Partida Rol por web

- Tú haz lo que consideres apropiado. Él me pidió tu vida, yo se la di. Nada más te ata para con nuestro trato. Pero entenderás que Galaliel es un aliado importante para nosotros y no vamos a deshechar esta oportunidad de ascenso rápido al poder. Galaliel es uno. Necesitará gestores, sabios y consejeros. Planificadores, constructores, políticos. Y esos somos nosotros. ¿Estás con nosotros?

Cerca de la casa veis que hay algún foco de fuego aunque ya no se oigan disparos.

Tras la escena protagonizada por la banshee, intento recomponer la postura y mientras miro hacia todos los lados algo aturdida digo no muy alto, pero lo suficientemente alto como para que me oigan Victor y Charlotte - Voy a intentar acercarme a la mansión y ayudar a Aedalus, ¿alguna idea de que hacer si esa cosa vuelve a aparecer? Charlotte, ¿tal vez podrías encargarte? - dicho esto, estando muy alerta por lo que pueda pasar, espero una respuesta antes de dirigirme a la mansión.

- Yo creo que todos deberíamos volver a la mansión. El objetivo de la banshee es Aedalus, posiblemente ya haya ido hacía allí. 

No espera respuesta y vuelve a caminar, con paso decidido. 

Guardo el frasquito y la daga me la escondo en la manga. Frunzo un poco el ceño tras escuchar a Victor - Tienes razón - así que echo a correr hacia la mansión - deberíamos darnos prisa entonces...

Les sigo sin rechistar, pero por el camino digo:

- No lo tengo tan claro... puede que yo sea su objetivo. Al fin y al cabo... soy lo más parecido a Amber que hay ahora mismo.

- Y quizás tu seas su segundo objetivo, si consigue acabar con Aedalus. Pero yo veo claro que él es su prioridad. A fin de cuentas su objetivo principal era encontrar al asesino de su marido, motivo por el cuál no se molestó en matarme. Y quien sabe, quizás te dejó huir por el mismo motivo o para que la guiarás hacía el asesino. 

- Pero, ¿vas a estar de su parte de verdad, o solo mientras te convenga? Porque eso sí puedo hacerlo, puedo esperar el tiempo que haga falta si me prometes que podré arrancarle la cabeza algún día.

Alrededor de la casa todo está tranquilo, excepto por el movimiento continuo de marionetas que están sacando lo que parece una fortuna de las entrañas de la casa. 

Hay un grupo de soldados delante de casa que no hacen ningún gesto a parte de estar con la cara hundida en sus manos, siguen vivos pero parece que hayan visto algo horrible. 

Estoy organizando algo, muevo los brazos frenéticamente al son del movimiento de las marionetas. No parece que esté herido pero estoy mucho más pálido que de costumbre. Abro los ojos de vez en cuando, una de las veces que lo hago veo a los otros habitantes de la casa. 

Me acerco a ellos. - ¿Estáis bien? - 

- Sin un rasguño, aunque hemos visto a la Banshee cerca. Deberíamos tener especial cuidado. ¿Te han ayudado los refuerzos, Aedalus?

Miro a Charlotte con una expresión de confusión. 

Mientras estoy mirando a Charlotte intentando entender su frase una marioneta pasa con la cabeza de un cadaver clavada en la pica.

- ¿Refuerzos...? - 

No parece que esté enfadado al contrario, me relajo bastante. - Entiendo. - Sentecio y me estiro en el suelo. 

En el suelo digo - ¿Dónde está la Banshee? - 

- Nos abordó en el bosque. - Comenta Vyktor, evidentemente sorprendido por la postura relajada de Aedalus. - Pero desapareció de pronto, hemos creído que lo más posible es que fuera a por ti. - Se encoge de hombros. - Yo en tú lugar me mantendría alerta, no conocemos el alcance de su poder. 

-Hanna...estamos hablando de cuestiones de estado. No creo que tus riñas pueriles tengan cabida aquí. Si es buen gobernante nos viene bien que viva...no comprendo por qué ese ansia tuya de acabar con Galaliel...

- Tarde o temprano irá a por mi... - 

Me levanto lentamente y añado. - Bueno, tengo una idea para no ser tan vulnerables. - 

- Acompañadme. La ciudad ha sido tan amable de regalarnos un zepelin acorazado de combate. - 

Vyktor acompaña a Aedalus. Comenta por el camino:

- ¿Y planeas subirte en él? No creo que tenga que recordarte como acabó el último.

- ¿Último? Este es un Zepelin acorazado. Ni siquiera con artilleria podriamos derribarlo. - 

- ¿Esa es tu idea para protegernos de una banshee? ¿Un zeppelín?

Más que tono de reproche, el tono es de sorpresa. Mucha sorpresa.

- Mi anterior fortaleza está un tanto comprometida. Aún tengo que mirar los detalles del Zepelin pero es una fortaleza voladora. -

- Incluso en el supuesto que la Banshee pudiera volar no podría tendernos una emboscada. - 

Convoco a los soldados que se mueven con las cabezas agachadas. 

Vamos a buscar el Zepelin que ha atacado la casa. 

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Se ha estrellado sobre el bosque pero no hace señales de que haya sufrido ningún daño. De entre los soldados aparece Silvia. Está atareada en un traje que la tapa gran parte de la cara. Me indica con la mano donde están las entradas. 

Nos subimos al zepelín y dentro los soldados se ponen a prepararlo para que despegue, mientras las marionetas están subiendo cofre tras cofre al zepelín. 

- Me llegaron informes de mis espías, 50mm de placas de acero forjado como protección exterior, 4 artillerías aire-tierra y 2 aire-aire. Utiliza un motor de Goullard and Sons que le permite volar pese a pesar más que el aire. - 

- Es realmente una fortaleza voladora. Está preparada para transportar y defender a un pequeño batallón. - 

- La banshee no me preocupa, cuando termine el día esta ciudad nos pertenecerá y entonces seremos imparables. . - Lo digo con solemmindad solo a la gente con poderes. 

Aunque ha pasado poco tiempo desde la primera habeis visto a Aedalus, ahora está visiblemente peor. Tiene la piel más blanca y ojeras más pronunciadas. 

- Quizá sea una tontería preguntar esto pero... ¿por qué quieres tomar la ciudad exactamente?