Partida Rol por web

Prólogo:

La noche cae sobre las caravanas antes de llegar a su destino, la capital de Arhynn se encuentra a casi medio día de camino al sur. Una posada, junto a la villa de Lord Theodir, da cobijo a todos los invitados que el Barón Greigory ha convocado para un consejo de urgencia, se ha de tratar la inminente invasión de las bestias y monstruos sobre sus tierras. Os adentráis en su interior con premura, al parecer quedan pocas habitaciones libres para descansar y el posadero intenta habilitar las más grandes para que los invitados puedan compartir un lecho.

Saludos viajeros, sed bienvenidos a la mejor posada de Arhynn, veo que la noche se ha cerrado pronto, cómo veis esto está abarrotado. Se presentó el posadero con entusiasmo, sonriendo con encanto. Uno a uno solicitasteis cobijo al posadero y aunque parece estar al completo, no puede negaros su servicio, por lo que os asigna una habitación de cuatro camas. Habéis tenido suerte, mi hijo acaba de preparar la última habitación que nos queda, seguidme, no es muy grande, pero está junto a las escaleras, justo encima de las letrinas. Una leve carcajada incómoda se le escapó tras tan desafortunado comentario. El caprichoso destino ha decidido que compartáis el descanso esa noche, antes de emprender vuestro camino a la capital. Tras dejar vuestros apeos a buen recaudo y acomodaros en la habtación, el amable posadero regresa para ofreceros una proposición que no podéis rechazar. ¿Qué tal todo? Espero que sea de vuestro gusto. Como soys los últimos, os invito a una cerveza, cortesía del señor de la villa. ¡Vamos! bajad al salón principal antes de que se acabe.

Vuestra leyenda aunque joven, es conocida en Terrinoth y no tardáis en reconocer al resto de héroes que comparten sus aventuras y hazañas en las mesas, acompañados de una buena cerveza aguada casera. Se percibe cierto ajetreo en el salón principal, todos murmullan sobre un evento social que se celebrará en la villa de Lord Theodir mañana por la noche, pero se desconocen los detalles.

Arquea la ceja, y luego separa los ojos de su libro.
- Perdonar que no me halla presentado, coff coff... (toma un sorbo de liquido que le había servido el posadore hacia varios minutos para aclararse la voz), mi nombre es Leoric, si, ya, seguro que habéis escuchado grandes hazañas de mi, pero soy una persona humilde y estudioso de las artes de las runas. Y ya que vamos a compartir esta noche, como os llamáis?.
Y dicho esto, empieza a mirar a cada miembro de la mesa esperando respuesta.

Tras dias cabalgando casi sin descanso, la habitación de la posada, aunque pequeña(y más teniendo en cuenta que tendremos que compartirla entre cuatro) me resulta tan acogedora como el mejor de los palacios. Con presteza, dejo mi poco equipaje y mis abundantes armas bien apiladas en un rincón y me dirijo a darme el baño que mi cuerpo lleva reclamando durante dias.

Ya algo limpio y relajado, me dirijo a la sala comun, donde uno de mis compañeros de habitación ya se encuentra disfrutando de una cerveza inmerso en un libro.

Leoric... si, he oido hablar de vos, aunque no tenía el placer de conoceros en persona. Yo soy Avric Albright, discípulo y defensor del templo the Therion en Sandalar. ¿Así que vos tambien habeis sido convocado al consejo? Según la misiva del Barón, el asunto a tratar es muy grave, pero no daba más detalles. Me pregunto que asunto será tan importante como para convocarnos con tal urgencia. 

En ese momento, una de las camareras llega y deposita una gran jarra de cerveza espumosa ante mi, a la que le doy un gran trago tras agredecerle el servicio con una moneda y una sonrisa.

No es la primera vez que Dezra comparte habitación con otros hombres. Aunque muy femenina para unas cosas, para lo concerniente a marcar límites es peor que cualquier hombre.

Después de un largo caminio está bastante cansada y decide asearse y relajarse. Después se dirige a la sala principal y se acomoda entre sus compañeros de aventura.

-Leoric y Avric, comvocados al consejo como yo. Las habilidades de todos serán indispensables en cualquier cosa que nos propongan resolver. ¡Qué seria de Terrinoth sin los héroes que la mantienen viva y llena de color! Hace una pausa y observa como el resto de la mesa la mira fijamente. Después se pone a beber su zumo de grosella.

A escuchar la voz de la joven, vuelve a levantar los ojos de su libro y la observa.
- Cierto es mi señora. Creo no a ver escuchado su nombre, era?
Y disculparme Maese Avric, la lectura de este libro sobre la interacción de las formas del mundo terrenal en el multiverso interno de los planos subcutáneo de los Avernos, me esta absorbiendo todo mi interés, y no he blindado con usted.
Me temo que este tipo de reunión se debe a la máxima afluencias de bestias y monstruos en el reino, mucho mas de lo normal, y se espera que algún oscuro plan este detrás de todo esto. Claro, es mi conjetura, aun no tengo hecho palpable de los acontecimientos, pero hecho un estudio apriori es mi postura.
Levanta su copa ya a temperatura ambiente y espera respuestas de sus compañeros de mesa.
- Por el reino!

Un orco al que se le veia asomar los colmillos , pero no por ello es que estuviera malhumorado, sino porque era herencia inherente de esta raza brutal y salvaje, se encontraba pasando su larga uña del dedo indice por un grimorio de intrincadas runas

O disculpad estaba con mi lektura diaria de grrrimorios...., esta semana toka "Kompendio de maggria salvaje para orkos, volumen 3" Veo que usted tambien lektor "Planos subkutaneos de los avernos",  debe ser lectura interesante.....Enkantado de konoceros Mi nombre es Elder Mok...... Portaqvoz de eskpiritus de las trikbus de los orkos negros del Boskew Sombrrio

Disculpad mi acento, acostumbrakdo a lengua orca, idioma comun tener que acostumbrar porke pasar mucho tiempo.

La noche pasó veloz entre risas, cervezas y peleas de enanos. Quizás más de la cuenta, pues avanzó demasiado hasta que os decidisteis retiraros para descansar. Fue a media mañana cuando el posadero os imploro que abandonarais la habitación para poder prepararla y fuisteis conscientes de vuestro retraso. El consejo comenzaría pronto, por lo que los cuatro héroes cogieron el camino sin perder un segundo, juntos hacia su destino, por desconocido que llegara a ser.
El avance por el camino hacia la capital parecía más tranquilo de lo que un principio habíais esperado, teniendo en cuenta la cantidad de caravanas que se apearon anoche en la posada. La imagen de la capital Ahrynn pronto dejó ser parte del horizonte para imponer su grandeza frente a vuestros ojos. No hubieran pasado apenas unos minutos hasta llegar cuando unos gritos os sorprendieron a la derecha del camino. Vuestros pasos se aceleraron alertados en dirección hacia el lugar en el que se confirmaban los temores del barón.
Al fondo de una pendiente se veían los restos de una pequeña caravana destrozada, con ligeros restos de sangre que anunciaban un fatídico desenlace. Al poco de acercaros, el cuerpo de un guardia aterriza cual muñeco de trapo frente a vuestros pies. Pese a las heridas, la sangre deja entrever la insignia del Barón Greigory en su armadura. Su débil mano se eleva con su mirada hacia el grupo de héroes y exhala escuetas palabras con dificultad. Detenedlo… por favor, Mutilador conoce el camino… La tos se apoderó de su voz. ¿cómo es posible? Deb… su consciencia se desvaneció desplomando su brazo en el suelo.

En dirección contraria al soldado, se confirmaba con facilidad el culpable de tan desalmado acto. La figura de dos imponentes ettins de dos cabezas despachaban a un par de soldados más por los aires con tal facilidad que pareciera tratarse de pura diversión. La sonora celebración de uno de los ettins tras acertar con su garrote a uno de ellos aclaraba las dudas.
Entonces fue cuando una de las cabezas demostró una inteligencia más desarrollada de lo que cabía esperar de tal criatura. ¡Vamos pequeños! ¡Corred! La profundidad de su voz se apoderaba de vuestros corazones ¡O Mutilador os comerá! Tras su amenaza las tres cabezas restantes repitieron al unísono con escasas muestras de inteligencia. ¡Mutilador!

Un grupo de goblins se escurrió entre la maleza armados con arcos para alcanzar el camino. Uno de ellos, lleno de cicatrices, los iba guiando desde una maltratada rama, para dirigirse hacia la ruta secreta que daba acceso a la capital. Cómo habían llegado hasta allí. En vuestro interior sentíais el deber de detenerlos, tenían que pagar por sus crímenes. Haciendo acopio de coraje, vuestras miradas se cruzaban formando un extraño vínculo que os unía, había llegado la hora de demostrar vuestro valor, aquello por lo que se os consideraba héroes de Terrinoth.

MAPA

MAPA ACTUALIZADO

Monstruos:

Gran alcance
Lanzar: Elige un héroe y hace una prueba de fuerza. Si falla, desplázalo tres casillas y sufre uno de daño.

Avanza entre sus aliados hasta cerca del cruce de camino. Se escuchaba movimiento a su derecha, pero no podia ver de quienes se trataban, pero si a dos gigantesco Ettin, y uno mas imponente aun si cabe aun, que sin duda se trataba del llamado Mutilador. Apunto con su orbe al Ettin mas cercano
- criaturas, sentireis la ira y la fuerza del Gran Leoric del Libro, defensor de este reino
Dichas estas palabras, un chorro de energia mistica salio disparado del orbe, estrellandose en el suelo. El ettin paso su.mirada de inquietud a una sonrisa maquiabelica a ver que el rayo habia fallado, y miro fijatemente al mago y empezar a chocar su maza en la otra mano
Leoric levanto su dedo indice y lo movio negativamente.
- Tsk, tsk, no tan rapido, amigo mio.
Con un movimiento de mano, la bola de energia salio.disparada del suelo hacia el sorprendido Ettin, que ledio tiempo a batear la bola.y.marcar un Home Run

Avric se alejó de sus compañeros hacia el otro lado del claro tras observar como había algo extraño entre un grupo de bultos amontonados cerca de una de las carretas. Probablemente se tratase de alguna mercancía, aunque tambien podría ser algo importante.

Al agacharse a examinarlo más de cerca vio un pequeño cofre lleno de frasquitos de cristal. En su mayoría estaban rotos, pero había uno todavía intacto, lleno de un líquido de aspecto extraño.

El viejo orco vio brillar algo cerca del carromato y lo miro con avariciosos ojos , sinembargo, Avric, fue mas rapido y dio con el tesoro antes que el , asi que despues de una pasada por cerca del carro, ocupo una primera posicion , pues su rama era de cuerpo a cuerpo y aunque con gran alcance de debia posicionar en primera linea

Se adelanta desde su posición hasta cerca de Leoric. Desde allí puede obsevar la situación y meterse con aquellos grandullones malvados que les amenazaban. Viendo los dos Ettin al frente, la nigromante convoca a uno de sus reanimados.

-Ahi va un poco de ayuda desde el otro lado.

De pronto, en una porción de tierra justo delante de Dezra algo aparece súbitamente. Es...¡una mano! Si, una mano surge de la tierra y le sigue todo un brazo. En seguida todos pueden observar como un cuerpo putrefacto ha surgido de la tierra y con cara amenzadora mira fijamente a los monstruos que tiene enfrente.

-Sifrina difira estir narck. ¡Unsedous! A una orden de la maga, el no-muerto convocado avanza hacia los enemigos con paso lento y decidido.

La voz de los ettins resonó de nuevo contundente. ¡Cruzad! Sus pesados pies comenzaron a elevarse para trazar lentos pasos hacia el grupo de héroes, mientras los goblins se escabullían amenazados de ser pisados en cualquier momento. Mutilador acabará también con vosotros. Mutilador… mu… tiladooooor. Esta vez las cabezas repetían con desgana el nombre de su cabeza líder con ritmo, síntoma del esfuerzo que sus mentes realizaban para seguir las instrucciones que acababan de recibir. Mutila...dooor.
Los goblins siguieron los pasos del líder como una manada de cabras, continuando su avance pese a que este se detenía a mitad de camino, aprovechando para disparar una de sus ortodoxas flechas. Parecía intentar asegurarse que todos llegaran pronto a la ruta de Ahrynn, pues sus secuaces temblaban de terror sólo de pensar en las posibles represalias por parte del tal Mutilador.

MAPA

MAPA ACTUALIZADO

Las bestias comenzaron su ofensiva desordenados, pues el gran Mutilador deseaba acabar con todos con sus propias manos. El primero en sentirlo fue Mok, que tras ver como el gran garrote hacía pedazos el cadáver que Dezra había despertado, un fuerte golpe con el envés de su otra mano le arrojaba varios metros por delante. Suerte que el aterrizaje se produjo en mitad de una charca, evitando peores consecuencias, pues estas llegaron pronto cuando el segundo ettin seguía los pasos de la cabeza pensante. En un alarde de maestría, concentró su defensa en una armadura pétrea que absorbió el fuerte golpe con facilidad.

Llegado el momento de los inquietos goblins, descargaron sus flechas sobre el resto de héroes con gran descontrol. Apenas suponían un peligro para los experimentados acólitos de la magia. La peor parte llegó para el sabio Leoric, pues quedaba desprotegido y sufría las consecuencias de enfrentarse a tan cobardes criaturas en vanguardia. Era el momento de sopesar el siguiente enfrentamiento, pues podrían caer en la desgracia de ser tan efectivos como los goblins, ofreciendo así una gran oportunidad al despiadado Mutilador.

Las criaturas avanzaron como una avalancha, cebándose con el mago y sus compañeros. Mutilador se escondía detrás de sus secuaces, por lo que era difícil lanzarle el ataque mágico. Así que opto por atacar al goblin jefe, que ordenaba a los suyos a disparar de forma mas mortífera. Lanzo dos ondanas de su Orbe rúnico, pero el resultado fue nefasto, peor de lo que esperaba.
Van a pasar!! Van a pasar!! se dirigen al pueblo!!
Advirtió a sus compañeros, como si eso sirviera de algo.

La nigromante observa el avance de los grandullones y de los pequeños goblins y encaja la flecha del goblin como si ya estuviese acostumbrada a las heridas en batalla. Muchas han sido las batallas que Dezra lleva en su curriculum, esto sólo es un juego para ella.

-Bien, mi engendro no-muerto ha servido de parapeto. Ahora es el turno de que prueben mi magia. La nigromante alza su mano y una luz brillante y verdosa comienza a formarse iluminando el contorno de su figura. Una bola de energia se forma en su mano y la mujer la lanza sobre el más fiero de los pequeños goblins.

-No os metáis con los mayores, pequeños seres infames. Ahi va un poco de magia negra. El rayo de energia sale del guante de Dezra en dirección al pequeño lider goblin.

Después de comprobar como impacta el rayo en el lider de los goblins, Dezra vuelve a invocar a su reanimado.

-Sifrina trisra estir sock. ¡Astrucdu goblin fustre! Ordena a su no-muerto que ataque al goblin.

Los goblins, fieles a su naturaleza, en lugar de pelear con honor, se intentaron alejar tan rápido como sus cortas piernas se lo permitían. Si les dejaban escapar, algún pobre campesino sufriría por su causa, y eso es algo que jamás se perdonaría.

¡¡QUE LA LUZ DE THERION OS CIEGUE VILES CRIATURAS!!

Con el nombre de su señor en la boca, se lanzó a la carga directo hacia la masa de goblins del camino arrollando a uno de ellos con el escudo antes de aplastarle el craneo con un golpe seco de la maza

Al grito del goblin que apagó con fuerza la maza de Avric, el pánico se apoderaba de todo el grupo, pues quedaban rodeados por la determinación de un prometedor grupo de héroes y la furia de un sádico y enorme ettin. Pero había algo más que se quería apoderar de las mentes de aquella contienda…

Una sombra se deslizó desde la profundidad de la charca, abrazando el cuerpo del anciano Mok, que había quedado paralizado ante tal visión, para enfrentarse contra su alma. La voluntad del chamán luchaba con tenacidad, tanta que consiguió deshacerse de su control con extraños gestos que le llevaron a un trance místico propio de su tribu.

MAPA

Un desorientado goblin apareció entre la maleza, siguiendo la estela de sus compañeros. Que el líder se mantuviese firme en el camino indicaba que seguramente llegarían algunos más.

El viejo Mok necesitaría ayuda pronto, los dos gigantes habían tomado la charca para defender el avance de sus secuaces, algo que os sorprendió, pues Mutilador no era del tipo que pensara en las consecuencias, algo parecía guiarlo a cumplir su objetivo, pese a su estupidez.