Partida Rol por web

Gloin frunce el ceño cuando se menciona a Akin, con una expresión de ¿Y ése Akin quién connio es? pintada en la cara.

Por suerte, la verborrea del mediano le distrae de sus pensamientos durante unos instantes... hasta que se menciona a los elfos del bosque Negro, en cuyo momento cruza los brazos y mira a Eurainon de arriba abajo, y luego de abajo arriba, esta vez con una expresión inescrutable.

Se hace un silencio sepulcral en la habitación, sólo interrumpido por el crujido de los maderajes del cercano muelle. Por la ventana entra el aire del lago, que aporta una leve brisa.

Gloin suspira, encoge los hombros y murmura algo en khuzdul.

Textualmente: De perdidos, al río.

- Mmmm, cierto cierto. Tendréis que disculparme, llevo demasiado tiempo lejos de mi gente y he perdido las mínimas nociones de educación. Como bien ha dicho mi compañero, mi nombre es Akin Brasas Calientes, hijo de Ai Fragua Templada. Aunque me temo que mi nombre no os diga gran cosa, mi padre cayó en la guerra de los cinco ejércitos y yo... bueno, no fui el soldado más valioso precisamente, me tumbaron al primer golpe. Desde entonces llevo intentando reparar mi honor, combatiendo a los orcos allá donde puedo encontrarlos. Que nuestro aspecto no os confunda, no somos mercenarios. Luchamos por algo, aunque supongo que pasará tiempo antes de que por esa vía consiga resarcir mi maltrecho honor...

- Además, con nosotros no tiene nada que perder, si nos matan los orcos no estará peor que ahora. También es para nosotros un... -Y aquí el enano añadió las mismas palabras que había dicho Gloin en ese difícil idioma enano.

Gloin asiente ante las francas palabras de su congénere. No conocí a tu padre, muchacho, pero todos y cada uno de los que cayeron aquél día vivirán para siempre en el recuerdo del pueblo de Dain. Y no te atormentes por haber sido derribado en combate, las cicatrices son las mejores condecoraciones.

Luego se dirige al grupo en su conjunto. Sentaos, dice, y hablemos.

Mi primo Balin, hijo de Fundin, dejó la montaña Solitaria con un compañero. Iban a entregar personalmente una carta, una invitación formal del rey Dain Pie de hierro al Señor de las águilas para la próxima Reunión de los Cinco ejércitos, una cita importante que tendrá lugar al inicio del verano. Planeaba ir al sur a lo largo del río Rápido, para investigar el estado del camino del Bosque viejo y posiblemente atravesarlo, ahora que la amenaza de los trasgos ha quedado tan reducida.

No sé lo que ha pasado, pero desafortunadamente las opciones son muchas en estos días de dudas... Por si los peligros de las tierras Ásperas fueran pocos, también hay que considerar a los sospechosos habitantes del reino del Bosque. Son enemigos jurados de la Sombra, pero desafortunadamente no aprecian a los enanos y vigilan su tierra celosamente. Espero que mis sospechas estén desencaminadas, pero no me sorprendería que Balin volviera a gozar de la famosa hospitalidad del rey Elfo…

Ésta es la ruta que pensaban seguir.

Fredegar va a abrir la boca pero se percata de que Gloin solo presta atención a Akin...enanos, qué groseros son con las demás razas...así que decide volverla a cerrar y ver cómo avanza la cosa...aunque si Akin se vuelve a atascar tendré que ayudarle de nuevo...

Mata tomó asiento en silencio.

No tenía pensado decir nada en esta conversación, a no ser que le pregunten directamente algo a él. No iba a meter la pata, como es su costumbre cuando interacciona con alguien importante. Se pone nervioso, titubea, tartamudea y puede que hasta le entren los picores justo en la nuca... y todo eso no es una buena imagen para el grupo.

Por eso, el explorador se sentó serio, con el rostro de marmol, sin hacer un solo gesto, aunque con la mirada atenta.

Tampoco quería que piensen que no estaba prestando atención.

¡Que difícil es la diplomacia!

- Entonces creo que somos los más adecuados, tenemos entre nosotros un elfo, y él nos servirá de intermediario en caso de toparnos con algunos de entre los de su gente. Yo no digo ni que sí ni que no, pero hay suficientes amenazas entre los partidarios de la sombra como para que mi primera sospecha sea para alguien de la hermosa gente. En todo caso, seguiremos el mismo camino, y trataremos seguir su pista si es posible. 

El gesto de Eurainon se tensa al escuchar las palabras del señor de los enanos, pero no dice nada. Sería poco juicioso, y hablar ahora solo serviría para añadir leña al fuego de un odio que, a lo que parece, no hace mas que aumentar año tras año. Las palabras de Akin tampoco hacen mucho para que el gesto serio del elfo se destense, pero ha sido diplomático suficiente tiempo como para no dejar que su enfado se haga evidente

La Reunión de los Cinco Ejércitos...

Sería un gran acontecimientos aquel que reuniera a los viejos héroes de la Batalla de los Cinco Ejércitos. Ante sus ojos, Ioli tenía a uno de tales héroes, Gloin, pero no era el único. Balin era "el mensajero" del que habían oído hablar, quien entregaría una carta de Dain pie de hierro nada menos que al Señor de las Águilas. Ioli, hijo de Olvard se preguntó si era el único de los compañeros en experimentar esa sensación. Una especie de cosquilleo. La sensación de formar parte de la historia.

Por mucho que le necesitaran en su tierra, nadie podría dudar que la misión era digna.

Soy Ioli, hijo de Olvard. Mi familia y mi pueblo lucharon contra el Gran Gusano Smaug y contra los trasgos en la Batalla de los Cinco Ejércitos. Con la ayuda de enanos... y elfos... sobrevivimos entonces. Miró hacia Eurainon al hacer la pausa, reconociendo el valor a los de su raza y disipando algunas de las tensiones que la conversación había provocado. Después volvió a mirar a Gloin.

Y gracias a vuestra amistad y comercio hemos prosperado. Será un honor representar a mi gente, los Hombres de Bardo "el Matador del Dragón", en virtud a nuestra alianza.

Cierto sentido del orgullo no le permitía considerarse dentro de esta misión hasta así haberlo declarado en voz alta, como si además de informar a Gloin se convenciera a sí mismo y se justificara ante su difunto padre.

- ¿Cuánto tiempo hace que partieron? ¿No cree que dos enanos son pocos? Si hubieran sido los elfos, ¿no sería normal que hubieran avisado?...Fredegar empieza a lanzar todas las preguntas que se le ocurren.

• Partieron de Erebor aproximadamente hace una semana, pasaron por aquí y siguieron en bote río abajo.
• Balin su compañero son enanos de gran experiencia, y más que capaces de valerse por sí mismos en cualquier circunstancia.
• Como quiera que no se me alcanza por qué los elfos hubieran querido retenerles, tampoco sé decir si habrían tenido que avisar o no.

- ¿Una semana? No parece tiempo como para preocuparse, es difícil que hayan tenido tiempo de ir y volver...