Partida Rol por web

Ocaso

6. Apache (amanecer)

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22/09/2015, 07:44
Bruce Coulon

Me acerco poco a poco hacia el antiguo guerrero, no sin dejar de observar de tanto en tanto a los indios que nos vigilan. Sigo empuñando mi rifle, pero lo tengo apuntando hacia el suelo, como señal de buena voluntad y cortesía. No es cuestión de crear más desconfianza, pero hasta que no vea que se calmen, yo no me calmaré del todo y dejaré el rifle.

Observo el dibujo Ishna Witca, con curiosidad. Ben en ese momento se dirige hacia la tienda del jefe

-Ben, mejor espera un poco, no sabemos sus costumbres, tal vez nos presenten a su jefe cuando ellos lo estimen oportuno. Cuando regrese Clem le preguntamos. -A buenas horas desaparece y nos deja aquí solos- Tal vez ha ido a hablar con el jefe para decirle que ya estamos aquí.

Sigo observando el dibujo de Ishna Witca. La criatura que se come a un bisonte me parece terrorífica. No es más que un dibujo pero no puedo evitar que me produzca un escalofrío, y la memoria regresa a la noche anterior, cuando nos encontramos con los lobos. Unos lobos poco comunes

Me arrodillo y por señas intento que el Ishna Witca se fije en mí. Señalándome me presento

-Bruce, yo soy Bruce -afirmo poco convencido de que el indio entienda lo que quiere decir.

Acto seguido le señalo a él y luego a su dibujo, intentando que me diga que es

¿Podría ser una representación de los lobos que nos atacaron?, no lo parece pero las pinturas indias son muy peculiares y podría representar un lobo.

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23/09/2015, 19:06
Director

Los indios responden diferente ante los movimientos de Bruce y de Rumson.

Ante el avance de Ben hacia el centro del campamento, los apache levantan rápidamente sus rifles al grito de alto y entre el ruido de las armas.

En cambio permiten que Bruce se acerque al viejo pintor y únicamente un par de guerreros le siguen como su sombra.

Al lado de Ishna Witca, Coulon observa todo un repertorio de cuencos de madera y de piedra, que albergan una gran variedad de pastas de colores y olores muy distintos.

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23/09/2015, 19:10
Ishna Witca

Después de escuchar las preguntas de Bruce y sin apenas moverse, responde con un hilo de voz.

¿He aha Te Taura Whiri i te Tala? No te tau ka puta i Te Ropo nayeli i te Tiriti o orega tana Parongo mō Te Reo. Ko nga topanga o roto, kia ta mai he ture e whakaaetia ai te karero Apache i nga whare whakawa o te motu –su voz se entrecorta, padece sufrimiento- kia whakataria ana hoki he rapa i raro i te ture, mana e tiaki, ¡e poipoi te reo Apache!

I te tau i muri mai... ka whakamanaia te Ture Reo e te Whare Paremata. Poua ana i kona te mana o te reo Tala a-ture nei ki Aotearoa, tu mai ana ane hoki ko ¡Te Taura Whiri i te Reo Apache!

Ishna Witca se queda mirando sus dedos absolutamente llenos de pintura, parece muy espantado, pero es imposible entender nada más.

En este momento vuelve a aparecer Clem.

-Vamos, el Hombre de las Medicinas os está esperando.

Notas de juego

De momento Ben, he supuesto que tu escena no ha ido a más, pero bueno, siéntete libre de solventarlo como quieras. Estamos en el Salvaje Oeste y todos sois Hombres Libres.

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23/09/2015, 21:29
Ben Rumson

Inmediatamente, Ben, pálido por la sorpresa, alza las manos y se queda clavado en el sitio. Respirando entrecortada y lentamente y mira hacia ambos lados. Jamás ha sentido la muerte tan cercana, ni siquiera en los tiroteos contra los cuatreros. Una refriega es una situación muy distinta de ser apuntado por un montón de rifles. Parece que ha interpretado mal la hospitalidad de los Pieles Rojas.

—Va...Vale...— Murmura, y retrocede un par de pasos.

Cuando el confederado aparece y les dice que el Hombre de las Medicinas les espera, Ben decide que ya ha tenido suficientes sobresaltos por ese día, y se resuelve a dejar que cualquiera antes que él de el primer paso. No va a ser él quien los meta en problemas con los Indios en su propia casa.

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24/09/2015, 09:12
Bruce Coulon

Al llegar Clem, Bruce lo mira y luego observa a Ishna Witca, se levanta y se despide de él. Camina junto a Clem, por lo que aprovecha para hablar con él.

-¿Has entendido lo que me ha dicho el tal Ishna?, si es así ¿podrías hacerme de intérprete?, tengo curiosidad por lo que está dibujando, me recuerda en parte a lo que nos atacó anoche.

Al llegar a la tienda Bruce observa a Ben y a los guerreros indios. Se detiene unos segundos, pero retoma la marcha

-Si nadie quiere ser el primero en entrar, yo lo haré -afirma mirando de reojo a los indios.

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24/09/2015, 10:44
Clem

Creo que te estaba explicando la historia de Ojo de Águila, y no creo que tenga nada que ver con su dibujo porqué ya hace una semana que lo terminó. Ahora solo se sienta delante para mirarlo.

Si te interesa te diré que Ojo de Águila se supone que fue un indio que se marchó de su pueblo en búsqueda de la llama y el fuego. Para ello tuvo que descender bajo tierra hasta llegar a un sitio donde habitaban todos los Espíritus Malignos, quienes a pesar de que vivir rodeados de llamas, eran insensibles a su daño. No se cómo termina la historia pero yo no le haría mucho caso a un hombre que alimenta su cuerpo solo de licor y alcohol, y no estoy hablando de mí.

Llegáis enfrente de la tienda principal del poblado. Se trata de la más alta de todas y en el centro podríais estar todos de pie. El techo está reforzado con sábanas untadas de grasa y en su centro hay un pequeño agujero por el que sale humo.

A cada lado de la entrada hay dos grandes jarrones de barro bellamente decorados con motivos tribales y dibujos de animales.

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24/09/2015, 13:25
Jerry Willis

Clem, ¿nos cuentas en serio esa historia? La verdad es que el hombre sólo parecía pronunciar sonidos inconexos. Debió de recibir mucho más daño del que llevo sufrido yo.

Mis compañeros aun no lo han dicho claramente, pero creo que hablo en nombre de todos cuando digo que siento pena por lo que ha sufrido tu tribu. Evidentemente nosotros no somos como los otros hombres blancos que han tratado de masacraros, pero entendería que desconfiarais de nosotros o incluso trataseis de usarnos como moneda de cambio.

Willis miró a Clem de arriba a abajo. Analizando cada gesto que pudiera hacer después de decirle las palabras "moneda de cambio".

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24/09/2015, 22:48
Allan Dewey

El predicador habia estado callado y espectante entre la tribu de apaches, tratando de estar cerca de Clem para pedirle le tradujera lo que le dijeran para saber lo que paasaba a su alrededor; admiró la pintura de Ishna y prendio´un tabaco mientras lo hacía para ofrecerle al artista después de probarlo, miró a Jerry desaprobatoriamente al escuchar su último comentario esperando no darle ideas peligrosas a Clem antes de decir:

" Muchas gracias por su hospitalidad, con gusto platicaremos con el jefe si nos ayudas con la traducción Clem "

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25/09/2015, 11:44
Clem

He aprendido a respetar las historias de esta gente tanto como las que conocía yo de joven en el pueblo. ¡Que diantres! ¿Acaso no se han visto por toda América fantasmas de soldados confederados que continúan luchando de noche?

Permíteme que me ría muchacho cuando dice que ustedes son diferentes a los demás. Nadie lo somos. Es usted joven y aun no ha vivido ninguna guerra, pero le aseguro que llegada la hora será capaz de ser tan malnacido como cualquier otro. A saber cuántos hombres han matado sus compañeros. Pero de momento aquí no tienen nada que temer si se están quietos. Estan aquí porqué el anciano pidió hablar con vosotros y ustedes aceptaron, nada más.

Notas de juego

Willis: Clem enarca una ceja cuando insinúas que los indios quizás os quieren raptar, pero luego no parece darle más importancia durante el resto de la respuesta.

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28/09/2015, 21:33
Allan Dewey

El predicar toca el hombro de Willis para calmarlo un momento mientras que le sonríe a Clem y le dice:

" Nosotros esperaremos pacientemente amigo al gran jefe, pero por favor no te apartes mucho de nosotros mientras para poder interpretar cualquier malentendido que surja mientras tanto, que dios y nosotro te lo agradeceremos "

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28/09/2015, 21:48
Ben Rumson

Ben no quiere añadir más leña al fuego, así que se muerde la lengua. Qué diablos. Clem tiene razón. Muchísima razón. Es cierto que el sheriff intenta evitar las confrontaciones directas siempre que sea posible, como también es muy cierto que jamás le ha temblado el pulso a la hora de apretar el gatillo para defenderse de los cuatreros e incluso contra los Pieles Rojas más de una vez. La vida en el oeste es así de dura.

—Hablaremos con el anciano.— De nuevo, una frase parca que deja escapar un deje de impaciencia, por la inquietud que siente al estar allí.

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29/09/2015, 01:41
Jerry Willis

Willis decide creer al anciano. A eso se suma la reacción de sus compañeros que parecen molestos por el comentario. Él es un joven aventurero y como tal sospecha de todos, puesto que él mismo actuaría de esa manera.

Finalmente oculta sus pensamientos y asiente a las afirmaciones de sus compañeros.

Perdonad. Hasta el momento sólo habéis demostrado hospitalidad. Tal vez sea mi pensamiento de hombre blanco, que apuñala mi subconsciente.

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29/09/2015, 07:54
Bruce Coulon

Bruce mira a sus compañeros. Ante el comentario de una posible trampa del joven Willis niega con la cabeza, no tiene sentido tendernos una trampa aquí.

-Bueno, ahora que hemos dejado las cosas claras, hablemos con el jefe. Entre unas cosas y otras hemos perdido mucho tiempo. Tenemos a un sospechoso que atrapar y averiguar que diantres está pasando aquí.

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01/10/2015, 11:11
Director

Entráis a la tienda detrás de Clem y enseguida veis que el interior es tan austero en su ornamentación como el resto del campamento. Tan solo destacan un par de grandes mascaras alargadas apoyadas en un rincón. Después de entrar vosotros alguien pasa una manta por fuera de la puerta y la estancia queda en una tenue oscuridad tan solo rota por la luz que entra por el agujero del techo y por el brillo rojizo de unas ascuas que se encuentran en el centro de la tienda. Un fuerte olor dulzón inunda el aire, quizás proveniente también de los rescoldos de la hoguera.

Sentado al otro lado hay un indio anciano que suponéis que se trata del líder de esta pequeña tribu. Lleva dos grandes plumas de halcón cruzadas sobre la cabeza y mantiene la mirada gacha hacia el suelo. Detrás de él y en un segundo plano se encuentra un niño de unos 8 años.

Sin mover la cabeza, el anciano y Clem se intercambian un par de frases rápidas y luego el viejo se pone de pie con la ayuda del niño. Poco a poco da la vuelta a la hoguera y se acerca hasta quedarse justo enfrente de vosotros. Ahora veis que sus ojos están totalmente blancos, cubiertos en un profundo manto de cataratas.

Levanta sus arrugadas manos poco a poco y suavemente empieza a palpar vuestros rostros, uno detrás de otro, con breves pero estudiados gestos. Finalmente y visiblemente satisfecho da un paso atrás.

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01/10/2015, 11:12
Hombre de las Medicinas

Con su habla profunda y pausada os dirige unas breves palabras que de inmediato son traducidas por Clem:

Soy Dah-Keya y hablo en nombre de todos los hombres que viven aquí. Os doy la bienvenida a nuestro pueblo. Gracias por aceptar mi invitación.

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02/10/2015, 14:44
Bruce Coulon

Me quito el sombrero al entrar en la tienda y observo su interior con curiosidad, aunque mi vista acaba centrándose en las dos figuras que hay en su interior, un niño y un anciano. Espero pacientemente a que hablen con Clem, y tras traducirnos sus palabras, saludo con la cabeza.

-Gracias por su hospitalidad y su ayuda. Estábamos en una situación muy delicada

Acto seguido sonrío de oreja a oreja, dejando a la vista una dentadura maltrecha

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02/10/2015, 19:56
Allan Dewey

Notas de juego

" Muchas gracias por su hospitalidad estimado hermano Dah-Keya, pero cuál es el motivo de vuestra invitación caballero? "

Dijo el predicador Dewey poniendo atención en Clem mientras que les hacía el favor de traducirles y regresó la mirada al jefe indio

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04/10/2015, 16:40
Ben Rumson

Ben se encuentra algo incómodo en la tienda. Ni el ambiente, ni el olor, ni la escasa luz hacen que la estancia se le antoje acogedora. Clem tenía razón al fin y al cabo. Cuando uno ha vivido con prejuicios toda su vida, es difícil desterrarlos del cerebro con una simple sacudida de cabeza.

No deja, sin embargo, que sus sensaciones se traduzcan en su lenguaje corporal, sino que busca un lugar a una distancia seguro de las brasas y se cruza los brazos, con actitud impertérrita. Con un poco de suerte, si Clanton puede llevar las riendas del encuentro a una conclusión pacífica, podrán ganar unos estupendos aliados para terminar bien la empresa. 

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05/10/2015, 16:18
Director

Dah-Keyah asiente lentamente ante vuestras palabras. Después de darle unas breves instrucciones al niño, éste se pone inmediatamente a preparar una especie de pasta en un bol de madera. Huele a miel y a ajo.

Clem parece más calmado dentro de la tienda y su habitual espectáculo de tics y manías parece haberse relajado un poco: ahora tan solo insiste en toser continuamente y echar gargajos en un pañuelo.

- El Hombre de las Medicinas sabe que Jerry está herido y quiere atenderle –dice el viejo soldado.

Aunque el anciano no puede ver lo que hace el niño, le va dando instrucciones y correcciones. Cuando el joven termina su cometido le entrega el bol a Dah-Keyah y éste se acerca a Willis, que ya se había destapado la herida y le aplica el ungüento. Le entrega vendas nuevas y le da una serie de recomendaciones para los siguientes días.

Finalmente y de nuevo sentado, el viejo indio manda repartir tabaco. Se trata de la planta casi al natural, y ya intuís que el tabaco será tremendamente fuerte y áspero.

Pasan unos segundos en los que Dah-Keyah parece estar concentrado. Las ascuas de la hoguera parecen no apagarse nunca y le dan una extraña iluminación rojiza a la tienda. El indio escoge con cuidado sus siguientes palabras.

Notas de juego

Vamos a suponer que Clem está traduciendo todo el rato.

Willis: si llevas una vida pacífica en una semana podrás recuperar 2d3 puntos de vida en el brazo herido.

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05/10/2015, 16:20
Hombre de las Medicinas

La voz profunda y pausada del anciano llena de nuevo la estancia.

- El Mal camina libremente ahora por los Llanos. Dos viejos demonios antiguos que el Hombre Blanco no puede comprender y que los Apache temen.

El Hombre Blanco cavó en un lugar sagrado. Un lugar sagrado para el Coyote. Un lugar donde el Coyote luchó contra la Oscuridad en los primeros días. Un lugar donde el Apache no irá.

El indio hace una pausa. Va dando ligeras caladas a su pipa y en seguida expulsa el aire hacia arriba. El niño le cuenta las formas que va tomando el humo antes de desaparecer.

- Como el Hombre Blanco fue avaricioso, el Coyote se lo comió. Pero a uno no quiso cazarlo. El Coyote es astuto y en lugar de matarlo encontró la manera de trepar por su cuerpo. Pero el espíritu del Coyote es demasiado grande para el Hombre Blanco y ahora lo está destrozando. Tenéis que matar al hombre que estáis persiguiendo, porqué en su forma actual el Coyote es demasiado peligroso. No debe de correr más por los Llanos. Mata sin razón y camina libremente entre los ángulos del mundo.