Partida Rol por web

Argolyn se acercó a observar el desempeño de la clérigo. 

-Notable trabajo, querida. Me alegra ver que tenemos gente que cumple con las expectativas creadas. Creo que somos afortunados de contar contigo.

Lo gritos no eran proporcionales al dolor que sentía. Seguramente se excedió un poco...

Vale, vale... Para una vez que salgo herido tiene que ser ahora... Estoy como una ro... ¡AY!

Aún se resentía de los golpes pero podía continuar. 

Kimbo le ayuda a Teresa a recoger sus cosas y dice
-Que hariamos sin usted señorita! seguro el joven John no salia de esta.

Voltea con una sonrisa curiosa hacia Tork
-Imagina pequeño hombresito, de haber sido tu, uff!

-Si John se siente mejor creo que deberiamos seguir, obviamente con un poco mas de cuidado.

Después de muchos puntos y vendajes, John vuelve a estar (mas o menos) de una pieza.

Con más tranquilidad, avanzáis por el pasillo. Podéis oir varias voces a través de la gruesa puerta, pero demasiado amortiguadas para distinguir qué dicen. Tork pega su oreja puntiaguda a la puerta y oye el golpe recurrente de una herramienta metálica contra el suelo.

La puerta se puede abrir, no está bloqueada. El pasillo sigue hacia el norte, bifurcándose y dando lugar a otra puerta más pequeña

Susurraba las palabras.

¿Inspeccionamos lo que hay detrás de esta puerta o continuamos? Después de lo que me ha pasado debería ir con más cuidado, pero soy demasiado duro para hacerlo.

Debemos investigarlo TODO, así que no veo por qué no empezar por estas puertas. Esta vez, examinémoslas todos en busca de más trampas antes de aventurarnos. A ver si entre todos vemos algo.

Ahora con más tranquilidad, la clérigo estudia la intrincada decoración de la peligrosa puerta doble.

Las intrincadas muescas de la puerta no parecen formar ningún patron reconocible. Sin embargo, Argolyn se esfuerza en ver y palpar concenciudamente cada uno de los recovecos. Ofuscado, se retira a la entrada para poder pensar con tranquilidad. En el momento en el que fija su vista de nuevo en el portón, ahora iluminado por sus compañeros, ve que los murales y la puerta forman entre los dos una extraña escena...

Un humanoide con rasgos de perro sostiene un orbe blanco en su mano derecha y uno negro engarzado en un bastón, que sostiene con su zurda.

Otros humanoides más pequeños con rasgos de diferentes animales están a su alrededor. Los que blanden armas contra él, son impactados por un rayo lanzado por su bastón. Los que le adoran y reverencian parecen alegres, y se situan a su izquierda.

 Cuando Argolyn cuenta lo que ha descubierto, se percatan de que en el pasillo hay dos orbes semejantes a los que aparecen en el mural, pero de color rojo y verde.

¿Y ahora qué ? pregunto después de escuchar la descripción de Argolyn. Los orbes que tenemos son de otro color pero siguen el patrón de la escena uno va ser dañino y el otro no Resoplo ..¿nos lo jugamos a suertes o confiamos en que el de la derecha sera el bueno?

Yo propongo que, yo no, por supuesto, probar con los orbes que se encuentran ahí tirados.

Dio un paso hacia estos con el fin de examinarlos algo mejor. Remal había avisado: quizá fuese perjudicial tratarlos con total desconocimiento. Él, no obstante, hizo caso omiso a esas palabras. 

Caballeros, esta zona está inexplorada. Y entiendo que albergará más peligros por descubrir, como este acertijo de los orbes. También cabe la posibilidad de seguir los pasos de nuestros antecesores por el pasillo Norte de la sala anterior.

El elfo miraba las puertas, reflexivo, mientras todos daban su opinión. Finalmente, habló.

-No lo veo nada claro. Creo que no deberíamos apresurarnos. Exploremos el resto de las zonas, como dice Teresa, antes de jugárnosla al 50% con los orbes. Hagamos lo que nuestra clérigo propone.

Está bien, gallinitas. Miró en ambas direcciones algo estremecido. Continuemos. 

Decidís que el puzzle aun no tiene todas las piezas, así que decidís partir en su búsqueda.

El pasillo norte termina en una puerta, más pequeña que la que habéis dejado atrás. Hacia el oeste, el pasillo continúa hasta dar con otra puerta, donde se desvía hacia el sur. Además, veis que ese pasillo conecta con la entrada y que comunica con dos habitaciones más. Una de ellas, la más cercana, tiene la puerta entre abierta.

Echto... hola? Hay alguien por aqui? - Dice Tork, mosqueada. - No och pareche raro? Debería haber doche perchonach por aquí... Quizách echtán en una habitachión?

Sí, amigo mío... Sin duda deben estar por estas habitaciones o quizás en un nivel inferior. 

El elfo vió como el goblin se asomaba por la puerta entreabierta y decidió esperar a saber qué era lo que él y su compañero detectaban dentro.

La habitación está completamente vacía, a excepción de varios camastros y petates, repartidos por el suelo.

Puede que estén ocultos. Continuemos investigando si no has conseguido ver nada interesante en esa habitación.

Haciéndose el interesante, bordeó la esquina y continuó por el pasillo tratando de no hacer ruido.

Argolyn examinó a conciencia los petates, en busca de alguna pista sobre el origen de los falsos pathfinders.