Partida Rol por web

Nos topamos con un armario y de el salió un hombre vestido similar a mis otros dos compañeros. Pero rápidamente observó que se dirige hacia Arry. Inmediatamente mi instinto me dice que me ponga entre la chica y el calvo.

Arry, acaso cconoces a este hombre.

avanzo tras mi compañeras, al cruzar la puerta pienso la palabra,y observo a Sydney con atención, me acerco a donde está y cojo la nota para leerla con atención.

-supongo que será lo mejor -digo con voz clara y las miro, acomodandome frente a otros tambores, y mirandolos, me concentro en ellos- bien debemos hacerlo de tal manera que lo hagamos todos juntos- explico- aquí dice que lo toquemos los seis tambores, diez veces, todas al mismo tiempo- repito lo que dice la nota- coloquemosnos frente a dos tambores cada uno de nosotros tres... como has dicho Sydney, intentare daros el tiempo -sonrio alegremente mientras me concentro- avisenme cuando esten listas

Pensó en la palabra clave cuando cruzó con las puertas junto a Sydney y Norte con cautela y evitar salir lastimada. Al entrar al pasillo, Sonea observó el lugar con atención por si había algo interesante, pero se desencantó al ver el instrumento musical del que sólo había escuchado hablar en su mundo. Sabía que era usado para crear melodías estrambóticas y que llegaban a lastimar el oído si se estaba cerca.

-¿Cómo... se toca esto? ¿Con las manos o con alguna otra cosa?

Sin embargo, al ver cómo se colocaban los demás frente a esos objetos hizo lo mismo y esperó indicaciones por parte de Norte.

-Creo que estoy lista... 

La voz de la joven revelaba su intriga ante esta experiencia, pero por otro lado le llamaba poderosamente la atención aprender algo nuevo y que sirviera para obtener la reliquia.

La felina escuchó las palabras de la dos patas en ese cuadrado y miro a su persona empezar a realizar cálculos matemáticos en el aire. Bostezó y su gran hocico dejó ver sus colmillos afilados, se relamió y se recosto sobre sus propias patas sin dejar de ver a la hembra del cuadro.

Stelmaria movía su cola de un lado a otro e intercalaba miradas para ver cómo resolvían lo que ella dijo. Le pediría ayuda al clan estelar, pero estaba consciente que eso debían hacerlo por sí mismos. Se le quedó viendo a la joven dos patas para saber qué hacía.

asiento, concentrado en los tambores.

-bien, aquí vamos, tocaremos a la de tres- explico- una... dos... y tres -a la palabra de tres comienzo a tocar el tambor con precisión, intentando hacerlo de manera tranquila y coordinada.

Al ver aparecer al que decapitó a mi padre los músculos se tensan mientras agarro firmemente a Aguja.

- Ese Bastardo mató a mi Señor Lord Edard Stark. - digo poniéndome en Guardia. Juré que lo haría pagar por ese crimen y por fin ese momento ha llegado. - añado avanzando lentamente hacia él sin bajar la guardia, atenta a todo cuanto nos rodea.

- ¿Que haces aquí Payne? - pregunto una vez he adelantado a Percy y entre mi enemigo y yo no queda nadie. ¿Has venido a morir? - añado sonriendo. La hora de la venganza está cerca.

Si mato a vuestro señor os ayudare encantado,Arry. 

El capitán se prepara para en caso necesario intervenir para ayudar a la chiquilla aunque no dudaba que seguramente se las apañaría ella sola bien. 

En el momento en el que Percy se para entre Arya e Sr. Ilyn la cabeza del hombre explota y salen dos cuernos colosales, el cuerpo empieza a crecer y a parecerse más a pedazos de piedra unidos por energía. En donde antes había un hombre, ahora se levanta un titán, Cronos el titán del tiempo, padre de los olímpicos camina hacia el grupo.

Así que Perseus Jackson viene a saludar a su abuelo ¿Como te lleva la vida sesos de alga?

Después de no hacer nada dos segundos, empieza a mirar a Diego y Arya.

¿Así que tienes nuevos amigos? Supongo que puedo comérmelos a los tres, seguro saben mejor que tu padre y sus hermanos, Poseidón estaba un poco salado de más.

Por más que les costó tres intentos, al tercer intento lograron coordinar perfectamente los golpes y apareció un pequeño altar con una tablilla, la misma tenía dibujado un tejón. Además apareció una puerta al final del pasillo que volvía a llevarlos a la primer habitación.

¿pero qué? ante mis ojos ese hombre se convirtio en el abuelo preferido de los semidioses. era el propio señor Cronos, y al parecer era el de mi mundo pues me conocia bien. mi cuerpo se tensa y el miedo hace que por un momento mi mente se turve, pero veo que crece y me llama como suele llamarme Annabeth. Luego se dirige a mis compañeros y eso me despierta.

Deja a mis comañeros en paz, una vez te vencí y lo puedo volver a hacer.

miro a mis compañeros y se que no podrian resistir a un encuentro con el titán, yo mismo casi muero la vez que lo enfrente.

Cuando la Cabeza de Payne "explota" me quedo perpleja por unos instantes justo hasta que ese ser o lo que sea amenaza con comerme.

- ¿Así que crees que sin conocerme de nada puedes amenazar con comerme y que eso va a quedar sin consecuencias? - pregunto sonriendo mientras me sitúo a la izquierda de Percy.

- Primero un enemigo mío, luego uno de Percy. - pienso mientras miro fugazmente a Alatriste. ¿Podría ser?

No me gustaba la idea de enfrentarme al enemigo del hijo de un Dios. Así que un plan empieza a formarse en mi mente.

- Capitán, si usted avanza hasta ponerse un paso por delante nuestro, ¿eso cambiará? - pregunto señalando a quien antes era Payne sin apartar la vista del nuevo sujeto.

Diego vio con cierta sorpresa el cambio del hombre al que había jurado matar Arya a un ser con cuernos que parecía conocer extrañamente bien al chaval "semidiós". Pensó levemente sobre la posibilidad de que ese ser fuese el mismo que antes les enseño a sus seres queridos malheridos y pudiese ser en ese momento igual pero con sus mayores enemigos. Vio que la pequeña espadachín parecía pensar igual y decidió que prefería enfrentarse a Gualterio Malatesta o al conde de Alquezar antes que a algo o a alguien que no sabía realmente bien que era.

Tal vez sea como vos digáis y si yo avanzo se cambie a alguien conocido mio,y en caso de tener que enfrentarse alguien contra su enemigo prefiero ser yo antes que vuesas mercedes.

Decidido a comprobar si era cierta lo que pensaban, dio un paso adelante desenfundando su espada y su daga vizcaína. 

Miro al frente con sorpresa tras haber logrado coordinar nuestros tamborileos y observo como se forma una suerte de altar con un objeto encima, mis ojos brillan emocionados y digo.

-¿lo hemos logrado? -creo que voy a ponerme a bailar, pero lo que hago es acercarme al altar y mirar la tabilla con el simbolo del tejon, es bonito- ¿quién lo lleva? -pregunto, mirando a mis compañeras.

Que valiente es esta niña y que inteligente, este ser se transforma en nuestros peores temores. Pero tendrá los mismo poderes de las entidades que copia o sera que su mayor arma solo sea asustarnos de muerte y esta criatura sea débil.

creo haber descubierto su debilidad, su mayor poder es causarnos temor y también es su única fuerza. si vencemos nuestros tenores seguro veceremos a esa critarura.

No hemos tardado mucho. Claro que tampoco era tan complicado.

-Yo misma, me da igual.- si nadie dice otra cosa, cojo la tablilla. -Deberíamos regresar. Si hemos terminado los promeros siempre podremos asegurarnos de que no molestan a los demás. ¿O se os ocurre otra cosa?

Y podría intentar un conjuro mientras esperamos...puede que sirva de algo.

Cronos empieza a desmoronarse como si fuera una montaña de arena, en su lugar aparece un hombre vestido de negro, con un sombrero de ala y un sable, el mismo mira a Alatriste y empieza a caminar hacia él.

Tanto tempo sin vernos capitano.

El italiano camina acercándose al grupo, pero mientras más cerca, ven como el cuerpo va mutando entre Slyn, Cronos y Malatesta.

Demasiado poco al parecer,hubiese preferido no veros mas.

Mientras no dejaba de vigilar al ser cambiante Diego se dirigió a sus compañeros: Alguno tendría que atacarle y ver que sucede. 

Sonea observaba todo lo ocurrido con evidente fascinación. Era la primera vez que tocaba un instrumento así y con el trabajo en equipo adquirieron una de las reliquias, por lo que en su rostro se formó una sonrisa genuina de satisfacción.

-Si gusta, lady Sydney, tome la tablilla y vayamos a reunirnos con los demás. Lo hicimos bien, juntos... ¿verdad?

La joven demostraba cierta alegría, pero rápidamente desapareció con la sugerencia de hacer algo para saber si el resto estaba bien. Su rostro adquirió concentración mirando afuera del pasillo y como si quisiera ver a través de las paredes.

-Veré si detecto algo...