Partida Rol por web

Zeljko le da una palmadita a Calethos y se retira con Ari.

Quizá podríamos ponernos a buscar ese castillo. No debe haber muchos lugares así y seguro que hay algún documento en la biblioteca o en el ayuntamiento que podamos consultar.

Calethos realmente disfruta con eso. ¡Ah! Habría sido un gran jefe goblin.

Los que salis fuera, empezais a oir gritos desde dentro de la prision, de intensidad variable. Los guardias os miran asustados hasta que uno no puede mas y sale corriendo hacia la posada.

Poco despues sale Calethos, con las ropas y los brazos manchados de sangre. Iarno, el pobr infeliz, solo ha entendido ahora, al final, que sus debiles encantamientos no pueden competir con el poder de la Naturaleza.  No ha sido facil pero finalmente ha cantado: Hay una reunion entre la tribu orca de los Muchas Flechas (*) y otro lugarteniente del Rey Krol en Wyvern Tor, mañana. Los enviados de Krol sabran donde esta el castillo, donde Iarno nunca ha estado ni sabe donde esta. La explicacion de que planeaban con los orcos y porque eran necesarios los bandidos se ha perdido en los balbuceos y sollozos del mago pero parece que la idea era ganar el favor de Neverwinter. Es evidente que lo que os contaba antes era mentira. Era un villano y ha pagado por ello.

Justo cuando Calethos termina, llega Sildar corriendo con el guardia. Ve la sangre y os mira horrorizado

Que habeis hecho??

Os aparta de un empujon y entra en la prision.

Sildar sale de la prision un minuto despues con la cara palida. De nuevo, una pequeña multitud se empieza a congregar al notar que algo esta pasando. Se gira hacia dos guardias.

Llevaoslo a la posada y que alguien atienda sus heridas.

Se gira despues hacia vosotros y saca su espada

Habeis torturado un prisionero de Neverwinter. Por el poder investido en mi por la Alianza de los Lores, os pongo bajo arresto. Vuestras acciones ayer, no just...

El alcalde se adelanta, interponiendose entre Sildar y vosotros

Alto! - dice con voz chillona - Aqui el que manda soy yo! Estoy harto de extranjeros que vienen a Phandalin creyendo que pueden hacer y deshacer a su antojo!

Callate Harbin! No eres mas que un cobarde!

Si, es un pusilanime... Pero tiene razon! Que hace la Alianza de los Lores entrometiendose en nuestro pueblo? Esos bandidos eran un problema y estos aventureros lo han resuelto! Y ese tal Ganivren se merecia lo que le ha llegado! No necesitamos mas arrestos... necesitamos un nuevo alcalde!

Votacion! Votacion! Votacion! - grita la masa enfurecida

Pe... Pero... Y...

Abajo con el alcalde! - gritan unos

Que les jodan a Neverwinter! - dicen otros

Menuda paliza! - dice uno viendo la cara irreconocible de Iarno mientras se lo llevan a la posada

Queremos votar! - se oyen varias voces

Yo quiero ver tetas! - dice otro

Una colleja se oye por encima del resto

Pero que dices! Callate, coño ya!

Pero madre... Que yo no he sido!

Le cae otra colleja

Alton mantuvo su posición, apoyado contra la pared con la daga en la mano, mientras Calethos sometía a Ganivren al duro y exhaustivo aunque a la par eficaz método de interrogatorio del palo y la otra punta del palo.

No era la primera paliza que observaba, había visto varias en sus años en el ejercito.

Llegó Sildar a tocar las narices, como siempre y ya no pudo callarse.

Lleváis viviendo toda la vida aquí, habéis trabajado como cabrones, habéis dado todo lo que teníais... y no solo vosotros, si no vuestros padre y los padres de vuestros padres.

  - Y los padres de los padres de vuestros padres. - apuntilló Trull.

¿Y qué ha hecho Neverwinter por vosotros? - siguió Alton. - ¿Qué ha hecho este alcalde por vosotros?

Nosotros no os hemos pedido nada, hemos visto una injusticia y la hemos solventado, de la misma forma que esto - señala el cuerpo machado de Ganivren - evitará futuras injusticias. Por no mencionar que se lo ha ganado, él estaba más que dispuesto a hacer lo mismo o peor...

- El acueducto? ---se oye una voz en la multitud

- Sí, eso, y la sanidad --- apostilla otro.

- El camino al puerto? ---aventura una tercera voz al fondo.

Ari, mientras tanto, se mantiene al margen y no dice nada y observa cómo se desarrolla la escena. Ayudará a sus amigos en lo que tenga que ayudar, especialmente contra unos burócratas calzonazos, pero no va a abrir la boca sin necesidad.

Cita:

Eso, eso! - grita uno

Pero si el pueblo se monto hace 6 años...

Calla! Que hable el mediano!

Cita:

Cita:

El mediano alcalde! El mediano alcalde! - gritan unos mientras otros gritan lo contrario

Nadie me puede quitar la alcaldia sin una votacion! Lo dicen los estatutos!

Calethos agita los brazos dejando que la sangre caiga por todos lados.

- Por cada gota de sangre de este indeseable, yo, mis compañeros y casi todo el pueblo ha vertido diez. - contesta calmado - No me ha gustado lo que he hecho. Pero ha muerto gente. Muchos hemos estado a punto varias veces. Y mucha más morirá si no paramos esta invasión. Sabiendo que ese desgraciado tenía la información que necesitábamos y no la quería dar, no obtenerla hubiera sido traición. Traición al pueblo de Palanthir, traición a nosotros mismos, pero sobre todo traición a todos los que han muerto en manos de los bandidos, los orcos o los Muchas Flechas.

- Yo no me someto a nobles ni a grandes nombres. Me someto al pueblo soberano. Si Palanthir quiere mi cabeza me la arrancaré yo mismo. Pero no admitiré detenciones de aristócratas en nombre de imperios extranjeros. - deja una pausa dramática - Y creo que el alcalde debería hacer lo mismo. Que se someta a la voluntad del PUEBLOOOOO!!!! - grita el joven.

- Y los padres de los padres de vuestros padres. - apuntilló Trull.