Partida Rol por web

-Señor Johnson le seré sincero, su actitud no ayuda, y ahora que estamos solos, permitame decirle, que he visto su equipo...no se de donde ha salido...(limpia sus gafas y se las coloca)...mejor dicho, como los ha conseguido, yo se de sobra de que va esto, esos objetos no te pertenecen, ni si quiera son medio legitimos, si lo que intenta aqui es cubrirse las espaldas a nuestra costa, le garantizo que ha pinchado en hueso, vayase a dormir, pero recuerde si nos pones en peligro tee utilizaré de escudo, ¡¿me he explicado con claridad?!.

HORNET rie del comentario de Bestia, una risa corta y sarcastica, de esas que intentan parecer rudas.

-No te preocupes mi peludo amigo, si alguna vida pondre en riesgo sera la mia, ya estuve muerto una vez y fue gracias a cientificos como tu y si algo tengo claro es que no pienso dejar que vuelva a pasar, por eso me he equipado bien esta vez-

HORNET sale de la habitacion sin esperar una respuesta de Bestia y se va a dormir

(Paso la tarde-noche, habia sido agotador, pero a su vez interesante habiais visto con vuestros propios ojos uno de los días más difíciles que habia vivido Estados Unidos y el mundo en su historia más reciente, pese a eso fue una larga noche de reflexiones, esto habia demostrado que quizás está lucha era más si cabe, complicada de lo que ya era, en estos momentos, el amanecer se acerca y escasas horas la hora de volver al entrenamiento, era un día soleado y el capitán vestido con unos pantalones pesqueros negros y una camiseta blanca de tirantes os esperaba en la playa, habia dejado una nota informando de que ibais a correr por la playa y que teniais pantalones y camisetas como las suyas en vuestros armarios).

Me levanto de la cama estirando mis brazos. Doy un gran  bostezo y observo un sol reluciente a traves de la ventana. Hoy toca trabajar duro, todavía mas. Me digo a mi para darme confianza y saber que podía hacer por mí mismo y ser alguien útil.

Encima de una silla veo unos pantalones cortos y la camiseta blanca de tirantes. Una nota encima de la mesita de noche ponía que el Capitán nos entrenaría en la playa. Sin pensarlo dos veces me visto con la ropa, y salgo hacia la calle en dirección a la playa. Un poco de ejercicio matutino  iriía bien para despertar el apetito. Hacía tiempo que no me dedicaba a ello, pues siempre iba acostumbrado a la moto.

Después del merecido descanso, como era habitual en mí, me levante temprano con la idea de salir fuera a correr un poco y cual fue mi sorpresa al ver como si el capi me hubiera leído la mente, una nota dejada por él me indicaba que saliera a fuera para hacer ejercicio matutino.

Me puse aquella ropa cómoda del armario y salí para realizar el ejercicio que intentaba hacer cada día, no paso mucho tiempo cuando apareció Ross con la misma ropa que yo. Buenos Días, veo que no estas acostumbrado a esto, jejejeje. Le dije al ver la cara de sueño que tenía. 

-Maldito lugar, la principal organizacion de defenza y no tienen para una s malditas camas decentes, me lleva el carajo, como alguien puede dormir en un lugar asi?-

H.O.R.N.E.T. llego otra vez al laboratorio de la rata azul gigante para recibir instrucciones osbre la mision, esperaba que esta vez hicieran algo mas que esconderce y parlotear, despues comienza a equiparse sin saludar a nadie y solo lanzando miradas retadoras a todos los presentes

(El capitán calentaba los tobillos, las rodillas y las caderas, mientras se preparaba evidentemente para correr)-Bueno, hoy vamos a tomarnos un día de concetración y relajación debeis de ser capaces de mentalizaros de que somos indiscutiblemente la solución al grave problema que el mundo sufre y que solo nosotros podemos otorgar, tened conciencia de lo que teneis en las manos...itentad olvidaos de todo por ahora...(comenzais a correr poco a poco recibiendo el suave movimiento de las olas en los tobillos).

Sigo detrás del capitán corriendo. No estaba acostumbrado y apenas tenía fondo. Manteniendo el ritmo intentaba que mi corazón no se aceleraba, y procuraba desescabullirme entre mis pensamientos y convencerme que sería útil para la misión. Con cada chapoteo saboreaba la brisa del mar y el ruido de las olas al golpear las piernas. Sin duda era refrescante estar en la playa y este entrenamiento, aunque quizas mas agotador fisicamente, empezó de forma reconfortante.

Aquella carrera matutina no fue nada novedosa para mí, cosa que no pude decir de Ross. Venga ya queda menos, le anime durante un rato que marche a su vera. El sudor empapaba mi cuerpo, el sol estaba ya en lo alto del cielo, pero aun no hacía demasiado calor. 

El capi era como una maquina bien engrasada, apenas se le notaba esfuerzo alguno y su ritmo era constante. Vaya su entrenamiento es excepcional. me dije al ver su magnifica forma física.  

Sin duda Frank mantenía mejor el ritmo que yo. Parecía estar mas acostumbrado al deporte, pero a diferencia del Capitán, eramos como unos novatos. Para él parecía ser un paseo, por el ritmo que llebávamos. De apretar un poco, nos dejaría atrás como un coche. Ya me costaba mantenerlo, que poco a poco me iba quedando unos pasos detrás de Frank. No sé el rato que llevaba corriendo, pero me las encontraba pesadas, y la respiración algo agitada. Tampoco es que fuera un negado para el deporte, pero el estar retirado de la competición de motos, y usar esta como principal medio de transporte hizo que perdiera el fondo que tenía.

Desde luego, prefiero estar escuchando las excentricidades del doctro McCoy, a correr por aquí. Si el Capitán fuera una tía, seguro que le atrapaba. Dije con las pocas fuerzas que me iban quedando.

-Ya...bueno, escuchadme, Ross y Frank, acudid al laboratorio para que el doctor comience el entrenamiento establecido para vosotros, en cuanto a el señor Johnson, puede hacer lo que desee el resto del día, yo les veré en la cena...pensad en lo que teneis entre manos, pensad cuantos dependen de nosotros y alcanzareis la verdad, de lo que teneis que conseguir, de lo que debeis hacer...(tras esto el capitán se retiro hacia la casa, dejando a los jóvenes a escasos metros de la casa en la playa).

Entendido Capitán. Asiento con la cabeza afirmando su orden. A pesar de tener respeto al Capitán, veía en él alguien quizás demasiado idealista. Será tantos años como el icono de América? O ser el héroe de la Segunda Guerra Mundial? Quien sabe. Tanta responsabilidad, tanta grandeza me corrompía.

Me dirigí jadeando por el cansancio y sudoroso hacia la casa. Con ganas de una ducha y jugar con mi nuevo juguetito.

Al terminar la carrera mañanera, el capitán nos insta a Ross y a mi a seguir con nuestro entrenamiento en el laboratorio.

Mientras me llevo una toalla a la frente para secarme el sudor del esfuerzo realizado asiento la decisión del capi, Me parece bien, debemos seguir trabajando con nuestros poderes.

Y junto a Ross voy a la casa, una ducha antes no me vendría nada mal.

Entonces no haremos nada hoy? A estos sujetos les gusta perder el tiempo, supongo que tendre que encontrar algo que hacer mientras los niños juegan, tendre que ir a perder el tiempo a... no se, a algun lugar, esta cueva es muy aburrida.

-Entonces diviertanse niños, yo ire a hacer cosas de adultos-

H.O.R.N.E.T. sale de la camara y va a explorar la fortaleza