Partida Rol por web

Estaba sentado, agarandome las rodillas con las manos entrelazadas, sintiendo el placer de las manos de Irina descargando los anudados músculos del cuello. Dormir en el suelo y cavar para encontrar agua estaba resultando agotador.

La cara de Charlie me resultó satisfactoria. Habiamos encontrado agua, al fin.

Eché la cabeza para atrás mirando el cielo, señal inequívoca de victoria.

Cuando Charlie terminó de beber el agua miré a Irina.

- Venga, bebe - dije mientras me ponía en pie y le ofrecía la mano para ayudarle a leventarse.

Mientras la mujer bebía me acerqué a Charlie echando mi mano sobre su hombro.

- Buen trabajo, amigo. Ahora tenemos que buscar algo para recoger algo de este agua. Quien sabe cuanto tiempo seguirá corriendo.

Por un momento parecía todo solucionado. Teníamos agua, sólamente agua, pero para mi parecía el mayor de los éxitos, la culminación de un objetivo primodial en mi vida. Lamentablemente no era tal, pero por unos instantes me ayudó a olvidar las penurias que nos ocupaban y que, con toda seguridad, nos harían la vida imposible en los próximos días.

-A ver esos recipientes de bambú que estaban haciendo los demás... Yo no me voy a alejar demasiado del agua, no sea que otro animal venga a morir aquí, como el del charco que vimos ayer.

Parece quedarse pensativo tras esas palabras y, finalmente, parece llegar a una conclusión.

-¡Claro! ¡Joder! - se golpea la palma de la mano con el puño - Tenemos que construir una trampa cerca del agua. Sí, comeremos jabalí como que me llamo Charlie. - dice entrecerrando los ojos.

Con fuerzas renovadas por el descanso y por haber bebido, busca una rama flexible en alguno de los árboles cercanos al pozo recien abierto. Su idea es doblarla hasta el suelo, sujetarla con una estaca y cubrirla con hojas. Atando a ella una especie de lazo hecho con lianas, tela o lo que encuentre, lo que pretende es que, si un animal se engancha en el lazo y estira hacia un lado, libere la rama y quede colgado, listo para ser degollado y cocinado.

-Esto funciona con perros y gatos... - explica mientras con naturalidad, como si comerlos fuera lo más normal del mundo.

El sol se acerca a su punto más alto cuando charlie termina de montar su rudimentaria trampa. Vuestros estómagos rugen por la falta de comida pero bebéis más agua para intentar engañarlos.

De pronto un gran grupo de pájaros sale volando hacía el cielo desde lo que parece ser la zona cercana a la playa donde estabais. Se oyen unos ruidos como de tambores por aquella zona. ¿Que estará pasando?

Ya estaba pensando dejar a Charlie e Irina aquí, vigilando el agua mientras me dirigía a ver como iban esos recipientes cuando se oye ese ruido.

- Charlie, déjame la pala, creo que esta vez puede servir de otro modo.

Miro a ambos compañeros y les hago una señal con la mano.

- Quedaos aquí un momento, veré a ver que pasa y de paso intentaré acercarme al campamento para recoger alguno de esos recipientes que ya deberían estar creados.

Es demasiado el camino como para que no se pierda detective... ademas Charlie es nuestro mejor guia... vamos!!! - tomando de la mano a Felix y dandole un tiron que casi lo hace caer... - ya algo me decia que no estabamos solos en este lugar!!!

Charlie, guia el camino lo mas rapido que puedas!!!

-La pala puede que la necesite para rematar lo que cace. - responde a Felix y parece meditar - Bueno, un palo servirá. - concede finalmente, pasándole la pala al policía.

Cuando Irina le propone volver a la playa, se niega en redondo.

-No, señorita, yo me quedo. Estoy cansado y nos ha costado mucho hacer el pozo como para dejarlo solo. ¿No recuerda lo que pasó esta noche? - le replica con los brazos en jarras y su cascada voz.

Dicho eso, busca un lugar tranquilo y a la sombra, a la distancia suficiente como para vigilar el pozo a escondidas. Se cuida mucho de colocarse donde el viento no lleve su olor hacia el interior de la selva, de donde espera que lleguen los animales a beber.

Maldita sea Charlie... justo ahora se te da por jugar en plan de niño malcriado!!! - Irina casi que esta a punto de lanzar al aire unos insultos pero se contiene aferrando mas fuertemente la mano de Felix.

Venga bonito... apuremosno y entre los dos nos guiaremos hacia la playa!!

Algo malo ha sucedido. No sabes lo que ha pasado pero de repente sientes nauseas y no puedes evitar vomitar mientras tiene la sensación de que estáis en peligro, todos vosotros.

Meneo la cabeza a ambos lados.

- No Irina, Charlie tiene razón, es mejor quedarse a vigilar el pozo - digo mientras me acerco a recoger la pala.

- Dejadme ver que son esos ruidos de tambores y luego decidiremos si voy o no a la playa pero me temo que alguien tendrá que ir.

Le indico a Irina un lugar a la sombra junto a Charlie antes de partir a investigar esos sonidos.

No... nooooooooooo! - Irina se lleva la mano a la boca y comienza a ponerse palida... la presion le ha bajado y no se siente en este momento muy bien que digamos, ni siquiera para echar una carrera hasta la playa... aunque tampoco le agrada quedarse bajo la sombra de un arbol junto a su mal-hablado compañero.

Ve lo mas rapido que puedas Felix... lo esperaremos aqui... no me siento bien ahora...

-¿Qué tambores? - le pregunta ceñudo a Félix. - ¡Carajo! No nos estará tomando el pelo, ¿verdad? Si alguna tribu de salvajes vive aquí, las cosas pueden ponerse o muy bien o muy mal. Estando yo, muy mal. Seguro. Ese cabrón - mira al cielo - me la tiene jurada.

Tras un par de reniegos ininteligibles y un sonoro y generoso escupitajo al suelo, se da cuenta de que Irina no se encuentra bien. Las palabras de ésta se lo confirman.

-¿Qué le pasa? ¿Le ha sentado mal beber tan deprisa? ¿Se ha mareado de tanto cavar?- mezcla la pulla con un interés que parece sincero.

Tras pensárselo un poco, echa mano a la fea petaca que lleva en el bolsillo de la chaqueta y se la ofrece.

-No es demasiado buena, pero le reanimará.

Gracias Charlie... ya se me va a pasar. - tras lo cual Irina eleva su rostro al cielo y toma unas cuantas bocanadas de aire a modo de respiro hondo.

Veo que no te habias percatado lo de los tambores... pero si, algo está sucediendo no lejos de aqui y tendriamos que ir lo mas rapido posible... creo que ya estoy bien.

¿Qué dices ahora Charlie... vamos? - Irina se levanta de un paso firme y el color de a poco va volviendo a su juvenil rostro...

Ya estaba de camino cuando Irina empezó a sentirse mal. Eso me detuvo un instante hasta que Charlie le dio algo de beber que calmó su malestar.

- Creo que debéis descansar aquí, sobre todo tú, Irina. Dejadme echar un vistazo. No me alejaré mucho.