Partida Rol por web

- Vamos Gisele. Tú espera en el coche si quieres. Voy a echar un vistazo a ver si hay forma de acceder...

Me dirijo hacía la puerta de entrada y voy mirando por si detecto alguna cámara de vigilancia.

Está bien, te espero aquí abajo. Te dice mientras se fuma un cigarro apoyada en el coche. Dado que la puerta está cerrada de la portería, te esperas a que salga una persona y entras. Subes hasta el piso, el 2º 1º y ves que la puerta está cerrada.

Exactamente no estoy interesado en el campo de la robótica, pero mi padre si que trabaja en una importante empresa de tecnología, así lo conocí una vez, en una reunión que tuvo con él y otras personas. Mi padre quiere que me encamine por esta rama para entrar en su empresa.

Mientras me percato de que no hay cámaras de vigilancia, de que no hay alarma conectada, así de que no hay nadie a mi alrededor, saco mis herramientas con ganzúas. Intento abrir la cerradura ayudándome de mis herramientas, pero de momento se está resistiendo el cerrojo de la puerta.

"¿Mokuro me propuso para ayudarla?" Pensó sorprendido. Como Arma podría ocuparse del problema y capturar al culpable, pero los poderes de Hikaru no eran algo de dominio público. Aunque supuso que Mokuro estaría ocupado y lo propuso a él por su amistad. -Bien, te ayudaré.- Accedió.

Lo que la chica le dijo era sin duda perturbador y no podía permitir que algo tan horrible estuviese ocurriendo en el instituto. Además, parecía haber un sospechoso. -Quizás podamos echar un vistazo cerca del lugar donde atacaron a tu amiga.- Sugirió. -Bueno... si vamos a investigar sobre este suceso, no me vendría mal saber tu nombre.- Le dijo con tono dubitativo aunque con la intención de romper el hielo.

Hasta la tercera vez no consigues abrir esa cerradura. Aunque inicialmente no era difícil, te cuesta por la falta de práctica. Has roto dos ganzúas, pero te facilitan el acceso al encontrar el punto clave. Entras en el piso despacio, y puedes ver la disposicion de muebles, mesas y demás, pero no poseian objetos encima. Por el suelo había rastro de polvo y de que encima se habían depositado cajas. Sin duda la sensación era de que había cambiado de piso. La distribucion de la casa era estandar: cocina, comedor, cuarto de baño, dos habitaciones, galería y un pequeño balcón que daba a la parte de atrás.

Me llamo Ruri Kinomoto. Supuestamente ahora el profesor debe estar dando clases en el gimnasio con las de segundo. Podemos acercarnos. Siempre se suele quedar hasta el ultimo momento.

Mientras te lleva hasta el gimnasio, desde las afueras se puede escuchar las voces de diferentes chicas ejercitando, a la vez que el dando indicaciones.

Jess. Procura impulsarte más, así no llegarás lejos. La puerta se hallaba entreabierta, aunque mas cerrada con lo que el espacio no permitia ver mucho.

El joven estaba algo confuso. No obstante, causar buena impresión a la hija del jefe era importante.

- Ehm, claro, por supuesto ¿de qué se trata?

Dejas los utensilios y sales de la piscina para poder hablar mejor con ella. Me preocupa una amiga mía. Asustada, me comento que en su instituto hay alguien que está violando a compañeras, y se rumorea del profesor de gimnasia. Ella esta misma tarde tiene practicas con el club de gimnasia ritmica, y me temo lo peor.

Kaito abrió mucho los ojos al oír eso, pues no se esperaba para nada algo así. Aun así, tuvo que relajar el gesto, no debía dejar entrever toda la ira que le provocaba esa información.

- Eso, eso es terrible. Bueno yo, tengo un... conocido, que podría pasarse y vigilar que no le ocurra nada. Si te parece bien, puedo pedirle que eche un vistazo. Me debe un favor, y en caso de que se hubiese problemas, sabe solucionar esa clase de situaciones.

Observo minuciosamente el lugar en busca de alguna pista que pueda arrojar algo más de luz al asunto que nos interesa: La temida droga Forte.

Empiezas a deambular por la casa y no encuentras nada relevante hasta que pisas un pequeño papel. Lo coges y son unas anotaciones de un lugar algo alejado de Tokyo, en el mar y pone el nombre de Júpiter.

No me importa si quiere ayudar. Quizas sea mas capaz. Nos vemos a las 15h en esta direccion. Es la del instituto de mi amiga. Te entrega un papel con la direccion apuntada. Todavía estaba el sol en lo alto, eran mas o menos las 12:30h, asi que aún quedaban horas libres y tu jornada estaba acabando

Hikaru caminó junto a Ruri de camino al gimnasio. No le costó mucho darse cuenta de que todavía seguían dando clases al escuchar las arengas del profesor. -Bien. Acerquémonos y esperemos hasta que terminen. Seguramente será mejor que no nos vean para poder ver si ocurre algo.- Propuso el estudiante. -Aunque si todavía les queda tiempo, podemos echar un vistazo en el lugar donde atacaron a tu amiga.- Aquella alternativa dependía de si la agresión tuvo lugar en el vestuario o en otro punto de las instalaciones.

Me guardo el papel para analizarlo más adelante. Todo parece indicar que señala el escondrijo de esos pescaditos de Jupiter...-Pienso interiormente. Busco por si encontrase algún despacho o algo parecido donde pudiera encontrarse un ordenador o un portátil para seguir investigando...

-Muy bien Mokuro, pues si quieres acompañarme y presentarme a este hombre pues de acuerdo! Dije con enfasis, aunque en lo interior no me gustaba del todo la idea y me provocaba ciertos escalofrios, quizas Mokuro podria servirme de pantalla para hacer averiguaciones. Por lo pronto en cuando estuviera libre, trataria de sacar todo lo posible sobre la Japan Bakersville y Ryouto Murasaki.

Encuentras una habitación que se usa como despacho. Los archivadores como los estantes están vacíos. En la mesa hay rastro de que hubo un ordenador pero tan solo queda algunos cables y un router en el suelo. En un cajón hallas un par de facturas de Akai, pero la información es de piezas electrónicas y no esta relacionada con la droga ni nada. Las fechas son más de cinco años.

- Bien, entonces, se lo diré a mi amigo. Que tenga un buen día, señorita.

Respondió Kaito tras aceptar el papel, haciendo otra reverencia.

Cuando acabó su jornada, mientras se cambiaba, pensó en qué hacer con el tiempo que le quedaba antes de ir al instituto. Debería ir a comprar algo de ropa con parte del dinero que había estado ganando, pero en aquel momento no le apetecía nada pasar por una tienda. Buscar un nuevo lugar donde trasladarse tampoco era algo que le apeteciese demasiado. Con la capucha de la sudadera puesta, decidió dar un paseo mientras consideraba cómo abordar el asunto del instituto.

Debería ir como yo mismo, en lugar de como "mi amigo" Rever. A plena luz del día, llamaría demasiado la atención. Si soy discreto, podré acercarme y observar desde cierta distancia, listo para intervenir si hiciese falta. Tendré que separarme de Megumi para que no me vea transformándome, y es posible que deba improvisar algo. Tal vez sería mejor familiarizarse con el entorno antes de la operación...

Pensando esto, decidió acercarse a la dirección que le había dado Megumi. Casi faltaba una hora para la cita, pero si estudiaba el terreno de antemano, esperaba poder encontrar posibles puntos desde los que observar el gimnasio discretamente, y también posibles vías de escape, en caso de que tuviese que perseguir a un pervertido a la fuga, o en caso de que él miso tuviese que desaparecer rápidamente.

Aunque esto no termina de convencerme, mezclando el trabajo con mi... otra vida. Pero debo hacerlo.

La imagen de la muerte de Sakura volvió a su mente y tuvo que sacudir la cabeza para desprenderse de ella.

Debo hacerlo...