Habéis cabalgado tres horas más bajo un Sol esplendoroso. Durante la primera hora el paso de la tormenta era evidente. Árboles arrancados, tierra sin asentar, piedras fuera de sitio y ningún animal a la vista. Aunque la tormenta avanzaba hacia el oeste a mucha más velocidad que vosotros, a la lejanía habéis visto como poco a poco ésta se deshacía. Finalmente todo el horizonte ha quedado despejado.
Después de la primera hora os habéis encontrado con un abrupto valle que os ha obligado a bajar y luego subir a un ritmo más lento. Al menos durante este trecho todos habéis disfrutado de un aire más fresco y húmedo y vuestros caballos han pisado suelo fértil y terroso. Una vez habéis vuelto a subir el viaje ha continuado como siempre: con la única compañía de lagartos, cactus saguaro, arbustos jojoba y pájaros comecucarachas.
Desde hace un rato el refrescante rumor de agua va llenando el aire. Abundan las palomas blancas y los pájaros de distintos colores: sin duda habéis llegado hasta el Rio Fairbank.
Hay un sencillo puente de madera que lo cruza y un sendero fangoso pasa al lado de una sólida cabaña de madera. La tierra está pisoteada por el sinfín de caballos y carros que deben de haber pasado por aquí.
A medida que os acercáis vais viendo más detalles. Afuera del puesto hay abrevaderos para los caballos y también un gran tablero cubierto de docenas de papeles amarillentos que revolotean suavemente con la brisa.
La cabaña está hecha de largos listones de madera talada y está parcialmente cubierta de musgo. A fuera y colgando de un poste un desvencijado cartel anuncia: Rick’s Trading Post.
Ben está sudando, lleva horas cabalgando bajo el sol del oeste y se enjuga la frente con la manga de su camisa como buenamente puede. Nota también la respiración pesada de Lewis, el animal está también algo cansado, así que Ben decide que ya es hora de descansar un rato aprovechando la estación de comercio.
—Detengámonos aquí un rato, por favor. Estoy agotado—Comenta, con un tono cansado.
Es cierto que no se pueden permitir muchos retrasos y Ben es consciente de ello. Pero también es cierto que no ha probado bocado desde que abandonaron Tombstone, así que ya comienza a tener hambre y a notarlo en la marcha.
Bruce desciende del caballo de Fox
-Estoy de acuerdo, además, tenemos que comprobar si hay alguien.
Es la primera vez en todo ese tiempo, desde que dejaron atrás el cuerpo de Ironside, en que Bruce dice algo. Su mirada es una mezcla de tristeza y furia.
-Voy a echar un vistazo
Bruce coge su fusil y se acerca lentamente primero hacia el tablero donde hay los papeles amarillentos. Atento a cualquier ruido o movimiento, preparado para disparar a la mínima señal de peligro.
Los papeles del tablero son todos anuncios oficiales de Se busca. Tira Descubrir para alertar cualquier movimiento a tu alrededor. Al final del turno te informo.
Miro los anuncios de "Se Busca" y durante unos minutos me olvido de todo contemplandolos
Motivo: Descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 45-
Resultado: 93 (Fracaso)
Con de una marcha silenciosa después de haber dejado atrás a Ironside Allan desciende como los demás después de rezar un poco e igual que el resto alista su pistola dentro de la biblia falsa que saca para ocultar el arma pero para poder usarla rápido si es necesario, mientras que se acerca a Bruce para decir:
" Si le parece señor Coulon podría ingresar al lugar por delante preguntando para no asustar a nadie adentro, la mayoría de la gente no ataca a un predicador desarmado, mientras que ustedes rodean el lugar, lo revisan y me cubren, ¿que les parece la idea? "
Espero la respuesta para improvisar un discurso religioso para ganar la confianza de cualquier tipo dentro o distraerlo un poco mientras que les doy tiempo a los demás de rodear el lugar.
El predicador me saca de mi ensimismamiento
-Como vea, yo le cubro- le respondo, mientras me quedo junto al tablón empuñando mi fusil
Ben sacude la cabeza, le cuesta creer que haya algún peligro ahí dentro, pero, aunque hubiera la posibilidad, le sorprende comprobar que Coulon es de gatillo tan fácil. En fin, tampoco va a aguar la fiesta al predicador y al anciano, así que, simplemente coloca un pie en el estribo y baja de Lewis, dándole unas palmadas en el cuello para indicarle que puede descansar y agarrando las riendas firmemente. En cuanto los dos hombres acabasen con el teatrillo, ataría las riendas al poste, mientras tanto, lleva su mano derecha a la cartuchera donde tiene su Colt... Mejor prevenir que curar, al fin y al cabo.
Todos los que adopteis una actitud de alerta podeis tirar Descubrir. Esto también sirve para Jerry si así lo desea.
Dewey: al acercarte a hablar con Coulon ves que las hojas del tablero son anuncios de Se busca.
Coulon: Haz 2 tiradas más de Descubrir (3 en total)
Con la biblia por delante el predicador se asoma al lugar para poder leer los cartelones mientras que dice:
" ¡Buen día hermanos! Soy el predicador Allan Dewey, del poblado cercano de Tombstone, que he venido para taerles algunas palabras de dios nuestro señor, además de hacerles un par de preguntas "
Motivo: Descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 36-
Resultado: 6 (Exito)
Oculto detrás del tablón de anuncios, vigilo ante cualquier señal de peligro con mi fusil preparado. Una gota de sudor desciende por mi frente tanto silencio no es bueno
Motivo: Descubrir 1
Tirada: 1d100
Dificultad: 45-
Resultado: 95 (Fracaso)
Motivo: Descubrir 2
Tirada: 1d100
Dificultad: 45-
Resultado: 63 (Fracaso)
Haz otra tirada más de Descubrir por favor.
Motivo: Descubrir 3
Tirada: 1d100
Dificultad: 45-
Resultado: 46 (Fracaso)
Estoy bien cegato!!!. Te la paso por privado porque no sé si quieres que sea pública.
A Jerry le sorprendió un poco la actitud de los veteranos. La verdad es que no se esperaba que fueran a ponerse tan cautos, pero era cierto que desde la muerte del caballo, el desánimo y la preocupación se percataban en el ambiente. El joven desmontó de su caballo y agarró las riendas, caminando tranquilo. No creía que allí hubiese nada malo, pero si el predicador y Coulon querían demostrar algo, él no se lo iba a impedir.
El supuesto Rick te está esperando en el interior del sucio lugar. Toda clase de mercaderías y miscelánea llenan el sitio de arriba abajo. Ruedas o herraduras compiten por el espacio con un enorme oso de peluche. Lámparas y hachas se exhiben lado a lado de sombreros y zapatos de las tiendas de la Costa Este.
Su sonrisa de bienvenida se tuerce un poco al escuchar tus ofertas de preguntas y Fe, pero rápidamente retorna a su entusiasmo inicial:
- ¡Buen día predicador Dewey, cualquier visita es bienvenida aquí! Pueden dejar sus caballos afuera y dejarlos que se refresquen un poco, por aquí no hay ladrones, – su acento inglés es muy bueno, aunque él es mexicano a todas luces - de hecho por aquí casi nunca hay nadie.
Ni antes de entrar ni ahora ves nada sospechoso.
Todo parece estar tranquilo y el predicador entra en el comercio. Los abrevadores están llenos y los caballos quieren ir a beber. Ya todos podéis ver que los papeles amarillentos del tablero son anuncios de “Se busca”.
Mirar todos los papeles dura unos minutos y se traduce en 2 tiradas de Descubrir.
Todos los carteles de Se Busca están bastante anticuados, no conoces a ninguno de estos supuestos malhechores.
El predicado Allan Dewey se relaja un poco, guarda su biblia y le sonríe al joven de origen mexicano, no sin antes decirle:
" Muy bien hermano, muchas gracias opr tu hospitalidad, dios te bendiga, por favor cuentanos si has tenido noticias de la mina o de algún viajero que haya pasado por este lugar ultimamente? "
Nota del guardian: He desmarcado a los otros PJs porque de momento nadie más ha entrado a la tienda.
Cuando el predicador Dewey entra en el establecimiento y no escuchar un ruido más, Ben se relaja. Retira su mano del revolver y permite a Lewis abrevar.
Con curiosidad, revisa el tablón de anuncios. Tenía curiosidad por comprobar algo....
Motivo: Descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 45-
Resultado: 92 (Fracaso)
Motivo: Descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 45-
Resultado: 30 (Exito)
Lentamente me dirijo hacia el establecimiento donde el reverendo ha entrado. Como no oigo ni gritos ni disparos, doy por supuesto que no ha pasado nada, pero igualmente no me fío. El silencio puede ser señal de que no pasa nada o de que puede pasar de todo
Me quedo en un lado de la puerta, pegado a la pared y con el rifle abro la puerta poco a poco para ir echando un vistazo lentamente en el interior. Durante unos segundos cierro los ojos para habituarlos a la oscuridad y poder ver mejor.