Amanda sonrie, todo estaria bien.
- Pues dadme pues esta noche Izam, solo hoy. Me haceis estar fiebrosa por su cuerpo, el poder tocarlo, besarlo, acariciarlo, solo de pensarlo me estremezco, nadie notara nada, nadie sabrá nada...antes del dia, podra olvidarse de mi
Le mira suplicante, como hacia a su principe anteriormente, cosa que le encantaba a Leonar, pero a Izam le gustaria?
El te mira y sonrie, toma tu barbilla con dos dedos levantando tu vista.- Si aspirais a ser princesa de una ciudad teneis que dejar de suplicar, si deseais algo tener el valor de tomarlo, dejar de comportaros como una niña o nadie os tomara en serio.- Te dice esperando tu proximo paso.
No me salio en novedades ¡Inaceptable! Ahora tendre que postearte el doble XD
Amanda sin dudarlo y siguiendo su cnsejo se lanza a sus labios acercandose cuanto puede a el.
Quiero algo...lo tomo
En su interior bullia esa fuerza de un principioo con el principe. Pero auqello era salvaje, diferente. Le encantaba.
Izam lo esperaba con deseo, dejandote dar los primeros pasos pero el no era un hombre sumiso y la parte superios de tu ropa quedo desgarrada por sus fuertes manos, apartando la tela que le estorbaba.
Sus besos llenaron tu cuerpo con una pasion animal que el principe jamas te habia demostrado. Viste en sus ojos que queria poseerte como ninguna otra cosa en el mundo.
Amanda lo mira lasciva y con una sonrisa embelasadora. Se deja hacer pero ella no quedaria atras, despojando a Izam de sus ropas superiores y besando su cuerpo medio desnudo. Acariciandolo, explorandolo con pasion y dulzura. Mordisqueando aqui y alla. Gimiente y jadeante ante sus caricias y besos.
Izam prolongo vuestro carnal encuentro durante horas, negandose a terminar, sabiendo que aquella podia ser la ultima ocasion de ver a la peliroja chiquilla del principe.
La pasion alli derramada pudo haber llenado un rio, pero como todo, termino.
Izam beso a Amanda en los labios, saciado de una sed que llebaba años sin contentar y comenzo a vestirse, dejando a la chica con la sensacion de haber tenido la experiencia sexual mas intensa que podia recordar.
- Debo irme Amanda y tu tambien, te echaran de menos pronto y no seria bueno para ninguno que nos encontrasen asi.
Amanda se viste y sonrie. Estaba maravillada con lo ocurrido, y deseaba mas y mas pero como bien se dice. Lo bueno siempre termina cuando menos lo deseas.
- Está bien, tiene razon, ahora debo irme, pero no te creas que te libraste tan pronto de mi. Volvere a buscarte, y quien sabe...quizas acepte eso del lado oscuro Izam. No seria mala idea.
Sonrie, deseaba irse con él, poseerlo noche tras noche, pero ahora debia ocultar cosas, debia silenciar aquel encuentro, lo haria, y conseguiria lo propuesto.
Izam se marcho costandole separarse de ti, pero nada mas quedaste sola notaste unos ojos a tu espalda. Un maldito malkavian habia estado observando ¿Desde cuando? No podias saberlo pero si hablaba tu pellejo no valdria nada.
- Buena noche mi lady.- dijo con su habitual sonrisa.- Sali a cazar grillos y me encontre con una liberula ¿No os parece curioso?.- te pregunta mostrandote una luciernaga dentro de un bote de cristal.
- Es una luciernaga...Malkavian....¿Que haces por aqui? no es tu territorio...
Quisiera degollarlo...aun poseia la daga...que pasaria? y si lo mordia? aun tenia el mejunje de Izam...no notarian la diablerie...del malkavian....
- Los territorios son solo para comer y no estoy cazando comida, solo insectos nadie se come los insectos ¿Sabes por que? Porque son pequeños y tienen poca carne, mal sabor y te puedes poner malo por hacerlo.- dijo el malkavian y casi viste un doble sentido en eso de no comer a los inferiores por las cosecuencias ¿Era casual o leia tu mente?
El chico seguia mirando el bicho del bote.- Me llamo Lucios, no malkavian, malkav era mi padre...No me molesta pero es como si a ti te llamaramos Leonardivian y respecto al insecto. Estoy seguro de que es una liberula, puede que tu no lo veas bien, que te parecca que brilla mucho pero no brilla para nada. Asegura cuando ves claramente que es una pobre luciernaga.
- Y que hace...Lucius, hijo de Malkav aqui? hay luciernagas por todos lados. No pudiste quedarte mas cerca de tu hogar?
Maldita sea...lo matare como sepa algo.o haya visto algo.
- Y que? muchos bichos esta noche?
- Hay bichos por todas partes pero cada uno vive en su hogar, por aqui habia grillos el año pasado, este ya no. Es curioso como desaparecen algunos bichos... me pregunto si los que vuelven les extrañan..
El chico se queda un momento pensando, como hablando para si, moviendo los labios sin pronunciar palabra hasta que reacciona y vuelve a hablarte.- ¿Y que haceis vos? ¿Tambien estais cazando bichos lejos de casa? Hay que tener cuidado con los bichos de la noche ¿Sabe? Aveces son peligrosos y muerden profundo, con mucho veneno.
-Lo se Lucius, lo se. Hay bichos que muerden demasiado, y que quizas gusten en hacerlo
No sabia porque pero tenia ganas de morderle y matarle ali mismo.
- Decidme, Lucius, no habeis visto nada raro esta noche? he visto que el ambiente está muy movido esta noche.
Me voy a dormir, mañana mas. ya vere como me quito al malkavian de encima XDDDDD
El malkavia te mira serio de repente.- Amanda, bajo ese pelo rojo vuestro hay una larga cabellera rubia ¿Cierto?.- pregunto con interes y despues resoplo.- Os hemos visto intimar con Harol pero a nosotros no nos importa a quien dais vuestro afecto y no vamos a decir nada. - dictamina con mas lucidez de la que imaginabas que pudiera tener.
- Nos vamos a ir esta noche y no volveremos en mucho tiempo, Los Gangrel tambien se han ido, solo queda Lavenko en la ciudad. Ya no es divertido salir a jugar, solo quedan malos bichos por las calles.- dice mientras su lucidez se disipa.- Solo queriamos avisarte de que algunos bichos no se muestran como son.- dice enseñandote de nuevo el bote, donde la luciernaga a desaparecido y en su lugar solo hay una cucaracha gigante.- ¿Lo comprendes Amanda?
Amanda sonrie y mira con curiosidad al Malkavian.
- Comprendo todo lo que dices Lucius, y me alegro de tu consejo y advertencia. Siempre supe que tras vuestra locura hay una gran sabiduria. Lastima que os vayais. Perdoname por la falta de respeto Lucius. No me gusta dejar cabos sueltos, y quizas me puse algo nerviosa. Pero aunque nadie me tome en serio puedo dar mucha guerra, espero....no tenerla con vosotros.
Su seriedad atemorizaba, y el rojo color de sus ojos era fuego llameante para el malkavian. Bella y fogosa como la mayor amante. Pero quedaba lejos de las manos de Lucius.
Nosotros no buscamos pelea con nadie, solo... observamos los diferentes bichos.- te dice sonriendo.- Vos sois uno de los mas curiosos ejemplares, sois bonita pero pecais...dijo, picais.- dice corrigiendose como si hubiera errado a posta.- sois una abeja... una abeja ¿Reina?.- pregunta con un gesto interrogante antes de emprender alejarse mirando como si siguiera el vuelo de una mosca imaginaria.- Nos volveremos a ver.- te dice plenamente convencido de ello.
- Espero que tu lengua no sea tan larga como vuestra mente.
Aquello sonaba a una clara amenaza. No se dejaria cazar, y menos por un loco malkavian.
¿Volver a vernos?Quien sabe, quizas ellos me den la solucion de lo que deseo, quizas su apoyo me sirva para llegar a ser reina...
Sonrie y se dirige de nuevo a su casa.
Algunos recuerdos del principe te asaltan... algo relacionado con los tremere.
un proyecto secreto para mejorar la especie, vampiros resistentes a la luz del dia.
La idea te asalta de pronto, sobrecogiendote.
Tremere??? que diablos...quizas debiera ir a verlos...quien sabe, tener aliados siempre es bueno, y los tremere son una especie de lo mas curiosia y rara.
Una sonrisa aparece en el rostro de la toreador, quizas debiera ir a visitar al o a la primogenita Tremere. Su apoyo a cambio de que les dejaria hacer cuantos experimentos deseasen.