Partida Rol por web

Sin abrir la boca, ante un gesto de silencio de Soker, repite el gesto a los demás cercanos, y le hace un gesto a Rumuk pra que le acerque esa nota que lleva. Acto seguido, pide permiso para avanzar al pícaro humano. Qizá entre los dos podrían rematar a lo que sea que ha encontrado... los kobolds son nocturnos, y tienden a dormirse en las guardias diúrnas.

Rumuk le cede la nota a Geon.

Tiendo la mano pidiendo la nota para ver si la entiendo, aunque imagino su contenido.

Después, al ver la cara de preocupación de Soker, la puerta se abre hacia los dos lados, susurro...

- Vaya marron, sobre todo teniendo en cuenta que hay otra sala más allá y no sabemos cuantas criaturas puede haber en ella o pueden llegar por ella

- ¿Alguno de los arqueros puede conseguir un disparo claro sobre los lobos?

Sería un tro difícil, y taponaría la puerta. Además, te recuerdo que si lo que nos vamos a encontrar es a Jeva mis flechas no le harán más que cosquillas. Me temo que la única opcion es el cuerpo a cuerpo, lucharemos como los enanos. Sonríe Finn.

-Muy peligrrrossoos en los túneles; letales en las distanciassss corrrrtassss.- rezonga Geon, como si lo llevara escrito a fuego.

Acto seguido hace otro ghesto al pícaro, demandando una indicación del algún tipo, mientras sigue con el arco tensado.

Mejor que los más silenciosos vayáis primero. A mí me escucharían en seguida esas bestias.

El plan de Soker me gusta, mucho. Los demás nos quedamos cubriendo por si llegan kobolds o más criaturas (al menos distraeremos).

De acuerdo, detrás vuestro voy yo para cubriros con el arco. Finn saca una flecha de su carcaj.

Soker se adelanta a Geon y su sigilo es notable...

Geon se adelanta también, guardando su arco y con hacha en mano, con un sigilo comparable al del ladrón.

Cruzais apresuradamente sin fijaros en lo que hay en la sala de al lado. Acabais con la vida de los lobos antes de que se puedan levantar.

Tras acabar con los lobos, Geon hace un gesto a Soker para cubrirse detrás del mueble más cercano, y señala a la puerta de enfrente. Lentamente saca su arco y se prepara para cubrir al ladrón, mientras echa un vistazo.