Partida Rol por web

Zhen respiró aliviado cuando cayó el último goblin. La sala estaba hecha un desastre, pero no se iba a perdonar no mirar si había alguna pista sobre quien estaba detrás de este asalto

quizás deberíamos mirar si hay algo útil en esta sala antes de seguir. dijo señalando la puerta doble

Meri echa un vistazo desde la entrada.

- ¿Hay alguien herido? Deberíamos curarnos antes de avanzar. El oso recibió varios golpes ...

En las mesas y bancos de trabajo sólo había cinceles, martillos, lentes de aumento, pegamento, cables y otras herramientas para construir esqueletos juntando huesos. 

Los goblins sólo estaban en poder de algunas magras pertenencias, basura reciclada en general, como todos los de su especie. 

Sí, antes de continuar recuperemos las fuerzas. Gliss, préstame la varita.

Régulo jadeaba exhausto y tembloroso a causa del veneno. Aún tendría que aguantar algo más de tiempo. 

Se arrodilló junto a él y lo golpeo ligeramente con ella. Ya erguido:

¿Veis algo que nos pueda ser de utilidad? Ojeó también la habitación, casi sin impostarle. Continuemos pues, cuanto más tiempo perdamos más ganará Charvion para continuar con su plan.

Otros grupos de pathfinders entran en el mausoleo y varios reducen a una figura espectral en otra sala y revisan algunos libros en otra.

Llegáis a otra sala con un artefacto familiar: ¡La Jaula de Almas de Charvion!

Una extraña jaula de metal yace en el centro de la habitación como un gran loto esquelético ondulante. Largos zarcillos translúcidos de éter fustigan violentamente del artefacto, mientras crepita una luz misteriosa a través del marco de metal y hasta el pilar fantasmal que erupciona desde el centro del dispositivo hacia el cielo nocturno. 

Una docena los cuerpos rodean la jaula palpitante, cayendo sobre el piso y convulsionando locamente.

Bueno... esto si que es un espectáculo! ¡Si todas las obras de teatro son así, no quiero perderme ninguna!

Zhen observó el extraño artilugio desde la distancia. Con cierto temor pensó que esa cosa alteraba el equilibrio cósmico que predicaba Irori. Los zarcillos parecían peligrosos. Él se veía capaz de esquivarlos, pero dudaba que algunos de sus compañeros pudiesen pasar.

Así que ésta es una de las fuentes de poder que utiliza Charvion para propagar todo este caos.

Desde la distancia observaba la jaula, intranquilo. Los látigos de éster supondrían un obstáculo más en el camino si pretendían seguir adelante.

Meri, te atreves con la jaula? Nosotros te cubriremos! - Sonríe, confiada.

Meri sonríe mientras prepara unas ganzuas.

- Me encantan los retos. Contad conmigo.

Los zarzillos se precipitaron sobre los valerosos patfinders cuando avanzaron hacia la Jaula de Ecos Almas, o lo que pudiera ser el artefacto. Meri tenía una oportunidad de desactivarlo. 

Desafortunadamente, todos sufrieron algo de daño por el frío etéreo sobrenatural. 

Meri quedo algo mareada tras la descarga pero se acerco a la jaula, dispuesto a hacer su parte.

Los rayos parecen perder parte de su fuerza, pero varios impactan en Meri.

Esto... em... por dónde?  Ah...

Me empieza a doler la cabeza, esto de pensar no se me da bien

Gliss recibe dos pequeños rayos, pero agarra a Meri y se le señala unos mecanismos oscilantes que parecen ocultar una cerradura. La ladrona abre la cerradura, pero el místico objeto sigue mostrando engranajes cambiantes.

Esquivando las sacudidas, se acercó para ayudar a Meri, que parecía haber tenido éxito con una de las cerraduras.

Tres palabras salieron de sus labios y sus ojos se tornaron blanquecinos, pero esta magia, por el momento, aún se escapaba de su comprensión.