Partida Rol por web

William se gira hacia su compañero cuando este le pregunta. Lo que te explique antes, es lo que sabemos Stuart. Lo que pasa que este caso creo que es más grande de lo que nos pensábamos, no es un simple vandalismo, aquí hay mucho más.

Vuelve a mirar hacia donde se ha ido el coche...

Podéis intentarlo.

Algo asustado tras comprobar el estado del camarero, me levanto al ver que poco o nada se puede hacer ya por el tipo. Rápidamente me giro hacía mis compañeros y voy en su busca a la carrera para seguirlos. Cuando me pongo a su altura, y sin perder el paso, les comento lo que he descubierto.

- ¡Caballeros! Ese tipo es extremadamente peligroso y mucho más de lo que parece ser. No se como, pero esa pistola que disparó al camarero lo ha congelado al instante...Esa tecnología es desconocida e incluso inexistente a día de hoy. Tenemos que intentar averiguar más sobre este asunto. Puede que los trabajos del profesor Blanc-Sec estuvieran relacionados...Y puede que este tipo no quisiese que salieran a la luz...¡Vamos! Hemos de intentar alcanzarlo...

William dice a su compañero, vamos creo que si cogemos el coche rápido aun podemos atraparlo!

Entonces sale corriendo del local Alan, que les comunica algo muy extraño de una arma que congela? ¿Como? ¿Que?... Bueno de eso ya hablaremos luego, vamos tenemos de montar en el coche. ¿Un arma que congela? Creo que la tensión le ha hecho imaginarse algo a Allan. Si hay tiempo ya observaremos el cadáver más tarde.

Rápidamente se suben al coche, cuando están los tres juntos William dice preparados? Y Arranca su ford T.

El cielo empieza a encapotarse y una fina y gélida llovizna golpea los cristales del Ford T. Tomáis la dirección en que ha huido el agresor pero al entrar en la calle no se ve ningún rastro del mismo.

- Creo que lo hemos perdido...Será mejor que volvamos a por Lisa y nos reagrupemos. Quizás a alguien del local le suene ese tipo ahora...

- Estoy de acuerdo; volvamos al bar - digo apoyando a Alan...

Se queda durante unos segundos en silencio, escuchando como la lluvia repiquetea contra el coche. Realmente le ha molestado que ese tipo se les escapase. Mierda! Finalmente responde, Esta bien, volvamos al bar a por las señoritas. Arranca el coche y se dirige en dirección al bar.

Cuando volvéis al bar comprobáis que se ha montado un revuelo enorme. La mayoría de la gente está saliendo por la puerta y dispersándose asustada. A lo lejos una sirena de la policía rompe el silencio de la noche.

Busco con la mirada al "camarero congelado" y veo si puedo acercarme para investigar.

El camarero frigorizado sigue en el pasillo de la salida. Está rodeado por el encargado y otros trabajadores del bar que se prácticamente se ha quedado vacío. Sus compañeros se preguntan con rostro horrorizado que le ha podido ocurrir.

Ante la caótica situación que nos encontramos a nuestro regreso, decido adelantarme a mis compañeros e ir en busca de las señoritas, llamando a Lisa y a Melinda según avanzo...