Partida Rol por web

Alba asintió y levantando la vista observó a la mujer llamada Hecate trepar.

- ¿Hecate, tenéis vos capacidad de sanación?

Después se giró al elfo Eldarían

- ¿Y vos, mi señor, que camino tomaréis?

La clériga se informa sobre donde mueven las personas con capacidades curativas para moverse a uno u otro grupo.

Ecate arquea la ceja al ver que se insitia en omitir las formalidades

Me temo señorita Alba, que no me es posible ejecutar ningun poder de curacion por el dia de hoy, pero si lo ven necesario podria contemplarlo para mañana, por otro lado supuse que un abanico de magia para el combate e investigacion seria mas apropiado para la situacion

El elfo asintió al hechicero. No le gustaba la idea de separarse, pero tampoco la de estar demasiado tiempo en ese lugar.

Con un par de zancadas Eldarian se puso al lado de Valduane y le hizo una señal a Jai para que hiciera lo mismo. Luego sacó su arco y le caló una flecha por si tenía que usarlo rápidamente.

Sin necesidad que le dieran una respuesta, Alba, observó como cada cual elegía un grupo. La clériga asintió para sí misma y sin decir palabra comenzó a encaramarse por la telaraña.

El pequeño mediano no sabía en que grupo ir, yendo de un lado a otro indeciso, pero en el momento en que los grupos ya estaban casi perfilados se decidió ir por el que iba a explorar la puerta.
- Yo iré con ustedes. Señalando al grupo que se dirigía a la puerta.
- Esperenme, no puedo caminar tan rápido. Las patitas de Kal se movían lo mas rápido posible para poder alcanzar el grupo.

Dado que escalar no era su fuerte preferia ir por la ultima puerta que faltaba por revisar, ya despues podrian regresar a ver las telarañas si no pasaban a estar encadenados nuevamente, avanzo hacia el grupo que exploraria la puerta con la guja en manos lista para usarla de ser necesario

Aire asintió y agarró a Gorgo por el brazo ¡Bien! ¡Tú vienes conmigo! No te preocupes, yo te protegeré, nadie va a hacer daño a mi gigantito, ¡no, no, no! Aire volvió a restregar su mejilla en el brazo de Gorgo Venga, yo subo primero, que me puedo hacer invisible jijiji

Gorgo después de demostrar a la hembra que la protegía, ella prefifrió ir por otro lado, está claro que ha elegido a otro guerrero para que la protegiera. ¿Pensaría que Gorgo no es fuerte por dejarse atrapar? Recordaría para futuras ocasiones que la hembra llamada Ecate no necesita la ayuda de Gorgo. La otra persona pequeña finalmente decide ir por el otro camino, así que el usar a Gorgo de mula de carga queda anulado. Bien. No le hubiera gustado la contestación del hijo de Grummsh.

Cuando noto el toque de la juguetona persona visible-invisible, la miró con su único ojo, ella si parecía necesitar a Gorgo aunque dijera lo opuesto, así que se dispone a trepar, pero se detiene y busca con la mirada a la hembra humana de pelo amarillo.

Sin embargo el restriegue de la Aire, lo confunde.

-¿Porqué restriesgas cara en brazo de Gorgo?- le pregunta extrañado.

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¿Me ha llamado gigantito?

Cuando Alba comienza a encaramarse a la red se ve obligada a echarse a un lado ya que Ecate, repentinamente, desciende de la telaraña y se une al grupo de Valduane. La clériga se encoge de hombros.

"Parece que no tiene las ideas muy claras", razona. Pone de nuevo atención en trepar, pero sabe que no llegará muy lejos: no tiene mucha pericia en escalar.

- Eh, grandullón - llama la atención de Gorgo - Cuando te fuera posible una mano aquí sería mas que bienvenida - sonríe.

Llevo un rato dando vueltas a un asunto que no me gusta nada: Asmodeo.

Que nuestro compañero desapareciera había sido algo sorprendente y si bien no me daba buena espina, puede que simplemente hubiera decidido salir de ese lugar y olvidar a los drows. Pero al volver, ninguna duda se aparta. ¿ha vuelto por su propia voluntad?¿porque no encontraba el camino de salida y somos la mejor opción?¿nos ha vendido?. Tal vez simplemente se adelantara al grupo, pero no le conozco lo suficiente como para estar tranquilo.

Mi intención era seguir hacia la puerta, pero entonces estaríamos descompensados y no creo que sea bueno eso. Además, Valduane cuenta con la ayuda de Eldarian, que se ha ganado nuestra confianza, y Jai, que ha demostrado ser un compañero temible. Por otro lado, si las cosas se ponen mal en el ascenso, se que Aire nos puede sacar rápido de allí y así puedo cubrir sus espaldas de unos compañeros de los que no me fío demasiado.

-Bien, yo iré por las telarañas otra vez. Espero no tener tantos problemas como la anterior. Asmodeo, no se si lo que nos encontramos fueron trampas o algo permanente, pero tu experiencia en ese campo te convierte en el indicado para ir con Aire en la cabeza, si os quedáis atrapados ella te puede sacar y Gorgo con su musculo también siempre que no se quede atrapado.

Me doy cuenta que mis pensamientos están algo desordenados y apenas se si ya les hemos hablado de nuestro anterior ascenso, pero si Aire va en cabeza estará alerta y tendrá más posibilidades de escapar.

-Muy bien.-Digo asintiendo.-Iré en cabeza con Aire. 

Acercándome a la telaraña, no llego a encaramarme a ella, sino que me encaramo a la pared y trepo por ella cual arácnido. Después de todo, aún no sabemos si algo o alguien siente las vibraciones de esa tela.

Aire miró sorprendida a Gorgo cuando éste le habló

¡Uy! ¡Si sabe hablar! ¡Y habla conmigo!

Pues porque eres muy mono, y muy grande y porque tu brazo es muy suave sentenció Aire mientras se agarraba como si de amigos de toda la vida se trataran, y se quedó allí, tan agusto.

Además, tienes una historia que contarme. ¿Dónde está tu otro ojo? ¿Le tienes escondido? Creo que el mejor lugar para un ojo es aquí dijo, tocando el suyo Es ahí donde se puede ver con él.

- Será mejor partir cuanto antes- dijo el elfo mirando a sus compañeros-. En cuanto acabemos nos reuniremos con vosotros. Si por el contrario necesitamos de vuestra ayuda, os mandaré un mensaje con un murciélago.

- Jai, en cabeza, si ocurriera algo nosotros te protegemos- comunicó a su amigo.

Finalmente el grupo decidió dividirse para abarcar con más velocidad todo el espacio que había por explorar. Solom decidió quedarse junto al grupo que subiría, pues pensaba que el verdadero peligro estaría en las plantas superiores. Al menos así es lo que pasaba en la torre invertida en la que él vivía.

No dijo nada, tan solo agachó su rostro en forma de despedida y se quedó contemplando como el otro grupo abandonaba la sala para ir a investigar la última sala de aquel piso.

Tras las explicaciones de Asmodeo y de lo que había comentado Eldarian sobre las siguientes salas, decidieron avanzar hasta toparse con la puerta que aún estaba sin abrir. Cruzaron unas cuantas salas octogonales más, con sus respectivas telarañas a modo de escalera, hasta llegar a la zona indicada.

Al llegar empujaron las puertas que eran de doble empuñadura para encontrar una sala cubierta de enormes tapices escabrosos que representan muertes horribles y cadáveres en movimiento. Cerca de una pared se alza un enorme bloque de piedra cubierto de seda negra y adornado por candelabros de plata, cuencos de plata y una daga con el mango de plata.

Custodiando la habitación hay tres enemigos, un drow vampiro como el que ya se habían enfrentado anteriormente y un par de abominaciones también muertas vivientes cuyo cuerpo está lleno de odio y rencor, son vampiros drañas, es decir, engendros con torso de y cabeza de drow, y la parte inferior de una araña gigante. Sus manos son extremadamente afiladas y de su boca sobresalen afilados colmillos como los de una araña venenosa.

Al abrir la puerta y ver lo que nos estaba esperando, el mediano se lamento de no ir por la tela de araña, aunque un segundo después se le vino a la cabeza de que seguramente arriba también iban a tener sus problemas.
- Bueno, aquí estamos. Es hora de demostrar lo que puedo aportar al grupo. Aunque sus manos temblaban un poco por el nerviosismo y el miedo que la inminente batalla se estaba por desatar.

Me sorprendia la abominacion que tenian aqui los drow, no solo tenian criaturas muertas vivientes si no tambien a los rechazados de su propia estirpe o sus parias como vampiros, esto parecia muy sospechoso a primera instancia como para suponer que llegaban a ese punto sin la ayuda o instruccion de alguna criatura que los use como titeres

Valduane observó a las criaturas, este era su refugio, su santuario, seguramente donde guardaran sus cosas de valor. 

El hechicero de la tierra se adelantó hasta la puerta y agachándose tocó con la mano el frío suelo de piedra. Con un gesto de la mano mientras pronunciaba las palabras arcanas bastó para que unos barrotes de piedra, gruesos como brazos de ogro, aparecieran justo delante de la puerta.

Con la separación suficiente para que no pudieran atravesar aquellos barrotes.

Rápido, hay que debilitarlos antes de que se acabe el conjuro

La visión de los seres dejó a Eldarian en estado de shock. No sabía que hacer y lo único que podía hacer era mirar a esos engendros con una mezcla de odio, repugnancia y pena.

En su ensimismamiento no se dio cuenta que sus compañeros se estaban preparando para actuar. Él, a pesar de tener el arco en la mano y una flecha preparada, no pudo hacer nada. Entonces Jai, al ver el estado en el que se encontraba su compañero, le cogió por detrás le y apartó de la puerta.

Al ver las criaturas el tigre se puso en alerta al instante. Sus orejas se plegaron hacia atrás y enseñó sus dientes enfurecido.

pero al instante se dió cuenta del estado en el que se había quedado su amigo Eldarian. Le conocía suficientemente bien como para saber que la existencia de esos engendros le dolia y apenaba mucho al elfo.

Así, el tigre-hombre actuó presto, cogiendo a su amigo y llevándolo hacia atrás para quitarlo de en medio.