Partida Rol por web

La Larga Búsqueda: In Vitae Veritas

Londres Nocturno

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06/02/2014, 13:19
El Narrador

 

El grupo viajó desde el Mar del Norte, cruzando el canal de la mancha hasta llegar a la desembocadura del Támesis. El Capitán Santos obedecía con diligencia las órdenes de Thomas, haciendo que el viaje transcurriera tranquilo y sin infortunios.

Así, ante ellos, el puerto de Londres se abría a la vista. Un puerto vivo, y ajetreado a pesar del frío y la oscuridad. Un puerto envuelto en la niebla, la humedad... y los secretos.

 

Notas de juego

Nos borramos tres de Sangre.

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06/02/2014, 13:28
Rosalía Caeiro

Rosalía aguardó asomada a la baranda a que el barco encontrara su lugar en los muelles. Sus ojos contemplaban el puerto con una mezcla de emoción e incertidumbre. ¿Había estado allí antes? ¿Podría la Sire de Thomas devolverse los recuerdos? ¿Averiguaría algo sobre Christian Adler?

Cuando al fin la nave echó en ancla se acercó hacia el Ventrue y los demás para descender la pasarela.

-Londres es enorme ¿Dónde podemos encontrarla? -susurró al sajón.

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06/02/2014, 13:30
Håkan den Svarta

-Considéralo hecho...

Zanjó el asunto poniéndose en pie.

-¿Dónde queréis que la lleve?

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06/02/2014, 13:38
Sonja Keller

-Al Castillo de Stonegaze, en la afueras al sur de la ciudad -dijo ella poniéndose de pie-. Confiamos en los dos.

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06/02/2014, 13:57
Håkan den Svarta

Por fin llegó la noche, y Francesco no podía sentir mayor excitación. Iba a volver a encontrarse con sus dos viejos amigos, aun como parte de un elaborado engaño, y una vez más estaban en contra de los designios de los Usurpadores. Pero ahora todo había cambiado. Demasiado.

Había pasado la noche anterior cazando, alimentando a Jarl y conteniendo unas casi irresistibles ganas de yacer con Astrid. La gauta tampoco parecía estar muy de acuerdo en ponerle fáciles las cosas.

Acechaba entre las sombras del puerto, yendo y viniendo, en busca del barco que llevara a Thomas y a Rosalía. Se valía de sus sentidos aumentados para ello... Y se sentía más ansioso que nunca.

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06/02/2014, 14:04
El Narrador

Al final divisó una carabela atracar en el muelle. Los marineros colocaron la pasarela y de ella descendieron Rosalía y Thomas, tan iguales a cómo el los recordaba. Tras sus viejos camaradas caminaban a su paso una mujer morena, ataviada con ropas de color ocre y una espada al cinto y un joven de cabello liso y oscuro también armado, que miraba en derredor con curiosidad. 

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06/02/2014, 14:07
Thomas Daister

-Iremos al Elíseo -le dijo el Ventrue.

Después, mientras los marineros colocaban la pasarela, Thomas se despidió del Capitán, pagando lo convenido y ayudó a descender a la castellana. Tras ellos, Oana y Rodrigo caminaron por primera vez por el puerto de Londres.

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06/02/2014, 14:09
Rosalía Caeiro

Asintió a las palabras de Thomas y paseó a su lado a través de los ajetreados muelles hacia la ciudad.

-Nunca te lo he preguntado... -dijo de pronto-. O quizás sí y no lo recuerdo. ¿Naciste aquí? ¿Qué sientes al regresar?

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06/02/2014, 14:12
Thomas Daister

Thomas sonrió.

-No aquí. En Sussex, un condado al sur -explicó. Había un matiz de melancolía en su voz-. Pero viví aquí mis últimos días de mortal. Es extraño... siento como si el tiempo no hubiera pasado. Me siento ansioso, pero también... me siento un poco ajeno. Como si ya no perteneciera a este lugar. Esta ciudad es un lugar de extremos, capaz de sacar lo mejor y lo peor de un hombre... No quiero imaginar como su desarrollo puede haber potenciado eso.

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06/02/2014, 14:19
Rosalía Caeiro

Rosalía lo tomó del brazo y se lo apretó afectuosa, como si de alguna forma quisiera tranquilizarle.

-A Thomas Daister no le asusta nada. Mucho menos una simple ciudad -dijo jovial.

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06/02/2014, 14:32
Håkan den Svarta

Si hubiera tenido un corazón vivo, le habría dado un vuelco por la emoción. Sonrió de buen grado al verles. Tal y como siempre habían sido. ¿Qué otra cosa podía esperar? Pidió a Astrid que le esperara en un callejón que habían preparado previamente para la recepción, tras lo que decidió salir al encuentro de sus dos viejos amigos encarnando un semblante muy distinto al de quien realmente era. Hakan den Svarta les daría la bienvenida, pero Francesco les pondría sobre aviso de la situación...

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06/02/2014, 14:37
Håkan den Svarta

Hakan salió al encuentro de Rosalía Caeiro, Thomas Daister y su pequeño séquito. Era alto, bastante más de la media, y su complexión hablaba de un hombre muy habituado a la guerra. Caminaba con un paso firme y decidido, envuelto en oscuras pieles y con ropas de no demasiada calidad, pero recias y bien curtidas.

En el rostro, una extraña sonrisa lobuna, no exenta de cierta malicia, y una mirada fiera enmarcada por dos leves rastros de ceniza bajo los ojos. Sin duda, aquel bárbaro estaba fuera de lugar y llamaba lo bastante la atención, aunque no pareciera importarle tal cosa. Cuando habló, lo hizo en un inglés con un acento muy marcado y unas maneras arcaicas, que hacía tiempo habían caído en desuso.

-¡Sean muy bienvenidos, damas y caballeros! -extendió los brazos, de forma teatral-. Sobre todo vosotros, Thomas Daister y Rosalía Caeiro. Permitid que me presente para aquellos que no me conocen todavía: soy Håkan el Negro.

Miró especialmente, aunque de soslayo, a Thomas Daister, y su sonrisa se ensanchó ligeramente.

-Y ahora, si son tan amables, ¿por qué no me acompañan sin montar un escándalo? Hay importantes cuestiones que personalidades como las suyas han de tratar con impresentables de mi reputación... Por mucho que pueda sorprenderos.

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06/02/2014, 15:15
El Narrador

Cuando aquel hombre se presentó frente a ellos el alma de Rosalía se encogió. Era el mismo Vampiro al que había visto a través del medallón. Aquél que había atacado a Thomas. Aquél que había marcado su pecho con sus garras y a punto había estado de acabar para siempre con su no-vida.

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06/02/2014, 15:23
Rosalía Caeiro

Rosalía contempló enmudecida al bárbaro. Ni siquiera escuchó sus palabras, absorta por completo en el recuerdo desvelado por el medallón que ahora se hacía corpóreo.

-Es él... -musitó hacia Thomas apretándole aún más el brazo-. Tu herida...

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06/02/2014, 15:37
Thomas Daister

Thomas se puso delante protegiendo a Rosalía y desenvainó su espada.

-Esta noche no, bastardo -dijo con una amenazante sonrisa.

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06/02/2014, 15:39
Oana Radu

Oana imitó a Thomas y desenvainó también.

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06/02/2014, 15:40
Rodrigo

El joven se puso a un flanco de Rosalía espada en mano.

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06/02/2014, 16:04
Håkan den Svarta

Hakan profirió una estruendosa carcajada. 

-¡Por favor, Embaucador! ¡No compliques más las cosas! No para ellos, al menos... Tu sentencia ha sido dictada. No fallaré por segunda vez, pero las cosas pueden ser más fáciles para tu querida Rosalía. Oh, y por supuesto también parar vuestros lacayos. 

Reculó un par de pasos, pero la tensión de su cuerpo no hablaba de una retirada, sino de su estado de alerta. Y su sonrisa lo confirmaba. No estaba armado, pero por la posición en que colocó sus manos bien podría parecerlo. Como si fueran garras. 

-¿Dónde ha quedado la famosa lengua y diplomacia de Thomas Daister? ¿Dónde ha quedado esa buena costumbre tuya de mostrar tu manejo con la espada sólo cuando la palabra es insuficiente? 

Alzó las cejas en un gesto ligeramente burlón. 

-¿Es que ya no os agrada parlamentar lejos de ojos y oídos curiosos, ya estén cerca de vosotros o donde no podéis alcanzarlos...?

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06/02/2014, 16:39
Rosalía Caeiro

Refugiada tras las espadas de Thomas y Rodrigo, Rosalía observó al tal Hakan preguntándose qué asuntos eran ésos que decía querer tratar con ellos y cuántos más sabrían ya que acababan de llegar a Londres.

-¿Quién te envía, bárbaro? -preguntó sintiéndose segura detrás del Ventrue.

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06/02/2014, 17:09
Thomas Daister

Thomas frunció el ceño. Había algo extraño en todo aquello. Sin apartar la espada, que apuntaba a su asaltante, miró en derredor. Un sólo Vampiro atacando a los cuatro. Quizás hubiera más emboscados. Sin embargo había algo extraño en la forma en la que aquel enemigo hablaba. Parecía haber un oculto propósito en sus palabras.

-¿Qué sabes tú de mis modos y costumbres, maldito despojo? -le exigió saber.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Pedazo tirada. Thomas es Sherlock.