Partida Rol por web

La Maldición de Hobb

Epílogo: Secretos en el futuro

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24/08/2007, 14:23
Antón Bocabierta

El gnomo, tal como se lo había propuesto, se dirigió a la habitación que les habían asignado y, tras sacarse su armadura y verificar que no faltara nada de su bolsa, se recostó en una de los camastros.

Como de costumbre su corta estatura le permitió repatingarse y retorcerse sobre el colchón sin inconvenientes, hasta encontrar una posición que sintió cómoda. Luego, suavemente, mientras por su mente pasaban flashes de lo que había sido la aventura, cerro los ojos y dejó que la modorra lo envolviera.

Pensando en su próxima compra, ya viéndose montado sobre un ferroz perro entrenado para combatir, una sonrisa se dibujó en sus labios mientras su consciencia se desvanecía en las brumas del sueño. Solo fueron unos minutos. Luego el único sonido que se escuchó en la habitación fueron los suaves ronquidos que dejaba escapar por su boca - Zzzzzzz -

Notas de juego

Master: Ya me dirás cuando me despierto.

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24/08/2007, 17:44
Aldeano

El grupo de tres humanos que están hablando te miran con desprecio cuando interfieres en su conversación, pero por suerte parece que están demasiado cansados como para crear problemas. El que estaba hablando continua, respondiendo ligeramente a tu pregunta e interrogandote a su vez. ¿Seguros? A saber que día esas criaturas osaran por adentrarse en la ciudad, si es que no lo han hecho ya alguna vez. Dicen que al viejo posadero lo asesino uno de esos engendros, pero que Enoch se apresuró a ocultar lo ocurrido. ¿No te parece eso extraño?

Instantaneamente el hombre agarra su jarra de cerveza y la alza en el aire gritando: !!!Por el viejo Yanran!!! Al momento prácticamente toda la taberna estalla en un grito similar, habiendo encontrada una magnífica excusa para apurar sus bebidas de un sólo trago. Puedes ver la cara de agotamiento del posadero cuando todos sus clientes le piden al mismo tiempo que les sirva más bebida.

¿Y vos quien sois, forastero? ¿Acaso un extranjero perdido? ¿o quizás un espía del enemigo? En estos tiempos uno no puede fiarse de nadie que no conozca, y vos pareceis demasiado dispuesto a recabar información. Al momento ves como los otros dos hombres toman posiciones a tu alrededor para impedir una posible huída. Esta claro que los aldeanos no buscan problemas, pero tampoco están dispuestos a dejar huir a un enemigo.

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24/08/2007, 19:26
Tristán Anasasi

Disculpe capitan.Queriamos agradecerle el esfuerzo que ha hecho por la comida.
Sabemos como estan las cosas por aqui y queriamos ofrecer nuestros servicion para ayudar con los heridos.
Si puede indicarnos donde debemos dirigirnos.

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24/08/2007, 22:05
Igreth

Igreth mira con despreocupación a los dos sujetos que se ponen a su costado.
De nada serviría contarles que él estuvo esa noche y que fue él quien dió caza a esos sujetos. Solo sería recibir más sospechas.
- No se preocupen caballeros, estoy de su lado. Mañana mismo parto, he llegado con el último grupo de refugiados- dijo haciendo seña al posadero para que le sirviera a él también. - Simplemente quería saber, para ver como actúan estos sujetos, y si ha pasado algo más que aquel episodio con el viejo posadero. Mis inquietudes no van más allá de un joven con un poco de miedo. Más que miedo, mucha precaución, quien dice que es lo que podremos encontrar por allí afuera.- terminó el elfo dedicándole una sonrisa a su interlocutor.

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24/08/2007, 23:08
Luthien Tinuviel

Luthien decide que sería mejor intentar dormir algo. Así, además de reponer fuerzas, dejará de pensar en todo lo ocurrido.

Así, buscando un hueco libre, suelta sus pertenencias y se tumba encima sin más, mirando al techo unos minutos. Cuando al fin cierra los ojos, se gira hacia un lado y se acurruca sobre sí misma.

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25/08/2007, 00:25
Aldeano

El semblante del hombre se tuerce en una sonrisa por unos momentos. Aún así no pareces lo suficientemente precavido como para resguardarte en la ciudad hasta que la situación sea segura. En mi opinión o eres un loco o un espía, y no pareces estar mal de la cabeza.

El hombre alza su voz todo lo que puede, dirigiéndose al resto de los que habitan en la taberna. !!!Mirádlo bien!!! Embozado en una capa y caminando sólo de noche por la ciudad. Decidme si no os parece un espía. De repente el murmullo de la taberna se cierne en torno a tu persona.

Un espía, el enemigo ha entrado en la ciudad, dentro de poco las criaturas estarán aquí.

Cuidado, podría convocar a diabólicos seres salidos de las llamas de los infiernos, será mejor alejarse.

...

No pasa demasiado tiempo antes de que alguien alce la voz que tanto estabas temiendo. !!!Acabemos con el espía, démosle el castigo que se merece!!!

Los hombres comienzan a armarse con cualquier cosa que encuentran a mano: jarras, ollas, utensilios de cocina...todo puede ser útil en un linchamiento. Intentas echar mano a tu espada pero antes de que puedas reaccionar tres hombres han inmovilizado tus brazos. Lanzas una patada a uno, que se ve obligado a retirarse, pero por desgracia no es suficiente. La marea humana cae sobre ti y sientes el golpe de varios puños sobre tu rostro y tu cuerpo. Maldita sea, jamás hubieras dicho que tras una semana de duros combates una rencilla de taberna podría acabar contigo. Intentas resitirte pero el golpe de un grandullón te aturde lo suficiente como para quedar casi inconsciente. Unos fuertes brazos se aferran por detrás a tu cuello cortándote la respiración. Tu vista comienza a nublarse poco a poco...es el final.

Un último pensamiento recorre tu mente: esos elfos oscuros correran a su aire por el reino, sin nadie que les haga frente. Y todo por culpa de unos estúpidos aldeanos con sus estúpidos temores...

Notas de juego

Es el fin, has muerto a manos de los aldeanos :S

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25/08/2007, 00:43
Mujer desconocida

Estas al borde de la asfixia cuando la voz de una mujer se alza imponente en la taberna: !!!BASTA!!! Inmediatamente tu ejecución se detiene. Por un momento levantas una plegaria a los dioses de tu raza, a los que has tenido olvidados tanto tiempo. Tus nublados ojos alcanzan a ver como una figura femenina embozada en una capa de color negro azabache asoma por la escalera superior. Ahora que lo piensas, iste una sombra en esa posición cuando penetraste en la taberna, pero su súbita desaparición te hizo pensar que no se trataba más que de una ilusión de tu mente.

Ineptos y estúpidos hombres. La mujer se acerca cada vez más a tu posición. Por un momento piensas que quizás se haya reservado el placer de matarte con sus propias manos. Intentas coger tu arma, pero estas demasiado débil para ello. La humana llega hasta ti y te observa unos instantes, antes de echar tu capucha hacia atrás y descubrir tu rostro al resto de los allí presentes.

¿Desde cuando un elfo resulta ser el espía de unas criaturas infernales como las que nos atacan? ¿Acaso estais todos ciegos como para no daros cuenta de su raza? A mi no me costo demasiado trabajo descubrirlo desde el triple de distancia que vosotros.

La mujer esboza una ligera sonrisa dirigida a los hombres de la taberna, en claro gesto de arrogancia y superioridad. Los oscuros ojos azules de la muchacha se clavan en los tuyos por unos instantes. Levanta, elfo. Y marchate de aquí antes de que otro imbécil te confunda con un zombie infiltrado en nuestras defensas.

Caes inmediatamente al suelo cuando los hombres te sueltan, pero a pesar de todo consigues incorporarte, con dolor, pero lo consigues.

Notas de juego

Huuuy ¿a que te has acojonado un poquitin? Lo siento, no he podido evitarlo :P

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25/08/2007, 05:16
Igreth

Igreth se levanta del suelo, un tanto mareado, pero mirando fijamente al hombre que inició su sufrimiento. Con parte del rostro maltrecho por los golpes, le dirige una torva sonrisa, en claro gesto de provocación. Volveré por tí pensaba su lado oscuro. Sus músculos se tensaron y luchó internamente por agarrar la espada y terminar con aquel hombre. Ya va a haber momento para eso...

Luego, cambió de dirección y se dirigió a la mujer
- Muchas gracias...- se quedó esperando el nombre de la mujer y luego continuó.- Debería invitarle unos tragos, como es costumbre en los de su raza, pero calculo que no soy bienvenido acá.- esperó un instante y antes que pueda hablar la mujer continuó.-... sin embargo me gustaría intercambiar palabras en algún lugar tranquilo..- y no tan separado de esta taberna, así puedo seguir y encontrar a este hombre. Probará el filo de mi espada, no comprendió, pobre hombre, que fluye sangre drow por mis venas, y para... ellos, no hay mejor cosa que la venganza bien hecha. Ruega que no tenga familia. la mente de Igreth se vió inundada por su lado drow, que quería venganza a toda costa, y sin importarle quien pagara por ello.

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30/08/2007, 18:58
Mujer desconocida

La mujer te mira con aire sonriente, como si lo que acabas de pedir fuera una absoluta estupidez. Las caras del resto de hombres reflejan una muestra de perplejidad y risa similar a la de la humana. Esperas a que la mujer te indique su nombre, pero tal cosa no llega a suceder, continuand algo contrariado con tu discurso.

Será mejor que te marches ya, elfo. Que te haya salvado de estos imbéciles no quiere decir que sea un ángel protector. La mujer da la vuelta e ignora el resto de tus comentarios mientras se dirige de nuevo al piso superior. Mientras ella sube la escalera, ves como ella te mira fijamente unos instantes. No sabes que querría decir con ello.

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30/08/2007, 19:20
Enoch

El capitán se sobresalta ante las palabras del paladín. Sin lugar a dudas estaba completamente perdido en lo que fuera que estaba pensando. Su rostro refleja su contrariedad ante el ofrecimiento de Tristán. Vaya, no pensaba que después de tan duro viaje aún os quedaran ganas de ayudar con los heridos. Os estaremos muy agradecidos por vuestra actitud. Al menos habreis ganado por siempre la gratitud y amistad de Enoch el´Astar.

El capitán de la guardia hace una reverencia con la cabeza en señal de agradecimiento, tras lo cuál os señala la puerta con la mano. Seguidme. Avanzais con el soldado, saliendo al exterior del edificio. Enoch os guía por la zona alta de la ciudad, en dirección hacia la gran estrella blanca que remata el templo de Elemuin, la diosa de todo el bien que se extiende sobre Galanor.

Al entrar allí el panorama es realmente asolador. Los bancos del templo han sido retirados y sustituidos por imrpovisados lechos donde yace un número de heridos difícil de contar a primera vista. A pesar de todo el ambiente está saneado. Desde luego mucho más que las cuevas orcas de Enshi Ka´Ningul. El aire que se respira es limpio y los enfermos están bien cuidados. Al parecer la mayoría de ellos sufren heridas superficiales. Son pocos los aquejados de alguna enfermedad grave. Parece que están en el templo a la espera de que llegue su turno de ser atendidos por los sacerdotes, ya que sus poderes diarios son limitados.

Notas de juego

Nugharth, he intuido que ibas. Si no lo haces avisa y cambio el mensaje. Robaina está de vacaciones, así que no esperes su contestación. Le pnejoteare si es necesario.

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30/08/2007, 23:55
Igreth

A igreth se le apoderan por unos segundos sus bajos instintos
¿pero en que estoy pensando? ¿No será una trampa? Je, no importa, no me asustan estos hombres. No dejaré que nadie se me acerque de nuevo. .
Sin perder tiempo, el elfo sigue a la mujer escalera arriba.

Si nadie se le interpone y llega cerca de la mujer le dice, sin dejar que ella hable primero:
- No eres mi angel guardían, pero tampoco le temo a ellos. Es muy importante que podamos hablar unos momentos.

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03/09/2007, 11:13
Nugharth

La mirada de Nugharth se pasea por el lugar, vagamente, observando el estado de los heridos. La visión le provoca una familiar mezcla de sensación, entre la inquietud evocada por el sufrimiento y la paz que trasciende la muerte. Acercándose al paladín, tanto que su aliento se hace incómodo, le dice en voz baja:

-Caballero, poco trabajo es que hacer aquí para yo. Puedo dar extrema unción a pocos que están a borde de muerte y sin remedio. Resto de heridos no sufren por largo tiempo, una vez que sus heridas son curadas. Aunque no sé si esos sacerdotes consienten siquiera que yo toco enfermos de ellos. -Casi por instinto, retrae ligeramente su brazo, intentando ocultar el brazalete de marfil. Aunque nunca ha tenido contacto personal con los devotos de Elemuin, sabe que alguien de su credo puede no ser bien recibido en circunstancias como esta.

Notas de juego

Voy voy... aunque mi idea de "ofrecer ayuda" a estas gentes es ligeramente distinta de lo que Tristán puede tener en mente juasjuas... No estaría mal que uno de los sacerdotes de Elemuin me identificase y se mosquease un poco }:oDDD

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03/09/2007, 21:05
Tristán Anasasi

Sin usar tus poderes curativos puedes ayudar con las heridas superficiales de modo que esto se vaya vaciando y parezca menor el mal,por ello no creo que tengamos problemas.Yo tratare de sanar a los mas graves.

Notas de juego

Pues dire usare mi asignacion diaria de imposicion de manos con los mas graves y la habilidad de sanar con los demas que pueda.

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11/09/2007, 15:53
Director

Tristán se acerca a aquellos que parecen más graves e invoca el poder de su dios. La mística energía fluye entre sus manos y se apodera del cuerpo de su paciente. Mágicamente, la gangrenada herida que se abría en uno de los costados del individuo cobra un aspecto mucho más agradable, aunque todavía no este del todo curada. Tristán utiliza sus habilidades sobre otro individuo con una herida grave. Aunque no cura por completo a ninguno de ellos, su actuación si que es suficiente como para asegurar su supervivencia. Tras ello, el caballero se dedica a entablillar huesos rotos o realizar vendajes comunes para aliviar el sufrimiento del mayor número de gente.

Por su parte Nugharth entiende algo distinto por ayudar a los heridos. El semiorco se acerca a aquellos que seguramente no vivan más allá de esa misma noche. Su peluda mano se extiende sobre su cuerpo mientras que unas palabras salen de sus labios. Ahora ya están listos para iniciar el camino de la muerte. Cuando el mestizo levanta la cabeza puede observar como dos sacerdotes locales lo observan con curiosidad. Sus ojos reflejan una clara desconfianza en el semiorco, pero los animos de los sacerdotes están tan mermados que cualquier ayuda es bien recibida.

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11/09/2007, 15:55
Mujer desconocida

Todos los hombres de la taberna observan anonadados tu conversación con la mujer, así como tu atrevimiento al llevarle la contraria. Para sorpresa de todos, la mujer abre la puerta de la habitación contigua, invitándote a pasar.

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11/09/2007, 15:58
Nugharth

A pesar de sentirse observado, el mestizo continúa con sus menesteres, concediendo la extrema unción a aquellos que acceden, y a los que no están conscientes para conceder su permiso. Ajeno a las miradas, pero siempre atento, esperando que en cualquier momento venga alguien a echarle de allí, termina con los moribundos, para después acercarse a Tristán y susurrarle:

-Poder otorgado a yo sólo debo usar para defender dogmas que yo creo, pero puedo ayudar con curación mundana como tu dices. -Tras la aprobación del paladín, comienza a ayudarle con los primeros auxilios.

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11/09/2007, 22:58
Tristán Anasasi

Gracias Nugharth toda ayuda es bien recibida.
Continuo con la labor hasta caer agotado y luego pretendo ir a descansar antes de abandonar el pueblo.

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12/09/2007, 12:10
Igreth

Igreth no se adelanta demasiado en la habitación, simplemente da unos dos pasos en el interior y le dice a la mujer
- Quería agradecerte, y si es posible hablar un rato de las cosas que están sucediendo acá.-

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12/09/2007, 16:20
Mujer desconocida

La mujer te mira un poco sorprendida y molesta: Agradecerme, ya lo hiciste abajo, no era necesario venir aquí para eso. Hablar sobre lo que ocurre...que te haya salvado de esos patanes no quiere decir que yo sepa algo sobre los hechos de mayor importancia que se suceden en la región. Creo que nuestra conversación no durara mucho. La mujer espera un poco más, esperando a que digas algo más antes de echarte de su habitación.

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12/09/2007, 22:30
Igreth

Igreth la mira sorprendido
- Creo que debe haber algo que te interese saber. O al menos no estarías con un elfo en tu habitación.- dijo Igreth con un extraño brillo en los ojos.