Partida Rol por web

(Esta vez os llevarón a la sala de entrenamientos era una habitación rectangular enorme y completamente blindada, antes de acceder a su interior por un portón circular, había una sala de máquinas y allí estaba Jeanov, el científico del S.H.I.E.L.D)-Buenos días caballeros, porfavor accedan a la sala de entrenamientos, una vez dentro recibirán instrucciones...

Una vez aseado tras la carrerita por la playa me dirigí a otra sala de entrenamiento, allí ya nos estaban esperando.

Buenos días, como usted diga, y me camine hacia dentro de la habitación. Veamos que plan de entrenamiento tenemos ahora.

La ducha me hizo relajarme mucho más. Me dejo como nuevo y con mas ganas de entrenamiento. Espero no tener que correr más.

Buenos Días. A ver que nos tienen preparado ahora. Quiero algo de acción. Y junto con Frank, me situo en el centro de la sala.

(Al entrar en la sala acorazada hay una mesa y sobre ella dos objetos lo uno, parece una especie de pequeño yelmo de latón o de peltre quizás con una serie de circuitos en circulo, lo otro parecía 2 armaduras para los antebrazos los caules parecían particularmente pesados y hechos de acero, no tenían adornos, pero estaban cromados, cosa que era un tanto incompatible, pero aqui tampoco es que entendiesen mucho de moda, y sobre la mesa dos trajes de fibra de carbono al lado del casco uno de color azul con el simbolo de la organización y al lado de las armaduras de antebrazo uno igual, pero de color negro).

Al entrar en la sala me pareció que nos tenían preparado un equipo especial para el uso y aprendizaje de nuestros poderes, seguramente los utilizaríamos para nuestro próximo entrenamiento.

Me acerque curioso a la mesa y me interese por aquel artilugio con forma de casco, no me pareció muy pesado, lo contrario que aquellas muñequeras grandes que lucían demasiado pesadas.  

Me volví hacia la puerta y deje en el aire una pregunta que era obvia: Supongo que estos trastos son para nosotros, ¿Cuando empezamos?

Dos armaduras diferentes, dos formas de luchar. Sin duda al entrar en la sala acorazada me entró la curiosidad por ver todos esas piezas alli encima de la mesa. Supongo que las de carbono con el logo de Shield serían los nuestros.

Frank, supongo que nos deberemos poner una cada uno. Habiendo dos es lo lógico. A ver si nos dan alguna explicación de los pasos a usar.

-Mucha impaciencia, un traje para cada uno, pues sin él estareis fritos en un instante creedme, y ese no es el traje de operaciones...bien Ross los guantaletes esos del doctor McCoy son para que te los pongas tú y Frank se pondrá el casco concetrador de ondas hertzianas...en cuanto esteis listos, preparaos...

Al descubrir el cadáver de Jeanov, se quedo petrificada ¿que había pasado? ¿donde estaban los demás? ¿estarían bien? se acerco a el cadáver de Jeanov, pero pronto vio que nada podía hacer por el ya.

Corrió hacía donde habían llevado a los demás a entrenar, solo esperaba que estuviesen bien.

Creo que le veo cierto nerviosismo en usted, señor Jeanov. En ningún momento he pensado que sean los trajes de operaciones. Quizás tenga miedo en no seamos lo suficiente efectivos para la misión, pero desde luego lucharé hasta el final.

Notaba cierta intranquilidad en las palabras de Jeanov, quizas tambien eran mis ganas de actividad. Me chiflaban los aparatos raros, aunque no era de tecnología. Distonia con mi personaje? Quien sabe.

Me acerqué hacia la mesa y me puse los guantaletes metalicos. Frank, creo que te quedará bien ese casco. Quizás te ayude a levitar y todo. Y dejo una ligera sonrisa.

Las ganas que teníamos por aprender nos hacían impacientes, algo que no le gustaba mucho al profesor.

Bien, Bien, suponía algo de eso, los trajes sin duda tendrían una función esencial para el entrenamiento, al igual que los objetos.

Al indicarme que a mí me correspondía el casco, lo tome al igual que el traje azul, y me desvestí allí mismo para ponerme el traje, mientras Ross soltó un chascarrillo, Veamos que efecto nos proporcionan estos objetos, quizás como bien dices me hagan levitar y todo.

En pocos minutos ya estaba preparado con el traje puesto y el casco en mi cabeza, parecía que estaba hecho a medida.

Yo tambien me puse el traje junto los guanteletes. Era el momento de comenzar las pruebas.

(Acudiste en busca de los demás cruzaste por la cocina, la cual estaba destrozada, y en el suelo en un verdadero cahrco de sangre había una mano humana cortada de su cuerpo, en ese momento oíste carreras de los soldados del piso de arriba y una comunicación por radio)-Pelotón Alfa, no hemos encontrado a la zorra rubia, requerimos que el pelotón Beta entre en la casa y que los demás vigilen todas las salidas, nos se nos puede escapar bajo ningún concepto.

Escucho atentamente, vaya paree que soy MUY importante, pensó sin sentirse nada tranquila. No sabía donde estaban los demás, es más, no sabía si quiera si estaban vivos, ahora lo más acuciante era salvar su propio pellejo.

No conocía aun muy bien del todo aquel recinto, pero sin duda habría donde esconderse. 

(se cayo un momento para beber un trago de agua de un vaso que tenía cercano)-Bien, pues vereis, en primer lugar vamos contigo Frank tu caso, recoge y concentra las energías de tu cerebro, estas proyectan tus poderes sobre un objeto llegará un momento en el que no lo necesitarás en cuanto a Ross, esos guantes recogen un veneno que hemos cargado en este caso con aterioridad y disparara dardos envenenados gracias a tu habilidad que le permitira sintetizarlo de manera total...(delante de cada uno a unos 10 metros, se alza un muñeco de madera de practicas, delante de Frank, ademas una plataforma desde el techo desciende hasta el suelo dejando una caja de metal)...bien caballeros, ya podeis adivinar que debeis hacer ahora...

Con las indicaciones de Jeanov, miro los guantes con cierta alegría. Los acaricio de nuevo para aprender su textura. Me sentía como un niño. como si me hubieran regalado mi primera moto. Y dirijo la mirada hacia el muñeco de madera que tenía enfrente. No sabía si tenía que esperar indicaciones, pero apunté mi brazo derecho. Lo puse recto e imaginandome una mirilla en el frente, realicé un disparo intentanto apuntar hacia el cuello de la diana.

Nuestra primera prueba estaba delante de nuestras narices, de alguna manera suponía que aquel casco me ayudaría con mis poderes y la explicación del profesor afirmo mi corazonada.

La tarea que me propuse realizar era levantar aquella caja metálica por la rampa, venga debes centrarte, muévete, muévete. 

(El disparo de Ross alcanzo en el objetivo, pero Frank estuvo algo más lejos pues la caja volo hasta las paredes acorazadas reventandola en astillas)-Creo Frank que debes mantener la calma, Ross tu muy bien sigue asi, podeis estar practicando el tiempo que querais, para aumentar vuestra capacidades, falta poco para la batalla y debeis estar listos...

-¡Tú!...(el capitán américa se acercó hasta donde estabas)...¿piensas quedarte todo el puñetero día ahí sentado?, quieras o no vamos a entrenarte y ponerte a punto, esta es tu lucha tanto como la nuestra, vamos, ven aquí...(te llevo a la sala de entrenamiento la cual se habia dispuesto como un almacen lleno de cajas y containers)...bien, quedaté aquí, me oíras por megafonía...(el capitán se desvanecio en el aire, mientras se escuchaba unos mecanismos por el almcacen).

(La ventaja de tu cuerpo era muy útil, pues pudiste esconderte entre un mueble y la encimera de la cocina, parecia que los pasos se alejaban, pero cuando creías estar a salvo viste una cabeza que te miraba por encima subida en la encimera, lo único que veías es que sus ojos eran de color verde claro, siembargo un sónido caracteristico te hizo reconocer que eran unas gafas calóricas)-Te pille rubita...(dijo con voz de mujer).