Partida Rol por web

Esas cosas no parecían peligrosas, eso es cierto, pero ahora tenemos enfrente nosotros un geth intacto -intentó que entrara en razón-, si conseguimos comunicarnos con él, o aunque solo sea investigarlo, será un gran avance para toda la humanidad y también para toda la galaxia. Subirá a nuestra nave, y si intenta algo raro me limitaré a hacer lo que quieres hacerle tú sin pensármelo. Pero no hay muchos geths que queden intactos, y nos puede servir. 

Usaba un tono normal, tranquilo e incluso dulce, mirando a los ojos al chico para que lo pensara... Claro que si le disparaba no tendría nada que hacer, pero realmente veía eso como una oportunidad para avanzar... Y quizás conseguir ir un paso por delante de los geth.

Nada más llegar a la zona de entrenamiento los insultos de unos krogan hacen que me que me hierba la sangre, pero intento calmarme ante la posible represalia por mi comportamiento. Así que intento respirar lentamente mientras me acerco a ellos, para seguidamente contestar a sus preguntas.

– Mi nombre e Joram, soy el nuevo recluta para la Manada Sangrienta.
Vengo buscando a Menglar. ¿Sabéis donde puede estar?

El soldado escucha tus palabras con paciencia mientras se piensa si va a disparar o no al sintético, tras oirte observas que su arma empieza a temblar y su expresión de enfadada pasa a ser seria. Acto seguido guarda su arma en el compartimento situado a su espalda.

- Está bien... maldita sea... tu ganas. Espero que esto no te pase factura en cualquier momento, estoy dispuesto a no matarlo, pero lo que si que no puedo permitir es que lo subas a tu nave, en nuestras instalaciones existe más seguridad de la que pueda haber en una nave. Asignaré un comando de 4 hombres que se irán turnando de a dos en la puerta custodiando al geth, tendrán órdenes de disparar en caso de cualquier gesto agresivo por parte del geth ¿entendido?.

Por lo que el soldado acaba de decir parece que no es un simple soldado, debe ser el jefe de seguridad de las instalaciones. Este sigue hablando.

- James, William, John, Melissa, vosotros cuatro hareís turnos en el laboratorio B7, allí llevaremos al geth para su estudio. En cuanto a ti capitana Evans suelte al demonio ese y vaya a la enfermería, no me gusta esa herida que tienes en el muslo, trasladaremos a tus compañeros heridos a la sección médica de las instalaciones.

El capitán se gira hacia la multitud de científicos.

- En cuanto a los demás, hoy es trabajo de seguridad limpiar el desastre de ahí abajo, tenemos que recuperar el cuerpo de Emily... Mañana continuareis con vuestro trabajo excepto el aula médica a vosotros os necesitamos.

Uno de los soldados te recoge al geth y otro apoya tu brazo en su hombro, unos científicos os siguen, el resto se dispersa y vosotros subís al ascensor. En el trayecto del ascensor el jefe de seguridad te mira.

- Bueno, no nos han presentado, mi nombre es Hide Kyle. Serví a la Alianza durante muchos años, pero eso ya lo he dejado atrás (parece una persona apesadumbrada). Menudo recibimiento ¿eh?.

- Mira Kreig, ¡pero si sabe hablar!.

- (Carcajada) Basta ya idiota, por muy gracioso que sea reirse de este pobre desgraciado todo el día, no nos pagan por ello. Está bien pequeño, Menglar es el Vorcha que está al fomdo del campo de entrenamiento, allí espera a los nuevos reclutas. ¡Date prisa!

Acto seguido sigues tu camino hacia el campo, observas que está bastante adornado, hay un recorrido de entrenamiento de soldados; neumáticos, paredes con una cuerda colgando, alambre de espino sobre una parcela. Sigues un poco más y te encuentras con un vorcha con el uniforme característico rojo de la banda de mercenarios.

Menglar parece un tanto agresivo en su aspecto, tiene ambas extremidades superiores cubiertas de cicatrices, por tu experiencia sabes que los vorcha cuentan con una asombrosa capacidad de regeneración, algunas parecen ya bastante viejas.

- Sharrggg, que tenemos aquí, un nuevo recluta dispuesto a empezar en el negocio ¿eh?. Bueno ahora veremos de que pasta estas hecho.

El vorcha te lanza un rifle de francotirador, cuando lo coges notas enseguida el peso del arma, por su peso dirías que está cargada con más de una bala.

- Tiene un cargador de 5 balas, es un rifle Hydra de los más usados, pero aún sigue siendo preciso. Escúchame bien, quiero que le des a esa diana que esta a 50 metros, quiero verte disparar ¡vamos!

Aparte de ti y el instructor hay en el campo una serie de krogan y vorcha disparando a dianas, algunas de ellas en movimiento, otros están entrenando a sus varrens contra muñecos de prueba.

Sonrió satisfecha, era eso justo lo que esperaba, aunque por un momento había dudado si sonaba convincente, se alegró de que así fuera, aunque tampoco sonrió de oreja a oreja, se limitó a sonreír leve y a asentir a sus palabras, si incluso le iban a prestar las instalaciones para que pudiera investigar el sintético.

Lo único que no le hacía gracia es que ya se había conectado una vez en aquella red, debía confiar en que no volviera a suceder. 

Gracias -le dijo subiendo al ascensor, ya cuando veía que se llevaban al geth, sonrió ante su presentación y su pregunta- Sí, la verdad es que hacía años que no tenía un recibimiento así... Ha sido entretenido, pero lo siento por la doctora Emily. -dejó de sonreír, suspirando y bajando la mirada... Las guerras entre razas, sobre todo entre sintéticos y orgánicos, parecían ser eternas.

Se encontraba acurrucada contra un muro, con los ojos abiertos como platos pero sin conseguir ver nada. Subitamente algo se activó en su mente y el mundo que la rodeaba comenzó a aclararse: las figuras comenzaron a volverse más nítidas, más coloridas y el sonido inundó sus oidos de forma violenta despertándola de ese estado de shock que le había dejado inmóvil. Sentía la adrenalina inundar su cuerpo obligándola a reaccionar de una vez ante aquella situación.

Pero, ¿que puedo hacer? ¡¡QUE PUEDO HACER!! Yo no soy una guerrera, no puedo matar a nadie,yo... Se acercó tambaleándose al borde oyendo a duras penas que Aria le pedía ayuda. Lo que más deseaba era salir de allí corriendo pero sabía que eso era imposible, no podría bajar de alli y atravesar todo el local sin ser vista, además necesitaba la ayuda de esa asari para poder salir de Omega. Era el momento de decidirse: mantenerse oculta y sobrevivir o arriesgarse a morir y ayudar en lo posible a aquella asari que podría ser su salvación.

-Yo...estoy contigo, haré lo posible- le grita a Aria mientras se asoma por el borde apuntando a uno de los vorcha del nivel inferior. Con las manos aún temblorosas observa al objetivo al que intenta eliminar y no puede evitar sentir lástima por el. A pesar de ello, aprieta el gatillo.

El jefe de seguridad parece triste, baja la cabeza y permanece así el resto del trayecto. El ascensor se para y el grupo sale con dirección al ala médica de las instalaciones.

Cuando llegas entrais en una sala espaciosa llena de camas blancas y una serie de instrumental quirúrjico por toda la estancia. Te apoyan en una de las camas para que así puedas descansar y recuperarte de tus heridas.

- Relájese Sanders, enseguida vendrá nuestro equipo médico a atenderla. Nosotros custiodiaremos al geth, cuando esté preparada estaremos esperando en el laboratorio de IA, vamos a limpiar ese desastre...

Acto seguido se marchan y te quedas a solas varios minutos, el equipo médico llega y comienza a atender tu herida en silencio, pasan unos minutos hasta que una de los médicos se dirige a ti.

- Listo capitana, no se preocupe la herida es superficial, ha perdido algo de sangre así que le convendria descansar esta noche. Sus compañeros están de camino, las heridas de la quariana no serán fáciles de curar, tiene la pierna destrozada...

Enseguida llegan varios asistentes que traen a Zheria y a Carl. Los sitúan a ambos lados de tu cama. Zheria tiene un vendaje lleno de sangre en la pierna herida, Carl no parece estar demasiado consciente.

- ¡Eva! me alegro de que estés bien, me gustaría poder decir lo mismo de mi... tengo que recuperarme y volver contigo, te debo tanto.

Asintió a sus palabras y se despidió dándoles las gracias, tampoco creía que necesitara atención médica, no se veía algo grave y en su nave tenía "potingues" para curar heridas; pero no dijo nada, las cosas no estaban para bromas, y su intuición femenina le decía que había llegado al cupo de la paciencia del jefe de seguridad, así que cuando llegó el equipo médico se dejó hacer.

Se acercó a Zheria sonriéndole con confianza.

Lo importante es que estás bien... Y mejor estarás cuando se te cure la pierna, no te des prisa, ¿vale? Te voy a esperar lo que haga falta, así que no hagas el tonto -la señaló "amenazándola" y acabó por sonreír de medio lado. 

Suspiró mirando a los médicos, le habían dicho que se quedara a descansar y además ya era tarde... 

Volveré a la nave a descansar -les dijo sonriendo, pues no había mejor lugar para descansar que tu propio camerino, miró a Zheria- Hasta mañana.

Dahyra

Con la pistola sobre tus manos disparas dubitatibamente el arma sobre uno de los vorchas situados tras la barra del local, el impacto de la bala  penetra directamente en el pecho del alien, la sangre sale del orificio y el vorcha cae contra el centro de la barra circular tirando en su camino varias botellas.

Te vuelves a cubrir de los disparos, cuando vuelves a mirar el enemigo este se encuentra bocarriba inerte, pero observas algo muy peculiar, ¡el orificio que abriste con el disparo se está cerrando!. Una de las habilidades que hacen que a los vorchas se les permitan formar parte de la Manada Sangrienta es su gran capacidad para la regeneración en combate, muy útil en situaciones críticas.

Cuando estabas mirando el alcance de tu ataque un disparo de uno de sus compañeros te roza superficialmente el hombro, te llevas la mano al hombro, la herida es sólo superficial pero hace que te duela de verdad.

Bolvar Elmore

Te levantas con dificultad tratando de recuperar la respiración normal poco a poco, pero el combate sigue y un mal disparo acaba de darle al krogan muerto que tienes a tu lado, sin duda el cuerpo sin vida no era su objetivo, sabes que necesitas cobertura antes de que consigan acertar en el blanco.

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Es el turno de Aria de acabar con los invasores, tras haberse apuntado un krogan en su lista negra, se incorpora tras su cobertura y lanza una especie de esfera azulada que alcanza a uno de los vorchas, lo levanta en el aire y lo lanza violentamente contra una barra de acero de las bailarinas del local. El golpe es tremendo partiendo al desdichado vorcha por la mitad, se escucha un sonoro "¡Crack!" y el cuerpo cae doblado por la espalda al suelo de la pista de baile.

El último vorcha aprovecha que Aria está "manejando" a su compañero para asestarle un disparo preciso que se dirige a su cráneo, al impactar destiñe un brillo azulado, sin lugar a dudas su barrera de protección biótica le ha salvado una vez más la vida.

Como podeis observar Aria es una experta en el combate, controla todo tipo de armas con letal precisión, sus poderes bióticos le ofrecen una barrera de protección además de movimientos de ataque como lanzamiento y alzamiento. Su carácter es fuerte y dirige Omega con fuerza y destreza.

 Tragué saliva en el momento que percibí que habían tomado mi cuerpo de nuevo como objetivo de disparos. Bajé demasiado la guardia tras el encontronazo con el difunto Krogan.

Rápidamente, me situé en la columna más próxima, buscando una cobertura que me diese tiempo a esperar a que mi rifle se enfriara. Había comprobado desde la distancia como el escudo biótico de Aria hacía su trabajo de una manera sublime, tarde o temprano tendría que conseguir un dispositivo de esos.

Aguanté la respiración y salí de mi cobertura para disparar ráfagas desde mi rifle con el fin de acabar con alguno de los Vorchas que aún se mantenían en pie y siendo una amenaza.

- Gracias compañera, no sabes lo mucho que te aprecio, sin ti ya no estaría aquí, prometo ser más útil en el futuro (Zheria apreta un puño) malditos geths...

- No te preocupes por mi, comienza con la investigación, yo te alcanzaré más tarde.

Tras descansar un tiempo en el aula médica te despides de tu compañera y decides pasar la noche en tu camerino donde dormirás comodamente. Sales del aula médica caminando por los pasillos para alcanzar el ascensor de la salida, pasas el pasillo donde combatiste ferozmente contra los geth, observas que han recogido los cuerpos y limpiado la sangre que decoraba toda la estancia, lo único que permanece son las señales de balas en las taquillas o paredes.

Acto seguido subes al ascensor y sales a la superficie, cuando sales de las instalaciones una noche oscura cubre el cielo de la colonia y las calles de la misma están desiertas,  la iluminación es bastante buena permitiendote alcanzar tu nave sin problemas, introduces el código de seguridad y una rampa te permite acceder a su interior.

Cuando entras la rampa se cierra automáticamente, en la aeronave se encuentran 2 o 3 técnicos en sus puestos, los demás estarán probablemente durmiendo, al pasar a su lado te saludan con respeto y sigues tu camino hacia el camerino.

Pero al cruzar la puerta del puesto de mando un técnico reclama tu atención.

- Capitana Sanders, una conexión entrante del admirante Hekett pide paso, supongo que será para obtener el reporte de los problemas en tu llegada a las instalaciones, ¿Qué le contesto?.

Al darme el rifle unos recuerdos leves de mi instrucción asolan mi mente y empiezo a actuar por instinto: primero calibrando el peso, seguidamente ajustando la mira y finalmente apoyándola sobre el hombro, mientras respiro hondo para apuntar con calma al objetivo.

Una vez lo tengo en el visor el centro de la diana, empiezo a disparar corrigiendo la posición del arma para evitar el retroceso de ésta.

Saludó con el mismo respeto a todos que la saludaban, estaba cansada y tenía ganas de llegar a su camerino, sin embargo, y en medio de un bostezo, alguien la interrumpía haciendo que diera media vuelta sobre sí misma para atenderlo.

¿Qué decirle? Si le decía que tenía un geth bajo su supervisión se ganaba una bronca fijo, además de órdenes (como destruirlo) que no quería cumplir, pero no decírselo sería mentor u ocultar información a un superior, y francamente en estos momentos no sabía qué era peor. 

Respóndale que ha habido un pequeño percance, pero que ya está solucionado, y... Que continuaremos intentando sacar información de los geth, entre otras investigaciones.

Vale, no había dicho que había "rescatado" un geth, pero había dicho que continuarían la investigación... No le estaba mintiendo, casi.

Coges el arma dispuesto a enseñar lo que vales al instructor, apuntas y disparas a la diana situada a 50 metros de distancia. El disparo es tan preciso que pega en el centro de la diana, es retroceso te ha dado un fuerte golpe en el hombro, esto indica la falta de calidad en las armas de estos mercenarios. Apoyas el arma en el suelo y miras al vorcha para ver que impresión has causado en el.

Este observa con unos binoculares la precisión del tiro.

- Sharrgggg, estupendo turiano creo que ha sido uno de los mejores tiros de francotirador que he visto en uno de tu especie. También han sido pocos los turianos que he visto por aquí hehehe.

Menglar observa un poco más el lugar donde ha dado el tiro.

- Justo en el centro de la diana...

- Para asegurarme de que no ha sido suerte, toma un fusíl se asalto Thunder, a ver como te las apañas con este. Está configurado para operaciones de asalto, así que su principal ventaja es que puedes dejar seco a cualquiera con 3 ráfagas de 3 disparos cada una.

El vorcha te retira el fracotirador y te lanza un fusíl de asalto, al atraparlo notas que este es más ligero pero letal a distancias medias. El instructor pulsa un botón situado en un panel lleno de tirra a su izquierda, este se ilumina en un naranja sucio y inmediatamente la diana anterior se oculta dando paso a otra diana con forma de humano aún más cerca, diarías que está a unos 25 metros de distancia aproximada.

- Veamos...

- Recibido capitana, enseguida le entrego un reporte. Que pase una buena noche.

Pasas la puerta automática del puesto de mando, sigues un par de pasillos más allá y llegas a tu camerino descansando allí el resto de la noche. Las horas pasan y la noche da paso al día. Te despiertas con la agradable música del despertador automático, los pensamientos de la tarde anterior te vienen a la mente ¿será peligroso activar el geth? ¿Zheria podrá recuperarse?, sacudes la cabeza para despejar las dudas que puedas tener, hay unas instalaciones que puedes usar y todo un campo que invetigar sobre las IA, tu tema favorito.

Te incorporas de la cama con algo de sueño, pero cuando te dispones a vestirte un holograma aparece en el dispósitivo de interfaz humana de la pared, el holográma parece tener forma de mujer humana.

- Rtr3004 a su disposición capitana, he recibido informes en mis sistemas de que uno de los geth del combate ocurrido en la estación ha sobrevivido. Permitáme la recomendación de no activarlo bajo ningún concepto, las posibilidades de que pueda corromper los demás sistemas de Inteligencia Virtual es muy alta.