Partida Rol por web

Debeis decidir que hacer con los soldados.

Me acerco a mis compañeros, que parecen que han dejado ko a los rivales y les digo:
Perdonar, por esconderme, pero yo no soy un combatiente. Tenemos que esconderlos y salir de aquí ya

Sin mostrar piedad ni misecordia, Aapep se dispone a acabar con las agonizantes vidas de aquellos soldados seguidores del Traidor de traidores. Sería oportuno entcontrar algún lugar donde depositarlos, ya fuera una habitación cercana, como algún recodo que nos ofreciese al menos algo de tiempo para nuestra huida. Aprisa, ayudadme a mover los cuerpos.

Ayudo a Aapep a rematar a los soldados y esconderlos de la mejor manera posible. Tenemos poco tiempo, pero al menos conseguiremos que tarden un poco más en encontrarlos.

Despues de muchos esfuerzos, lograis esconder los cuerpos en una sala cercana, la cual atrancais para que nadie pueda entrar en un tiempo

Vamos sigamos hasta el exterior

Continuais andando hacia el exterior, no sabeis que estara ocurriendo pero parece que la tranquilidad vuelve a dominar la zona, no os cuesta llegar al edificio en cuestion donde Isis reside. Pero existe una dificultad, el edifico esta fuertemente guarnecido, podeis llamar la atencion sobre los soldados y eso haria llamar la atencion sobre los seguidores de Set que estan en todas partes.

El edificio está bien protegido, y tras nuestro encuentro con los soldados será difícil que pasemos desapercibidos. Hay sangre en nuestras armas y nuestras ropas, y la respiración sigue alterada por el combate.

- Creo que deberíamos entrar sin que nos viesen - Señalo la parte más alta del edificio - Por el tejado...

Aapep miró el edificio de arriba a abajo, valorando su dificultad, pero no era momento de discutir, tenían a los soldados tras sus pies. Era el momento de actuar rápido. De acuerdo, intentémoslo por ahí. Aceptó clavando sus ojos en el tejado.

Bien ,parece que sois de mente rapida...mi buenos chicos, empecemos entonces la escalada, no sera nada facil, vayamos a esos edificios de alli, señala 50 m mas lejos,tendremos que andar mas por el peligro de los tejados, pero prefiero eso a tener que tener cuidado con las flechas que apunten a nuestros corazones...vayamos pues

La escalada comenzo lenta y en silencio, los 4 subisteis hasta arriba sin ningun problema y sin ahcer practicamente ruido..una vez arriba la brisa nocturna del desierto os azoto la piel , dandoos un pequeño escalofrio en toda la piel

El proximo camino seria lento, pero os llevaria a una ventana del 2º piso, con suerte las dependencias de vuestra Señora Isis estuviera cerca...

Escalo sin problemas hasta alcanzar el tejado, y me descuelgo hasta alcanzar una ventana por la que introducirnos. Voy en cabeza, pero realmente no conozco bien el lugar y no sé donde ir. Sólo espero que la búsqueda de nuestra señora sea rápida y sencilla...

Sigo a mi compañero hasta el tejado, aunque no me ha costado mucho hacerlo, me ha fatigado bastante y nada más llegar al techo me he sentado para tomar el aire. Mientras miro a todos los lados y me pongo a pensar, ¿qué es todo esto? ¿qué ocurre? me encuentro raro, sumido en pensamientos que nieblan mi mente, no puede actuar solo.

Se sintió aliviado tras encararmarse al edificio y descencer por la ventana. Echó un rápido vistazo a la sala, buscando la puerta más cercana y tomar inciativa al acercarse a ella flanqueándola a uno de sus lados, las puertas eran un peligroso y acertado punto letal.

Al entrar en el edificio sentis demasiado silencio, muy raro...

De repente una puerta se abre, no sabeis como pero sin hacer un ruido

Una sirvienta ,por las vestimentas que lleva asoma la cabeza

-Ahh, sois vosotros, mi señora os espera, teneis que daros prisa, seguidme

la chica desaparece detras de la puerta y sigue sin oirse unos pasos...

Sin saber el por qué la sigo y les pregunto a mis compañeros: ¿Qué ocurre aquí? no entiendo nada

Siguió a la doncella medio agachado, destacando sus ligeros pasos para pasar desapercibido hasta por la propia doncella de ser necesario.

El pasillo por el que os introducis parece que no se ha usado en años, debido a la arena en los rincones y las telarañas en las esquinas... la doncella parece andar muy rapido, cada vez que gira en un recodo le perdeis la vista, para cuando girais vosotros ver un pequeño revuelo en otra esquina...

La extraña mujer nos guía por distintas estancias a tal velocidad que nos cuesta seguir su ritmo. Es muy extraño, pero la seguimos sin preguntar en cuanto nos dijo que nuestra señora Isis nos estaba esperando.

Los distintos pasillos y salas parecen abandonados, y sin duda han pasado tiempo en la sombra. La situación es cada vez más extraña, pero me limito a seguir a la doncella. Parece haber puesto algo de cordura entre tanto caos...