Partida Rol por web

Knights Code [+18]

Capitulo 4: Viejas Deudas

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09/08/2020, 21:31
Caos

 -No te preocupes por la tardanza, no esperaba que lo lograses pronto... -confesó mientras continuaba acariciando tu cabello suavemente, yendo entonces a poner la mesa donde les esperaba una comida de lo más... desagradable. Aunque ya se esperaba que te harías el duro y te lo comerías todo intentando no mostrar lo terrible que era aquel alimento, realmente acabó sorprendida cuando te acabaste el plato. -. N-No pensé que de verdad te lo comerías... -después de todo, ella no se comería ni la mitad del suyo: era sumamente desagradable...

 Seria entonces que te miraría con cierta sorpresa al ver como, luego de un tiempo considerable, decidías disculparte... En aquel lugar el tiempo era ciertamente relativo, y aunque en el mundo real una disculpa tras tanto tiempo luego de estar prácticamente juntos en todo momento seria una cosa, en un mundo donde el tiempo no significaba nada era una disculpa más.

 -Tranquilo, tal vez fui muy dura contigo... A ti te gusta... Recibir de chicos, ¿no...? -se atrevió a preguntar, suspirando levemente antes de apoyar un codo en la mesa y dejar caer la barbilla sobre su puño. -. Conozco mucho de ti, pero estar encerrada aquí hace complicado entenderte del todo... El jujin lobo era importante para ti, ¿verdad...? Lamento lo que le sucedió... Están pasando muchas cosas en la realidad, entidades antiguas que están regresando para reclamar lo que una vez fue suyo, seres que van más allá de la compresión de los mortales... Y tu, Fío, podrías ser uno de esos seres que decidirá el destino de la vida en Danhir... -mirando entonces su mano libre, empezaría a liberar una serie de hilos negros que, al verlos detenidamente, podrías ver a través de ellos a ciertos individuos, irreconocibles para ti y que seguramente escaparían de tu memoria luego de un tiempo, pero allí estaban. -. El caos me lleva enseñando visiones desde hace mucho tiempo... Una persona de la raza de los dragones de luz, un futuro rey que podría dominar como un conquistador, un demonio rojo y codicioso, un par hada que romperían las leyes universales... Nunca supe que podían significar estás personas, pero algo me dice que ellos serán quienes salven a Danhir de su destrucción, o pueden ser quienes la causen... -cerrando entonces su mano para retraer los hilos y guardarlos, se levantaría entonces de la mesa y haría un par de estiramientos. -. ¿Te sientes listo para continuar? Dije que te tendría aquí hasta que lograses cumplir la prueba...

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10/08/2020, 06:52
Alanís Cromwell

Alanís agradeció mentalmente que Cytla y sus formas agresivas y desconsideradas de  lidiar con la situación. No quería realmente dudar de las razones del  rey sobre reclutarla, pero comenzaba a serle tan impresentable para el cargo como lo fueron las hadas antes de pasar a ser criminales directamente. Pero...discutir o decir lo que pensaba realmente no hubiera dado lugar a nada útil.

-Entiendo, princesa...pase lo mejor que pueda dadas las circunstancias. Dudo que nadie espere que este es un local disfrutando una bebida, así que no creo que sea una mala idea.

Asintió a ambos, de forma apagada.

-No se preocupe, no me despegarse de esta habitación o del lado de su hermano.

Se mentalizó en exactamente lo que decía. No dejaría esa habitación, ni se distraería en su vigilancia. Deliberadamente, dejo el contestar a Arthas para el final, y lo hizo del mismo modo formal de siempre, esbozando una sonrisa serena, leve y cansada.

-No te preocupes, nadie está en problemas. Solo...muchas cosas han pasado. Alessandro, podría pedirte que te ocupes de que...el cuerpo del rey sea propiamente tratado? Es mejor que...sea movido con cuidado.

Le parecía ciertamente mórbido que el cadáver siguiera ahí, junto a todos. Nuevamente, se dirigió a su señor.

-Mi nombre es Alanís Cromwell. Haré lo mejor posible para contestar todas las preguntas que tengas y todo lo que este en mi poder para que tus memorias sean restauradas.

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10/08/2020, 19:31
Cytla Calatia

Desde luego estoy bien molesta con la situación, con todos los presentes salvo la princesa... sinceramente ahora estoy molesta por todo. Y escuchar a Glaius explicarles que es lo que le habría pasado al principe... básicamente lo mismo que dije yo, que la amnesia era o por la magia o por el trauma, me cabreó también -A ver si porque lo ha dicho otra persona diferente le hacen caso... ya se ve que a mi no...- musité entre dientes molesta.

Entonces, Glaius me miró preguntándome si ya había acabado de gritar, lo cual le respondí con un gruñido antes de escuchar a donde me quería llevar antes de a una habitación libre. A su oficina para que me pusiera el otro ojo... Genial, así podre ver la mierda de situación que es esta con dos ojos en vez de con uno... estupendo. Ya sabía donde estaba la oficina del nigromante, por lo que al decir que iriamos ahí primero me puse en camino sin esperarle a él en vez de al revés, supongo que me seguiría a mi.

Al entrar en su lugar de trabajo... desde luego estaba abarrotado, no se como no podía tener esto algo más ordenado. Estaba lleno de papeles, pociones... y eso que también estaba repleto de estanterías y mesas, ¿para que los tenía si todo seguía pareciendo caótico? Aunque también hice un descubrimiento curioso, y es que parecía que vivía también aquí... o eso parecía por el baño y la cama que parecían usarse para lo mismo que las mesas y estantes: desordenar cosas -No se como encuentras cosas aquí- dije mientras miraba alrededor.

Me indicó que me sentara en un lado, y eso hice dejándome caer sobre ella, mirando por la ventana mientras me explicaba más o menos todo lo que había investigado para hacerme el ojo... Antes de decirme que tampoco es que fueran métodos éticos... sino que además, sería doloroso implantármelo... Cuando me preguntó si quería hacerlo de todos modos, me mostré molesta -¿Ahora te interesa como me voy a sentir y te preocupas? Los sentimientos te aparecen cuando te da la gana...- le pregunté y comenté aún enfadada, sin poder evitar estarlo -Soy una caballero que rapiña cadáveres para vender sus posesiones... no es que la ética me preocupe demasiado- le dije llevándome la mano al ojo de cristal que me habían puesto -¿Y si aún dudabas en ponérmelo para que me traes a tu oficina?- le pregunté... Porque en caso de que le hubiera dicho que no, este viaje a su cuarto hubiera sido una pérdida de tiempo que me hubiera cabreado más todavía.

Me saqué el ojo de cristal, y con el agujero miré a los ojos de Glaius ya que no tenía la máscara tampoco -No quiero esperar nada... Me habéis fastidiado y humillado la primera misión en la que estaba al mando y la más dura emocionalmente que he llevado a cabo por tocarme personalmente, el rey ha muerto sin poder hacer nada, nuestros dos compañeros hadas secuestrados y sospechosos de matarlo y uno además sin pierna, los príncipes han perdido a su padre frente a ellos, el que supuestamente debía de ser el heredero esta amnésico y seguramente aunque no quiera deberemos coronar reina a Artanis...- enumeré todas las cosas malas que habían ocurrido hoy, las cuales no eran precisamente pocas -Si además voy a sentir un dolor insufrible, el mejor momento es ahora que tengo todo acumulado... no tengo ganas de dejarlo para otro día...- le terminé diciendo, esperando que empezara o fuera a buscar las cosas... y cuando se girase... -Gracias por preocuparte por mi y el ojo... que esté iracunda no te quita mérito... casi te da más...- balbuceé un agradecimiento en voz muy baja... Estaba que reventaba de la furia... pero no negaré... que tengo ganas de volver a tener dos ojos operativos, y eso será gracias a él.

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11/08/2020, 14:24
Faith Edrielle
Sólo para el director

Tras tal basto ataque lleno de determinación por mi parte, caí al suelo rendida y de rodillas. Había usado demasiado de mi poder mágico y eso en parte me agotó.

Las palabras de Ordinem sin embargo fueron de otra manera esta vez, palabras de aliento, palabras que me apremiaban al menos por mi lado a llegar más allá de donde podía llegar. Palabras que me indicaban que aún había posibilidades para mi, palabras que me confirmaban que aún no había acabado todo, y que no debía rendirme... Más al mismo tiempo escuché del propio Ordinem las palabras que más temía "Aún no ha acabado" y en mi pensamiento la idea de resucitar a Lily estaba mucho más lejos... Solo que al acabar de escuchar la frase levanté la cabeza para ver a mi doble rogando por ayuda.

De nuevo un shock me cruzó por entera... Era mi cuerpo así que en parte me hacía sentir fatal... Era como si estuviera sola sin nadie que pudiera ayudarme y me hizo encontrarme mal conmigo misma. Alcé mi mano muy dispuesta a curarla, es más, mi misma mano empezó a cubrirse con luz mientras las lagrimas corrían por mi rostro... Pero justo en el momento de lanzar el hechizo me detuve.

-¿Como lo haces? - pregunté entre sollozos - ¿Como puedes lidiar con decisiones tan duras? - y las dudas que se generaron en mi cabeza, empezaron a librarse como una afirmación de lo que sabía debía hacer, pero un bloqueo emocional que me impedía hacerlo - Se lo que debo hacer... p-pero... No puedo hacerlo - Me mentiría a mi misma si dijera que para mi es facil matar - Es superior a mi... - y era normal... No era Ordinem, ni había pasado por el suficiente entrenamiento como para valorar la vida y la muerte pese haber vivido cientas de ellas.

-¿Como se supone... que debo sobrellevar el eliminar a alguien? ¿Como acallo los sentimientos que me piden que la ayude? ¿Como calmo este sufrimiento que siento por pura empatia? - acabé preguntando a Ordinem finalmente sin llevar acabo ningún conjuro, mientras me veia a mi misma rogandome ayuda con los ojos.

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16/08/2020, 16:31
Director

 A diferencia de como paso con Alessandro, que ambos le apoyasen tranquilizaría un poco a la princesa, quién recibiendo la ayuda del caballero grifo se reincorporaría y avanzaría hacia la puerta.

 -Muy bien... Nos vamos... -declaró la chica mientras se disponía a retirarse a paso moderado con Baeric, ayudándose de esté para mantenerse en pie y no tambalearse demasiado.

 Sintiéndose en una situación donde sus pensamientos estaban demasiado distorsionados por todo lo sucedido, Alessandro decidió colaborar siguiendo las ordenes de Alanís, dirigiéndose hacia la cama donde descansaba el cuerpo del rey para cubrirle con una sabana.

 -Esta bien. Iré a por un grupo apropiado para llevar discretamente al rey a un lugar adecuado y cuidar su cuerpo. También enviaré pronto a un caballero diamante que pueda acompañarte y ayudarte si sucede algo -dicho eso, Alessandro también se dispondría a dejar la enfermería.

 A pesar de que no parecía del todo convencido con la salida de Artanis, Arthas pronto volvió a sonreír levemente cuando Alanís se presentó.

 -¿Alanís Cromwell...? Es un lindo nombre... -y como si fuese la primera vez que se hubiesen conocido, el príncipe extendería su mano hacia la chica con la intención de estrechar la suya...

Notas de juego

1/2

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16/08/2020, 19:27
Príncipe Arthas

 Una vez a solas, estrechases su mano o no, el príncipe se compondría en la cama tomando asiento sobre está, acomodándose de forma que pudiese apoyar la espalda en la pared detrás de él.

 -Entonces... Mi padre murió, ¿verdad...? -empezando con aquella primera pregunta, el príncipe se quedó viendo hacia ninguna parte en específico durante unos segundos. -. No lo recuerdo en lo más mínimo, pero... Siento que me debería sentir mal por su muerte... -regresando entonces su atención a ti, soltaría una pregunta que si te daría para responder. -. ¿Quienes más eran importantes en mi vida...?

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16/08/2020, 19:40
Princesa Artanis

 Una vez dejada la enfermería, la princesa iría recuperando las fuerzas poco a poco mientras caminaban por el castillo para buscar las túnicas, con las cuales podrían salir cubiertos a la ciudad sin llamar mucho la atención. Seria así como, tras una caminata que se podría considerar completamente silenciosa, terminarían en una de las tabernas de la ciudad.

 Sin pensarlo dos veces, la princesa iría a tomar asiento en una de las bancas de la barra, teniendo justo al lado otra donde podrías acompañarle.

 -Lo de siempre... -pidió la princesa al encargado, siendo que a pesar de que nadie parecía haberlos reconocido con aquella vestimenta aquel hombre parecía más que preparado para a ese tipo de visitas...

 Sin decir nada más, la princesa se mantuvo en silencio y con la mirada agachada, apoyando ambas manos sobre la barra mientras cerraba constantemente los puños sobre la misma...

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16/08/2020, 19:44
Glaius

 -Tengo un sistema... -fue lo único que respondió el nigromante respecto a su organización, empezando a rebuscar por el lugar lo que necesitaría para darte lo que te había ofrecido...

 Mientras rebuscaba entre los cajones y papeles, te dirigiría una mirada por encima del hombro al escuchar tu primer comentario.

 -No confundas las cosas, solo quiero evitar que el ojo sea una excusa para que explotes... -respondió cortante mientras continuaba buscando, dejando en el aire la pregunta que le habías lanzado respecto a haberte traído allí sin saber si lo haría o no.

 Finalmente, con una pequeña caja negra en sus manos, se voltearía para verte y escuchar lo que tenías que decir ahora que no llevabas le parche, dirigiéndote la mirada más fría e inexpresiva que podía tener...

 -Es lo más sensato y profesional que te he oído decir en todo el día... -respondió sobre tu decisión a hacerlo de inmediato, terminando de tomar un par de frascos con líquidos antes de escuchar tus palabras en tono bajo, provocando en él... nada, o al menos nada de lo que te pudieses percatar, pues sin decir nada al respecto regresaría contigo y dejaría todo lo que había traído sobre la mesa a tu lado: la caja negra, un par de frascos de cristal con un líquido morado y otro rojo, un pequeño espejo -. Comencemos...

 Nadie esperaría que colocarse un ojo nuevo seria cómodo o agradable, pero era inevitable no sentir un escalofrío al ver al nigromante abrir la caja negra y sacar de ella un ojo, de iris roja, en perfecto estado que descansaba sobre un interior acolchado y limpio, como si se tratase de una joya preciosa. Tomando el ojo únicamente con dos dedos, para evitar tocarlo más de lo necesario, Glaius lo pondría delante de ti permitiéndote ver la parte de atrás: aún tratándose de un nigromante, que una serie de delgados tentáculos empezasen a salir y a sacudirse detrás del ojo resultaba... desagradable.

 -Muy bien... -decidiendo prepararte, Glaius apoyaría su mano libre sobre tu rostro intentando mantenerlo lo más quieto posible. -. Tal vez gritar te ayude a resistir el dolor...

 Y aunque no quisieras, el no gritar ante aquella experiencia escapaba de las capacidades humanas, pues cuando Glaius acercase el ojo al agujero en tu rostro los tentáculos empezarían a introducirse lentamente antes de empezar a removerse ferozmente en tu interior, sujetándose también desde afuera permitiendo que Glaius lo pudiese soltar y que el ojo se empezase a acomodar por si solo, entrando poco a poco y acomodándose a través de los tentáculos que se ocultarían en el interior de tu cabeza, lugar donde también se empezarían a clavar y aferrar a quién sabe que tantas cosas. Luego de que el ojo hubiese tomado el lugar que debía, Glaius tomaría el frasco con el liquido rojo y vertería el liquido sobre el ojo, siendo que tras unos segundos dejarías de sentir los tentáculos removerse, como si finalmente se hubiesen detenido.

 Luego de lo que podrían haber sido unos de los segundos más dolorosos de tu vida, empezarías a recuperar el aliento mientras tu vista derecha, inicialmente oscura, empezaba a cobrar luz y color...

 -Uhm... -tomando entonces el pequeño espejo, Glaius lo colocaría delante de ti para que pudieses ver, con ambos ojos, como habías quedado. -. Intente que fuese lo más idéntico posible al que tenías antes -explicó, tomando con su otra mano el frasco con el liquido morado. -. Toma esto, es para evitar que te de dolor de cabeza o que los tentáculos intenten salir de tu cabeza...

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16/08/2020, 20:38
Baeric Griffith

Finalmente ambos terminaron marchándose del castillo vestidos con las túnicas y con la capucha puesta, buscando en el proceso una taberna en la que podrían descansar y…”desfogarse” un poquito. Estaba siendo un día muy duro para todos, sobretodo la princesa.

Así que una vez llegaron a una de las tabernas preferidas de la princesa, ambos tomaron asiento en la barra y ella pidió una copa. Baeric en un principio no iba a beber, pero supuso que estaría bien una copa, solo una.-Para mi otra.-Respondió con voz tranquila mientras veía de reojo como la princesa sufría en silencio.

El caballero halcón se sentía responsable por lo ocurrido, pero lo volvería a hacer.

-Prin…señora…no tiene que martirizarse por lo ocurrido, fue un desgraciado accidente.-Le trató de decir con calma, era difícil encontrar palabras que pudieran animar a alguien en un momento así, esa era la verdad.-Se hizo lo que se pudo…pero prometo que el culpable no se saldrá con la suya.-Confesó con seriedad dando un buen trago a su copa una vez la recibió.

-A lo mejor suena un poco “duro” en estos momentos…pero ha de hacer todo lo posible para mantenerse serena, ha de ser como su padre.-Comentó.-y apoyar a su hermano en momentos así, pero también…si usted cree que necesita gritar, golpear o hablar, aquí tiene a un fiel servidor.

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17/08/2020, 03:41
Ordinem

 Aunque Ordinem intentaba mostrarse lo más neutral mientras veía cual seria tu última acción, que te detuvieses a instantes de lanza el hechizo curativo provocaría cierta sorpresa en el ente de aquel mundo.

 -Uhm... -observando como aquella situación empezaba a romperte, Ordinem se quedó pensativo durante unos segundos antes de responder desde su posición. -. No puedes -respondió bastante seguro. -. No recuerdo si ya te lo mencione antes, pero el caos y la creación no son opuestos solo de ambos, si no de ellos mismos también: el portador de la creación está condenado a acabar con lo que ama, y el del caos a amar lo que desea hacer desaparecer... Pero esto no significa que no puedas ayudar -haciendo una leve pausa, el chico descendería hasta colocarse nuevamente detrás de ti, apoyando sus manos sobre tus hombros para sujetarse mientras el resto de su cuerpo flotaba hacia arriba, manteniendo su rostro junto al tuyo mientras miraba a la copia. -. No existe poder capaz de salvarlos a todos, y eso es algo que debes aceptar... Gente muere a diario por distintas razones, y sin importar que tan fuerte te hagas no podrás cambiar el ciclo natural de la vida y la muerte... Por eso debes estar preparada no para decidir a quién matar, si no a quién no salvar... -seria entonces que, con una de sus manos, señalaría a la copia para que centrases tu atención en ella: en ese momento ambos serian testigos de como tu imitación hacia una expresión de molestia segundos antes de voltearse en el suelo y empezar a arrastrarse con las manos para alejarse de ti, algo difícil teniendo en cuenta que de por si las hadas no tenían mucha fuerza en los brazos... -. Esa copia... Es una representación de ti, de mi, de la luz... Todos estos años has querido aprender sobre tu magia y familiarizarte con ella, llevarte bien con la luz, trabajar juntas para salvar las vidas de las personas, convencida conque la luz resolvería todos tus problemas y haría del mundo uno mejor... ¿Pero alguna vez te has parado a pensar si la luz quiere hacerlo...? -fugazmente, la imagen de la copia lanzando el cañón de luz luego de que le curases paso por tu mente, recordando como se había aprovechado de ti para acabarte... -. La luz nunca ha querido ser usada por nadie para nada, pero los portadores siempre caen en su trampa al pensar que son ellos los que tienen el control...

 Perdida en las palabras de Ordinem, serias capaz de percatarte como desde el suelo empezaban a emerger una serie de tentáculos de luz que lentamente escalarían por tu cuerpo... Pero no te sentías capaz de hacer nada más que seguir mirando a la copia alejarse en vano.

 -El caos es un tsunami que arrasa con todo a su paso sin dejar rastro, pero la luz es igual o más temible cuando se le conoce... Es una suave marea que va subiendo poco a poco, engullendo todo lo que se encuentra hasta atraparlo en sus profundidades, preservándolo en el mejor estado únicamente porque sabe que ya está bajo su control... -haciendo otra pausa, Ordinem se separaría unos instantes de ti mientras los tentáculos seguían subiendo por tu cuerpo como maleza hasta dejar tus brazos, piernas y parte del torso atrapados. Llegados a ese punto, Ordinem volaría hasta quedar delante de ti, cubriendo la visión que tenías de la copia justo cuando está no pudo arrastrarse más y cayó rendida al suelo -. La luz, la creación, mi persona... No nos podría interesar menos tus intenciones: si has recibido mi ayuda hasta ahora es porqué así lo he querido... Pero parece que, al igual que el resto, no eres más que un polluelo incapaz de romper el cascaron...

 Con una leve sonrisa en el rostro, Ordinem sujetaría suavemente tu rostro con la mano derecha para poder acercarse y lamer un poco tu cara.

 Mostrando entonces una mirada de seguridad y superioridad, Ordinem te sonreiría nuevamente.

 -Ahora que sabes todo eso... ¿Que piensas hacerme, portadora...?

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17/08/2020, 12:54
Faith Edrielle
Sólo para el director

A pesar de buscar una forma de avanzar, la respuesta era la que me pensaba... Más mística de lo que podía desear entender, pero con palabras claras y directas. Miré pues a mi doble pensando que podría pues ayudarla por esta vez, aliar la luz a mi misma, volverme una con ella, pensando que quizás así me ganaría el honor de ser la portadora de pleno derecho así como su conjuradora.

Pero la siguiente revelación de Ordinem me detuvo de nuevo... La confusión volvió a mi pensando de nuevo si eliminarla o curarla. ¿Por qué era tan dificil una simple decisión? Entonces pude observar tras sus palabras tan certeras aunque crudas, como mi copia ya estaba reaccionando ante la respuesta, sin siquiera estar segura yo de cual era. ¿Debía destruirla para visualizar los posibles escenarios futuros que ocurrirían y saber que decidir y como reaccionar? ¿Era una preparación para no sentirme tan mal conmigo misma? O quizas... Una decisión donde ninguna respuesta es correcta, o erronea... Era tan solo el ciclo natural de las cosas, como bien decía Ordinem.

Más revelaciones salieron una tras otra, y entre ellas una que no quería creer, pero tanto me había ayudado Ordinem hasta ese momento, que aunque pareciera una muñeca por la poca fuerza que me quedaba, me afectó en gran medida, pues al fin sabía la gran verdad de mi poder: Estaba sola... Por mucho que Ordinem me ayudara a aprender sobre mi poder o sobre mi misma... A pesar de que tuviera seres queridos que me ayudarían en cualquier situación... a pesar de que volviera del contrario la opinion de un emigo volviendolo un poderoso aliado... A pesar de que lo tuviera todo, no tenía a nadie, más que a mi para lidiar con el poder de la luz. Ni siquiera tenía a mi propio poder para ayudarme. Si quería lograr ayudar, debía ser yo, y solo yo, quien diera los pasos sola, ante aquellos problemas que quería solucionar, y solucionarlos por mi misma, con mi propio ser, con mi propia luz.

Justo en ese momento mis ojos cayeron en un vació enorme mientras aquellos tentaculos empezaron a agarrarme y sujetarme. A pesar de que Ordinem seguía hablando y explicandome cosas que empezaba a entender, había solo una frase que se repetía en mi mente una y otra y otra vez: "La luz nunca ha querido ser usada por nadie para nada" sin parar como una tortura mental.

Así pues como ahogandome en aquella marea apretada cada vez más por aquellos tentaculos, entendí tarde todo lo que me intentaba enseñar Ordinem, todo para lo que el "quiso" ayudarme... Todo lo que significaba mi propio poder, y el pago tan grande que conllevaba ser tan solo su portadora... Ya era el final...

Pero...

Algo no cuadraba. La luz, Ordinem, mi copia, yo misma... No cuadraban. Lo único en común era una única cosa: El poder de la luz. Cada cosa en este mundo contenía en su interior luz y oscuridad por partes iguales y aunque fueramos seres poseedores del poder de solo una de las dos partes... Eso no quería decir que fueramos iguales a todos los mismos que controlaban el mismo poder.

Y ahí lo ví claro.

Después de varios seguros en donde parecía que me había dado por vencido ante Ordinem, empecé a reaccionar, encogiendome en mi misma, pues sentía una enorme fuente de poder creciendo en mi interior. No sabía nada de la luz, y a poco que entrenaba junto a Ordinem iba entendiendo más de ella. Empatizar o no, ahora sabía que tenía que hacer.

Estirandome del todo lanzando pues así un gran pulso de luz desde mi interior quise deshacerme de mis ataduras, pues si había algo que me distinguía del resto, era que no pensaba caer en la trampa de la propia luz. - Mentira - dije entonces entre toda la luz que me recubría así como cualquier humo originado por la destrucción de los tentaculos.

En un parpadeo me transporté a la espalda de Ordinem sumida en un Summun puro de luz en el cual mis ojos y mis alas ya se habían vuelto uno con la propia luz. Mientras tanto de mi mano, llevada hacia su cuello, surgiría el exceso de magia que de mi salía generando pues una cuchilla, amenazante, pero sin llegar a atacarlo. Me olvidé incluso de mi copia, pero estaba atenta por si intentaba algo

-¿Por qué quieres dices? No obstante tu tienes tus propias intenciones ¿No es así Ordinem? Como bien has dicho, a la luz no le interesan mis intenciones, ni tampoco las tuyas. Solo le interesa ser libre, capturando a los que intenan usarla y someterla a sus propias intenciones cuando de tanto usarla, la propia luz se ha sobrepuesto a esas personas, esos portadores, capturandolos en una prisión de la que jamás podrán escapar. Una prisión... muy adecuada, de la cual el tiempo no es consciente, y el espacio es infinito, pero en cuyo interior no hay ninguna salida. - hablaba obviamente del propio lugar en el que estabamos: El mundo de Ordinem... Pues cuando si no había entrado yo a este mundo, sino cuando la magia de luz me había superado. Pero aún no del todo.

-No ayudas a los portadores porque quieras... Los ayudas porque aún albergas una esperanza de escapar de la prisión en la que la propia luz te metió en un inicio. ¿Verdad? - Calmandome pues así, la luz que expulsaba comenzó a rebajarse poco a poco, volviendo a mi forma natural - Yo... No me importa que la luz me use para sus propios fines, y repitiendo lo tu me has dicho... Me dan igual los intereses de la propia luz en todo esto... Pero si soy una portadora de la luz, jamás me dejaré caer en esa trampa, y si caigo saldré de ella. Pero no podré caer si soy yo la que me ofrezco a ser usada para vuestros fines, si a cambio puedo cumplir los mios.

-La luz... tu... y yo... - Me giré un poco para lanzar pues la luminaria hacia mi doble - Seremos la misma representación, pero somos distintos. - Alzando pues la mano misma con la que lancé el hechizo se la ofrecí a Ordinem - Sigue ayudandome, pues ya va siendo hora de que yo te ayude. - Finalmente confesé del todo con las ideas que ya tenía en mente. Iba a seguir haciendo lo que creía oportuno, aunque fuera un error, aunque tuviera que hacerlo sola... Pero iba a ayudar ahora a quien siempre había estado solo a no controlarme, sino a dejar que me use para liberarse de su yugo...

¿Eso significaría que su yugo pasará en un futuro a ser mio? No me importaba si a cambio cambiaba el mundo... Si a cambio me convertía en la portadora que debía ser.

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18/08/2020, 04:07
Cytla Calatia

Cuando dijo que no me confundiera con su preocupación y me dijo lo de que no quería que explotará de rabia por el ojo, claramente mi cara se tornó -Perdon es cierto... Casi pienso que te preocupas por mí... No volverá a pasar... Pero tampoco explotare mientras me hurgas el ojo... Porque no quiero hacerme daño, no pienses que lo hago porque te fuera a molestar- le respondí a Glaius con seriedad... Dejando claro al igual que el que si me contenía no era por el sino por mi.

Y lo que dijo de mi sensatez también me hacía fruncir el ceño -Me alegro de que te parezca sensato que me siente como una mierda y no me importe sentirme peor- la ironía con la que lo dije fue más que notoria. Vi el ojo con curiosidad... Sin demasiado asco ni repelús... Supongo que cuando le abres el estómago a un cadáver enemigo para recoger los dientes de oro que le has hecho tragar... Pocas cosas te asquean -¿Como lo has hecho, creado desde cero o lo has sacado de un cadáver y lo has trabajado?- no pude evitar preguntar con curiosidad... Seguramente poca gente le preguntase por las cosas que tiene que hacer para crear algo. Aunque los tentáculos moviéndose si que me hizo arrugar el ceño -¿Porque todo lo nigromantico tiene tentáculos? Trabajáis con muertos, no pulpos...- pregunté dejándome sujetar la cara por Glaius mientras me acercaba el ojo a la cuenca... Sugiriéndome que gritara para atenuar la experiencia... A lo cual suspiré suspicaz -Hmm... ¿Acaso el dolor me dará opción a no gritar?- le pregunté dudosa sobre ello... Pero sin miedo por lo que fuera a hacer ahora.

La experiencia fue... La cosa más desagradable y dolorosa que pudiera imaginar... Lo único que podría imaginarme que fuese parecido sería tener un Kraken tratando de comerse mi cerebro mientras estaba viva -¡AHHHHHHH!- y claro que grite de dolor... Incluso Glaius seguro que lo haría. Y puede que lo hiciera, porque incluso si él no quería... Yo llevé mi mano para coger la suya, agarrándola y apretándola como lo hacen las embarazadas en los partos para exteriorizar también dolor...

Solo después de que me echase el líquido rojo y dejara de sentir movimiento en mi cabeza le solté la mano... Y me quedé jadeando de dolor, aunque recuperándome poco a poco -Joder... Ha dolido más cuando entró que cuando salió...- dije mientras jadeaba... Aunque entonces... No pude evitar reírme un poco -Je... Eso fuera de contexto suena fatal...- terminé diciendo con una leve risa... No sé si Glaius lo habrá entendido. Y la verdad es que de ira ahora andaba algo mejor... Supongo que porque después de sufrir tal cosa no tienes ganas de cabrearte. El nigromante me puso un espejo enfrente para poder verme la cara... Y me vi el ojo mientras le escuchaba. Me quedé en silencio mirando el ojo con seriedad... Hasta que me tome ese líquido violeta de un trago como me dijo para evitar que me explotará la cabeza. Solo entonces hablé -El mío no tenía tentáculos que yo supiera... Pero si ve como el original, es un buen trabajo...- le fui admitiendo al nigromante, antes de quitar la mirada del espejo y mirarle a él a los ojos -Gracias... Realmente no tenías porque hacerlo y... Se que no te importara nada pero realmente significa mucho para mí...- le terminé reconociendo al nigromante... Esta vez a la cara, molesta de tener que reconocerlo, pero a la vez sincera y algo sonrojada. Me había devuelto la visión... Y no solo eso, sino los ojos que según mamá le recordaban a mí padre... Eso era lo que realmente me hacía estarle agradecido... Aunque también podría verlo como una compensación por haberse equivocado tanto dando esas estúpidas órdenes a Muramasa, y así no estar tan agradecida, ni le debería una.

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18/08/2020, 22:52
Fío Edrielle
Sólo para el director

Se quedó mirándola sin saber qué responder a lo que le estaba planteado. Había tenido algunos  enamoramientos tontos en el pasado pues 210 años daban para mucho, hombres y mujeres, le era indiferente pero... ¿Recibir? Jamás lo había planteado, o más lejos que había llegado con alguien era con Caos quien lo había tomado a la fuerza desde el inicio.

-Pues... No lo sé, la verdad... Fue a buscar en su pecho el medallón donde había metido una foto de la familia de Feris junto a una de su hermana, pero no encontró nada. Agachó la cabeza, maldiciendo el momento en que dejó todas sus pertenencias en la tienda de Cytla, echando de menos poder ver los rostros de aquellos que tan importantes habían sido y eran para el. Cerró los ojos suspirando hasta que sintió el movimiento de Caos y al mirarla pudo ver en su mano como se creaban hilos que formaban individuos que no conseguía distinguir hablando hasta que cerró la mano e hizo desaparecer los hilos, haciendole la pregunta.

-Si, sigamos... Me dará igual tardar años, conseguiré lo que otros no lograron con su dominación... Yo... Abrazaré tu caos con respeto, es lo único que funciona, a la larga... Imponer algo jamás sale bien, es una lucha constante de poder y no deseo luchar más contra ti. Le sonrió y se colocó en posición, podía comportarse muchas veces como un niño pero era innegable que tenía 210 años a sus espaldas, y tras los últimos acontecimientos lo estaba demostrando con creces. Comenzó a lanzar de nuevo bolas de caos, así como ella le había enseñado, acercándose poco a poco a su meta, a paso lento pero con seguridad.

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24/08/2020, 01:54
Alanís Cromwell
Sólo para el director

-Ahora mismo no necesitas presionarte en sentir nada que no nazca naturalmente.

Alanís abrió la boca un segundo y volvió a cerrarla. Sentía que estaba siendo demasiado familiar y debería hablar de forma más distante y formal. Pero...a la vez no le parecía que justamente ahora eso fuera lo que el príncipe necesitara. Quizá se sintiese más aislado aún de lo que su condición lo hacía ya.

-La muchacha que se acaba de ir es su hermana, la princesa Arthanis. Es una gran guerrera de temperamento firme. Algún día es probable que lideres ejércitos con su fervor y proeza marcial. Te quiere muchísimo, pero ahora mismo necesita espacio para si misma. 

Se quitó del camino entre la vista de Arthas y la mujer en la otra cama.

-Esta es tu madre, la reina Freya. Es ambas, poderosa y benevolente. Es conocida por su fuerte concepto de unidad...cree firmemente que en la unión está la fuerza.

Estoy segura de que se sentirá algo triste de ver lo fragmentado que está el castillo.

No podía engañarse y decir que no estaba tremendamente enfadada aún por la actitud de Cytla, pero ahora mismo le bastaba con que se hubiese quitado de su vista. La única razón por la que no le había dicho que no merecía ser caballero, era porque no iba a poner en duda el juicio del rey que la eligió para el cargo.

-Ellas y tu padre son tu familia más cercana. Yo soy tu guardia personal, se me asignó recientemente...mi labor es mantenerte seguro, y seguirte incluso hasta el fin del mundo. No diría que figurara como alguien importante, pero ciertamente tiendo a estar cerca.

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27/08/2020, 23:45
Princesa Artanis

 Inicialmente, la mirada que recibirías por parte de la princesa solo podría expresar molestia debido a tus palabras...

 -¿Accidente? ¿De verdad te refieres a lo que sucedió como un accidente? -estaba claro que Artanis veía todo aquello como un atentado directo, algo hecho a propósito con el fin de acabar con el reinado de paz que había gracias a la familia Aztora... -. Estoy segura de que así será... Yo misma me aseguraré de que esas hadas obtengan su merecido...

 Para tu sorpresa, lo que se debían ser una par de simples copas de licor para pasar el rato llegarían en forma de dos jarras de cerveza a rebosar, siendo la princesa la primera en tomar la suya para beber un largo sorbo: estabas encubierto en un mal momento, era claro que la imagen no era su preocupación en esos momentos...

 -¿Como mi padre...? Es más fácil decirlo que hacerlo... Crecí preparándome para ser una caballera digna de proteger y servir al próximo rey, pero... La muerte de mi padre, la perdida de memoria de mi hermano... Acabaré sentada en ese trono, me guste o no... -a diferencia de lo que uno esperaría, la princesa no se veía precisamente entusiasmada por la idea de convertirse en reina, siendo que aún conservaba esa mirada de molestia y decepción mientras continuaba bebiendo la cerveza. -. Bah... -dejándose llevar por la bebida, había logrado acabar la jarra en cuestión de segundos, siendo que con el segundo sorbo se le había pegado hasta beber la última gota. -. Otra... -exigió al hombre tras la barra,dirigiendo nuevamente su mirada hacia ti con una expresión ligeramente más relajada... -. ¿Que harías tú en mi lugar...?

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28/08/2020, 05:30
Glaius

 Su expresión ocultaría cualquier interés sobre tus motivos para hacer las cosas o la manera en la que te tomabas sus comentarios, siendo que continuaría en silencio hasta que mostraste interés en los orígenes del ojo...

 -Tengo una colección de partes que he logrado mantener en buen estado gracias a un proceso para evitar su descomposición... Solo tuve que hacer algunas cosas para adaptar el ojo para ti y que sirviese sin tener efectos secundarios... -explicó, siendo que confirmaba la teoría de que el ojo había salido de alguien más, alguien que ya no lo necesitaba... Pero por más que tu curiosidad había servido para hacerle hablar un poco, el hecho de que mencionases lo de los tentáculos causaría que recibieses su mirada fría tan común; era difícil decirlo cuando era tan inexpresivo, pero sentías que el comentario no era de su agrado... -. Si no te agradan los tentáculos entonces no deberías interesarte nunca en la nigromancia, es una de las cosas más básicas y menos... dañinas para la mente...

 Seria entonces que Glaius acercaría el ojo mientras te advertía sobre el dolor y sobre lo que podías hacer para resistirlo, siendo que ante tu última pregunta guardaría silencio durante un par de segundos antes de responder de forma seca.

 -Por supuesto que no... -sentenció antes de comenzar con el proceso de colocarte el ojo...

 Dispuesto ser lo más rápido y firme posible, Glaius apretó un poco el entrecejo mientras con su otra mano se aferraba a tu rostro, claramente intentando que no te movieses demasiado, pero ni él hubiera esperado que en lugar de simplemente gritar y ahogarte en el dolor terminarías sujetando su muñeca de esa forma... Podrías notar entonces como algunas venas se le marcaban en la frente a la vez que sus ojos se ponían en blanco; no por el dolor, si no por la indignación de que te atrevieses a hacer eso...

 Finalmente acabaría con el sufrimiento de ambos, o al menos el tuyo, siendo que escucharía lo primero que se te ocurrió decir mientras pasaba a hacer unos ligeros estiramientos con la muñeca que le acababas de apretar...

 -¿Enserio? ¿Un chiste con doble sentido...? -parecía que para el nigromante no era el momento más adecuado, aunque no parecía que te fuese a criticar por ello. En su lugar, te daría lo que necesitarías para asegurar tu seguridad luego de haberte colocado el ojo, esperando que con eso te pudieses retirar sin darle más problemas... Pero terminaría escuchándote nuevamente -. No tienes nada que agradecerme... Tal vez fui un poco duro contigo... No eres precisamente la mejor imagen de una caballera, pero no soy alguien que deba cuestionar la decisión del rey de haberte dado el cargo de diamante... Solo te recomendaría buscar una manera de liberar estrés sin que tenga que perjudicar a los demás: todos los caballeros llevamos un gran cargo sobre nuestros hombros, y mucho más en estos días tan caóticos, y eso es precisamente el motivo por el que los demás no tenemos que tragarnos los problemas de los otros... Si necesitas que alguien te escuche, pues busca a ese alguien y habla: no esperes a que todo se te acumule y explotes cuando todos hacen el esfuerzo por no hacerlo... -habiendo dicho eso, terminaría por suspirar antes de dirigirse hacia la cama de la habitación, donde empezaría a remover las cosas que habían encima con el fin de abrir espacio. -. En fin, ya tienes tu ojo, ya puedes retirarte... Te recomendaría venir seguido para hacerte seguimiento, solo por si acaso...

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28/08/2020, 16:10
Cytla Calatia

La verdad, la curiosidad ayudaba en parte a calmar el enorme cabreo que tenía, y las respuestas y algunas reacciones de Glaius me la estimulaban -¿Como los conservas? ¿Frío, vacío, magia...? ¿Y que cosas adaptaste, y como?- le pregunté al nigromante, pensando en que cambios le habría hecho al ojo y como... Si, con la idea de ver si algo de eso pudiera adaptarlo a mi sistema de negocio y "ampliar mercado". Entonces... curioso, parece que el comentario de los tentáculos no le agradó... quizás le había tocado el corazón tentacular que tiene -No he dicho que no me agraden los tentáculos, aunque la idea de tenerlos dentro de un poco de grima; pero si es lo menos dañino tampoco me quejaré- le respondí al nigromante de forma seria y sincera -Te he preguntado que tiene que ver la nigromancia con ellos. Es decir... puedo asociar nigromancia con muerte, vida, cadáveres, almas, huesos... quiero saber porque los tentáculos también son parte de ello- le terminé diciendo con respecto a ese tema a Glaius.

Al menos eres sincero- dije cuando reconoció que me iba a doler una barbaridad salvaje haciendo que gritar no fuera una opción sino algo inevitable. Y mientras me retorcía de dolor, parecía que él también estaba sufriendo por culpa de la muñeca que le estaba constriñendo como método de exteriorizar mi sufrimiento junto a los gritos... Aunque en su caso parecía más que le dolía más el simple hecho de que le estuviera tocando que el daño que le podría estar haciendo.

Después del dolor y haber soltado aquel comentario, parece que Glaius lo había pillado al final -Te juro que lo dije sin pensar... y me refería al ojo...- le dije simplemente mientras terminaba aquella leve risa, antes de tomarme aquel brebaje para asegurar el nuevo ojo -Y dicen que la risa es la mejor medicina... podrías probar si te he hecho daño en la muñeca. Perdón por agarrarte...- terminé diciendo sobre ese tema, disculpándome también por la muñeca que le había agarrado. 

Entonces, escuchó mi agradecimiento y me lo respondió diciendo que no hacía falta, incluso reconociendo que había sido un poco duro conmigo. Sobre lo que dijo que yo no era la mejor imagen de una caballera... -Le dijo el que trabaja con cadáveres a la que roba a los cadáveres...- dije con algo de ironía, aunque lo que dijo luego, asentí dándole la razón -Ni yo tampoco debería... perdón por lo que te dije fuera- me disculpé con él por lo que le dije cuando comentó que le devolvieron el puesto de caballero diamante rojo.

Lo que acabó diciendo luego, sobre que debía encontrar la manera de liberar estrés para no explotar y estresar a los demás, ahora que estaba más calmada, asentí en silencio, dándole la razón mientras continuaba escuchándole... que pena no poder hacer lo mismo que cuando trabajaba en la calle para desahogarme. Escuché como sugería que buscara alguien con quien hablar para que todo no se me volviera a acumular, y si, tenía razón, ayudaría... -Las penas pesan menos si se comparten...- dije después de escucharle por lo bajo, aunque luego suspiré desviando la mirada -Pero he hecho cosas bastante malas y vivido cosas bastante duras... que dudo que alguien quiera escucharlas, ni yo compartirlas... ni tampoco abundan voluntarios...- terminé diciendo. El problema mío... es que no tenía alguien con quien pudiera compartir lo que sentía, ni en quien confiar tanto para hacerlo... Porque con mi madre no puedo hablar de las cosas que hice durante mi "época oscura", con mi maestra no puedo desahogarme del todo por culpa de la sombra de Jonathan,... y el rey que sabía todo de mi y aún así me hizo caballera diamante esta ahora muerto.

Entonces, vi como Glaius empezaba a quitar cosas de su cama -¿Te vas a dormir ya en la cama?- le pregunté después de decirme que viniera a verle seguido para hacerme seguimiento del ojo. Al final, suspiré y me acerqué a su lado -Deja que te ayude... que menos...- le dije a Glaius, mirándole -Y si quieres puedes decirme cosas pertinentes del ojo... aunque seguramente prefieras silencio...- le terminé diciendo. Y si me dejaba, empezaría a coger cosas y llevarlas a donde correspondían... sin que Glaius tuviera que decirme nada, y sin mostrar asco o desagrado si en algún momento veía algo muy "nigromántico". Estando aquí ya un buen rato, y con dos ojos... creo que ya entendía el "sistema" que tenía para apilar y guardar las cosas. Por algo soy mercader además de guerrera, y se reconocer patrones así de la misma forma que organizo mi tienda por tipo de mercancía, precio o intención de venta.

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28/08/2020, 18:07
Príncipe Arthas

 El príncipe terminaría bajando la mano que te había ofrecido para escucharte atentamente, pensando sobre todo lo que mencionabas y las personas a las que le presentabas... Su mirada hacia el cuerpo duermiente de su madre no expresaba nada en particular, como si en el fondo entendiese lo que era para él pero no le encontrase verdadera importancia o sentimiento...

 Arthas aguardaría en silencio durante unos segundos mientras terminabas de hacer las presentaciones, volviendo entonces su mirada hacia ti con ligera curiosidad.

 -Entiendo... Parece que todos me querían, pero... ¿Qué significaban ustedes para mi? -preguntó con cierta confusión. -. Por la forma en la que presentaste a mi hermana y a mi madre puedo hacerme la idea de que son personas a las que admiraría y respetaría... Pero a ti se te fue dada la responsabilidad de protegerme: ¿No había nada en nuestra relación que te hiciese llevar a cabo tu trabajo por gusto y no por obligación...? Me refiero... ¿No eramos más que un simple príncipe y su caballera...? -el tono del príncipe era de auténtica curiosidad y sinceridad, deseando realmente escuchar cualquier dato que pudieses darle para entender quién era él y los demás... -. En todo caso... Estoy seguro de que si se te fue dado ese cargo es porque puedo confiar plenamente en ti -añadió, mostrando otra de sus dulces e inocentes sonrisas.

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28/08/2020, 19:58
Caos

 Decidiendo no darle muchas vueltas, Caos te invitaría a regresar a tu entrenamiento, escuchando nuevamente tu determinación a cumplir el objetivo que te habías propuesto al tomar aquel camino: hacer las paces con el caos...

 Como era de esperarse, la comida no había sido más que una pausa para recuperar energías y que pudieses mantenerte activo más tiempo, siendo que nuevamente la bola de caos fallaría al ser lanzada, más allí estaría Caos observando cada movimiento y gesto de tu cuerpo con tal de poder comentar cualquier cosa para ayudarte... De esa manera, el tiempo pasaría fugaz sin que fuesen conscientes de él, con mínimos avances entre intentos e intentos, hasta que finalmente...

 -¿Uhm...? -la mujer de cabello oscuro observaría entonces como aquella bola que habías lanzado volaría directo hacia la diana, impactando de lleno contra el centro de está y... provocando absolutamente nada en el objetivo. -. Muy bien, ya has logrado golpear la diana, y solo te ha tomado... ¿Un año...? -dedujo sin mucho interés, acercándose por detrás de ti para sujetar tus brazos y empezar a palparlos. -. Tu resistencia ha aumentado, y ya eres capaz de entender un poco más como funciona el caos, pero... Necesitarás más que eso para romper la diana -seria entonces que, aún flotando detrás de ti, formaría un minúsculo círculo con su dedo índice y anular, uno de no más de un par de milimetros de radio... -. Golpeaste el centro de la diana, pero el punto donde puedes romperla es tan solo de este tamaño... Si tu ataque no golpea exactamente esa parte la diana permanecerá en pie... Debes aprender a concentrar el caos de modo que puedas realizar ataques pequeños, precisos, pero devastadores... -te explicó antes de apartar sus manos y llevarlas a tu torso, continuando con su ligero estudio de los cambios en tu cuerpo con el paso del tiempo, aparte de tu cabello largo. -. Cambiando de tema... ¡Mira lo que tenemos aquí! -cambiando sus ánimos a unos más bromista, subiría sus manos hacia tu pecho, con la excepción de que en lugar de encontrarse la parte plana de siempre terminaría sujetando un par de bultos que resaltaban muy ligeramente. -. ¡El caos te está transformando!

 Sin hacer más que apretar un par de veces, Caos te soltaría para rodearte y ponerse delante de ti y que pudieses verla soltar la carcajada.

 -¡Ya había visto a portadores recibir cambios físicos, pero nada como esto! ¡Vamos, vamos, quitate la parte de abajo a ver si no se te ha perdido nada, o a ver si también se te ha puesto más grande! ¡Ha, ha, ha! -era obvio que el asunto le causaba mucha gracia, y en caso de que intentases decir algo para detenerla solo lo empeorarías dándote cuenta de que tu voz también se había vuelto ligeramente más aguda y femenina... -. Ay, rayos... No me he reído así desde hace milenios, la espera ha valido la pena... -satisfecha con haber podido soltar aquella carcajada, Caos se apartaría y se tumbaría de espaldas a varios centímetros del suelo, mirándote nuevamente con una ligera sonrisa en el rostro. -. Vamos, vamos, no te vayas a detener por mi... Solo... Puff... C-Continua, ¡ha, ha, ha!

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28/08/2020, 19:48
Alanís Cromwell
Sólo para el director

Alanís sintió que las preguntas inocentes de Arthas podrían terminar rompiéndole bla espalda con su peso. Ahora mismo no sabía que responder, o que debía responder. Pero sintió que le fue titánico no tomar la mano ofrecida, en pos de mantener la distancia. Son embargo, con cada momento estaba perdiendo más piezas de las que podía mantener juntas. Tomo un respiro hondo y se llamo a calmarse...pero no funcionó, de forma imprecedente. Tomo otro, y obtuvo una respiración cortada en respuesta. Parpadeó un par de veces, y noto que la vista se le estaba nublado.

-Desde antes de este puesto...éramos...personas cercanas. Amigos... -su voz también se estaba desmoronando- Sin embargo...sin embargo no ha pasado mucho y la situación esta...como está. No he sido capaz de atrapar al sospechoso mayor delante de mis narices. No he sido capaz de protegerte propiamente. Y a pesar de que una fracción de mi vida en ello, el rey está muerto. Ugh...nghh...

Llevó una mano a la altura de la frente y los ojos, escondiendo a medias una fea expresión, apretando los dientes, y trataba de respirar sin generar sonidos lastimosos. Simplemente no podía detener sus lágrimas, por más que las empujara con desespero a sus ojos. Hablo nuevamente, con voz temblorosa.

-L-le ruego que cuándo esté mejor y recuerde todo, me reemplace propiamente...tampoco estoy siendo capaz de mantenerme funciona, parece...me...me compondré en breves...si no fuera por las condiciones especiales del momento, diría que necesito ser reemplazada inmediatamente.