Partida Rol por web

-Bueno paece que despues de todo, si estaba todo decidido, ahora que el muerto esta en el hoyo que cada uno se vaya a la cama y espellemos mañana estemos todos enteros.

Si mas valdria a alguno de estos gandules hicieran algo, ¿Dulcinea hija, y tu hermano no piensa hacer guardia?

- Yo... Señor... dijo cabizbaja, sabía que Will tendría que ir, pero... ella... y qué pasaría con Ingrid. Will decidirá lo mejor para su familia, tiene que protegernos a nosotras también.... pero... entenderé que tenga que ir a vigilar, estoy muy asustada. dijo mientras atraía a su hermanita pequeña hacia sí para sentirse más segura.

-Grácias a Dios, se ha hecho justícia.- En ese momento sonaron las campanas- ¿Pero què hora es? ¡Ya es la hora!- e immediatamente Jonás salió de la taberna. Al cabo de unos segundos se podía escuchar a Jonás gritando la misma salmodia de cada noche:

-¡Venga, ya es la hora, fuera de mi plaza! ¡Ya os he dejado andar todo el día por aquí! ¡Largáos! ¡Es MI plaza! ¡A vuestras casas!- Jonás echaba a gritos a cualquiera que aún deambulase por la plaza del pueblo, de la qual él se consideraba propietario.

 Yo hare también la guardia claro, díganme quien se ofrece conmigo porque no creo que solo uno podrá serlo con lo que esta pasando no?, bueno alcalde cuando empiezo.

 Mientras le pongo un brazo arriba a Dulcinea y le sonrío para que sepa que no se preocupe, ya tenia bastantes preocupaciones con lo que paso y no quería que cargara con mas, luego le susurra a Dulcinea.

 No te preocupes yo estaré ahí siempre para ti hermana, solo llámame y veras que nunca estarás sola.

Me pongo de pie, vaciando la copa que tenia frente a mi. Había demasiada gente como para sumarme a una guardia nocturna. Ademas de que estaban todos aquellos fanáticos religiosos que no me caían tan bien. Por dios, creer en cosas sobrenaturales... Esos si que tenían tiempo libre... Prefería irme a entrenar. Estaba totalmente segura de que había sido cualquier perro salvaje el que había matado a aquel hombre. ¿Cuanta gente moría todos los días y nadie armaba tanto escándalo? Claro estaba que había muerto alguien y eso no era bueno. Pero se estaban desesperando por algo que pasaba a menudo por allí.

-Vale yo me iré afuera...-

Me ahogaba allí adentro. Las palabras de todos me golpeaban con fuerza como una potente maza que intentaba meterse en mi cabeza por la fuerza. Estirándome, salgo de la taberna para quedarme a un costado de la misma. Observándolos bajo el aire fresco.

 Llamo a William a mi lado: Bueno, ya somos dos en la guardia. Esperemos un poco si alguien más se suma, si no, vamos a recorrer el pueblo.

- Gracias hermano. susurra a su hermano algo asustada pero orgullosa también.

- Ingrid es tarde, vamos a casa. dijo tomándola de la mano.

- Buenas noches se despide de todos, esperemos que esta noche todo esté solucionado y no vuelva a ocurrir nada tan horrible.

Rápidamente Alazne se acerca a Luca, y dice:

-Voy con vosotros-en un tono completamente decidido.

Viendo Como pasaba la noche , decidir irme a mi casa humilde esperar alguien que tuviera sed... Estaría toda la noche despierta o mitad de la noche.
En mi casa escuchaba a la gente "diciendo se ha hecho justicia!!!"
Entonce decidir ir donde estaba la gente con un botijo de agua fresca .
Me acerco donde esta la multitud y digo:

¿Quien quiere un poco de agua fresca señores?

Al tener ya a los generosos voluntarios para hacer guardia por la noche decido volver a mi casa. Tengo cosas mejor que hacer que estar por aquí mirando… Como contar dinero, o planear mis próximas estrategias comerciales… ¡Cuando uno es comerciante no puede dormirse nunca en los laureles!

- Señoras y señores… Yo tengo cosas que hacer, soy un hombre ocupado. Así que, por ahora, me vuelvo a mi casa. Hagan el favor de vigilar bien el pueblo, perder más clientela sería un duro golpe para mi negocio. Y no creo que quieran ver como la economía de nuestro pueblo decae, ¿verdad?

Miro a todos los presentes inquisitivamente. – He dicho. – me giro exhibiendo mis lujosos ropajes para alejarme de allí. Mi bolsa de monedas tintinea al compás de mi marcha. El solo hecho de pensar que pueda llegar un momento en que el número de monedas disminuya por la falta de clientes… me aterra.

Viendo como Victoria ofrecía un poco de agua dijo
Amable señorita yo quisiera un poco de agua. Antes de dormir revisaré el pueblo para ver si veo algo raro.

Cuando Borjia se dirigios hacia mi pidiéndome un poco de agua yo se lo di amablemente

Tome Borjia Beba un poco de agua

Ya que fue el primero que se me acerco le dije pregunte

¿Usted sabe las ultimas palabra que dijo el extranjero, cree usted que realmente fue el?

 Miro a Alazne y le pregunto. Bueno, veo que está decidida. Sabe cómo manejar un arma? Es muy probable que nos veamos obligados a usarlas, si es que lo que sea que causó la muerte de ese sujeto vuelve. Pero esperemos que no sea así. Soy Luca di Forli, y es un placer conocerlos.

 Yo no tanto se usar un arma, pero aprendo rapido, o sea las he usado pero nunca para herir a nadie si sabes a lo que me refiero, prefiero desarmar que matar, aaa... y es un placer conocerte.