar… miedo, furia, traición, esperanza… miles de palabras conocidas que pronto tendrían un significado dentro de tu ser.

Pues habías tardado años en aprender aquel oscuro trazo, que guardaban entre acertijos unos oscuros libros, un trazo que podría romper aquel corazón frío que ahora mismo poseías llenándolo de nuevos sentimientos, llenándolo de aquel murmullo que nombraban como ilusión.

El pago por aquel trazo sería la mitad de tu alma, que poco a poco sería destruida y vendida sin rendición, pero a cambio, la vida de alguien sería apagada, mientras sus vivencias y habilidades te serían entregadas sin dilación.

Una manera de llenar aquel único sentimiento que hasta ahora habías mostrado saber conocer… la envidia de sentir.

Pronto llegará ese momento, pero mientras llega, debes seguir ocultando tu yermo corazón bajo una máscara de ilusión.