Partida Rol por web

La Tierra Prometida

III. El Peaje de las Montañas

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27/01/2020, 16:38
Lestra

Una mujer de negros ropajes apareció desde las espaldas de Argasto. Estaba cubierta por una sucia capa gris, pero podíais apreciar que debajo de la misma había una pechera de cuero tinto que le brindaba protección, además de una espada corta y una pequeña ballesta que pendían de su cinturón. Gael recuerda a aquella dama, la había encontrado de casualidad en el Fangal hace varias noches para verla desaparecer ante sus ojos y ahí estaba. Tan real como lo es el aire.

—Y yo soy Lestra Nodringer. Agente de los Mantos Negros —Dijo, y parecía que los hermanos se removieron en un escalofrío—. ¿Nos hemos visto antes, Pansar? Por lo que veo te has hecho amigo de un hombre que despertó el interés en toda la caravana.

Lestra dirigió entonces su mirada hacia Eyvind, y sonrío falsamente. Aquella mujer era una Manto Negro; cazadora de monstruos, brujos y algún que otro inocente que sepa demasiado. Su organización es un mito temido entre el populacho, ya que su llegada solo presagia tensión para todos los que le rodeen. Argasto se mantiene en silencio. El patrón de la caravana parecía haber viajado con ella en todo momento... ¿Pero por qué habría salido ahora a la luz del sol?

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27/01/2020, 16:48
Narrador

Cada uno se había enfrascado en sus propias actividades por separado, así podrían cubrir más campos en un menor tiempo y podrían regresar antes al Paso para reunirse con el resto de la caravana. Rodrig y Telk encontraron un buen árbol que cortar mientras que a su alrededor las mujeres de la caravana empezaban a buscar entre los arbustos algunas con arcos en mano por si encontraban algún conejo en los alrededores. Demeon y Eilene se decidieron a buscar algún rastro y se separaron un poco en su búsqueda por la presa.

No tardaron mucho en encontrar un rastro entre el suelo inundado por las caídas hojas otoñales. Todavía no caía suficiente nieve como para cubrir la pequeña arboleda y eso hizo posible el hallazgo. Los dos cazadores atravesaron matorrales y esquivaron árboles con la vista pegada al suelo y los oídos detectando hasta el crujir de las ramas.

Demeon no halla todavía ningún animal pero si que logra hallar varios racimos de solea, una flor alabada por cualquiera que haya sufrido heridas en la intemperie. El aceite que se extrae de sus largos tallos junto con el aguardiente sirve para crear una solución tópica para la desinfección de heridas o esterilización de instrumental. Aquello sería bien apreciado por Edgar aunque si lo guardan tendrían un salvavidas casi inmediato en las alforjas por si una herida empieza a cobrar mal aspecto.

Eilene pega un sutil silbido y Demeon vuelve a unirse en su búsqueda.

Más temprano que tarde encontrarían su hallazgo... Una cornamenta se asomaba tímida a través del sotobosque. Ocultos y con las armas preparadas el par encuentra un ciervo solitario, que rasca el suelo selectivo en búsqueda de alimentos. El animal trota despacio, orgulloso como si el bosque fuera suyo. Encontrar ese tipo de animales es casi imposible en el interior de la marchita Alberetor. La felicidad se acaba cuando un fuerte sonido se escucha a la distancia, ramas golpeándose entre sí y un fuerte golpe en el suelo bastan para que el animal levante la cabeza y empiece a trotar alejándose, alertado pero inconsciente de los dos depredadores que le acechan. Todavía estaba a tiro, pero si le dejaban ir habría que seguirlo...

Mientras tanto, Rodrig ve como Telk se ríe ante su desgracia: casi había sido aplastado de no ser por la advertencia de Rodrig cuando cayó el cedro. El par se apresuró a golpear el árbol con sus hachas mientras que sus acompañantes empezaban a reventar las ramas para atarlas con cuerdas. Era una tarea larga y laboriosa, pero con un trabajo en común lograrían terminarla entre todos, allí había suficiente leña como para alimentar las hogueras de la caravana durante todo el viaje. Solo haría falta terminar el trabajo...

Notas de juego

Demeon y Eilene pueden seguir al ciervo con una tirada de Discreto (+3) a ver a donde les lleva o intentar derribarlo a distancia con Diestro (+2)

Demeon obtiene flor solea

Rodrig sigue cortando el árbol en tocones, el resto del grupo le ayuda a remover las ramas y con eso tendrían suficiente leña. Aunque es un trabajo lejano a terminar.

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28/01/2020, 19:38
Eyvind

Con algo de sorpresa, Eyvind se acerco al patrón y sus acompañantes con su bastón. Aunque estaba escuchando atentamente, las palabras de Nodringer le hicieron olvidar casi por completo las de Argasto, con quien intercambio una mirada empapada de duda. Su rostro entibiado palideció levemente antes de hablar, sabía tanto acerca de los Mantos Negros como cualquier hombre con un oído avezado, pero no cometería el error de subestimar la sospechosa presencia de uno de ellos.

—Pensaba que los Mantos Negros eran un mito, Lestra Nodringer. ¿Que hace aquí? —Los labios del mago se cerraron e intercambió la mirada entre ella y Argasto, a sabiendas de que uno tendría una respuesta, sólida o no. 

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28/01/2020, 21:39
Gael Bedlam

Espero que así sea, Ludo, porque en lo que queda necesitamos todos los ojos y oídos posibles para evitar percances, y todos los brazos prestos para poder sortear cualquier eventualidad.– dijo el Pansar mirando de soslayo al enfermo, e inclinándose hacia su hermano, prosiguió en voz baja –De estar yo en ese estado, probablemente no podría sostenerme recto. El viejo Edgar podrá darle algo, por lo menos para atenuar el malestar.– El noble había tenido hasta ahora poco contacto con los norteños. Le parecían unos sucios salvajes sin modales ni honor que merecían ser domesticados por su propio bien. En el caso de estos dos, a penas había intercambiado palabra con ellos en todo el viaje. De hecho, pensaba que no sabían hablar el idioma de la civilización. En cualquier caso, ahora mismo poca diferencia se podría hallar entre ellos dadas las condiciones en las que se hallaban, más que por la armadura de unos y los tatuajes de otros. Además, el noble pensaba que, después del incidente con el ladrón, todos los integrantes de la caravana se encontraban en el mismo barco y para llegar a buen puerto no podían prescindir de ningún hombre.

El Pansar se sorprendió gratamente cuando Argasto volvió y presentó al capitán. Con un gesto antaño protocolario saludó al capitán, y agradeció las palabras del líder de la misión. –Me alegro de escucharlo, Argasto. Esperemos que los otros no hayan tenido incidentes y vuelvan pronto.

El militar quiso aproximarse al capitán para conocer más sobre su situación y la del asentamiento fronterizo cuando se vio sorprendido por la aparición de la misteriosa mujer de ropas oscuras. Gael quedó contrariado cuando ésta reveló su procedencia e intenciones, y notó el cambio de humor de los hermanos bárbaros. ¿Por qué aparecía ahora? ¿Tenía negocios en este puesto, o estaba interesada en alguno de los objetos que tenían ellos en custodia? –Humm... mi nombre es Gael de la casa Bedlam. Saludos capitán Hudson y... dama Nordringer. Creo recordar habernos visto al inicio del viaje. ¿Qué asuntos pueden traer a una manto negro hasta el cagadero del mundo? ... Oh, con ello me refiero al Fangal, Capitán, espero no se sienta ofendido.– dijo con una media sonrisa. Y respondiendo al comentario sobre Eyvind –¿Os referís a este ratón de biblioteca, mi señora?– siguió con una pequeña carcajada al tiempo que le daba al magi una palmada en la espalda –No debéis preocuparos, el negocio de la Ordo está en buenas manos con él. Hemos prometido proteger al muchacho hasta su academia.

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30/01/2020, 09:23
Eilene

Lo tenía ya en el punto de mira, sólo tenía que disparar y ya tendríamos nuestra preciosa cena; pero... de repente, el ciervo pareció entender que algo iba mal y comenzó a trotar, haciendo que mi disparo seguro se convirtiera en una probabilidad naja de éxito. Fruncí el ceño, pero seguí al ciervo. No sabía si Demeon haría igual que yo, o no, pero no pensaba dejar escapar una presa como aquélla. Si lográbamos cazarlo, tendríamos comida para varios días.

Sólo necesitaba encontrar el momento y el lugar ideal para atacarle de un solo virotazo y alcanzar mi objetivo. Si fallaba, sabía que no me daría tiempo a recargar antes de que desapareciera de mi vista. Tenía una única oportunidad.

- Tiradas (1)
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30/01/2020, 15:58
Rodrig

El cedro había mordido el polvo, mientras las mujeres de deshacían de las molestar ramas el y Telk se ocuparon de sacar los primeros puntales, cuanto más gruesos y toscos mejor. Una vez realizado Rodrig ató el tronco al caballo colocando los puntales para que el árbol pudiera moverse rodando sobre ellos, así a medida que avanzaban recogían los puntales del fondo para ponerlos por delante del tronco.-¿Qué os creíais que íbamos a cortar todo esto nosotros solos?Ni hablar, cuando lleguemos al fuerte se harán turnos, así acabaremos antes y podremos trabajar muchos más de golpe.-entonces dio un potente silbido para avisar a Demeon y Eliene-¡NOS VAMOS, NO OS ALEJÉIS SOLOS!- prefería ser precavido, que tener que lamentar perdidas. Entendía que los cazadores se hubieran alejado un poco, pero esperaba que todavía pudieran escuchar su advertencia.

Notas de juego

Aquí el que quiera leña que arrime el lomo ;)

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31/01/2020, 05:47
Lestra

Lestra asiente con la cabeza ante los comentarios de Gael. Parece especialmente divertida con el cambio de expresión que había mostrado el místico de la Ordo de un momento a otro... Un pensamiento sagaz se asomó con un brillo a través de sus ojos mientras que mantenía la mirada fija sobre Eyvind.

—Estoy consciente de que el erudito no ha demostrado ser culpable de su naturaleza... Aún —admitió, después de dedicarle una ojeada al zurrón donde debería hallarse la Piedra Solar—. Sin embargo, por ahora no forma parte de mis objetivos más inmediatos.

Argasto parecía estar a punto de hablar acerca de las razones por las que aquella mujer estaba aquí, pero la Manto Negro continuó antes de que el patrón pudiera decir nada. Esto no le agradó para nada.

—Como podéis asumir, Pansar, me uní a esta caravana desde el principio de su viaje. He estado en muchos lugares, lugares lejanos. Y aproveché la necesidad de nuestro empleador con los versados combatientes para desarrollar mi propia agenda personal. No asumo que lo sepáis... pero hay un marcado entre nosotros.

Todos parecieron asombrarse ante la revelación de aquella mujer. Quien mantenía una expresión calmada mientras que hablaba. Aunque sus celestes ojos expresaban la misma diversión que muestra un cazador cerca de la presa.

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31/01/2020, 06:16
Argasto

El patrón finalmente se acercó, con el ceño fruncido y el mentón en alto. Haciendo que la precavida mujer diera un paso atrás.

—Es una noticia inesperada, sí, pero no muy disparatada si nos ponemos a pensar en ello. Deseo extrema discreción acerca de todo esto, y que os mantengáis vigilantes una vez hallan llegado el resto. No sabemos en quien confiar y en quien no hasta que la cazabrujas haya terminado su investigación.

Miró a Lestra, y luego al par.

—Manteneos cerca de ella y otorguenle toda la información posible. Pero que siga igual de oculta como lo ha estado hasta ahora. ¿Está claro?

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31/01/2020, 16:25
Gael Bedlam

Las noticias de la misteriosa dama pertubaron los pensamientos del Pansar. ¿A qué se refería? ¿Podía tener que ver con la maldición que le echó el dragul? El soldado, algo nervioso y dubitativo, sintió ganas de echar mano del zurrón y sacar el colgante de Mal-Rogan, pero finalmente pudo contenerse al pensar en la anterior conversación con el magi. Después de los consejos de un molesto Argasto, intentando parecer lo más relajado posible Gael trató rascar algo más para sacar luego sus conclusiones. –Por supuesto, señor, estaremos atentos. Pero para poder obtener información que le sirva de utilidad, supongo que primero deberíamos saber algo más del tema. ¿A qué se refiere con "marcado", dama Nodringer? ¿Tiene constancia de este hecho desde la integración de la caravana, o después? Entiendo que por sus palabras, todavía no ha descubierto quien es. ¿Qué deberíamos tener en cuenta y en qué deberíamos fijarnos para descubrir a esa persona?– El Pansar dio un paso adelante con semblante serio, esperando respuestas que le ayudaran a entender mejor la presencia de la manto negro. Más tarde buscaría el momento praa hablar a solas con el patrón.

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01/02/2020, 14:19
Demeon

Demeon ya apuntaba al ciervo con su flecha cuando fuerte ruido lo ahuyentó. El cazador maldijo para si en silencio. Pensaba dejarlo ir, pero Eilene se apresuró a seguirlo. Mala elección, perseguir una presa en montañas que no conoces, con el sol en retirada y donde hombres curtidos se refugian en muros de varios pies de piedra y mortero. Sin embargo siguió a la impulsiva chica, necesitaban una victoria. Oyeron los ecos del silbido del grupo de leñadores. Avanzó entre los árboles con velocidad y en el más absoluto silencio. Alcanzó a Eilene en un repecho y la tomó por el antebrazo. La miró a los ojos mientras negaba con seriedad.

- Tiradas (1)
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07/02/2020, 18:45
Lestra

Lestra dirigió la mirada hacia Gael y se aclaró la garganta para responder sus preguntas:

—Pues todos sabemos lo que es un marcado, ¿o me estoy equivocando acaso, caballeros? —dijo mirando al resto del grupo, todos hicieron su mejor esfuerzo en evitar la mirada de la manto negro—. Pues alguien que ha tenido quizá demasiado contacto con la corrupción, por supuesto. Los escolares habían hecho una teoría que explicaba que todos los habitantes de Alberetor estaban marcados por la corrupción aunque sea en mínimas cantidades, gracias a las hórridas condiciones que alberga dicha tierra maldita. Pero hace falta tan solo un pequeño empujoncito para sacar a relucir los síntomas de corrupción. El contacto con otro portador de la marca, algún objeto místico... —dijo mirando a Eyvind como un gato que observa a un ratón—. Hasta la más estúpida razón puede bastar. Por eso estoy aquí. Una fuente confiable me ha dicho que entre los miembros de la caravana se halla un marcado... Si no se remedia esto antes de que lleguemos a los dominios de la reina en el norte, tendría que verme obligada a reportar a toda la caravana y provocar su arresto hasta que encontremos al principal marcado.

Argasto parecía querer decir algo, pero se lo reservó para él mismo. La mujer, entretanto, seguía hablando sin preocupación alguna. Como si esto fuera algo de todos los días.

—Yo estoy segura de que ninguno de vosotros querría exponer a la tierra que les recibirá con brazos abiertos a una nueva cepa de corrupción. ¿No es así? Solo requiero un poco de ayuda, unos cuantos ojos extra que mantengan la caravana vigilada mientras que yo hago mis investigaciones. Nada más, nada menos. Argasto me dijo que erais los más confiables de vuestro grupo de buscavidas... Así que... ¿Tenemos un trato, caballeros?

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07/02/2020, 18:58
Hudson

Hudson finalmente aprovechó el momento para hablar. El hombre había estado escuchando con atención desde que empezó el monólogo de Lestra y no interfirió hasta ahora para responder las preguntas de Gael con palabras más directas y fáciles de atrapar.

—Hemos detenido unas cuantas caravanas que llevaban marcados ocultos consigo. Usualmente es demasiado tarde para ellos cuando han llegado tan lejos, aunque no sabemos con exactitud que puede provocarlo usualmente vienen con cambios físicos. Algunos empiezan teniendo un par de dedos de más, o una segunda boca que murmura insultos debajo del cuello. Mis muchachos han luchado en los bosques con algunos despojos abandonados que tenían patas de carnero y cabezas de lobo. Para encontrar uno... solo hace falta ahondar en los pequeños detalles.

La manto negro y el patrón de la caravana asintieron al unísono al escuchar la respuesta.

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07/02/2020, 19:32
Eyvind

"Solo hace falta ahondar en los pequeños detalles..." Fueron las palabras que despertaron al místico de la Ordo que desde la mención de un Marcado no había dicho nada, acallado y encerrado en su cabeza que absorbía las palabras de los presentes como una esponja hace lo mismo con los líquidos. 

Sus parpadeos exhaustos como quien acaba de levantarse, le permitieron aclarar su vista y apreciar la expresión de la dama Nodringer, había algo en ella que le erizaba sus vellos. Sin embargo, fue el capitán Hudson aquel que acabó recompensado con la atención de Eyvind, que hasta entonces, solo había sido un confuso divertimiento para la agente de los Mantos Negros. 

Enarbolando el zurrón donde estaba la Piedra Solar y tomando con una sola mano su vara, pronunció sus palabras con una voz cortante. 

—¿Qué clase de detalles? —Eyvind se vuelve hacia la Manto Negro con un movimiento de su brazo izquierdo— Nadie desea poner en peligro la tierra que nos depara al otro lado de las montañas, debemos encontrar a este Marcado cuanto antes. Ayudaré a encontrarlo pero no poseo entre mis habilidades la Clarividencia para hallarlo, no pondría mano al fuego en que lo atrapamos esta noche... de no ser de que tengáis un sospechoso en el que fijarnos.

 

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08/02/2020, 10:44
Gael Bedlam

El Pansar, sorprendido esta vez por el místico, esperó hasta que éste terminara. El aprendiz de las artes arcanas parecía tener momentos de abstracción en los que parecía estar en otro mundo, tras los cuales le costaba articular palabra. A Gael le molestaban bastante esas situaciones, pero entendía que el magi debía tener en la cabeza un porrón de cuestiones sobre cientos de materias distintas sin resolver. –De ser así, Capitán Hudson, tiene fácil solución. Podemos desnudarnos todos los integrantes de la caravana y comprobar si hay alguna parte del cuerpo corrupta. Yo me presento voluntario para ser el primero, si queréis. Pero os advierto, no os asustéis de las partes bajas, pues su tamaño nada tiene que ver con una posible corrupción, sino por una herencia privilegiada.– dijo con una sonrisa burlona, antes de proseguir –Si no, estaremos pendientes, pero entiendo que ese marcado tendrá su mutación bien cubierta y no será tarea sencilla descubrirlo.–

Notas de juego

Eyvind, creo que lo has mandado a todos.

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11/02/2020, 06:47
Narrador

Demeon y Eilene siguen a su presa fundiéndose en las sombras de los arboles y las hojas de los matorrales como dos depredadores en sinergia. Tal vez uno con más entusiasmo que el otro. Donde los gritos de Rodrig ya no podrían escucharse con la misma fuerza que hace unos minutos.

Rodrig por su parte les daba instrucciones al resto del grupo para atar y poder transportar el tronco en conjunto. Si se apresuraban podrían llegar al pequeño fuerte antes del anochecer. Una pregunta carcomía las cabezas de los presentes: ¿Donde habían ido a parar ese par de cazadores?

Las hojas de los arboles se mecieron con una ventisca y algunas cayeron víctimas de los primeros soplidos de una nueva temporada. El aullido del viento sonaba más fuerte a esas alturas... Por fortuna, no había cambiado de dirección al menos de momento.

Notas de juego

Demeon y Eilene se separan de Rodrig.

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11/02/2020, 07:06
Narrador

El viento frío te golpeó en el rostro mientras que terminabas de recortar las ramas y hacer nudos. El tronco estaba listo para transportarse y bajo los tejados del Paso podrían tratarlo como se debía. Recuerdos de tu vida pasada en la aldea volvieron a tu mente al ver a esos hombres y mujeres trabajando juntos para poder transportar aquella carga. No era una vida fácil; pues los hombres que obraban de la madera eran conocidos por trabajar tanto como dos caballos y a veces sin agradecimiento alguno. Sin embargo, era la vida que se te había obsequiado y que no habías rechazado en ningún momento.

Telk hablaba con los demás, mientras que les ayudaba a atar sus nudos mientras que tu les observabas desde la otra punta del árbol. Una vez el conductor se acercó a ti por fin te dedico unas palabras.

Mala suerte cazar en bosques que no conocesfue lo que dijo, con una voz que no parecía suya—. Mala suerte cazar en bosques que no conoces...

El hombre dejó de hablar, pero las palabras volvían a repetirse en tu cabeza. Una y otra vez... te diste cuenta de que te habías perdido en su mirada cuando el hombre chasqueó los dedos frente a ti.

—¿Rodrig? ¿Todo bien, socio? ¡Eh! ¿Nos vamos ya o tenemos que esperar a que este par de perros terminen de olisquear a su presa?

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11/02/2020, 07:13
Narrador

Finalmente seguís al ciervo hasta un punto alejado del aserradero improvisado que había montado Rodrig a un par de kilómetros detrás vuestra. Ha sido una caminata aceptable y cansina al tener que mantenerse en constante silencio y agazapados... pero parece que ha sido fructuosa. Pues el ciervo ahora se halla en un mínimo claro donde los árboles se separan lo suficiente como para tener una buena vista del majestuoso animal. Una rareza en si misma, encontrar a uno de estos animales todavía en vida en aquella tierra perdida.

Allí podrían darle un buen tiro y acabar con él, pero parece que no se halla solo. Pues de repente, un segundo ejemplar de igual forma pero de una cornamenta distinta y pelajes más oscuros se acerca a él. Ambos chocan sus cornamentas como en un duelo a muerte... pero no parecen empujarse con la fuerza necesaria como para derribar al rival. Así dura el ritual durante unos escasos segundos hasta que las cornamentas se separan y el visitante se aleja corriendo de vuelta a la arboleda. El solitario ciervo vuelve a olisquear el suelo y mira a un punto perdido del bosque... en dirección a donde se fue su congénere.

Era el momento de actuar.

- Tiradas (1)

Notas de juego

La dificultad para dispararle al ciervo se reduce, una tirada de Diestro (+3) será lo que haga falta para derribarlo.

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11/02/2020, 07:22
Narrador

La propuesta de Gael fue bien recibida por el capitán. Quien asintió firmemente como si el pansar hubiese acertado totalmente el protocolo que seguían. Sus ojos se abrieron un poco ante el improperio del noble, y negó con la cabeza mientras que sonreía de medio lado. Argasto se mantuvo serio en el asunto y Lestra dejó caer una risa que ocultó bajo una mano enguantada, divertida.

Empezaron a planificar como iban a proceder con la revisión, y se dictaminó rápidamente que esperarían a que el resto del grupo llegara para poder llevarla a cabo sin que se levantasen muchas sospechas bajo la excusa de que así eran las "medidas de seguridad" en aquél fortín de villanos. Pero un importante cabo se soltó cuando el hechicero decidió hablar acerca de la falta de Clarividencia entre sus habilidades... algo que podría sonar indirecto e incluso sarcástico para muchos fue atrapado rápidamente por la astuta manto negro, quien cambió su rostro divertido por uno gélido como el viento de invierno. La mujer dio un paso hacia adelante y el rostro de Argasto se frunció mientras que anticipaba lo que ocurría. Hudson no se quedó atrás.

Argasto —La madre que me ha parido... —Masculló por lo bajo Argasto, mientras que se llevaba una mano a la  barba con expresión incómoda. El patrón de la caravana sabía que el secreto de Eyvind era un riesgo que  mejor tener bien prevenido. Ahora las corazonadas de Lestra se habían convertido en sospechas y pronto en  hechos. No dudo en llevarse una mano al pomo de la espada, aunque poco más fue lo que hizo en aquella  situación.

Lestra —¿Está jugando conmigo, maese Eyvind? Os supuse como nada más que un simple comerciante  que poco sabía acerca del paquete que transportaba —dijo, con la voz tan punzante como la más  amolada de las dagas mientras que se acercaba con pasos lentos al hechicero—. Pero veo que es posible que tratemos con alguien que sabe más de lo que  habla... se ha ganado usted mi más sincero interés.

Lestra tenía la mirada fija sobre el zurrón de Eyvind esta vez, y recorría su cuerpo con una mirada curiosa... buscando cualquier cosa que pudiese concluir sus sospechas. Hasta ahora no sabía que estaba tratando con un hechicero errante... un tipo de personas no muy bien vistas a los ojos de las gentes de Alberetor.

Hudson se mantuvo silente, con una expresión pétrea que juzgaba tanto al magi como a su acompañante acorazado. No le tomó ni un instante pegar un fuerte silbido y mirar por encima del hombro antes de cruzarse de brazos. Nadie había acudido... pero no podíais evitar sentiros observados. Los miembros restantes de la caravana se giraron a observar el lejano espectáculo, y Argasto ordenó a Belun y a Ludo ir a calmar a los demás viajeros.

La tensión se acrecentaba y no había rastro del resto de sus compañeros para auxiliarles en este curioso interrogatorio...

Notas de juego

Se puede tirar por persuasivo en todo momento, pero tendré muy en cuenta vuestros diálogos... Tanto Gael y Eyvind se hallan ahora en una situación comprometida.

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11/02/2020, 09:49
Rodrig

El viejo perro maldijo justo antes de escupir al suelo para limpiarse la boca, llevándose un par de dedos a ella repitió el silbido con mucha más fuerza y en repetidas ocasiones. Se apostaría un talero a que habían visto algo y la impetuosa muchacha no quería soltar la presa, como bien decía Telk cazar en un bosque que no conoces es sinónimo de convertirse en presa.-Esperaremos un poco más, no creo que sean tan idiotas como para ignorar la llamada. Vayamos quitando las ramas pequeñas que solo molestan.-mientras les daba un poco más de tiempo acababa de limpiar la faena, limpiando el tronco de rapitas para hacerlo más fácilmente transportable. Las que se podían cortar de un golpe, las partía para que las mujeres pudieran apilarlas antes de volver al fuerte cargando con todo.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Puedes probar a tirar por fuerza por ese silbido, hasta entonces siguen desmarcados.

XDDDDD Afuuuu, afuuuu, afuuu.

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11/02/2020, 11:46
Gael Bedlam

Tras la incómoda situación en que los puso con su soez comentario pensaba que el ambiente se relajaría, pero otro envite de la manto negro hizo temblar nuevamente los corazones de los presentes. Desde luego esa señora tenía el poder de atirantar una conversación con cuatro gestos. El noble posó la mirada sobre sus interlocutores. Escuchó la orden que dio el capitán con el silbido, mala señal. Luego miró a Argasto para concederle una rápida mueca, como rogándole su intervención. La tensión se palpaba en el aire y el líder de la caravana parecía ciertamente desbordado por la situación. El Pansar sabía que lo mejor sería esperar a que su compañero se explicara, pero la escueta labia del magi podría incluso empeorarlo.

Por un momento recordó la conversación que se vio forzado a mantener con el dragul, lo solo que se sentía y el peso que sentía al no saber si aquellos desconocidos harían algo por sacarlo de la encrucijada en la que se encontraba. En este caso no estaba solo, y tampoco lo estaba su compañero. No iba a dejar que lo acosaran. Le debía una, o dos.

A riesgo de que el interés se enfocara en su persona, trató una vez mas de destensar la situación y templar los ánimos, y con semblante serio trató de adelantarse a la respuesta del magi —Disculpe, mi señora, probablemente mi compañero el erudito quería decir lo mismo que he dicho yo con palabras llanas. Si las mutaciones son un claro signo de corrupción, ni él, ni yo, ni aquí nuestro capitán podemos ver a través de los gruesos ropajes que llevamos para protegernos de este maldito frío. Quizá usted si tenga esa habilidad de descubrirlo mediante las palabras de otros, a tenor de la perspicacia que demuestra. Pero no se preocupe, estoy seguro de que Eyvind no tendrá problema en ser el segundo voluntario para la inspección corporal—. Hizo una pausa para aclararse las ideas y ahondar en lo que la cazabrujas había dicho anteriormente. Con una sonrisa forzada prosiguió —Por otra parte, dama Nodringer, recuerdo que dijo que había obtenido la información acerca del marcado por un contacto. Entiendo que no quiera desvelar su identidad y no sé si esa persona se encuentra entre la compañía de refugiados, pero quizás a partir de ese individuo podríamos sacar alguna pista que nos llevara hasta el marcado, o la marcada. Por cierto, ¿sabe usted si el marcado es un hombre o una mujer?— Generando nuevas cuestiones intentó desviar la conversación hacia otra parte, con la esperanza de que su compañero ayudara con algún aporte sobre el tema.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Segunda tirada por "Privilegiado"