Por los dioses, señor Roger este final no es el propio de un hombre como usted, tenga en cuenta que nosotros hemos sido utilizados para este fin, y como nosotros habrá más en nuestro mundo. No sacrifique su vida de esta forma, este ser sabrá encontrar otros hombres para sus propios fines, de esta forma no podrá poner fin a su poder...
Venga con nosotros Roger....
—Mi vida ya está sacrificada. No pienso ayudar para esa causa —dijo dirigiendo la mirada a Haon-Dor—. Y supongo que necesitará que crucemos todos.
Roger negó con la cabeza a sus compañeros decidido a quedarse en aquel lugar y no ayudar a cumplir la misión de Haon-Dor.
—Marchad sin mi —sentenció.
- ¡PREFERÍS MORIR ANTES QUE CRUZAR DE VUELTA A VUESTRA CASA! ¡ SÓIS UNOS ESTÚPIDOS! -se calló unos segundos -puedo... puedo daros poder, riquezas, mujeres... lo que deseéis si me ayudáis y os ayudáis a vosotros mimos. ¿Qué decís? se os acaba el tiempo -dijo mirando hacia arriba, hacia la horrible bestia que quería devoraros.
El rostro del viejo se ilumina y de nuevo se pone en pie interesado.
—Antes manifesté mis condiciones. Si voy a volver no quiero tener a la muerte como un rival. Quiero seguir teniendo este conocimiento pero tener tiempo para perfeccionarlo. No es poder... o sí, da igual como se quiera ver. Si voy a seguir siendo un anciano tullido prefiero que mi vida acabe aquí.
Hasta el final tocando los webs XDDD
- Creí que no lo decía en sentido literal... pero la respuesta es sí. Aunque he de advertirle que en estos mismos instantes mi magia no tiene suficiente poder para hacerlo, pero todo cambiaré cuando crucen y recupere mi cuerpo, entonces mi poder tendrá pocos límites y si lo desea lo puedo volver un veinteañero con una vida por delante y sin perder la experiencia que ha ido acumulando con los años. ¿Qué me dice a eso?
"Entonces mi poder tendrá pocos límites..."
De nuevo las palabras del "filosofo" repicaban en mi mente.
¿Pero que estamos haciendo? ¿Estaremos ayudando a desatar un poder más terrible que el presenciamos en la pirámide? ¿Abriremos un canal para que estas criaturas endiabladas puedan llegar a la tierra?
Miré por un momento la criatura que nos amenazaba en el aire. Pero ya no sentía miedo. El miedo se habia quedado sin espacio en mi alma. Solo quedaba un sentimiento en el alma. Orgullo, el orgullo que me había hecho luchar para ser mejor que los demás, para demostrarles que valía. Y ahora me veía en una espiral, en un tunel del que parecía solo había una salida. Seguir los designios de este ser que nos había manipulado como marionetas para lograr quien sabe que retorcido propósito. Solo una cosa había retenido mi orgullo a lo largo de la vida, el miedo, y este ahora había dejado paso a una embriagadora sensación de libertad.
Miré al Sr. Bucks y luego a Stuart. Mis ojos entonaban un lo siento por lo que estaba a punto de hacer.
- ¡No! ¡No, no y nooooo! - Grité abalanzándome sobre la criatura. Sabia que no tenía posibilidad de vencerla, ni a ella ni a su sabueso, pero antes de acabar esta historia quería ver la cara a este ser que nos había sumergido en esta trágica odisea.
Intento quitarle el manto que le tapa la cara. Si hay que hacer tirada puedes hacerla porr mí master.
Compañeros, siento el arrebato
Una ligera sonrisa triunfal se dibujó en la cara del viejo Bucks mientras esbozaba un profundo asentimiento. Estaba conforme. Dudaba que la criatura fuera a cumplir e incluso que ese poder que le daría fuera bueno para él pero era lo único a lo que podía agarrarse... y se agarraría.
De repente Patterson se abalanzó sobre la criatura. La misma persona que antes, sereno, trataba de convencerle para aceptar el trato y abandonar aquel lugar ahora se mostraba hostil. Aquel lugar desestabilizaba las mentes, eso era innegable.
—Patterson, ¿qué hace? —dijo mientras extendía una mano en un gesto inútil para retener al antropólogo.
Vi la reacción del Señor Jack y asentí sabía que en el fondo tenía razón, el Viejo Rogers tenía razón, no se puede dejar un mundo como éste con la responsabilidad de traer el mal a un mundo como el nuestro.
Ahora sabía que aquellos hombres morirían antes que ver su mundo consumirse en los astros del infierno, como había sucedido en este desamparado lugar. Yo que fui uno de los exploradores del grupo sentía y había sentido desde que murió Vincent el deber de proteger a estos caballeros de intelecto sublime. Y seguía haciéndolo así que viendo la reacción e intención de Jack corrí para atacar a la criatura a su espalda, y en caso de que el señor Jack no lograse quitarle la capa lo intentaría desde atrás.
Sorprendentemente, al ir a echar mano de la criatura, no tocaste otra cosa sino el vacío. Era como un fantasma o una ilusión o un sueño. No era una criatura tangible y palpable hecha de materia. La criatura lanzó una carcajada tremendamente sonora y se limitó a decir casi en un susurro algo que entendísteis como - alea jacta est...
Entonces la criatura que os sobrevolaba se lanzó en picado a por vosotros. No teníais con qué defenderos, estábais apenas vestidos con unos harapos y sin ninguna de vuestras posesiones materiales. El hechicero-filósofo os había ofrecido la oportunidad de volver a vuestro mundo, de llevar una vida normal, o quizás de vivir una vida de nuevo como una persona joven en el caso de Roger, ¿Pero a qué precio? es decir, ¿decía la verdad? ¿qué habría hecho cuando se hubiese materializado en un cuerpo físico? ¿Acabábais de salvar el mundo? lo que estaba claro era que necesitaba que los tres cruzáseis el umbral de la pirámide, pues de otro modo no habría lanzado la criatura contro vosotros.
En todo eso fue en lo último que pensásteis antes de ser despedazados por la criatura voladora, por fortuna, os mató rápidamente sin apenas sufrimiento. Era una muerte original, eso desde luego.
FIN