Partida Rol por web

Llegaba la fecha del aniversario y había hecho una reserva en un restaurante italiano, con vistas a los canales de la ciudad. Teníamos una mesa aparte reservada solo por esta noche.Con velas y toda ella preparada para la ocasión.

Fui con uno de los trajes armani que solía llevar a los grandes eventos.Y este lo merecía mas que ningún otro. 

Esperé algo nervioso, no sabia porque pero quería que aquella fuese una noche especial y que no acabara todo estropeado por cualquier cosa. Saqué el móvil y mire la hora. Había venido 30 minutos antes.

Era un poco exagerado lo sabia pero que mas daba.Había estado esperando mucho tiempo hasta esta fecha en concreto teniendo planes. Mire la carta preparada con multitud de platos a elegir.Y empecé a pensar en que tomaría para dejar de pensar en la cita.

Tenía los ojos cerrados mientras el auto recorría la ciudad, los tacones eran plateados, el vestido en tonos blanco y negro era nuevo, de gasa y me llegaba apenas un par de dedos por encima de la rodilla, Bryan no me había visto nunca con él, abrí los ojos depositando la mirada sobre mis uñas, y tome un profundo respiro ¿Por qué estaba nerviosa? No me moría de nervios ni nada por el estilo, pensé con cierta ansiedad, quería ver a Bryan y golpearle trescientas veces por no haberme escrito tanto como prometió, aunque sospechaba que lo abrazaría en cuanto pudiera.

Me lleve una vez más la mano para llevar un mechón de liso cabello rubio hacía atrás, pero resulto que aun no se habían escapado de su lugar, sonreí inconscientemente bajando la mano hasta la altura del pecho donde se sostenía el broche de la capa, la misma que me quitaría en la entrada, y tome un respiro, habíamos llegado, cinco minutos tarde.

Forme una sonrisa de disculpa mientras ingresaba al restaurante y el maître me guiaba a la mesa, la capa había sido entregada y yo no me moriría de frio sin ella, al menos eso esperaba, entonces lo vi, a él y a la mesa y olvide todo mientras entrabamos en su campo de visión, solo podía sonreírle y mirarle con todo el amor que le tenía.

-Bryan… 

Comencé a mirar la hora un tanto preocupado. Cuando por fin la vi llegar con el maître con aquel vestido y la capa. En ese momento una sonrisa encantadora apareció en mi rostro devolviéndole la suya.

Despedí al maître mientras me acercaba a ella. Acerque mi mano a la suya y con un gesto caballeroso bese su mano.- Cada segundo lejos de tu lado ha sido como una eternidad de agonía. Te eche mucho de menos- revelé sonriendo, mientras le preparaba la silla para sentarse.

-Con ese vestido realmente estás preciosa.-añadí con una reverencia- Aunque me atrevería a afirmar, que no hay vestido o cosa en este mundo, que pueda disminuir tu arrebatadora belleza.-indicándole que ella siempre estaba bella llevara lo que llevara.-Sobretodo cuando sonríes.-termine.

-Bueno cuéntame que fue de ti todo este tiempo, ¿Que tal fue todo?-dije esperando a escuchar sus aventuras y como paso todo aquel tiempo. Cuanto mas tiempo pasaba con Claire, mas quería saber de ella. Sus aficiones sus sueños, sus ideales.
Muchos decían que era una persona muy superficial, pero Bryan sabia que había algo mas tras aquellas apariencias y se moría por descubrir que anidaba en su interior. 

Era imposible perder la sonrisa ante su gesto y lo mire con los ojos presos de un amor y una ilusión imposibles de describir, le quería, y tal como había pensado olvide la angustia por no haber hablado con él tanto como hubiese querido.

Me senté en la silla, aceptando su gesto y escuchando con alegría sus palabras,  mientras acomodaba mi ropa.

-También te eche mucho de menos Bryan –conteste sosteniendo por unos segundos su mano y mirándole a los ojos con sinceridad –no podía dejar de pensar en ti –confesé con medio sofoco antes de sonreír y mirar hacía la carta.

Cosa que no funciono, porque sus palabras continuaron y ante su halago me sonrojo ligeramente, sintiendo que inevitablemente sonreía de nuevo.

-Gracias, Bryan… -baje los ojos un segundo y luego volviendo a mirarle continúe- tú también estás muy guapo, tu traje es exquisito.

Era extraño volver a verle y aun así decir frases que al final parecían estudiadas, le mire de nuevo sonriendo y pensativa extendí una mano hacía él, habíamos vuelo a vernos, ¿Qué importaba lo demás? mis vacaciones no habían sido agradables, salvo por el tiempo con Felicia, pero o me atrevería a decirle la verdad, así que dije la verdad... disfrazandola un poco. 

-Pues –puse gesto de recordar algo- ya lo sabes, estuvimos de paseo en el yate de mi padre… e hicimos una visita corta a la costa francesa… Norman y George –mis hermanos- se quedaron allí, al parecer vuelven a tener cambios de planes –puse una sonrisa irónica por medio de segundo recordando a las jovenes con quienes se habían perdidoantes de que mis ojos brillarán recordando algo más - Pase un tiempo con Felicia, también, aunque ella quedo más encantada con el mar y no pudimos ver el Partenón… luego creí que podía leer a Haruki Murakami pero me aburrí demasiado… no es el tipo de autor que me gusta–comente y suspire –realmente han sido unas vacaciones muy simples, te extrañaba mucho –confesé de nuevo y le mire- ¿y tú? ¿Cómo lo pasaste? Sin duda fue más ameno que lo mío –le mire esperando que me contara algo. 

Tus hermanos siempre igual, algun dia se meteran en problemas.-bromee. Lo mio mas aburrido. Estuve trabajando para mis padres en unos negocios que hacia mucho me pidieron pero nunca habia aceptado. 

Tenbia que convencer a unos tipos que vendieran  acciones de su empresa porque mis padres querian absorverls. Ya sabes nuevos mercados y capitales. Los tipos eran rusos con presuntos contactos con la bratva. Bueno presuntos no, alguno tenia tatuajes.

Costo 2 semanas pero acabe por convencerles. Sabes hay veces que pense que acabaria mal pero entonces venia  ami mente por lo que lo hacia recordaba tu rostro y ganaba fuerzas.-dije recordando aquel tiempo.- Y sonrei.

Entonces mi rostro cambio y se torno serio.
-Si te he llamado hoy aqui en este sitio es tambien porque no quiero que hayan secretos entre nosotros.  Menos con lo que vendra despues de lo que te dire.

Queria hablarte de tu amiga  Felicia. Se que siempre habeis sido muy intimas. Pero creo que te quiere mal ya sabes que yo soy mucho de no prejuzgar ala gente pero lo que te tengo que contar no me gusto nada.
En una de las veces que discutimos una noche hable con ella y pues se me insinuo y no contenta con ello me beso.-tome un poco de aire mientras que miraba aun lado con repugnancia recordando aquel suceso. - Por supuesto la aparte y me fui de alli.

Hasta ahora no quise decirte nada proque temia que la creeerias mas a ella que a mi pero este era el momento. En ese momento la mire a los ojos te juro amor que no fue cosa mia yo no la bese. Ella creo que te queria hacer daño.-dije seriamente

-Oh créeme, ya lo hacen… pero son tan encantadores que se les perdona todo –sonreí ligeramente, mis hermanos eran mayores a mí, y se habían metido en problemas desde que yo recordaba.

Ladee la cabeza cuando empezó a contarme sus vacaciones, sus padres ya habían logrado que el participara en los negocios, eso me sorprendió un poco y preocupo después, ¿Cómo se les había ocurrido que el tratara con esa gente? Le mire a los ojos continuando con su historia… hasta que dijo aquello… completamente enternecida por sus palabras le sonreí y alcance su mano.

-Me alegro mucho por ti, Bryan… estoy segura que tus padres están orgullosos de ti- logre decir superando la emoción.

Hasta que se puso serio y yo en reflejo separe mi mano de la suya y poniéndome recta, suponiendo que algo había pasado,  espere que hablará.

Perdí mi sonrisa a la tercera frase, y mis ojos comenzaron a abrirse un poco mientras el continuaba hablando, evidentemente perdido en sus propias emociones, mis labios temblaron solo un poco, no podía ser verdad… aparte los ojos de él, incapaz de entenderle ¿Por qué me contaba eso? “no quiero secretos entre nosotros” cerré los ojos mordiéndome los labios y sintiendo que la humillación era más de lo que yo podía soportar…

“no me merezco esto” pensé “no de ella” y entreabrí los labios sin emitir sonido y le mire con el rostro expresando un dolor imposible de definir.

-Oh Bryan… ¿Por qué me lo has dicho? –pregunte y agache la cabeza sin llorar.

Levante la cabeza lista para irme, sin embargo me encontré con su rostro y no pude menos que contestarme a mí misma, ¿Cuánto le había costado decírmelo y no esperar que no le creyera? ¿Cuántos besos habían sido realmente? ¿Por qué Felicia me haría algo así? ¿Por qué Bryan la buscaría sin romper antes conmigo? ¿Acaso habian tenido algo detrás mio y ahora Bryan se adelantaba antes de que Felicia me dijera nada acusándole? Era imposible, pero suponía que en medio de aquel dolor yo misma era incapaz de entender más que aquello.

Le quería… solo sabía que le quería.

-Yo… no sé qué pensar... Bryan te creo- asegure y sentí que me moría- pero te juro que no entiendo porque… ella haría algo así… ¿no la quieres verdad? –y en ese momento me di cuenta, lo que más temía en aquel momento, no era que ellos se hubieran enamorado, sino perder a dos de las personas más importantes de mi vida, en un solo momento. 

Levante mis cejas sorprendido despues de todo lo que le habia dicho ni siquiera parecia mostrar un gran enfado con aquella chica. Me levante de la mesa algo enfadado.

Veo que no reaccionas. Tu supuesta amiga ha intentado quitarte a tu novio. Y no de una manera muy elegante que digamos. Buscando hacerte daño.

Y solo se te ocurre preguntarme a mi si la quiero. Saque algo d emi bolsillo y lo puse encima de la mesa. ¿Por que crees que estuve trabajando para mis padres, mezclandome con la mafia rusa?Lo hice para ganarme el dinero para esto.- Abri la caja dejando a la vista un anillo de diamante de muchos quilates

Vine aqui pensando tan solo en pasar el resto de mi vida contigo y en esa vida no caben mentiras Claire, ni malas amigas.-recogi la caja y la guarde.

Tienes un mes para solucionar esto con tu "amiga" o ella o yo.-termine serio.

En esta vida solo he amado y solo podre amar a una persona Claire St. Cloud. Si ha estas alturas no eres capaz de ver en mios ojos que eres la mujer de mi vida la unica que he amado, es que algo falla aqui.-termine al final

Seguía fundida en mi autocompasión cuando note que Bryan se levantaba claramente ofuscado, cosa que me asusto un poco: la gente podía vernos… aun así eso no fue lo peor, Bryan comenzó a hablar sulfurado acerca de Felicia, de sus actos y yo me encogí en mi lugar… ¿Qué quería que hiciera? ¿Qué enfureciera contra Felicia allí en público dejándome a mí misma en ridículo?

A Felicia me unían demasiadas cosas, no todas buenas todo hay que decirlo, y sí, me sentía traicionada pero allí eso no era lo importante… ni que me sintiera traicionada por ambos, ¿al menos se había escuchado hablar?

Mis ojos se abrieron de par en par al ver el estuche, el anillo y la cara de Bryan expresando toda su frustración, sentí que el mundo me daba vueltas, le mire sorprendida y mis hombros empezaron a temblar, sentía que podía matarlo o abofetearlo, o algo peor… no podía hacerme eso… allí quién tenía derecho de sentirse ofendida, indignada y demás era yo.

Me quede en silencio ¿Solucionar con Felicia? ¿O Felicia o él? Eleve el mentón y le mire, con los ojos llenos de lágrimas sin derramar y un gesto de ira concentrado en el rostro, tome un respiro y le mire.

-Pide la cuenta… -solté con una voz que no parecía la mía y mirándole de manera extraña -pide la cuenta Bryan, no pienso tener esta conversación en un lugar público… Pero déjame decirte una cosa antes, yo te quiero, te he querido siempre pero harías bien en recordar cuanto demoraste tú en decirme lo mismo –mi voz era tan fría que por evidencia solo podía estar diciendo la verdad, pero una verdad que me hubiese gustado destrozar- Pero aquí... aquí lo que se tiene que solucionar es entre tres y no entre dos… y no me parece justa tu actitud… yo no he hecho nada para que me trates así… creo que si quieres que las cosas vayan bien entre ambos, si queremos… deberíamos pensar en que la otra parte puede estar intentando comprender lo que pasa con el otro–fue lo que dije y me levante de la silla cuan alta era antes de dar media vuelta y salir de allí, me temblaban los nervios y sabía que iba a terminar haciendo algo de lo que me arrepentiría luego… el sabor de la culpa me atrapo de manera inmisericorde por lo que había dicho, y parpadee para evitar el llanto … Definitivamente no me merecía aquello…

Los tacones de Claire sonaban en el elegante piso del restaurante, al llegar a la entrada el maître le entrega su abrigo, la princess lo coge con sus manos y mira a Bryan quien le sigue unos cuantos pasos mas atrás, ambos salen del lugar y la limusina de Bryan aguarda en la entrada, el chófer rápidamente abre la puerta y ambos suben en ella.

Bryan hace una seña al chófer, quien se encarga de volver al restaurante y pagar la cuenta dejando todo en orden, eso les daría tiempo para aclarar esta pequeña discusión.

Me acomode en el sillon cruzandome de brazos serio.Hice un gesto al chofer para que subiera la ventanilla insonorizada que comunicaba la parte de atras y la de delante del coche.

Bien ahora ya salimos del sitio. Creo que ya podemos hablar esto un poco mejor. No se que te pasa si tu hubieras venido ami y me contaras que Adrien se hubiera propasado contigo o te hubiera puesto un dedo encima, le habria cruzado la cara y dejaria de ser mi amigo. Pese a conocerlo de toda la vida.

Pero sin embargo el caso se da al contrario y la que se propasa es tu amiga Felicia y me preguntas si hay algo entre los dos? Y no haces nada?No te entiendo Claire. Parece que haya sido cosa mia o que tenga la culpa y el caso cambie porque yo sea hombre no entiendo.

¿Que tengo que aclarar yo con Felicia, que me acosara?Crees que en tu caso si alguien te tocara yo te enviaria a hablar con el?No entiendo nada

Tome un respiro profundo mientras escuchaba a Bryan hablar y parpadeaba un par de veces para no echarme a llorar, uní mis manos, para evitar hacer algo y le mire, agradeciendo de todo corazón que el chofer no pudiera enterarse de aquello

-Primero ¿Qué pensabas contándomelo en un lugar como ese? ¿Esperabas que me echara a llorar o a armar un escándalo? Yo… escúchame bien Bryan, tengo demasiada dignidad para eso

Segundo, no te estoy culpado de lo que paso con Felicia, pero tú no eres justo conmigo, cuando me lo contaste- detengo mis palabras y por primera vez mi rostro expresa todo el dolor que la noticia me causo, una mezcla de dolor indignación temor y humillación – yo no lo esperaba, me confundí –por un momento la voz me traiciona y parece que voy a llorar, pero logro controlarme, una vez más – yo no entiendo porque ella hizo lo que hizo… porque si era hacerme daño… -parpadeo y recuerdo con brevedad la amenaza de hace un año… Felicia solo… tratar de pensar con claridad en ese momento es difícil… ¿Acaso Bryan era solo su modo de demostrarme que estaba, como siempre, en ventaja? – yo sospechaba que ella no… -tomo aire con frustración y rechino los dientes comenzando a perder la compostura –Cuando me lo dijiste… tenía miedo de que ella ya hubiera comenzado a tener algo contigo… -baje la cabeza hundiéndome las uñas en la palma hasta herirme de verdad –Para demostrarme que era superior…

-Por supuesto que estoy molesta con ella, –me detengo y la recuerdo… Bryan solo la ve como una niña malcriada, pero yo sé más… sé hasta dónde puede llegar – estoy indignada, ¿Pero qué esperas que haga? ¿Qué puedo solucionar con ella? ¿Qué quieres que le diga? –Mi voz suena desesperada - yo no soy tan fuerte como tú 

Pensé en una persona calmada y adulta que sabría encajar y aceptar una noticia así sin armar un escándalo. Sin contar que estábamos en un apartado vip ambos solos.

Quería que la cena y la pedida fuera especial y pedir tu mano y después contarte todo hubiera parecido una maniobra o un engaño para prepararte o calmarte para la noticia. Y yo quería que antes de estar segura de dar ningun paso supieras y conocieras todo de mi sin secretos.

En cuanto a ella  es tu mejor amiga y esta claro que ella no me quiere ni esta interesada para nada en mi. No solo no te ha respetado, si no que se trata de algo premeditado si ni le llamo la atención si quiera. Lo hizo por lo que lo hizo, no se dejo llevar por ningún amor secreto ni nada. Eso esta bien claro.
Tome una de sus manos la que se clavaba las uñas hiriéndose. Y la sujete con delicadeza pero sin soltarla, pero sin hacerle daño.

Creo que no lo entiendes no quiero que nadie te haga daño, bastante me duele que yo te lo haya dicho contándotelo. Pero era lo mas justo-La mire a los ojos-Le tienes miedo lo se. Es la sensación que da a todo el mundo. Que puede tomar de los demás lo que quiere y hacer lo que le plazca. Pero no tomara nada de mi nada de nosotros.

Quiero que despiertes. Eres Claire St. Cloud, de los St Cloud, por tus venas corre sangre noble, en tu mirada hay un porte de la realeza de otra época. Por encima de ello has luchado durante años en este instituto para conseguir las mejores calificaciones, has bregado contra gente mas grande que tu que ha intentado hundirte y siempre te has mantenido digna y por encima de todos ellos.

Eres mas que una cara linda, o unos modales ricos. Eres la mujer que yo he elegido para pasar mi vida a su lado y yo no elegiría a cualquiera solo lo mas grande. Así que olvídate de todo ese miedo no tienes que reclamarle a nadie, saca lo que llevas dentro de una vez y no te dejes pisotear despierta Claire. 

Tu eres fuerte y si necesitas fuerza puedes contar conmigo, no estas sola y ya nunca lo estarás. Quiero que los demás te vean como yo te veo-acerque mi mano y acaricie su mejilla.-Hazte valer- termine.

Él era mi condena, ahora lo sabía, era la expiación que pagaba por ser quien era.... mientras le veía a los ojos y callaba las cosas que deseaba decir, nunca me entendería, ahora lo sabía, tenía su modo de hacer las cosas, como yo, para el implicaba enfrentarse contra todos para defender sus ideales, mi modo de ver el mundo era esperar que todos hiciéramos lo que el destino había ordenado para nosotros, yo me había condenado hace un año.

Lo había hecho porque la quería, porque le temía, porque no podría soportar la verdad en sus ojos.

¿Había valido la pena?

Decir que no quería que nadie me dañara era absurdo, él me había hecho daño toda la vida… siempre…

-Te quiero –murmure vacía, se lo había dado todo y él pedía algo que no podía darle, ser yo implicaba ser perfecta, alguien perfecta no reclama, simplemente existe – Ojala pudiera decirte lo que significan tus palabras para mí – dije y el mundo se acabó ante mis ojos escondiendo el rostro en su pecho, oh Bryan si supieras la verdad ¿sería capaz de decir lo que decias? Si supieras lo que podría hacer… hacerte.

Lo quería, la quería; Lo amaba, la necesitaba.

Los odiaba

Mantengo la cabeza agachada mientras continuo escuchándole, noto como se pierde el verdadero color del problema, aunque lo roza de cerca también, al tiempo que su mano sostiene la mía, con cuidado, pienso en retirarla, pero las palabras que siguen a su gesto me lo impiden mientras le devuelvo la mirada, la palabra me acongoja de un modo extraño “miedo” si, le tenía miedo y si, lo que Bryan decía de Felicia era verdad, ella tomaba sin pedir perdón... lo había hecho con todos... lo había hecho conmigo. 

A ella, a mí misma… A lo que el continuaba diciendo sin saber la verdad… Quizás no era culpa mía, yo no podía mandar en el modo de pensar de Bryan, y él… él era demasiado idealista, tenía una visión bastante dulce, bastante idealizada de las personas, del amor, de la fidelidad… de la sinceridad.

Le mire a los ojos como si le viera por primera vez y luego le abrace, escondiendo el rostro en pecho… Le amaba… La odiaba…

-Te quiero –murmure vacía –Ojala pudiera decirte lo que tus palabras significan para mí.

Hablare con Felicia

Cuando note como me abrazaba la tome con mas fuerza entre mis brazos ,reforzando ese abrazo que ella me daba y yo le correspondía.

Puse mis manos sobre sus mejillas y atraje su rostro hacia el mio. Me detuve unos instantes para comprobar aquel rostro del que me había enamorado tanto.-En eso sonreí y mis labios fueron al encuentro de los suyos.

Sus labios sabían al mas dulce néctar y ambrosía. Su contacto era como alcanzar  el mismo cielo con la punta de los dedos.  Nuestras respiraciones se acompasaban y se unían vibrando como en una perfecta melodía.
El corazón me latía violentamente pensando tan solo en que aquel momento se perdería, en que en unos segundos nuestros labios se separarían. 

Hubiera dado todo por unos momentos mas,hubiera entregado mi alma a los mismos infiernos porque aquel momento nunca muriera, hasta que por fin nos separamos, lentamente.
Mis ojos se encontraron con los suyos. Mirando aquellos mares infinitos en los que me perdería cual naufrago,sonreí mientras comente.  

-No hacen falta palabras para describir aquello que ambos compartimos, no existen palabras que puedan describir el amor.-dije embelesado con su mirada.-Este es nuestro aniversario, no quiero perderme de ti ni un segundo. Pasemoslo entero juntos.-dije

Quiero que tu rostro sea lo ultimo que vean mis ojos antes de dormir y lo primero en contemplar al despertarme. Aunque no hagamos nada solo estar cerca de ti. 

Cuando Bryan me besa hago el esfuerzo por corresponderle como siempre, aunque es posible que haya fallado, estoy un poco perdida en mis pensamientos y eso me impide responderle como antes, pero cuando nos separamos le sonrió suavemente.

Sus palabras provocan que le mire sin quitar mis ojos de él, queriendo comprenderle y no perder rastro alguno de ellas.

-No sé qué decirte... yo solo sé cuanto te quiero Bryan y que es posible que no quiera a nadie más que a ti, ojalá lo que dices se cumpla… pero ahora  –murmuro y me abrazo a él, ¿qué podíamos hacer ahora? Yo necesitaba pensar y sabía que Bryan sabía eso, tenía miedo de la conversación que tendría llegado el momento con Felicia, y todo lo demás – Podemos pasarlo juntos, pero no haremos nada Bryan- digo suavemente- necesito pensar y amo tu compañía, pensar a tu lado será sencillo… pero no haremos nada, no esta noche –termino tranquilamente de vuelta en sus brazos y con la mirada perdida… ¿qué podíamos hacer? ¿A dónde podíamos ir?