Partida Rol por web

Adshareb llegó a duras penas junto a Dormin y Steelgart, mientras el eidolon lo seguía, atento a todo. - Steelgart, no me encuentro muy bien, el calor de arriba me ha dejado seco.- dijo, casi derrumbándose junto al enano.

Steelgart susurro una oración a Torag mientras una onda de cálida energia curativa se extendia alrededor.

Permanezco asustado detras de Steelgart mientras reviso el estado de mi ropa despues de el impacto de la bola de fuego, levanto la mirada hacia Adshareb que baja en ese instante junto con su invocación.

---¿Tenemos que entrar ahi?- digo con cierto tono de panico en mi voz.

- Si hay que entrar, sea lo que sea que se resguarda dentro debemos enfretarnos a ello. Cuando esteis listos entramos a sangre y ....., seguro que nos lanza algo para acabar la frase.

Steelgart examina con ojo experto las heridas de sus compañeros

Adshareb suspiró agradecido, el conjuro revitalizador del clérigo le había devuelto el color a la cara. El conjurador le dio las gracias.

- Está bien, vamos allá. Dormin, explícanos lo que ha pasado y qué has visto.

Asiento con la cabeza y comienzo a narrar.

---Me adelanté al resto del grupo y baje por las escaleras, mientras esperaba a que bajaseis decidi ver que habia detras de cada puerta, asi que me asomé a esa- digo a la vez que señalo la puerta.- Era una sala con trofeo y un montón de trastos viejos, sentí curiosidad asi que  me puse a escarbar entre los diferentes restos para ver si encontraba algo interesante y fui amontonandolos a un lado.

---Entonces la puerta se cerró de golpe y me quede encerrado, avancé a la puerta  y la abrí sin problemas, entonces de la nada apareció una esfera de fuego, pero logré esquivarla traté de buscar a mi agresor pero no habia nadie, la bola se lanzo contra mi de nuevo y-y-y....estallé en llamas- digo  con lagrimas en los ojos y comienzo a llorar-traté de huir de la sala pero otra bola me golpeo y-y-y.....

Me callo incapaz de continuar y comienzo a llorar asustado y temblando del terror.

El enano cuchichea

- Vamos a tener que entrar. Y nuestro adversario nos espera. Tal vez pueda desmontar las bisagras de la puerta para que entremos más rápidamente con el Eidolon y Ungrag delante, mientras preparo un dardo ácido ocntra el enemigo.

Examina con ojo experto las bisagras.

- Mmmm... si Dormin no ha visto a nadie, quizá era una trampa mágica, y no un adversario. Pensad que esta ciudadela parece estar plagada de trampas de fuego...- sugirió Adshareb.- Bien, vamos allá.

Empiezo a estar ansioso por la falta de acción y por la posibilidad de un buen combate.

- Vamos entonces la gloria nos espera tras esas puertas.

- Si estais  preparados ...

Abrís la puerta y podéis ver una sala levemente iluminada por unas antorchas en la parte opuesta por la que entráis donde también podéis ver una puerta de dos hojas. La habitación esta sembrada de cascotes de arcilla roja y negra y obsidiana, que formaba parte de los pedestales para estatuas. Ropas raídas, cortinas hechas jirones por el suelo, muebles destrozados con excepción de una larga mesa en la parte del fondo a la derecha, que además sirve de soporte para una estatua de una criatura de fuego que viste armadura completa y su cabeza astada con dos cuernos de toro os observa desde el fondo de la habitación.

Lo primero que hizo Adshareb al asomarse a la habitación, y como ya llevaba haciendo desde que entraran en la ciudadela, fue realizar el conjuro que le permetía detectar emanaciones mágicas. Si la bola de fuego que había herido a Dormin provenía de una trampa mágica, debían estar atentos a su origen.

El enano avanza, vigilando la estatua.

Tirada de percepción oculta.

He dicho oculta, sólo la veo yo.

Ves una luz en la pared izquierda que sale de los ojos y las bocas de la cara del genio que se repite como decoración por las paredes del edificio.

Entro en la sala en posición defensiva con la guadaña preparada, vigilando cada sombra o recoveco donde un enemigo pueda esconderse.

- Haber donde te has metidoooo.....