Partida Rol por web

Las cenizas de Cedrick

- Escena 1: La incineracion del Cardenal.

Cargando editor
22/01/2011, 23:02
Ohepa

 Ohepa, no supo que contestar ante la pregunta del arquero, con gesto de preocupacion digo.... Esperad un momento por favor, enseguida vuelvo.

Al cabo de un rato, Ohepa, entro en la habitacion con 6 tunicas de color marron y os dio una a cada uno... Poneos esto y dadme vuestras ropas mojadas. En la lavanderia se encargaran de labarlas y secarlas para que las tengais listas para esta misma tarde.

Notas de juego

 Jajajajaja, si me he podido reir, imaginandome a Wendel y Fibbin con la tunica puesta xDDDDD.

Cargando editor
23/01/2011, 00:58
Wendel Thornsteel

Wendel se desprende de sus ropas mojadas y se apura a vestirse con la túnica que Ohepa les entrega. Tras ciertas dificultades para adaptar la vestimenta a su formida pero baja constitución se gira y se dirige a los demás sosteniendo su hacha con gesto amenazante.

- Brrrrr... Al que le perciba un atisbo de sonrisa lo ensarto con mi hacha.

Resulta evidente que no se trata de una amenaza real pero también resulta evidente la incomodidad del enano con aquella indumentaria.

Cargando editor
23/01/2011, 01:11
Fibbin Casaverde

Fibbin ve como poco a poco el cuerpo del cardenal es incinerado e intenta retener en su memoria todos los detalles de la ceremonia para pasarlos a su cuaderno de notar y después relatarlo a su pueblo. Una vez acaban sigue, bajo la fuerte lluevia de la tormenta, al obispo hacia el lugar donde van a pasar la noche. Allí Ohepa les conduce a su habitación y les trae ropas para que se cambien. Fibbin no da crédito a lo que ven sus ojos, ¿acaso se creía aquel hombre que se iba a poner esa enorme túnica?

-Perdón, ¿pero no tendrás una para medianos y enanos? porque como me imagino que entenderás esto me queda gigantesco...- tras varios esfuerzos y después de ver como lo había hecho Wendel puede ponérsela pero aun así en cualquier momento podría tropezar con ella y caer de bruces...aquello no le gusta nada.

 

Cargando editor
23/01/2011, 10:30
Khelben Black

Demasiados sentimientos enfrentados hoy - Pensó Khelben. La asistencia a la ceremonia y la incineración se habían grabado a fuego en su mente, sus pensamientos desfilaban veloces... sus, pocas, intrucciones religiosas las había recibido de niño de Cedrick y ahora estaba ahí delante suyo devorado por las llamas...

Poco se ha demorado la profecía - Pensó mirando al cielo, que había cambiado radicalmente desde hacía unas pocas horas, pasando de un sol radiante a un gris tan denso que casi se podia tocar con las manos. La lluvía no tardó en hacer acto de presencia.

Calado hasta los huesos, al igual que el resto del grupo, Khelben es conducido a unos aposentos en el monasterio... - La misma habitación para damas y caballeros!!! - Pensó. - Estos monjes quizá estén más aturdidos que nunca con la muerte del cardenal - Al tiempo que recibía un hábito por parte de uno de los monjes.

- Gracias, hermano, por la túnica- Le responde Khelben al monje.

- En cuanto a mis pertenencias... No creo que pueda pegar mucho el ojo esta noche así que me mantendré junto a ellas dando, quizá, algún paseo por el patio al cobijo de las cornisas para poner en orden mis ideas si no os es mucha molestia- Le comentó al monje mientras se enfundaba la túnica.

- Vaya!!!, me queda un poco justa pero está perfecta-

Khelben echa una mirada al resto del grupo y tiene que hacer algunos esfuerzos para no sonreir al ver a Wendel y Fibbin enfundados en sus respectivas túnicas. Definitivamente... estos monjes están muy aturdidos con la muerte del cardenal!!!

Cargando editor
23/01/2011, 11:58
Ohepa

 Ohepa, intentaba evitar por todos los medios sonreir ante la comica situacion que se estaba produciendo en aquella habitacion.

Las tunicas no parecian sentarles a todos bien, y la imagen del enano y la mediana, arrastrando los faldones mientras caminaban hizo que Ohepa, saliera un segundo de la habitacion para romper a reir fuera de la vista del grupo.

Cuando volvio a entrar, algo mas relajado, la mediana le pregunto si no habian ropajes para enanos y medianos. Este contesto a la mediana con un gesto de negacion.

Entonces el guerro tomo la palabra, Ohepa le contesto.... Como gusteis, sois libres de hacer lo que querais con vuestras pertenencias, faltaria mas. 

 

 

Cargando editor
23/01/2011, 21:34
Arnold Greydove

El paladín asiste con devoción y respeto a la incineración del cardenal y, mientras lo hace, reza sus propias oraciones en silencio. Reza por el alma de Cedrick, pero sobre todo lo hace para pedir a su Dios que bendiga y proteja la misión que da comienzo en esos mismos momentos, con aquel acto.

De repente, sus plegarias se ven interrumpidas por el ennegrecimiento del cielo y un manto de agua. Arnold no sabe cómo interpretar aquello; es sin duda un mensaje divino, pero su corazón se nubla de la misma manera que lo ha hecho el día y entonces, sin saber muy bien por qué, se siente apesadumbrado.

Acompaña al monje y a los demás calle abajo hasta encontrar resguardo en el monasterio, donde cambia sus ropas por el hábito que le dan. No se siente extraño con él, todo lo contrario. Aquellas humildes ropas le sientan bien y le devuelven a su época de aprendizaje en Lumen.

Otro cantar es la pinta que con ellas lucen la mediana y, sobre todo, el enano. Si Arnold se hubiese sentido con ganas de reir, sin duda lo habría hecho pues la ocasión lo merecía, pero se limita a sentarse en su camastro mientras vuelve a perderse en sus oraciones, tratando de reconfortar el ánimo.

 

Cargando editor
24/01/2011, 13:21
Lúthien Alcarin

Después de la solemne ceremonia, y al chaparrón que les cae de camino al monasterio, una vez allí la elfa observa divertida como el malhumorado enano trata por todos los medios ajustarse a la túnica, y sin duda, al ver el resultado final, la elfa se da la vuelta mientras se rie educadamente por lo bajo, para tratar de no ofender al enano.

-Mi señor Wendel, sin lugar a dudas podríais llegar a ser un buen monje, limando ciertas asperezas.- Dijo tratando de bromear con el enano.

A su vez, la elfa se cambia una túnica por otra, y por contra de enanos y medianos, a Luthien la túnica le encaja mas o menos bien, quedándose algo corta.

Cargando editor
24/01/2011, 13:28
Ohepa

Ohepa, estupefacto por ver que todos y todas os desnudasteis sin ningún tipo de tapujo delante de vuestros compañeros para cambiaros de ropa, espero a que se las  entregarais para llevárselas a la lavandería.

 Mientras, echando un vistazo a vuestras pertenencias se dio cuenta que todos y cada uno de vosotros contabais con una manta en vuestro haber, lo que le llevo a pensar...

¿Porque no la habran utilizado para cobijarse bajo de ella y asi no calarse hasta los huesos como han hecho?.

El monje se llevo vuestras ropas a la lavandería y volvió a por vosotros para guiaros hasta el comedor, pero antes de llevaros al comedor os condujo hasta un amplio pasillo con dos puertas laterales, ante las cuales os dijo con una amplia sonrisa en su boca… estos son los vestuarios, por si la próxima vez que tuvierais que cambiaros lo queríais hacer en la intimidad. Una vez dicho esto, os condujo finalmente hasta el comedor.

Cargando editor
24/01/2011, 13:28

El comedor  estaba lujosamente decorado, con grandes obras de arte colgadas en las paredes y varios bustos antiguos que tuvieron un  importante renombre dentro del monasterio.

El suelo era de piedra pulida, algo mugriento por la falta de limpieza que había en el. Sendos ventanales presidian la estancia, aportando luz natural al lugar, luz que en esos momentos brillaba por su ausencia, debido a la fuerte tormenta que caía sobre todo Kajin y quién sabe si esta se había generalizado en  todo Embelyon.

La amplia mesa estaba dispuesta para 6 comensales. Cada uno en su lugar contaba con  cubiertos de carne y de pescado, cuchara de postre y una copa de fabuloso cristal elaborado en las lejanas tierras de Sincard. Todo estaba dispuesto para dar buena cuenta de la comida que os seria ofrecida en poco tiempo.

Una vez acomodados en vuestras sillas, un grupo de sirvientes, hicieron acto de presencia y en cuestión de segundos llenaron la mesa de carnes, pescados, frutas, verduras, pan recién echo y unas buenas botellas vino de las bodegas del monasterio.

Todos disteis buena cuenta del suculento manjar que se os había puesto sobre la mesa, mientras de fondo oíais los cantos de los religiosos que en ese preciso momento ofrecían misa en algún lugar del monasterio.

Cargando editor
24/01/2011, 13:28
Ohepa

Pasasteis bastante rato comiendo y hablando entre vosotros, aprovechando así la oportunidad para conoceros un poco mejor. Hasta que Ohepa, volvió a hacer acto de presencia y os amablemente que le acompañaseis, para conduciros ante el  obispo.

Todavia con una sonrisa picarona en su rostro el monje os dice…Si tienen la bondad de acompañarme… les llevare ante su ilustrísima, ya que me ha pedido que haga llamarles para que se presenten ante el.

Cargando editor
24/01/2011, 13:28

Ohepa, os guio por un entresijo de pasillos que parecía no acabar nunca, el monasterio desde fuera se veía grande, pero no tanto como para ser capaz de albergar tal cantidad de pasillos, salas y demás estancias del mismo.

Al final Ohepa se paro delante de una gran puerta que empujo con algo de dificultad para haceros pasar por ella. Cuando cruzasteis la puerta, visteis al Obispo, presidiendo una gran mesa de madera, que parecía estar bien cuidada pese a dar la impresión de ser una antiquísima mesa trabajada a mano. Sobre ella, había, cubierta por un cristal, un mapa tallado a mano en la madera, con la imagen de las tierras de Embelyon, con todo lujo de detalles, ciudades, poblados, caminos, montañas, mares, todo lo habido en Embelyon, estaba allí plasmado. Alrededor de la mesa habían seis butacones vacios, tres a cada lado de la mesa, esperando ser ocupados por todos vosotros.

La estancia contaba con una chimenea que en esos momentos estaba apagada. También había una librería bastante amplia, todos los libros relacionados con la religión y profecías. El suelo también era de piedra pulida aunque en la entrada de la estancia había un gran rosetón con símbolos que se escapaban a vuestro conocimiento.

Tres ventanales pequeños daban al exterior del monasterio, dejando ver así, parte de las majestuosas montañas de Kajin.

Cargando editor
24/01/2011, 13:28
Obispo Alexander

Cuando entrasteis en la estancia, el obispo se levanto de su asiento y dándoos la bienvenida os insto a sentaros con un gesto de su mano mientras pronunciaba unas palabras….Bienvenidos, tomad asiento por favor. Espero que la comida haya sido de vuestro agrado y vuestra habitación… hizo una pausa esbozando una leve sonrisa para continuar diciendo… sea confortable para…el descanso.

Una vez tomasteis asiento, el obispo os examino a todos y cada uno de vosotros y haciendo un gesto de afirmación con la cabeza empezó diciendo… veo que vuestros superiores no se han equivocado enviándoos a esta empresa. Noto en  vosotros y en vuestras miradas las ganas de partir hacia tierras del sur para portar las cenizas de nuestro cardenal al lugar donde les corresponde, haciendo cumplir así la profecía.

Bien, bien, he tenido el placer de leer las cartas de recomendación con las que llegasteis a Kajin cada uno de vosotros y que me entregasteis esta mañana…. Rodeando la mesa con sus pasos, se situó detrás del guerrero pronunciando las siguientes palabras… Aquí tenemos al gran guerrero Khelben, hijo del capitán de la guardia de Kajin y la entrañable aristócrata dedicada al comercio, también residente aquí en Kajin. Se de buena tinta que tu gesta en las inmediaciones del ducado de Fianhoster  han hecho retroceder al enemigo dejando así libre de momento aquellas tierras, estándoos eternamente agradecidos los lugareños de aquellas regiones.

Por otro lado, también puedo decir que en tu rostro se dibuja el dolor que te produce la muerte del cardenal, ya que fueron sus propias manos, las del cardenal Cedrick, las que hace años te bautizaron en la misma catedral donde hemos oficiado la misa en su memoria.

Pasando ahora a situarse detrás de Arnold y agarrándolo del hombro dijo… Clarion me ha hablado muy bien de vos en la carta que portasteis desde Lumen. En ella me indica todos los meritos que lleváis a cuestas desde vuestro ingreso en la orden de los soldados del dios Pelor. Honrándolo de esta forma, por donde quiera que paséis. Me dice en la carta que sois hábil con la espada y puro en vuestro corazon… espero que así sea, ya que requeriréis de valentía y fuerza para llevar a cabo esta empresa.

Después se dirigió hacia el joven arquero y le dedico unas palabras… Aquí tenemos a Edie, el mejor arquero de las tierras de Aldulume… en la carta que me entregasteis hace un momento, vuestro rey, Beldrouck, hace hincapié en lo habilidoso que sois con el arco. Espero que esa destreza no se merme con el paso de los días de camino a las tierras del sur… esbozando una pequeña sonrisa, continuo diciendo… y si tenéis a bien, nos gustaría escuchar de vuestra propia boca, la hazaña a la que hace mención vuestro rey en la carta. La que se refiere a la victoria ante las tropas enemigas gracias a una única flecha, la suya.

Concluyendo con edie ahora se puso tras la mediana, que apenas asomaba su cabeza por encima de la mesa… Desde las tierras de Lippelt nos llega esta valiente mediana llamada Fibbin, haciendo honor con su presencia en este grupo que acabáis de formar. Según sus ancianos, es la mejor de la zona en camuflaje y exploración. Cosa que os será de bastante utilidad a la hora de adentraros en territorio desconocido. Así que contareis con su experiencia para anticiparos al peligro que pueda depararnos el destino, por los peligrosos caminos del sur.

Luego fue el turno de la joven elfa, a la que se dirigió posándose también tras su asiento… Aquí tenemos a Luthien, alumna aventajada de nuestra querida escuela de magos, aquí en Kajin. Se de buena tinta que lucharas contra toda contrariedad allí donde os encontréis, dándole  de esta forma seguridad al grupo… dicho esto, la cara del obispo se entristeció… y algo me dice querida Luthiem, que tu sufrimiento por la desaparición de tus padres está a punto de ser vengado. Acabo dándole un par de palmadas en su hombro derecho a modo de esperanzas.

Al final llego el turno de presentar al enano. Posicionándose tras de él, al igual que había hecho con el resto de sus compañeros empezó diciendo… Y por ultimo y no menos importante, tenemos a Wendel, valiente enano dotado de un gran vozarrón… dijo esbozando una  leve sonrisa… Nori III, vuestro  rey, alaba vuestras  cualidades como fiero guerrero en el noble arte de la guerra. Veremos cómo te desenvuelves en la batalla cuando sea necesario apoyar o incluso defender a tus compañeros.

El obispo, una vez hechos los pertinentes comentarios sobre cada uno de vosotros, volvió a su sitio y sin sentarse se apoyo en la mesa con ambas manos, situadas a frente suyas. Bien, hijos mios, empezemos por lo básico… dijo el obispo.

Nosotros estamos situados aquí… dijo apuntando la ciudad de Kajin con su dedo índice de la mano derecha… y tenemos que llegar hasta aquí…dijo recorriendo con su dedo hacia abajo hasta llegar al lugar exacto donde se encuentra la cripta de Jhoannes.

Lo mas sencillo seria bajar directos de Kajin, hasta…miro a Wendel… Las tierras de Burag-Zal y desde allí desviaros al sur-oeste hacia el imperio de karst para luego llegar al desierto de Chun. Pero la cosa no es tan fácil, hay un pequeño detalle que por motivos obvios no se sabe a cerca de la profecía, y es que las cenizas no deben ser transportadas simplemente de un lugar a otro, sino que también, a lo largo de su camino, dichas cenizas tienen que ser bendecidas en distintos  lugares… El obismo observo en vuestras caras claros signos de asombro… por lo que os tendréis que dirigir primero a las tierras de Aldulume donde se realizara la segunda bendición de las cenizas. La primera la realizare yo mañana una vez me sean entregadas las cenizas del cardenal.  Desde Aldulume, deberéis llevarlas hasta Burag-Zal y entregárselas a Nori III. El ya sabe lo que debe hacer con ellas, al igual que Beldrouck en el poblado elfo. Entonces cuando ya se hayan hecho las tres bendiciones es cuando deberéis ir por fin a la cripta de Jhoannes y depositar allí las cenizas. Se que es algo complejo de entender, pero asi esta escrito y asi se hara.

Asi que ahora me limitare a deciros el camino que deberéis tomar desde aquí hasta la cripta.

Ojeando el mapa de las tierras de Embelyon tallado en la mesa, vuelve a posicionar su dedo índice sobre Kajin, llevándolo hasta un poco mas hacia el norte, señalando el puerto de Mir… Debereis llegar hasta el puerto situado en la ciudad de Mir, donde al atardecer os estarán esperando en los muelles para que zarpéis inmediatamente hacia el puerto de Ranteira situado en las tierras drow de Aldunume. Desde allí bajareis hasta los dominios elficos por donde os guiara edie para llegar a su pueblo, donde serán bendecidas las cenizas. De allí partiréis hacia port Sarsem donde también habrá alguien esperándoos para llevaros de nuevo en barco hasta el monte cocinilla, donde deberéis atravesar el monte por su interior hasta llegar a las minas de Cumak-Zalum desde donde os guiara Wendel hasta su rey, que de nuevo serán bendecidas las cenizas de Cedrick, concluyendo asi, el ritual de la bendición. Desde allí os dirigiréis al monasterio de Lumen… mira rápidamente a Arnold… para seguir vuestro viaje a través del mar hacia Port Drofo, desde donde  bajareis  directamente hacia el templo de Sadlarck. Y una vez allí,  ir a la cripta de Jhoannes y depositar por fin allí las cenizas de el cardenal.

El camino no será fácil ya que se rumorea que las fuerzas del mal ya están empezando a tomar posiciones a lo largo de todo el territorio del sur. Intentando asi que vuestro objetivo no se llegue a cumplir nunca.

Otra cosa que no he mencionado,  es que debeis elegir uno de vosotros para ser el portador o portadora de las cenizas. Mañana deberéis decirme a quien he de entregárselas, y el que hayais elegido como portador, será el responsable directo para que las cenizas lleguen a su destino.

Haciendo un alto en la narración os deja tiempo para que observéis el mapa y le expongáis las posibles dudas que tengáis.

 

 

 

…¿Alguna duda?, pregunto el obispo.

Mientras esperaba vuestras preguntas, se dirigió hacia las ventanas de la estancia y dijo… parece que ha dejado de llover.

 

 

Cargando editor
24/01/2011, 13:28
Wendel Thornsteel

Wendel se encuentra poniendo sus cosas en orden, con la túnica precariamente ajustada a sus medidas cuando Lúthien, la elfa realiza un comentario acerca de la posibilidad de que él fuera un buen monje.

El enano deja cuidadosamente sus pertenencias en el suelo y se gira hacia ella.

- ¿Un... monje...? -balbucea en tono serio con el rostro arrugado -¿ciertas... asperezas...?

Manteniendo una dura mirada el enano empieza a temblar para finalmente explotar en una sonora e incontrolable carcajada. Tras varios segundos, Wendel empieza a contener sus risas.

- ¡Por la barba de mi padre! ¡Un monje! -comenta entre sollozos y lágrimas provocadas por la risa -Desde luego que tiene sentido del humor, mi señora Lúthien. Un buen monje...

El enano se gira de nuevo hacia sus posesiones sin dejar de sonreír en una curiosa mueca.

Notas de juego

Vaya, la actualización me ha pillado a medio posteo xD

Máster, tú decides si borras o dejas este post. Otra opción sería pegarlo como respuesta en el mismo post de Lúthien. Tú decides :)

Cargando editor
25/01/2011, 11:07
Wendel Thornsteel

Tras la copiosa cena a la que fueron invitados, Wendel y el resto del grupo acceden a una sala dominada por una mesa y varias sillas en las que el obispo les recibe amablemente. Este comienza a hablar y a especificar detalles del viaje y el enano se sorprende al comprobar que deben visitar diferentes lugares para bendecir las cenizas del cardenal.

En un primer momento Wendel lamenta esta información pues complicaría el viaje, sin embargo su ánimo se recupera al comprobar que visitarían las minas enanas. El obispo acaba de hablar y pregunta si alguien tiene alguna duda. En ese momento el enano toma la palabra.

- En primer lugar quiero ofrecerme como portador de las cenizas que hemos de transportar. Juro que las defenderé con mi vida y hasta el límite de mis fuerzas si es preciso. En cualquier caso, lo podremos debatir en privado esta noche. Quisiera saber cómo es el recipiente donde transportaremos las cenizas, si es posible.

Wendel mira al obispo esperando su respuesta.

Notas de juego

 No puedo editar el post anterior :P

Cargando editor
25/01/2011, 13:19
Lúthien Alcarin

El grupo sigue al monje a través de los diferentes pasillos del monasterio hasta que llegan a una gran sala donde les está esperando el obistpo. Durante el camino, la elfa reflexiona acerca de la envergadura de la misión a la que se van a enfrentar, y camina en silencio y su semblante se torna mas serio al oir el plan de viaje que han de seguir, desde luego no iba a ser una tarea facil.

Las palabras del enano hacen que Luthien se vuelva hacia él y le regala una sonrisa, al aceptar tan valeroso encargo el de ser portador de las cenizas.

- Sin duda es una misión en suma arriesgada su exceléntisima, y más sabiendo que lor problemas nos aguardarán a cada paso que demos, pero quisiera saber que si se nos facilitarán medios o recursos para llevar a buen puerto este viaje.-

Cargando editor
25/01/2011, 13:38
Obispo Alexander

 El obispo deja de mirar por la ventana cuando escucha la voz de el enano ofreciendose como portador de las cenizas. Asiente con la cabeza mientras piensa... Valiente enano, si señor, y con gran iniciativa.

Dandose la vuelta sobre si mismo, dirige su mirada hacia el enano para contestarle... Su entrega es admirable Welden, pero no se tomen a la ligera la el elegir al portador de las cenizas, deberian debatirlo en privado todos ustedes hasta que lleguen a una decision. En cuanto a lo de las cenizas, no sera ningun recipiente, eso seria demasiado aparatoso para transportarlo, asi que se buscara la comodidad, y en su defecto se os haran entrega de la cenizas en una pequeña saca sellada magicamente para que no se habra, hasta que no llegue a su destino final.

Cuando el obispo acabo de hablar con el enano,  tomo la palabra la joven Luthiem, a lo que el obispo contesto... Por supuesto a ti mi querida Luthiem no se os hizo entrega de ninguna montura por razones obvias, pero el resto cuando partisteis hacia aqui, se os entregaron, si no me equivoco, y como cabe esperar, ciertos utensilios, asi como comida como para cinco dias, que es mas que suficiente, porque, a lo largo del viaje, donde pareis a que las cenizas sean bendecidas, se os hara entrega de utiles y comida para que sigais vuestros caminos. A parte de vuestra montura que se os entregara mañana, solo tengo referencia de estas de Arnold y Khelben, el resto... mirandoos a todos pregunto...¿ como llegaron a Kajin ?

Haciend un alto en su palabra se quedo pensando... Exactamente... ¿ a que tipo de medios y recursos os referis ? 

Cargando editor
25/01/2011, 14:39
Khelben Black

Con el ánimo más repuesto después de la cena ofrecida por los monjes en el monasterio Khelben, y sus compañeros, son conducidos antre la presencia, de nuevo, del obispo para ultimar detalles sobre la misión.

Khelben escucha las palabras de agradecimiento hacia él y el resto de compañeros al tiempo que se entera más sobre los asuntos personales de los mismos. -Hasta ahora las presentaciones han sido las justas - pensó.

Observa como Wendel se adelanta ofreciéndose como portador de las cenizas del cardenal y escucha las peticiones de Lúthien. -Vaya, parece que me leen el pensamiento - pensó.

-Si me permitís, damas y caballeros, yo mismo me hubiese ofrecido como portador de las cenizas del cardenal pero ya se ha ofrecido nuestro amigo Wendel al cual no le discutiré su magnífica decisión, pero tengo que advertirle que desde el momento que las lleve consigo mi vista no se apartará jamás de él y de su valiosa "carga", no es que desconfíe de vos - dirige una afable mirada al enano -sino que es mi misión no perderlas de vista.

-Mis dudas también son las mismas que milady Lúthien. ¿Se nos hará entrega de algún tipo de salvoconducto para embarcar y hospedarse en lugares remotos? Desconocía lo de las bendiciones en los distintos lugares sagrados de Embelyon.

Khelben espera respuesta por parte del obispo mientras observa, atentamente, los lugares donde transcurrirá la aventura.

Cargando editor
25/01/2011, 15:12
Obispo Alexander

 El obispo miro a el guerrero mientras este le hacia una pregunta, a la que respondio rapidamente... En pocas ocasiones tendreis oportunidad de cobijaros bajo techo para pasar la noche, o resguardaros de las inclemencias meteorologicas, asi que no creo que os haga falta ningun tipo de salvoconducto.

De todas formas, cuando sea necesario, se os comunicara el nombre del enlace que tendreis que buscar para que os conduzcan en barco de un puerto a otro cuando asi lo requiera el camino.  El resto del camino os valdreis por vosotros mismos

Cargando editor
25/01/2011, 17:07
Eddi Wiliam

 Eddi escuchaba atentamente aquel enano que queria portar las cenizas y ha Khelben decirle la importancia del portador de aquellas cenizas así que decidio hablar:

- Yo pienso que Wendel  dara su vida por proteger las cenizas.Un enano nunca  cede por su cabezoneria así que contais con mi apoyo, Yo mismo me pesentaria voluntario para portar las cenizas pero prefiero proteger a quien las porte entregando mi vida si  llegara el caso.

Miro al resto del grupo esperando  saber por quien seria el portador de las cenizas.

Cargando editor
25/01/2011, 17:19
Lúthien Alcarin

Las respuestas de unos y otros se van sucediendo, y poco a poco quien sería el portador se convertía en el tema principal, cuando el mismo obispo había indicado que decidiéramos esa cuestión en privado para dar una respuesta al día siguiente, pero Luthien aguardaba paciente antes de intervenir. Cuando eddi acaba de hablar decide intervenir de nuevo.

-Queridos amigos, creo que deberíamos debatir este tema entre nosotros, como bien nos ha indicado su excelencia el obispo, y seguro que todos tendremos una opinión al respecto. Sería mejor que nos centráramos en la cuestión que quizás se torna mas urgente, y es el viaje.- Dice mientras sonrie a todos los presentes. Tras eso, se gira de nuevo hacia le obispo

-Mi señor, mi pregunta se refería a si se nos facilitarían medios o un equipo inicial para comenzar nuestro viaje, pues ignoraba que al resto de los presentes se les habían otorgado algunos bienes. Por mi parte, mapas de las rutas y territorios por los que vamos a seguir, sería un importante presente.- Responde al obispo.