Partida Rol por web

No sabes que es... comenzó a decir Fátima con tono de "no jodas" cuando el oriental le volvió a interrumpir

Por eso es lo único que merece la pena. dijo con cierta malicia. Si supongo que lo tienes que meditar, preguntar a tu jefe y esas cosas, aunque es una suerte que te lo hayas traído. dijo restando todo tipo de autoridad a la mujer con que hablaba.

Como si se hubiera acordado de que estaba allí ese hombre se volvió hacia el desde la silla y dijo sin demasiada efusividad.

Un placer conocer le Sr LockStone, lamento que no haya avisado de su venida con más antelación, hubiera hecho algún evento de acuerdo a sus gustos.

Esbozo una sonrisa

Tiene que ensayar más su cara de poker, parece que la circunstancia le ha arroyado, supongo que tampoco le dijo a donde venía.

No posteo en publico, para no parecer pejiga actualizando cada cinco segundos.

Kranken está tratando de disimular su asombro. Parece un friki cuando ve por a su heroe favorito transformarse primera vez.  "Asi que esto es lo que hacen los reyes del crimen" piensa "Manejar todas las cartas. Tener sus manos en todos los fregados. Comprar todos los secretos y traficar con ellos"

En este momento es cuando se ha dado cuenta de cual es la diferencia entre un cyberpunk cualquiera y un (buen) arreglador: El cyberpunk le basta con saber donde conseguir lo que quiere (Streetwise) pero el arreglador necesita estar enmedio. No es que lo necesite por el negocio, sino la necesidad es mas profunda, es parte de él. Para Morimasa y los suyos, poner sus manos en los negocios y tomar siempre su parte de los asuntos de los demás es como el respirar. No basta con saber quien hace el qué, es necesario estar en medio, negociar, facilitar y dominar (Streetdeal)

Este es sin duda el hombre que le hace falta para su investigación. Si va a cambiar las calles, si sus teorías se van a convertir en una realidad, es Morimasa quien puede ayudarle a hacerlo posible. Desde luego a Kranken le gusta recortar en intermediarios, asi que con Morimasa no dependerá de un "Orejotas" comunicandole con "Gran Orejotas", y este con un "Orejotas Mayor"

Entrecruza los dedos frente a su cara, y sonrie ligeramente. Lo que está sucediendo es increible.

Alfred sonrió y meneó la cabeza

- ¿De verdad piensa que mi cara de poker necesita una mejora? Es sin duda algo sorprendente.- el ejecutivo no respondió de inmediato al hombre y sólo una ligera mirada a Fátima aclaró que sin duda iba a tener una larga conversación más tarde con su empleada. Sin embargo no parecía molesto, sino más bien... intrigado- En fin, creo que ya comenté que he venido por la comida, pero desde luego no tengo problema en hablar de negocios. Aunque reconozco que me pilla algo fuera de juego esta reunión- calla un instante y luego mira a Morimasa- aunque supongo que me agrada saber que hay algo de lo que yo se, que usted desconoce, es.... agradable habida cuenta de sus palabras. Como ya les han dicho- dice  mirando al resto de las personas- Mi nombre es Alfred Lockstone, y no, no puedo saberlo todo de ustedes. Solamente saber algunos datos importantes- sonríe con educación y luego observa a Morimasa- Dudo sinceramente que conozca mis gustos, señor Morimasa. Como también dudo sobre la oportunidad de todo esto. Sin embargo es verdad que no tenía ni idea de que venía a esto. Así que antes de responderle, permítame- se gira entonces y mira a la mujer que le acompaña- Fátima, guapísima... ¿en qué lío me has metido? ¿qué estamos haciendo exactamente aquí... además de tomar fideos, claro?- guarda silencio un instante mientras observa a su subordinada- Confío en ti, Fátima, pero si no me has preguntado antes de venir, ni me has explicado a lo que venías, no puedo autorizarte ahora. Y desde luego no es momento para que me des explicaciones. Sin embargo.... bajo tu autoridad y criterio, sabes que puedes actuar. Eso sí... si el señor Morimasa y el resto de presentes pudieran resultar ser útiles para el trabajo que tengo entre manos, y tú pudieras mostrármelo, sin duda podría estar interesado en contratarles... si es que respondes plenamente de su profesionalidad y de su silencio sobre todo este asunto, claro.  

Aquel tipo tenía agallas al menos y podía llegar a caerle bien, pese a sus jefes; se dijo Morimasa.

Señor LockStone, sus jefes venden la información que tienen, solo es cuestión de dinero... dijo Incluido sus gustos y eso último no sería muy caro, me temo.

Hizo un gesto con la mano acompañando la cadencia de sus frases como si de esa manera hiciera funcionar un engranaje imaginario.

Luego... si están aquí es por que sus jefes no les dan información suficiente o por que necesitan que usted averigüe algo que ustedes no saben... o alguna mezcla de todo ello en diferentes proporciones.

Durante un instante mientras se incorporó de su silla y sirvió dos copas calló mirando al interlocutor, luego en el camino de vuelta hacia su invitado comentó

Si le ha traído es para que me pudiera conocer, tantear lo que pido y usted se pueda formar una opinión antes de contestar, no contaba con que supiera quien era usted, me temo, ni que le embistiera de este modo si lo sabía. Estaría en la segunda reunión y evaluaría los trabajos por los que me habría pagado y dejaría la información sensible para otra ocasión en que usted se hubiera decidido ¿Me equivoco, cielo? Pero si no mencionaba algo jugoso yo no jugaría a este juego.

Ofreció una al  hombre de los fideos la segunda copa

Justo como le hicieron a Jeanne d'Arc cuando le presentaron al delfín, así que alegraos, os ha elevado a una categoría real. Su sarcasmo era evidente Por el rey dijo brindando

La conversación parecía que orbitaba en torno a nuestro anfitrión y el tal Alfred Lock-no-se-que. Pero bueno, parecía que poco a poco se iban entendiendo.

Miré a Alvarado y a Doc, luego bebí un poco de mi cerveza... tenia curiosidad por ver a donde llevaba esto...

Alfred negó con la cabeza y por un instante miró al resto de comensales, como esperando que alguno de ellos dijera algo. 

- Vamos señores. Va a parecer que es una conversación entre dos. Yo ya me presenté... pero realmente aun no tengo muy claro el motivo por el que están ustedes aquí - tras las palabras el ejecutivo menea la cabeza y alza la copa- Por el rey, si. Claro que si. Veamos... sí, en respuesta a su pregunta, sí. Podría estar interesado en contratarle tanto a usted como a sus amigos. Pero no voy a hacerlo como si yo fuera un berserk. Me juego mucho con estas cosas. Además, ¿cómo se que puedo fiarme de ustedes? Les acabo de conocer - tras las palabras mira un instante a Morimasa- Esperemos no acabar ninguno como Jeanne d'Arc, ¿no le parece? - da un trago de la bebida y luego se pone más serio- Díganme todos, ¿estarían dispuestos a que les contratara? ¿cuanto creen que valdrían sus servicios? ¿y por qué debo fiarme de ustedes?

"Nunca firmo un contrato, sin que al menos me digan para que me requieren" ataja Kranken. "Pero a veces no es necesario linea directa con los angelitos del cielo para saber quien manda y quien obedece cuando les ves juntos"

"Morimasa ya nos ha presentado: Me especializo en evitar que la gente se muera, y en hacer posible lo imposible ¿Le basta eso... alteza?"

Estamos oyendo hablar de cantidades importantes de dinero, nadie da tanto si no hay problemas de por medio. Y realmente se esta hablando de mucho dinero, seguro que Morimasa ya se ha informado de lo que puede sacar del asunto, aunque seguro que no comparte mas que lo minimo imprescindible. Tendremos que ir con cuidado para no meternos mas de lo debido en terreno pantanoso.

Escucho atentamente los comentarios y la discusion que se monta entre el asiatico y el ejecutivo recien llegado, parece una lucha de poderes hasta que duda de nosotros. Como si fueramos a hacer un trabajo sencillo, entiendo que quiere que quitemos de enmedio a una netruner, no sera el primer ejecutivo que complica a un grupo para eliminar competencia y luego como unico pago se reciben problemas.

- La confianza es algo que no tenemos en ninguna de las partes, tambien entiendo que el trabajo que se pide no es sencillo y que cuanta menos relacion se tenga con su persona mejor. Dispuestos a ser contratados, no creo que ninguno estemos aqui por las copas. Por lo demas, para acordar un precio, habra que acordar primero lo que se espera que hagamos.

Hacer este trabajo bien, a parte de darnos un dinero, puede darnos algun otro trabajo o quien sabe que nos puede dar el futuro.

"Primero dile que ofreces, así en general" le susurra Kranken a su viejo paciente "y luego dile que es lo que pide"

"Indirectamente, le he dicho que soy doctora y que se me da bien crear segun que cositas y que milagros hagan falta" bebe un sorbito de la copa "Asi que dile QUE es lo mejor que puedes ofrecer. Haz como Don Morimasa, y dile por que eres necesario, en cualquier plan que él tenga"

Para kranken, cuidar de sus pacientes no termina con poner un punto de sutura.

Tras las palabras de el superviviente, tal como lo había etiquetado el anfitrión de aquella velada la doctora con cierto grado de complicidad le susurro algo a la oreja, sin duda aquellas personas se conocían, sino mucho al menos habían tratado entre si como para tener cierto grado de confianza.

 Miré fijamente a todo el mundo, en completo silencio, con los brazos cruzados, mientras los demás hablaban. No transmitía ninguna emoción, lo que  hacía imposible que supieran lo que estaba pensando de todo esto...

El ejecutivo da un nuevo trago a su copa y su mirada va de unos a otros

- Señor Morimasa... le agradezco la sorpresa que me ha supuesto conocerle. Generalmente no es fácil llamar mi atención. Pero su sola existencia lo hace. Ya sólo por eso me alegraría de la reunión que estamos teniendo. Un poco de esgrima verbal despeja la mente. ¿Cómo decía aquel político? "no estoy de acuerdo con usted, pero sí lucharía porque usted pudiera opinar distinto a lo que yo hago"- menea la cabeza, divertido- Una época más fácil a pesar de todo- tras estas palabras saca con cuidado un pequeña pantalla plana opaca (uno de los últimos ordenadores extraplanos) y pulsa en ella diversas veces, mientras parece pensativo. Luego parece llegar a una decisión y guarda la pantalla y mira a los presentes- No me malinterprete. Una cosa es lo que desea mi querida Fatima- mira en este momento a su asociada y sonríe- Y otra muy distinta es a qué estoy dispuesto a contratarles. Sinceramente, ustedes me gustan. Pero antes de decir una sola palabra preciso que se comprometan a no revelar nada de lo que les voy a contar. Hecho esto, podría pasar a explicar lo que querría de ustedes, y el precio que estaría dispuesto a pagar por sus servicios. Y si no llegamos a un acuerdo, bien, no pasaría nada. Pero el compromiso de su confidencialidad iría siempre primero que yo dijera una sola palabra. Su contrato y la discusión sobre cuanto les abonaría, por supuesto, iría después.

Alfred Lockstone guarda silencio un instante y vuelve a mirar entonces al señor Morimasa

- Si le parece saldré unos minutos. Supongo que desearán hablarlo entre ustedes, antes de tomar una decisión para comprometerse a, lleguen o no a algo nuestras conversaciones y mi propuesta, guardar silencio sobre este tema

Antes de que salga...

"Discupe, pero parece que esto es un juego, más que de esgrima mental, uno de a ver quien convence al otro de que se lance a los brazos del primero, sin certezas ni reservas. Pide confidencialidad, pero ¿En que campo? ¿En que tareas?"

- En lo que yo les voy a contar, por supuesto, doctora Kranken. Manejo temas confidenciales, siempre. Y sencillamente, a pesar de vuestras palabras y las de el señor Morimasa, no soy precisamente un rey. ¿Un alfil quizás? Respondo ante otros, y si desaparezco del tablero, ninguna partida termina, y ninguna guerra se gana. Pero preferiría no ser sacrificado- sonríe con cortesía y amabilidad- Se que todos se conocen, y que probablemente soy algo así como el malo estirado de la holocinta. Pero.... es todo hielo, y filo. Todos queremos prosperar. Ni más, ni menos. Y para prosperar estar vivo y saber lo que se quiere es el primer paso