Partida Rol por web

Tras varios días moviéndote por los círculos de escritores de Grand Rapids, te comienzas a plantear si no hubiera sido una buena idea seguir las recomendaciones de tu tío y visitar Nueva Inglaterra, tierra de misteriosas leyendas que pudieran haberte dado una mayor inspiración para tu próximo trabajo. Después de todo Michigan es una zona demasiado tranquila.

Sin embargo un día quizás llega tu golpe de suerte. Has entablado cierta amistad con varios escritores de la ciudad, quienes te han invitado a unirte a una de sus reuniones en un salón de té en Grand Haven, a orillas del lago Michigan.

Y allí, un novelista de limitado éxito pero cuyas ideas juzgas interesantes, Mr. Ernest Sorton, te habla de un conocido suyo.

Ya veo... buscar inspiración e investigar para un nuevo libro. Las historias de fantasmas siempre venden bien en la vieja Inglaterra, ¿no? ¿Por qué no habla con Maurice van Laaden? es un poeta local, que quiere vender la mansión familiar, pero afirma que está embrujada y que no hay modo de encontrar compradores. Hay suerte, porque está aquí ahora mismo. Si le parece se le presentaré. te comenta Sorton una vez le has comentado tu búsqueda de inspiración para nuevo libro.

Sentado de espaldas al inmenso ventanal del salón de té, desde donde hay una hermosa visión del lago, algo rechoncho, de cabello quizás demasiado largo para alguien de su edad y un fino bigote que se atusa constantemente, eleva la mirada del ejemplar del Grand Rapids Herald.

Buenas tardes, Maurice. Me gustaría presentarle a Mr. Ray Pember. Es un ilustre novelista de la Vieja Inglaterra.

Inmediatamente Mr. Van Laaden aparta el periódico y se levanta con calma mientras te tiende la mano.

Un placer, señor Pember. dice mientras aparta de su boca la boquilla nacarada con la cual está fumando un fino cigarrillo.

Mr. Pember está buscando inspiración para su próxima publicación. Había pensado que quizás pueda valerse de su vieja mansión de la que nos habló hace un par de días...

Esto podría ser interesante, rumores de una casa encantada. Veremos que puedo sacar en claro de el dueño.

-Encantado de conocerle Mr. van Laaden.-Digo estrechandole la mano.- Como bien ha dicho nuestro amigo, estoy buscando una interesante historia para plasmar en mi siguiente libro. La suya, sin duda, parece interesante. Estaría encantado de escuchar su relato acerca de esa misteriosa casa. Permítame invitarle a algo, que va a tomar?-Digo haciendo una seña al camarero.

Saco mi vieja libreta garabateada y mi pluma.

Se lo agradezco, señor Pember, pero ya estoy tomando té y aún no terminé la taza. dice mientras te observa como si te estuviera evaluando.
En realidad yo no puedo decirle gran cosa. En mi niñez viví en el viejo hogar familiar, una mansión a 22 Km al Norte de la ciudad. Pero la casa era demasiado grande para un hombre solo, ¡y demasiado aislada! así que me vine a la ciudad, a un apartamento céntrico, cuando tuve ocasión. Allí no me encontraba cómodo, y siempre tenía la impresión de que la casa me observaba. Por supuesto que en Grand Rapids me encuentro de mejor humor. He decidido venderla, pero por todo el condado corren habladurías de que está embrujada, y lo cual explicaría el hecho de que no he tenido ni una sola oferta en tres meses. Quiero creer que son sandeces, pero voy a contratar a un hombre para que exorcize el lugar, o al menos demuestre que no hay ningún problema

Da una larga calada a su cigarro antes de continuar.
Quizás entonces esté interesado en participar en este trabajo. Mañana al mediodía tengo una cita con el "exorcista", un tipo extravagante y especialista en temas de ocultismo. Y también con un anticuario, que ha mostrado interés en este tema. Si es así, puede pasarse mañana por mi apartamento en el centro, donde he quedado con esos caballeros. dice para seguidamente extraer un tarjetero forrado en cuero del bolsillo de su chaqueta. Lo abrte con calma y extrae una tarjeta, donde se encuentra impreso, en elegantes letras cursivas, su nombre así como su dirección:

Cita:

No se si es lo que andaba buscando, pero tal vez le sirva de inspiración darse un garbeo por allí. Por otra parte, nunca había escuchado hablar sobre usted ni leí nada suyo. ¿Vive usted en Michigan? ¿Sobre qué suele escribir?

Tras una buena temporada intentando vender antigüedades en la populosa bahía de Tampa, llegas a la conclusión de que quizás no es el sitio mas idóneo para comerciar con antigüedades. la mentalidad ha cambiado tanto tras la Gran Guerra que ahora todo el mundo en esta joven zona de Florida piensa en adquirir nuevos muebles modernos de estilo "art decó" y otras novedosas modas procedentes de la intelectualidad europea y hay poco mercado para los buenos y robustos muebles decimonónicos.

Así pues trasladaste tu tienda hacia el Norte, hacia la zona de los Grandes Lagos. Mas aislado, y con gente con una mentalidad mas tradicional y calmada y con bastante dinero procedente de la siempre creciente industria del automóvil de Detroit, el Estado de Michigan puede suponer una nueva oportunidad para comerciar con los productos que realmente valoras y aprecias.

Y tu visión de futuro dio sus primeros frutos a los dos meses de trasladarte a este estado. En solo 6 meses ampliaste la tienda. Y en solo 2 ó 3 años ya llegaste a ser uno de los antivuarios mas valorados de Grand Rapids, la ciudad en la que finalmente decidiste asentarte.

E incluso te llegan encargos cada vez mas raros. Hoy sin ir mas lejos recibes una misiva procedente de un ciudadano local, llamado Maurice Van Laaden.

Estimado señor West.

Poseo una vieja mansión, herencia familiar desde hace varias generaciones, repleta de bienes y muebles que me gustaría vender para poder paliar mis deudas.

He pensado que quizás alguno de esos muebles pueda ser de su interés. Muchos de ellos proceden de Nueva Inglaterra, y otros muchos proceden incluso de la vieja Europa, y sin duda poseen un gran valor. Mi idea inicial es venderlos junto con la casa, aunque las habladurías de los habitantes del Condado de Kent cuentan de que está embrujada y me temo que en esas circunstancias se me hace difícil encontrar un comprador.

Mañana día 13 me reuniré a las 12 del mediodía con un experto en ocultismo al que he requerido para que investigue a fondo las raices de las supersticiones de la Vieja Mansión e imagino que querrá visitar la casa. No dudo en que usted puede estar interesado en visitar la vieja mansión familiar, con lo que le convido a que aproveche nuestra reunión y acuda a la misma.

Le ruego se presente mañana día 13 en mi domicilio en el apartamento 8 del 332 de Claremont Place en Grand Rapids si está interesado en este tema.

Sin otro particular le saluda atentamente.

Maurice Van Laaden

Curiosa misicva la que te ha llegado con el correo de la mañana.

Estimado sr. Shuben

Mi nombre es Maurice Van Laaden, y me dirijo a usted con la esperanza de que pueda resolver mi acuciante problema.

Soy el legítimo heredero de una mansión situada 22 Km. al Norte de Grand Rapids. Mi familia habitó esa casa durante generaciones aunque hace ya años que, tras la muerte de mi madre, me mudé al centro quedando la casa vacía.

Tras tres meses intentando vender la vieja mansión, me encuentro con una impropia y sospechosa falta de compradores interesados en la misma.

Atribuyo dicha falta de interesados a las habladurías que se dicen sobre la misma, sobre una maldición o encantamiento que pesa sobre ella.

Quizás pueda estar usted interesado en la vieja casa y en su supuesta maldición, con lo que le ruego se presente mañana al mediodía en mi domicilio para comentar estos temas personalmente.

Vivo en el apartamento 8 del 332 de Claremont Place, en el centro de Grand Rapids.

Sin otro particular y confiando en conocerle mañana personalmente le saluda atentamente

Maurice Van Laaden.

mmmm....interesante......aunque obviamente puede ser una broma de algun pesado....bien....si ya estoy en el tema, calculo que nada puedo perder un debate surge en mi mente...como todas las mañanas, aunque por diferentes razones.

Todavia en bata, con una taza de cafe en la mano y sentado a la mesa revisando, o por lo menos revisaba hasta que esta carta me sumergio en pensamientos, la correspondencia...

Me despierto de mi sueño diurno por el silbido de la pava que anuncia que el agua ya se esta escapando por accion del calor, cruzo con velocidad mi humilde morada, llena de diversos aparatos extraños que utilizo para mis estudios.

Un nuevo dia comienza, totalmente normal, pero añade la posibilidad de un mañana muy interesante...

Viendo una oportunidad de negocio increible no me lo pienso ni dos segundos, en aceptar esa invitacion, ya que aparte de ser una oportunidad fantasitica para reponer la tienda con objetos increibles tambien lo seria para investigar la casa que desde que llegue he oido hablar a los demas habitantes cosas increibles y asi poder dar rienda suelta a su aficcion hacia lo oculto

Ray se entusiasmaba más cada vez, exorcizar una casa? Eso sería genial, algo novedoso. Perfecto para mi libro. Con el corazón latiendo velozmente se apresuró a contestar:

-Po-por su puesto que me interesaría en acompañar a ese exorcista a su casa! Desde luego! Nunca he creido en esos cuentos de brujas y fantasmas, pero adornandolo un poco, seguro que tiene buena acogida entre mis lectores.-Dijo guiñandole un ojo.
-Bueno, estoy de paso en Michigan, viviendo en casa de mi tío. Aunque realmente soy de Londres, allí mis novelas son más conocidas. Suelo escribir relatos de aventuras, todas ellas inspiradas en hechos reales. Basadas en historias como la suya, precisamente. Quien sabe, si encuentro algo especial en su casa puede que escriba una novela sobre ella.

Entonces le espero mañana al mediodía, señor Pember. continúa Mr. Van Laaden con un tono de voz un tanto preocupado.
Si usted consigue inspiración para sus novelas y yo consigo vender la casa, todos saldremo ganando. No lo olvide: al mediodía. Sea puntual.

Parece que el asunto está zanjado.

-Por supuesto, los ingleses nunca llegamos tarde. Un placer conocerle, Mr Van Laaden. Nos veremos mañana entonces.

Después de despedirme del casero, continuo un rato más en el bar, charlando con los intelectuales sobre historia y filosofía. Mas tarde pago mis consumiciones y me voy a casa. Al día siguiente me presento en el lugar citado a la hora citada

Grand Rapids, Michigan, 13 de Febrero de 1923.

El pequeño apartamento de Maurice Van Laaden se encuentra bastante céntrico, en la octava planta de un moderno edificio de ladrillo, donde os ha citado a los tres.

El propio Maurice os recibe y os invita a pasar a su despacho, cuyo papel pintado color crema apenas es visible debido a las estanterías repletas de libros, clásicos de poesía y literatura universal.

Se trata de un hombre algo rechoncho, de unos 30 años, con el cabello algo mas largo de lo que suelen llevar los hombres de su edad bajo una boina que le da un aire bohemio.

Amigablemente invita a los 3 investigadores, una vez van llegando al apartamento situado en Claremont Place a tomar asiento en grandes butacones que rodean el pulcro y ordenado escritorio. El mismo toma asiento y enciende un cigarrillo que fuma al otro lado de una larga boquilla nacarada. Uno a uno os mira con sus oscuros ojos. Se atusa su largo bigote negro y comienza a hablar.

Gracias por acudir, caballeros. Permítanme que inicie las presentaciones. El señor Ray Pember le va señalando con la cabeza de la vieja Inglaterra, afamado escritor allá en ultramar, aunque en las colonias aún no hemos conocido bien su obra..

Su mirada se posa en el siguiente investigador.
El Señor John West, que regente una interesante tienda de antiguedades en este estado.

y por último se detiene el el tercero de los hombres que se han dado cita esta fresca y nublada mañana de Febrero.
Y por último, el señor Edward Shuben, ocultista y experto en temas que se alejan de la comprensión humana.
Da un par de chupadas a su cigarro y termina su alocución presentándose a sí mismo.
Y finalmente, mi nombre es Maurice Van Laaden. Bien algunos de ustedes ya saben algo sobre mí o sobre mi casa. Estoy intentando vender la vieja mansión familiar, la vieja mansión Van Laaden de la que se dice que está embrujada, junto a todos sus muebles, aunque se queda mirando al señor West
Quizás pueda desprenderme de alguno de ellos por separado para solucionar unos pequeños asuntos económicos urgentes. La mansión se encuentra en buen estado, pues sigo pagando a un par de personas para que la mantengan en condiciones. Y si me ayudan a desentrañar el misterio para que vuelva a atraer compradores, les podré dar una comisión de... el 10% de la venta total del inmueble

Tiubea un poco. Es consciente que está encargando un trato muy poco habitual y no sabe muy bien como plantearlo.

mmm no supuse que el tipo nos fuera a pagar tanta cantidad de dinero... en efecto debe haber algo raro en esa casa.
Ray Pember, que estaba sentado con las piernas cruzadas en pose relajada, habia saludado a sus dos nuevos compañeros antes que Laaden empezase su historia. Cuando éste terminó dijo:
-Por lo que a mi respecta estoy conforme con el trato. Espero encontrarme allí con fantasmas y otros seres para interrogarlos jajajaja.-Dijo con una estruendosa carcajada.

Al entrar miro uno a uno a los alli presentes, al tiempo en el que me saco el sombrero, como corresponde por educacion, y el sobretodo negro, ya que el ambiente en la pieza es mas agradable que el de la calle. Vestido con un traje que hace juego con el sobretodo y una camisa de un blanco contrastante tomo mi lugar como me lo indican.

Escucho atento la conversacion, haciendo un leve gesto con la cabeza al escuchar mi nombre, pero sin pronunciar palabra.

10 %....siendo para cada uno o en total es una suma muy importante....no creo que este hombre pague ese dinero por nada....pero tampoco creo que sepa con lo que esta tratando...

Espero que no tome a las fuerzas sobrenaturales como motivo de chiste, caballero.... me dirijo en un tono agradable hacia Ray, antes de volver mi mirada a nuestro anfitrion.

pido disculpe mi ignorancia...pero no he tenido el placer de escuchar la historia de esta mancion....podria facilitarnosla?, me gustaria ademas saber cuales son esos rumores que corren..

-Yo tambien estoy interesado en su casa señor, pero podria decirnos exactamente que echos han ocurrido en su mansion, para que se diga que esta encantada?

Le echo un vistazo a los libros de la biblioteca desde lejos, para ver si alguno le llama la atencion

El señor Van Laaden no parece encontrar ni pizca de gracia al comentario del señor Pember y se le queda mirando fíjamente y seriamente.

Se vuelve hacia el señor Shuben y el señor Wesyt cuando estos le preguntan acerca de la casa. Su rostro se vuelve un poco sombrío mientras se queda pensativo.

Mi familia lleva unas 5 generaciones viviendo en la casa, que fue erigida por uno de nuestros antepasados, mi tatarabuelo Erich Van Laaden. se queda pensativo un rato, que se os antoja incluso demasiado largo.

La casa está demasiado aislada, y no hay otras viviendas en las cercanías, hasta llegar a Sparta, a 4 Km. Además su estilo arquitectónico es algo distinto al de las casas de aquí. La gente del campo lo podría considerar suficiente extraño como para expandir los rumores, unido al hecho de que mi abuela enloqueció en la casa, y mi madre murió joven, con lo que la mentalidad pueblerina de la zona rápidamente se apresta a hablar de maldición.

Y en el interior de la casa, sientes como si constántente algo te estuviera observando. Es difícil de explicar, pero sin duda vivir aquí es mucho mejor. Hay mejor aire, mejor ambiente. No se si me entienden. Y además, ni un solo interesado en el inmueble ¡en 3 meses!

Hay varios volúmenes de los clásicos (Homero, Herodoto, Tucídides, etc.), obras clásicas (principalmente Shakespeare y Marlowe) y otros de grandes historiadores del XIX (Gibbon y Momsen), y clásicos de la literatura americana del XIX (Locke, Shaw, Poe...), así como obras generales de Filosofía: Kant, Hegel, Marx, etc.

Despues de escuchar el relato, del cual habia tomado notas con su libreta, dijo:

-Está bien, no se preocupe, los tragicos sucesos de sus familiares habrán desbocado en un sin fín de rumores por parte de los pueblerinos. Pero todos ellos me parecen infundados, ha debido ser una mala casualidad.- Garabateó un poco más en la libreta.- Respecto a eso que ha dicho usted sobre lo incomodo que es estar en esa casa... me gustaría experimentarlo en mis carnes.

Después guardó la libreta y concluyó:
-¿Y qué tiene usted pensado que hagamos? ¿Nos tenemos que quedar unos días en la casa? ... Habrá que demostrar a los del pueblo que no ocurre nada malo.

Van Laaden asiente, quizás un tanto confuso ante la pregunta de Pember.

Tendrán que ... no se... exorcizarla o algo así. Vuelve su mirada hacia Mr. Shuben intentando salir del atolladero respecto a la lógica pregunta (*) de Pember.

Sin duda el señor Shuben dice mientras indica en su dirección con un ademán con la mano como experto ocultista sabrá tomar los pasos necesarios para cumplir el trabajo adecuadamente y presentar un informe. De todos modos, aún a riesgo de equivocarme, imagino que es algo que se siente, ¿no es así, señor Shuben?, cuando la casa haya sido liberada de la maldición, la atmósfera en torno a esa zona será distinta.

Abre un cajón con calma.

Señores, he redactado un contrato que especifica las condiciones. Una vez lo hayan firmado, les permitiré el acceso a la casa. Si no tienen coche, yo mismo les llevaré hasta allí cuando ustedes dispongan comenzar.

Miro al misterioso Sr Shuben. Un experto en ocultismo... me gustaria entrevistarlo.

Se levanta de su silla y acerca su mano a la mesa de Ladeen.
-Bien, veamos ese contrato.