Partida Rol por web

Por mi parte, prefiero usar una "llama real". Así que uso una ramita para conseguir lumbre del Jack'O Lantern de Taar

"Si fuese tan fácil como llevar un Jack O'Lantern, nadie tendría miedo. Bastaría esto. Pero ahora sólo necesitamos ir al aserradero y continuar nuestra Sagrada Misión"
"No falta mucho, y estoy seguro, segurísimo, de que estamos cerca de romper la maldición del pueblo"

Calabazas encendiéndose y apagándose... aquello era demasiado extraño.

Por suerte, tenían al brujo con ellos...

- Gracias. -

Afirmó Yinhe en voz queda.

Zildjian asintió con la cabeza.. Vayamos cuanto antes a la serrería.. no hay tiempo que perder.. concluyó mirando por el rabillo del ojo a su alrededor.

Una vez pasado el susto por haberos quedado sin luz, se os acerca un gato negro al galope, ¿qué hacéis?

Pregunta: como esta es una aventura de una noche.. se supone que subimos en mitad de la noche sin hacer un descanso largo o como??

El gato resulta ser Azabache, el gato de la vieja bruja. Con sus pequeñas garras comienza a arañar un mensaje en el suelo terroso: "la bruja está sobre vo..." El gato recibe una descarga de daño y queda inconsciente. Una risotada malévola se escucha en todo el pueblo y, de pronto, lográis ver a unos diez metros por encima vuestro una bruja verde subida a una escoba. La moradora del aserradero os exclama:

-Vuestros amigos no han querido llegar a un acuerdo conmigo así que no tengo más remedio que cercenar vuestras cabezas antes de que lo haga el jinete...

Veo a la infame bruja. Un ser desprrciable que no merece existir. Asi que la miro, y la señalo inmediatamente.

"Bruja verde, sucia criatura infecta y odiosa. Las que sois como tu sois famosas por capturar heroinas y devorarlas. Eso no sucedera hoy ¡Ahora , CAE!" 

Si veo que esta al alzance de mi aluento, abrire el combate lanzandole mi Aliento Draconido, a ella Y A SU ESCOBA. Y si no, usaré un hechizo, Orden Imperiosa, con la orden de Caer.

La bruja cae al quemársele la escoba y cualquier posibilidad de negociar con ella se desvanece. Preparáos para el combate.

Todo se había salido de madre casi en un suspiro. Una bruja, propia de los cuentos de terror para niños, había aparecido montado en una escoba, cosa que, lejos de asustar el brujo, le produjo una carcajada.. 

Acto seguido, el paladín draconiano usó su espectacular arma de aliento que terminó por dejar al giamarga ciertamente patidifuso.. como si estuviera en una especie de guiñol con muñegotes que contaban historias de miedo, Taar tuvo que prescindir del sonoro aplauso, pues aquella nauseabunda saga venía con intenciones hostiles. De modo que Zildjian se caló su sombrero de ala ancha y se preparó a conjurar una descarga de energia arcana* para luego lanzar una serie de improperios en algún lenguaje desconocido a modo de maldición sobrenatural**.

Brujas, monstruos de papel... aquello parecía una historia de terror. Pero Yinhe era un heraldo de la vida, y no iba a permitir a la bruja salirse con la suya.

En cuanto tocó el suelo, la monje salió despedida, lanzando un lanzazo con su lanza firmemente asida en las dos manos, como siempre hacía. No iba a permitir que aquella bruja complicase demasiado las cosas, suficiente tenían con el jinete, del que ahora tenían el nombre. Seguro que la bruja sabía algo...

La lanza impactó notoriamente, no así la patada que trató de propinar después, que no alcanzó su objetivo, por poco.

- ¿Cortarnos la cabeza? Veremos, vieja bruja... -

La bruja encajó los golpes de la guerrera no sin aullar de dolor. Aquella vieja sacó toda la parte salvaje que tenía y se lanzó a por ella, con las uñas transformadas en horripilantes zarpas afiladas pero falló. Yinhe era extremadamente rápida.

Con dedicación a mi deidad, a mi credo y a la justicia, procedo a sacar mi motosierra para atacar a la bruja. El poder sacro corre por mis venas, y la furia de los dragones de antaño y la esperanza de los dracónidos del futuro me insuflan poder, Me piden que haga algo espectacular

"La única palibr... palobr... Esto... oye Taar" digo distrayendome "¿Cómo se dice 'Palabra' en común? Es que tenia una frase muy molona que decirle ¡pero no me sale!"
"¡No! ¡No puedo atacarla si no me sale la frase chula! ¡Son cosas de héroe!"

A Quatian se le encalla la sierra mecánica, quedándose sorprendido mientras la bruja corre con sus afiladas uñas hacia el sombrío hechicero.

El brujo apretó los dientes para usar otra muestra más de su repertorio "mágico", de modo que maldijo en otra lengua diferente* para, acto seguido, desenfundar su extraño estoque de hoja oscura, con extrañas marcas y glifos, de forma que intentando una finta para distraerle, buscó una estocada limpia que pudiera dañar a aquella criatura.

Con la agilidad digna de un gato, el bravucon giamarga consiguió asestarle una estocada directa en el costado, haciendo que la saga gritase de dolor.. 

Yinhe aprovechó que la bruja había fijado su atención en el hechicero para centrar de nuevo en ella sus energías.

Mientras ella giraba la cara para mirar al hechicero, la monje volvió a clavar su lanza y, aprovechando el impulso generado con sus dos manos, se alzó sobre la misma descargando una patada en la cara de la vieja enfurecida.

No contenta con ello, y viendo que sus golpes encajaban, soltó una mano de la lanza para soltar un codazo que la vieja detuvo, dejando de nuevo abiertas sus costillas para, con un impacto entrenado durante muchos años por la monje, apoyar su mano en el pecho de la criatura. El ki fluyó por su mano, impactando como una onda de choque. La mano de los monjes podía sanar, si, pero también podía ser un arma terrible.

La lanza se desencanjó de la bruja con la sacudida, devolviendo a la monje a un estado de preparación para la siguiente embestida.

La bruja, completamente anonadada por los golpes recibidos de la monje, decide maldecirla con un rayo de enfermedad pero Yinhe lo esquiva con pasmosa facilidad. Completamente derrotada decide hablaros:

-No me matéis y os revelaré la información que necesitáis. Podréis liberar a este pueblo de la maldición del jinete.