Partida Rol por web

La noche regalaba su silencio y su negro manto caia ya sobre los aventureros, sólo iluminados por la luz de la rodonda y pálida luna llena que observaba todo desde el firmamento.

Luego de discutir unos momentos el curso de acción y teniendo en cuenta que es tarde y hasta que las tiendas abran al día siguiente falta demasiado tiempo, ante la atrevida y exitosa acción de Likos, finalmente deciden entrar e investigar la misteriosa casa, sabiendo que es posible que dentro se encuentren con Milos y quien sabe con que o quien más, de esta forma el mago y el guerrero atraviesan el dintel de la puerta, detrás de ellos entran los demás.

Con extrema precaución y sigilo ingresan a la casa, una vez dentro comienzan a recorrer y a inspeccionar todo el lugar. La casa es bastante grande, a simple vista confirman qyue la apariencia de la fachada del lugar hace honor a su interior, el lugar es una completa ruina. Hay desperdicios y restos derrumabdos del edificio esparcidos por todas partes, por lo que se hace casi imposible determinar cuántas habitaciones tenía la casa en sus buenos tiempos, tiempo que han quedado atrás hace muchos años. Es evidente que nadie habita este lugar desde hace mucho.

No hay señal ni de Milos ni de nadie más. Luego de unos minutos sin sobresaltos confirman lo que Likos les había dicho antes, las ventanas estan todas tapiadas y la puerta trasera está bloqueada y tapiada, haciendo imposible su uso, en resumen, no hay más entrada o salida del edificio más que la puerta del frente.

La oscuridad del interior de la casa se hace eterna a los ojos de Lioquiles, que en conjunto con la profundidad de la noche deja muy pobre la luz que provee la luna. Intenta regitrar algo que pudiera advertirlo de algún peligro inminente, pero la detección de ese tipo de situciones no es su fuerte, no al menos esa noche...

Chicos..., ustedes perciben o ven algo sospechoso??

...susurra Lioquiles.

Intenta detener a Lioqueles y a Smendric pero no le da tiempo, esperemos que no hayamos activado ninguna alarma ni hayamos destruido ninguna pista por las prisas....

suuuuuu no hagais ruido, deberiais haber esperado a que Likos y Khal investigaran la entrada.... pero ya da igual

se habitua a la oscuridad y usa su vision especial, para intentar ver cualquier cosa extraña... y además mira y toca las paredes intentando notar oquedades o fisuras artificiales, que dejen claro que hay alguna puerta o trampilla secreta.

chicos cuidado no veo por donde habra ido Milos, y no quiero que nos cojan desprevenidos...

Todos comienzan a revisar la casa y a buscar pistas sobre el paradero de Milos, la luna ilumina la calle, pero muy poco de su luz se filtra por las rendijas de entre las maderas que bloquean las ventanas, por lo que la visibilidad dentro del lugar no es de lo mejor.

Sin embargo, Smendric revisa con calma la construcción de la casa y se da cuenta de que los cimientos tienen aspecto de ser bastante más antiguos que el resto del edeficio, y además la piedra en la que están excavados es de mejor calidad, y está acabada con más cuidado que el resto de la casa. Un dato no menor y bastante interesante para el mago.

Luego de revisar toda la casa sin éxito, aunque al menos no han encontrado trampas ni ningun dispositivo de alerta en el lugar, Ulfgar da con algo interesante; en la parte trasera de la casa, encuentra una trampilla en el suelo. Es de madera, y tiene una anilla de metal empotrada en la madera dentro de una cavidad, quedando al ras de la madera.

Frente a la trampilla el polvo del suelo parece ser menos denso en un sector, como si alguien hubiese estado parado ahí frente a ella no hace mucho.

Likos, un tanto rezagado y reacio a ingresar a la casa, decide inspeccionar con el mayor detalle posible todo lo que le rodea, poniendo a prueba todos sus sentidos en búsqueda de la más pequeña pista que los demás no hayan advertir. Pareciera que el bribón finalmente actuara de una forma más seria y prudente. Pero los hechos descartarían esa posibilidad.

"¿Qué le digo chicos? La curiosidad mató al gato. Bueno...no seré gato pero si curioso. No hay rastros de gente por aquí. Pero sabemos que aquí dentro había gente. Esto debe activar alguna especie de puerta secreta o pasadizo ¿No creen?"

Los mira a todos y cada uno a los ojos, con una sonrisa que pareciera no caberle en el rostro, todavía con la apariencia de un chiquillo. Se para delante de la trampilla con sus ojos posados en la anilla de metal e intenta abrirla...

- Parece evidente que si hay alguien en esta casa, debe estar ahí abajo - digo señalando la trampilla - No sé si os habéis fijado, pero los cimientos son distintos del resto del edificio. Parecen mucho más antiguos y mejor trabajados - Miro a mis compañeros y sonrío al comprobar que mi descubrimiento no parece demasiado interesante - Me refiero a que parece que esta casa ha sido edificada sobre algún tipo de construcción antigua, como si simplemente fuese una forma de ocultar lo que puede haber ahí abajo.

Muy bien amigos... si Milos y quien sabe quien más está ahí debajo, también cabe la posibilidad de que remotamente esté nuestro desaparecido, sin embargo no creo que sea tarea fácil de resolver, tampoco hay muchas posibilidades, es entrar o entrar?... Se me ocurre una alternativa un tanto arriesgada pero...

Lioquiles mira a los ojos de sus amigos (o por lo menos a donde estarían los ojos de sus compañeros debido a la oscuridad), y comienza a sentir que una energía especial le recorre el cuerpo entero como un volcán en erupción... y decide agacharse como queriendo abrir la trampilla para arriesgarse a entrar en ese escondite.

Vamos, este debe acabar pronto.

Likos es el primero en acercarse a la trampilla de madera, se arrodilla al lado de ella y la revisa cuidadosamente en busca de trampas o dispositivos de alerta, pero no encuentra nada, ni en la trampilla ni en la anilla de metal que la abre. Acto seguido el pícaro suavemente y con cuidado, tira de la anilla de metal para ver si la compuerta se abre, para su sorpresa la trampilla no está cerrada, ante el primer tirón, la trampilla cede fácilmente y se abre sin problemas.

Alguien enciende una antorcha, ya que la oscuridad en el lugar ahora es casi absoluta , luego de unos momentos logran encenderla e iluminan el agujero negro que aparece bajo la trampilla de madera para descubrir que la trampilla da a unas escaleras de no muchos escalones que descienden al sótano del edificio.

Likos descienden los escalones con cuidado, una vez en el sótano levanta la antorcha y descubre que la escalera lleva hasta una vieja bodega de vinos.

A lo largo de las paredes se alinean nueve enormes barricas de roble, cada una de ellas de 6 pies de altura y 8 de longitud. Por el estado de descuido en el que se encuentran estas barricas, parece que han estado almacenadas aquí durante bastante tiempo; sin embargo, paradójicamente, en la habitación hay muy poco polvo.

Al ver que el lugar es seguro, Likos llama a sus compañeros, pero esta vez actúan con más precaución y antes que bajen los demás Khal se adelanta para intentar encontrar algún tipo de huella o pisada en el lugar.

Esperen, esta vez denme un minuto para buscar huellas o algún rastro allí abajo, si Milos entró en este lugar puede que haya bajado allí abajo.

Khal desciende los escalones y comienza a inspeccionar el sótano mientras Likos le ilumina sin moverse. Luego de unos momentos, Khal da la noticia:

Aquí! lo encontré! unas pisadas.

Ante el descubrimiento del elfo, el resto del grupo baja al sótano para ver que ha encontrado.

Khal les enseña unas tenues huellas que ha encontrado entre el polvo del lugar, las pisadas van desde las escaleras hasta una de las barricas ubicada situada en la pared oeste.

Muy bien Khal, por fin siguen las directrices que he dicho varias veces por seguir, antes de tocar nada, dejadme pasar, no quiero que pase nada raro, si es el unico acceso al sotano, seguro que hay alguna trampa o conjuro de custodia, al fin y al cabo seguro que hay magos, y Milos es un sacerdote con muchos conjuros en su haber...

Moradin Domino meo, dabit me virtus tua meos oculos videre emanationum atque arcana, deprehendunt atque ad minima incantatores ...

los compañeros ven como se queda en la parte de abajo del sotano , se sienta y cierra los ojos...

Ulfgar se acerca al lugra donde las pisadas terminan junto a la barrica, pide un momento de silencio al grupo para lograr una óptima concentración.

Acto seguido el clérigo se sienta en el piso, cierra sus ojos y comienza a decir unas extrañas palabras, extrañas para aquellos no versados en las artes arcanas.

Para la sorpresa de todos, la trampilla no estaba cerrada, ni había trampa alguna en ella. Todo el grupo descendió por las escaleras, iluminados y guiados por Likos. Khal se adelanta al bribón para inspeccionar la zona. Sus asombrosas capacidades élficas logran percibir lo que parecen ser huellas.

Ulfgar se dispone a investigar el lugar hasta donde dichas huellas parecieran perderse. Quizás haya un pasaje secreto.

"Chicos ¿estamos de acuerdo si digo que no deberíamos descuidar nuestras espaldas? Si estamos todos aquí abajo nos pueden atrapar como putos ratones. No sabemos si allí arriba haya alguna otra trampilla. O aún algo menos pensado, que ese tal Enzo regrese y nos deje encerrados. Mejor subo y me quedo allí" 

"Además aquí abajo hace frío y hay mucha humedad...Y como que cinco varones en cuarto oscuro mmm...¿¿¿Y qué es ese olor??? Toma canas, no te chamusques la barba ehhh, jejeje"

Le entrega la antorcha a Smendric y se dirige escaleras arriba.

Como siempre bien pensado mi amigo Likos, no huela nada bien que tengamos un acceso tan fácil a este lugar.

Susurra Lioquiles, sin dejar de apretar con su mano el puño de su espada bastarda, como si fuese un reflejo tipico de un guerrero dispuesto a defenderse de cualquier ataque sorpresa.

Deberíamos esperar a que nuestro compañero enano termine su meditación y vemos por donde dirigirnos.

mal me huele esto... si no tengo una linea directa de vision no puedo discernir que es pero me mosquea bastante...

se levanta y sube tranquilamente pero pensativo...

A ver chicos, tenemos un pequeño problema, detras de la barrica donde terminan las pisadas que nuestro buen amigo encontró, hace un giño a Khal, he detectado un aura debil de magia, el problema es que como esta detras no puedo discernir que conjuro o custodia es, por lo que tendremos que arriesgarnos, puede ser una trampa magica, como una bola de fuego o algo por el estilo, una alarma, un conjuro invocador, o a saber que... pero no me gusta, y sin saber el conjuro ni estando cerca no creo que pueda pararlo. podemos esperar y buscar en una tienda arcana algun pergamino que nos sirva, pero posiblemente no tengan puesto que son conjuros de alta complejidad y además son muy caros...

que hacemos nos arriesgamos a abrirlo? o que hacemos?

- Yo voto por arriesgarnos. Seguramente ya sabrán que estamos aquí, así que no creo que haya mucha diferencia - Asiento mientras acaricio mi blanca barba - Lucius nos lo agradecerá - levanto la mirada para cruzarla con los ojos de mis compañeros y sonrío - si es que aún está vivo. Movamos ese barril y veamos qué encontramos al otro lado. Eso sí, preparémonos bien antes por si Ulfgar tiene razón y se activa algún tipo de trampa mágica.

Concuerdo con Smendric, si no fuera porque nos conocemo mi maese enano, diría que tienes miedo. Entiendo que quieras ser cauto, pero entiende que no contamos con tiempo para volver, si ellos saben que estamo aqui, no podremos entrar tan facilmente la proxima vez. Quizá tengamos algo de fortuna y no sepan que estamos en este lugar. Yo opino de avanzar.

Luego de algún cruce de palabras la mayoría decide ver que hay detrás del gran barril, pero el poco espacio entre los barriles y entre el barril y la pared no los deja maniobrar bien, eso y el hecho de que cada barril mide 6 pies ( 1,80 metros) y 8 de longitud (2,43 metros) vacios o no, son demasiado pesados como para que puedan moverlos.

Luego de un par de intentos se dan cuenta de que no podrán moverlos, por el poco espacio en el lugar para maniobrar y por el peso de los barriles.

Acto seguido Khal recorre la pequeña bodega dándole un golpecito a cada barril, con lo que se da cuenta de que cinco de los barriles parecen estar llenos ya que suenan apagados cuando los golpea, pero los cuatro restantes le devuelven un eco al ser golpeados, indicandole que deben estar vacios, uno de los vacios es el barril donde terminan las pisadas y donde Ulfgar detectó un aura mágica. Khal no debe decir nada, todos entienden el significado de ese eco.