Partida Rol por web

Apoyado en la pared y con las manos en los bolsillos, Pash observaba la calle hacia la esquina, dónde se suponía que todavía vigilaban los droides. De vez en cuando contemplaba el trabajo de Vex y R5, enfrascados como niños de la calle que hubiesen descubierto cualquier tesoro.

Al fin pareció que lograban algo e iban a entrar.

—Muy bien, chicos. Suerte ahí dentro…

Lo dijo con aparente desgana, pero Pash estaba deseando que liberasen los amarres y después posar sus manos en los mandos de la nave de Trex. ¡Qué hartón de reír, cuando se la birlasen delante de sus narices!

El wookie acepta la piruleta y se encoge de hombros.

- GRRRR ARGHHHH SLURP GRRRRR [Discreto puede ser pero mi... slurp... método hubiera sido más rápido] - comenta mientras se acerca al grupito formado por Oskara y Pesh.

- AARGHHHH UUUUGGGG[Os ayudo a vigilar, aunque creo que lo van a lograr. Estos droides son demasiado competentes] - comenta mientras se pregunta si el droide les esta manipulando a base de piruletas.

- Esa bola de pelo con patas me empieza a caer bien compañero metálico - Dice entre bips R5 conforme se abre la compuerta que os da acceso al interior de la torre. Sin más dilación y mientras el resto se queda fuera vigilando los dos droides entran en el interior de la sala.

Se trata de un pequeño cuarto rectangular con unas taquillas en una pared, una mesa pegada a la otra y ocupando poco menos de media habitación una mesa circular con varias sillas. Encima de ellas podéis ver varias cartas de sabacc repartidas en cuatro sitios. 

Cuando os acercáis a la puerta y os asomáis apreciáis una gran estancia abarrotada de computadoras dispuestas en torno a un holoproyector central en el que se muestra un plano del espacio aéreo local. Frente al holoproyector hay una mujer humana con los brazos cruzados a la espalda. Parece ser la encargada de la sala de control, veis como se dirige a alguien con tono imperioso a través de sus auriculares.

- Lanzadera imperial Lambda 11238, al habla la supervisora Brynn de la torre de control del puerto espacial. Tienen permiso para aterrizar. Bienvenidos a Mos Shuuta. -

Media docena de técnicos de distintas especies operan las consolas, y dos droides de seguridad montan guardia; uno al final de cada pasillo. Las paredes de transpariacero os permiten ver el paisaje desértico de Tatooine y la lanzadera imperial que se aproxima para tomar tierra.

Parece que por ahora no se han percatado de vuestra presencia.

Pash seguía apoyado en la pared, más o menos atento a lo que sucedía en la calle. Total, ya estaba Oskara bien atenta...

Sin pensar, estaba a punto de ponerse a silbar una alegre tonadilla de piratas espaciales. Sin embargo se lo pensó mejor, no parecía profesional en estos momentos.

¿Era una piruleta eso que el gran wookie se llevaba a la boca peluda? ¡No, que iba a ser eso!

41-Vex echa un rápido vistazo al interior  y luego se asoma para informar a sus compañeros.

- Hay siete operarios en la torre y dos droides de seguridad montando guardia. Intentaré soltar lo amarres. Si la cosa se complica R5 os avisará - entra de nuevo pero vuelve a asomarse -. Oh, acaba de llegar una Lanzadera imperial Lambda - y desaparece otra vez.

- Bueno amiguito - dice a R5 -, cubre mis espaldas.

Vex se dirige a la consola más cercana en silencio y tratando de mantenerse fuera de la visión de los operarios y manipula los controles buscando los amarres de la nave, pero no logra encontrarlos. Tratando de no tentar a la suerte vuelve al cuarto con R5 y se asoma de nuevo.

- No estoy programado para esto.

Mientras vas manipulando la consola puedes ver que los protocolos de seguridad están un poco por encima de tu programación; no obstante pareces encontrar lo que parece el sistema de amarre. Tienes varias opciones, pero no sabes cual es la apropiada para soltarlos... parece que no es la adecuada y puedes ver en pantalla un mensaje.

<< Códigos de acceso no identificados, introduzca si identificación >>

Al lado puedes ver un contador que marca 10* segundos... tiempo suficiente para poder volver con tus compañeros e indicarles que algo no ha ido bien del todo. Pasado ese tiempo todos podéis oír una alarma que suena primero bajo y posteriormente más alto. Parece que ha pasado del terminal en el que 41-Vex operaba a toda la sala...

- Creo que tendremos que recurrir al plan B - dice 41-Vex algo alterado -. O creamos una distracción fuera y lo intentamos de nuevo, o buscamos una nave alternativa. Quizás a la lanzadera imperial que acaba de llegar no les ha dado tiempo de activar los amarres.

Oskara escucha el mensaje de Vex por el comunicador, parece que las cosas no pintan bien.

-Pash, Lowhhrick parece que ha llegado el momento de soltar amarres entrando a sangre y fuego y toca decidir rápido- dice la caza recompensas a sus dos compañeros, mientras agarra correctamente la carabina blaster. -Si entramos por la fuerza podemos obligar a que suelten las amarras, pero está claro que los droides de la entrada y lo que nos ha indicado Vex vendrán a por nosotros.

El wookie suspira, aunque nadie lo sabe porque no se diferencia mucho de un gruñido cualquiera.

Coge sus armas y se prepara para entrar.

- GRRRRR UUUUAUUHHH OUUUUURRR [El tiempo que hubiéramos ahorrado si usáramos mi sistema desde el principio...] - comenta - RAAARRRHHH GOURURRRRR GRRROOOOAAAA? [Supongo que alguien tendrá que hacer despegar la nave en cuanto les obliguemos a soltar las amarras. ¿Pash podrías encarte?.]

Pash miró al principio con calma a 41-Vex, pero al empezar a escuchar la alarma, se puso un poco más agitado. Muy agitado de hecho, incluso revuelto.

—¿Pero qué has hecho, manitas de plata?

No le dio tiempo ni a poner los ojos en blanco, tenía que reaccionar. Oskara y Lowhhrick, como era de esperar, apuestan por dar caña.

—Vamos, que se acabaron las sutilezas. Pues vale, que sea rápido, a ver si al menos los pillamos por sorpresa.

Sacó la pistola y mostró a los compañeros que estaba preparado para dar guerra. Miró al wookie cuando le hizo la pregunta.

—Pfff *resopla*, por supuesto que podré encargarme, tío. Esa nave y yo ya somos amantes antes de conocernos.

Qué chulo había quedado eso, que bocazas.

—Y vosotros —señalo a Vex y R5—, poneos a mi espalda que va a haber jaleo. No tengo claro cual será la retaguardia en este caso, ya iremos viendo...

Parece que la vía sigilosa había llegado a un punto muerto, era hora de las tortas, y al parecer el enemigo ya estaba sobreaviso debido a la alarma que justo acababa de comenzar a sonar. Para cuando vais a entrar en la zona podéis ver a dos droides que con sus brazos armados preparados llegan uno por cada pasillo.

Nada más veros, la supervisora Brynn se dirige a uno de sus hombres.

- Encárgate a partir de aquí, ayudaré a los droides. 

Corriendo busca parapeto al igual que los dos droides, que parecen listos para comenzar un combate...

- AURRRHHGGGGG!!!! - grita el wookie al ver a la supervisora

Parece que los héroes entraron en tromba y a pesar del sonido de alarma lograron pillar por sorpresa el operativo que se estaba preparando para defender el lugar...

A Pash no le temblaba la mano por una buena pelea, pero tampoco es que fuese su pasatiempo favorito. Tampoco era amigo de matar sin una buena razón, así que buscó la manera de ponerse a cubierto, preferiblemente tras el marco de la puerta de entrada a la sala principal. En seguida disparó a uno de los droides, dejando a la supervisora para más tarde. Quien sabe, quizá se rindiese y no fuese necesario hacerle daño.

Su primer disparo pareció un tanto afortunado, pues no había apuntado demasiado bien y sin embargo alcanzó al droide en algún punto sensible. Tanta chispa lo delataba.

Oskara vio la descarga afortunado de Pash y por supuesto que ella no iba a ser menos. Con una sonrisa apuntó al droide y le disparó impactando en la cabeza del mismo provocando una mini explosión dejando inutilizado. La explosión hizo sobresaltarse a la supervisora perdiendo su posición a cubierto, facilitando los disparos del resto del grupo.

-Jajaja Pash vamos por la vía rápida - dijo.

Con un rápido movimiento cambió el enfoque de su carabina hacia la supervisora.

-Su turno, decida si quiere morir por la causa o rendirse para que podamos hacer lo que hemos venido a hacer. Si se mueve está muerta, ya ve que no somos de los que fallamos.

Nada más iniciar el combate, podéis ver como todos los operarios se parapetan bajo las mesas, parece que no cobran lo suficiente como para arriesgar sus vidas... o directamente no quieren hacerlo. Los dos primeros disparos son extremadamente certeros, haciendo que ambos droides caigan provocando un sonoro y momentáneo estruendo. 

La supervisora se queda petrificada y tan solo reacciona ante las palabras de Oskara arrojando su arma al suelo y colocando sus manos en alto.

- No me pagan tanto como para morir - Dice con un rostro asustado - 

El resto de trabajadores alternan sus miradas entre los droides, la supervisora y vosotros con el miedo siempre presente en sus rostros. Parece que no suelen tener visitas inesperadas...

-Perfecto me gusta que la gente tenga criterio a la hora de decidir si quiere vivir o morir. Colocaros todos en el centro de la sala. Y tú la supervisora ven a la consola de seguridad y suelta los amarres de esta nave. - dijo Oskara haciendo un gesto con la carabina blaster mientras seguía apuntado a la supervisora.

-Pash, Lowhhrick vigilad que nadie cometa un error, Vex y R5 venid para controlar que la supervisora suelte los amarres que corresponden. 

De forma discreta la cazarecompensas poner la carabina blaster en modo aturdir.