Partida Rol por web

Laura examino al chico noqueado con el pie para buscar algo de utilidad. Nota en la parte del pecho un pequeño bulto. De mientras el compañero empieza a explicar que hacía allí bajando los brazos y mirando de tranquilizarse.

Mi colega Erickson y yo nos hemos infiltrado en el castillo por que estamos buscando la espada Murasame. Un antiguedad que quiere nuestro líder, Shredder. Pertenecemos al clan del pie. Su hermana está al servicio de un comandante y tememos que le puedan hacer algo malo. Por ello la peticion y poder sacarla del clan.

Chicos, el cubo cosmico se encuentra al otro lado de esa puerta. Eliminemos rapido a estos ninjas estandares y vayamos a por ello.

Dice Ironman tomando la iniciativa y yendo a por uno de ellos lanzando un rayo repulsor.

El grupo de heroes tomo la iniciativa atacando a los ninjas. Strange invoco el poder del ojo de Agamoto y disparo un potente rayo desintengrador contra el Ninja A, pero este con rapidez de movimiento esquivo su ataque.

Iron Man disparo al Ninja B, que recibio el impacto quedando noqueado al instante.

Thor se mantenía a la espera viendo el movimiento de sus compañeros y los ninjas.

Squirrel Girl empezó a correr en direccion a la puerta para acceder al otro lado y coger el cubo. El resto de ninjas viendo su maniobra empezaron a dispararle shurikens. Con su agilidad fue esquivando los disparos, y uno de ellos le dio dandole un corte por el brazo derecho. Ella logró llegar hasta la puerta.

Los robots probaron ser una auténtica molestia, por lo que intento alcanzar al mayor número de ellos con mi sguiente ataque.

Apartense nuestro camino burdas máquinas sin alma, pues están ante la presencia del emisario de los sagrados Vishanti.

Sin esperar respuesta a mi amenaza libero mi poder sobre aquellas máquinas con intención de destruirlas.

- ¡Jajajaja! - se rió el Dios del trueno al ver que la fiesta comenzaba.

Levantó el Stormbreaker y apuntó contra los ninjas y lanzó un potente rayo. La cara de Thor mostraba cierta satisfacción, al fin había acción y podía desplegar sus encantos.

- Dejados a ella, vuestra pelea es conmigo - gritó a los ninjas que intentaba freír con su ataque.

Doreen aterrizó sobre sus pies y dio un giro sobre el suelo, para terminar agachada junto al cubo. Se cogió el hombro con una mano y luego se la miró, comprobando que había algo de sangre en la palma. Frunció el ceño en dirección a los ninjas.

“¡Eh! ¿No os dijeron vuestras madres que no debéis jugar con cosas filosas? Todo son juegos y rizas hasta que alguien se saca uno ojo.”

Levantando una ceja escuché tanto lo que decía Laura como el muchacho. No estaba muy segura de que me hubiera dicho la verdad, pero tomé buena nota de los nombres. Sentía cierta lástima por aquellos dos y su hermana, pero no podía perder tiempo en ello. Por mucho que lo lamentara no podía arriesgar la misión por un par de personas.

- Bien, tal vez podamos echaros una mano cuando todo esto acabe - fueron sólo palabras para ganarme la confianza del chico, no porque realmente fuera a hacerlo. Bueno, tal vez cuando todo acabara, ¿quien sabía? Lo importante era terminar con todo lo antes posible y que confiara en mi podía ayudarme con mi propósito - pero por el momento, necesitamos ese objeto. ¿Lo habéis conseguido? - por el rabillo del ojo observé a Laura inspeccionando al compañero caído. Tal vez aquel tenía lo que estábamos buscando.

La onda mística del Dr. Strange aglutino a 4 ninjas que quedaron noqueados al momento ante tal poder. Thor acabo con el que quedaba con un buen golpe de martillo. Con los ninjas derrotados solo quedaba acceder a la otra sala, a la cual ya entro Squirrel abriendo las enormes puertas rojas.

Allí se encontraba el cubo cósmico dentro de una especie de pecera irradiando energía. Ubicada casi al final de la enorme sala de ceremonias, varios cables conectaban la pecera a unos ordenadores que controlaban el flujo de energía que emitía. Doreen mientras hablaba iba corriendo hacia él mientras atravesaba el pasillo formado por los 12 ninja robots. A medida que se aproximaba estos se pusieron en marcha y la acabaron rodeando cortándole el paso.

EL chico no comprendió bien la pregunta de la bruja escarlata. Dudando, le responde:

¿Te refieres a la espada Murasame? Pues la verdad que no. Nos habéis estropeado la infiltración. Hace poco que nos hemos  introducido en el castillo.

Viendo a su amigo inconsciente en el suelo, con el pie izquierdo le intentaba dar toquecitos para que despertara.

Al  ver el percance en el que se había metido Doreen, decido que era hora de echale una mano.

Con un rápido movimiento de manos creo una barrera que protege a Doren de la mitad de sus asaltantes dividiendo en dos el pasadizo.

Steve apartó a aquel muchacho consciente de su amigo. Los pobres intentos de reanimar a su compañero no fueron pasados por alto por el Capitán América, de modo que trató de separarlos. No le parecían una gran amenaza, pero tal vez ocultasen más información de la que decían. 

- ¿sabéis donde está la espada? - preguntó sin preámbulos Steve tratando de intimidar a aquel muchacho 

No quería tentar a su suerte con la negociación, de modo que se guardó esa carta para más tarde. Trató de valorar la situación y le puso el escudo en el pecho sin hacer una fuerte presión. Era una amenaza vacía, que buscaba intimidarlo. Miró a sus compañeras, especialmente a X23 y al bulto que sobresalía del pecho del inconsciente. 

- Será mejor que nos digas todo lo que sabes al respecto - dijo sin más, tratando de obtener más información. Si el chico hablaba y decía algo sustancioso, tal vez contemplaría la posibilidad de llevarlos a ambos con ellos, aunque no estaba muy seguro de ese plan.

 - Ya. Una antigüedad. - Como otra cualquiera. Claro. Miré a la Bruja Escarlata, con la complicidad que me permitía haber sido su compañera tanto tiempo. A los ojos. Allí había gato encerrado. Primero Silver Samurai. Ahora esto. Arrugué la nariz y el ceño con fuerza.

 Extendí las garras de mi diestra en un puño cerrado y apretado para amenazar la vida del hombre que estaba tendido ante mí. Esto no es un juego niñato. Pensó, dudando en quitarse ese problema de encima ahora, sin valorar las posibles consecuencias, si eran o no inocentes llevados a realizar las acciones equivocadas que estaban cometiendo por un bien mayor. Ella no era ningún juez, pero tampoco una asesina despiadada.

 Bufé.

 - Cuéntales acerca de la espada. - ordenó. Luego le hizo un gesto al Capitán y a Scarlet para que estuviesen atentos, iba a extraer lo que quiera que llevase ese tipo guardado.

 - Más vale que no intentéis nada, o no quedarán extremidades pegadas a vuestros cuerpos cuando os encuentren rogando por vuestra vida en un charco de sangre. - espetó con cierta bilis siendo reprimida. ¡Este lugar me pone de los nervios!

 De nuevo buscó los ojos de su compañera. Los de Laura decían claramente que deseaba esa espada, pero también que podía sentir lo peligroso que era. Estaban hablando de objetos capaces de acabar con su cuerpo, capaces de herirla lo suficiente como para que no hubiese vuelta atrás. Por otro lado, era tan tentador...

 ¿Y si servía contra el fénix? Aunque su alma fuese consumida en el proceso, la venganza merecía la pena.

 - Veamos que tienes aquí. - anunció esperando que todos estuvieran alerta, y dispuesta a herir para incapacitar al hombre si se intentaba resistir. No le sorprendería extraer algo capaz de dejarlos a todos fuera de combate. En el mejor de los casos sería un walkie o algún dispositivo de idiotas.

 - Pero antes destapadles bien la cara. Quiero saber a quien tenemos que dar caza si algo sale mal. - ella haría lo propio sosteniendo de la cabeza al hombre tendido.

 Como digan que no saben nada de la murasama voy a cabrearme...

Squirrel Girl levantó los brazos con las palmas hacia adelante.

“¡¡Wow, wow!! Esperad un minuto. No soy de esa clase de chicas. No todos al mismo tiempo. Tendrá que ser de a uno en uno.”*

Miró hacia arriba y dio un salto, que la impulsó por encima de las cabezas de los ninjas.** 

- ¿Más amigos a los que hay que enseñarles con quien tienen que bailar? - preguntó en voz alta Thor mientras avanzaba a toda prisa hasta el grupo de ninjas robots que rodeaban a Squirrel Girl - Nosotros nos encargamos de ellos, pequeña - añadió dirigiéndose a su compañera mientras se colocaba al lado de uno de los robots y lanzaba un relámpago que salía de su Stormbreaker con intención de dañar a algunos de los robots a la vez.

Intercambié la mirada cómplice con Laura y posé las manos en mi cintura de forma relajada. Asentí imperceptiblemente dándole a entender que comprendía, sin embargo, no interrumpí la interrogación de mis compañeros. Tres amenazando a la vez al muchacho podía hacer que se cerrar en banda o que se quedara petrificado del miedo. No obstante, creé pequeñas unas pequeñas bolas de fuego rojos carmesí con los que comencé a jugar mientras no perdía de vista al interrogado. Eran más ilusiones que una verdadera amenaza, pero servían para intimidarlo un poco más.

Mientras esperaba a que X-23 destapara la cabeza de uno de los dos chicos me acerqué al otro para hacer lo mismo.

Por supuesto que sabemos dónde está, sino no habríamos venido con el peligro que supone entrar aquí.

Mientras hablaba, Laura le quita el pañuelo que tapaba la parte de la boca, solo para confirmar que era un chico joven con una cicatriz en la mejilla derecha. El no reaccionó, y se quedó pensando un momento. Wanda hace lo mismo con el insconciente. Revelando tambien un chico joven de no mas de 20 años.

Si podéis ayudarnos, quizás lo que buscáis este allí con la katana. Supongo que ya conocéis el poder de esa espada. Capaz de detener cualquier poder de regeneración y se supone que guarda un pedazo del alma de Wolverine.

Laura como Steve sabían de lo que era capaza esa espada, dado que ya se habían enfrentado a ella, e incluso Laura había visto como su poder regenerativo era frenado. Pero lo extraño era que hace 4 años fue destruida.

El chico saca un pequeño mapa del sótano del castillo y lo muestra:

La espada está ubicada en esta habitación. Posee un cierre de seguridad electrónica y se necesita una llave especial. Supuestamente la llave la lleva encima Silver Samurái. Duerme en una habitación donde medita por las noches en la zona este del sótano. Se ubica aquí.

El chico la señala al lado de otras dos habitaciones. El sótano tenia la zona oeste más amplia y parecía haber un pequeño jardín junto a una sala enorme alargada. La zona este era una pequeña sección amplia, similar a un dormitorio con pequeñas habitaciones. Las dos zonas se conectaban por un par de pasadizos que llevaban a otras salas.

La sala mas grande de la zona oeste es una sala de ceremonia altamente custodiada por ninjas y robots. Allí parece que hacen experimentos con un extraño cubo y también suele estar el Silver Samurái.

El resto de heroes entraron en la sala de ceremonias atacando a los robots para salvar a Doreen. Un muro creado por el dr Strange dividio al grupo de robots en dos. Thor entro de lleno lanzando un rayo que daño a 9 de ellos, y dejo atontados a algunos. Doreen aprovecho el momento para saltar sobre la cabeza de uno de ellos y escapar de ellos para ponerse a salvo yendo hacia una columna proxima.

Iron Man uso una señal masiva EMP que dejo bloqueados a 6 robots, los cuales quedaron quietos sin poder reaccionar. Se mantuvo cerca en el aire para poder mantener el pulso de forma activa.

Chicos, intentaré mantenerlos inutilizados el maximo tiempo posible mientras mantengo el pulso electromagnetico. Acaben con el maximo posible de ellos.

Los robots que se mantenian en pie empezaron a atacar al grupo de heroes con rafagas de shurikens energéticos. Algunas de ellas se perdian mientras otras iban de forma certera contra Doreen, Strange y Thor.

Steve miró con el ceño fruncido a ambos muchachos y al mapa. No podía creer lo que decían de la espada ya que sabía que esta había sido destruida. Sin embargo, la información acerca del cubo había captado totalmente su atención. Steve se debatía entre varias opciones: aquello podría ser una trampa ideada por esos muchachos para hacerse con el cubo y habían soltado lo de la espada para atraer la atención de ellos tres y provocar un enfrentamiento directo con Silver Samurai. Lo que sí estaba claro al menos para el Capitán América es que tanto la espada Murasame y el Cubo eran objetos demasiado peligrosos para que unos "niños" como aquellos los manejasen. 

- La espada fue destruida hace cuatro años - le espetó algo enfurecido - ¿tratas de mentirnos?

Miró brevemente a X23. Tal vez pierda el control si esto despierta alguna emoción en ella - pensó. Negó con la cabeza rápidamente: no podían cometer más errores, debían confiar los unos en los otros. Trató de descartar esa idea de la cabeza, no les quedaba más opción que trabajar juntos.

- ¿Qué sabes de ese cubo? - le preguntó más fieramente que antes al chico.

En cualquier caso, fuera una trampa o no ideada por aquellos chavales, debían inspeccionar aquel edificio a fondo, empezando por las malditas salas que habían señalado. 

- No confío en ellos - dijo mirando tanto a Wanda como a Laura y sin esperar la respuesta del chico. Tampoco confiaba en que seguir el interrogatorio diera resultado - Laura, la espada fue destruida hace cuatro años. ¡Es imposible! ¡Tú lo sabes! 

Chasqueó la lengua con evidente signo de molestia. Había algo que se les estaba escapando de las manos. En la situación en la que se encontraban los chicos no era probable que mintiesen, ni siquiera para salir del embrollo en el que se habían metido. Se fijó más en la cara del chico, buscando el más leve signo de mentira en él, aunque no era un experto en ello.

- De todos modos, no nos queda otra que inspeccionar este edificio. Debemos ser cautos - dijo esto último como si fuera una orden, aunque acto seguido miró la puerta que él mismo había derribado sin ninguna cautela. - evitemos un enfrentamiento directo con Silver Samurai. Tanto el cubo como la espada son objetos peligrosos - miró directamente hacia el muchacho que tenía arrinconado y le espetó con la misma actitud enfurecida de antes - y más en manos inexpertas e inconscientes.