Partida Rol por web

Jenssar noto las miradas del grupo posarse sobre él. Miro a cada uno de sus inesperados comensales, sabiendo que sus ojos sin pupilas solían desconcertar a los humanos no acostumbrados. Tras un instante reflexionando, comentó –Debo confesar que es un trabajo interesante, y una oferta tentadora. Sin embargo, Mynock es un tipo muy peligroso, y seguro que muchos cazarrecompensas han intentado, e intentan todavía, echarle el guante.

Se giró para encarar a Zendra - ¿Es posible que tu empleador te haya dado alguna pista firme que seguir? ¿Alguna pequeña ventaja para poder capturarle?  Y una cosa más. ¿Podremos quedarnos el equipamiento que rescatemos de este pirata?

-Podreis preguntarselo a él mas adelante si aceptais pero seguro que eso no es un probelma, Jenssar

. Bienvenidos, Kazer, Roorh... -Zendra podía notar una especie de titubeo en el jedi al aceptar. No le preocupaba, de momento. Sabía que tenía un as en la manga en cuanto a él se refería pero, ciertamente, prefería no tener que ponerlo sobre la mesa tan pronto.

-En cuanto a pistas, antes de darme mas detalles me ha encargado reunir un grupo de accion. De ahí que os haya estado observando...

Jenssar esbozó una media sonrisa - Pues aún sin contar con una respuesta clara a ambas preguntas, no me queda otra opción que aceptar. Vamos, que si os marcharais los 3 ahora de aquí sin mi, nunca me perdonaría esta oportunidad perdida. Así que estoy dentro. ¿Un brindis, por nuestro exito y nuestros pellejos intactos al terminar?

Sonrío y asiento a las palabras de Jenssar, lo que termina por firmarnos como un nuevo grupo de compañeros de trabajo y, por que no decirlo, de aventuras. Me atrae la idea de estar con otras personas si es que resultan ser buenos tipos. No sé como son ellos en realidad, pero a priori no parecen malas personas, aunque eso es algo de lo que debo cerciorarme.

Le hablo a la mujer aprovechando el nuevo acuerdo:

  - "Ok Zendra, dinos ahora qué hacer. ¿Como nos reunimos con nuestro cliente? La verdad es que no quiero estar por aquí más tiempo del necesario pues este bar ya demostró no ser demasiado tranquilo ni discreto. Aunque no veo problema en tomarnos una copa antes de comenzar, para celebrar como dice nuestro amigo."-Termino diciendo mientras miro amistosamente al Duro.

Me quedo tranquilo, me reclino en mi asiento con gesto cansado después de todo lo que he pasado y por fin puedo tener algo de calma. Me quedo ahí un momento, con las manos en mi nuca y los ojos cerrados esperando a que nos sirvan un trago mientras charlamos de negocios.

Zendra sonrió ante las palabras del duro.

-Buena elección.

Después agarró su copa y se la ventiló de un trago.

-Acabaos las copas y pongámonos en marcha. 

Jenssar termina su copa, recoge el cofre espacial con sus pertenencias y sigue a Zendra.

Roorh observó  la escena, una negociación rápida y sencilla. -Demasiado sencilla- pensó. Ya había experimentado situaciones semejantes en su tiempos como mercenario. Había aprendido ano hacer preguntas y a sospechar de todo. Antes de levantarse gruño:

- Roorh gruoor graaa wooor...-  señaló la mesa mientra clavaba su mirada e las curvas de la Umbariana.- gruoor graa wuoooor rooar waaar gruuuu roooow...-

El enorme wookie se relajó sobre su asiento,aguardando que la Umbariana diese el siguiente paso en la negociación.

Zendra levantó una ceja ante la actitud del wookie.

-Os daré los créditos cuando estemos en la nave de camino a la misión. Si no, la tentación de cogerlos y echar a correr es muy grande. Lo sé por experiencia. Si no quieres venir, quédate ahí y buscaré otro grandullón para el grupo. Aquí somos todos mayores.

Sientes el fluir de la fuerza y como esta se expande a tu alrededor cubriendo todos los huecos de la cantina. Desde los reservados, hasta los servicios, la barra y un hueco debajo de la barra que parece una habitación oculta. No hay ninguna señal de usuarios del lado oscuro, o gente sensible a la fuerza.

Tras aceptar ir a ver al misterioso contratista y acabaros las bebidas, salís de la cantina siguiendo a la Umbariana. Esta se dirige otra vez directamente a la zona de los muelles. Pasa de largo los atraques de transporte, los de personas y se dirige a la zona de muelles privados. Dos droides de guardia pasan a vuestro lado girando sus metálicas cabezas con un zumbido, y con otro las vuelven hacia adelante. Zendra se detiene ante el muelle 17. El timbre de llamada no os hace esperar y la puerta se abre revelando un precioso crucero de lujo tipo Nubian, plateado excepto en las zonas donde el sol incide directamente que la pintura cambia a color azul eléctrico. 

Un humano espera al pié de la rampa. Viste un traje blanco con un manto gris oscuro bordado y botas de viaje. Es moreno y bastante apuesto. A medida que avanzáis hacia él podáis notar que su porte es elegante y tiene una gran sonrisa. Os saluda con una reverencia afectuosa, como si fuera una ceremonia.

-Saludos, soy Heran Jorkin y os doy la bienvenida.-  
 

Zendra se tomó la molestia de hacer las presentaciones.

-Sr. Jorkin, le presento a los hombres que necesita: el Duro se llama Jenssar, el humano, Kazer y el wookie, Roorh. Todos han aceptado el encargo pero tienen algunas preguntas que hacerle personalmente.

Me pongo de pie con el resto, pues en realidad nunca tuve un trago que acabarme, me tapo la cabeza con la capucha para mantener mi rostro alejado de miradas indiscretas y me pongo en marcha junto a mis nuevos compañeros. Camino con la guardia alta de quien es perseguido constantemente, a pesar de la seguridad que conlleva la compañía de aquellas personas. Al avanzar por el puerto, mantengo mis sentidos atentos a cualquier clase de estímulo que me indique que hay algo de lo que temer.

Recorremos el lugar y me preocupo un momento cuando los droides no observan pues temo que tengan algo que ver con los droides que antes nos topamos. Aun así mantengo la calma y disimulo bien mis cuidados hasta que finalmente llegamos al sector privado, donde vemos la hermosa nave y al hombre que nos recibe.

Escucho su presentación y la que la Umbariana nos hace para finalmente hablar por mí mismo:

 - "Es un placer conocerle, Sr. Jorkin. Soy Kazer Almoth y estoy a su servicio para el trabajo que nos han propuesto. Considere que estoy dentro de inmediato, aunque de todas maneras agradecería cualquier información adicional del encargo."

La verdad es que no tengo intenciones de negarme aunque quisiera hacerlo. Aun las condiciones sean distintas o poco favorables para una negociación común, la verdad es que la mujer me tiene un poco acorralado y no haré uso innecesario de ningún recurso mientras las cosas no se salgan de control, pues me expongo al usar La Fuerza y jamás usaría la violencia contra una persona inocente aunque eso signifique correr peligro.

-Es un placer Kazer Almoth.-Responde educadamente el humano.

Con un gesto de su mano os invita a subir a bordo.-Por favor, hablemos de las condiciones en privado.-Un droide de protocolo os precede hasta una sala de reuniones, donde una mesa dorada con grabados rojos en cristal ocupa la mayor parte de la estancia. Las sillas son a juego, de cristal rojo con los mismos grabados en dorado. Son anchas y regulables en altura, permitiendo a una gran variedad de especies disfrutar con comodidad.
Heran Jorkin es un humano imponente. No en el sentido físico, sino en el porte, el habla y sus gestos. Parece un tipo capaz de convencer a un Hutt y por lo que habéis visto, se reúne bastante a menudo con gente de clase social alta. Pero invita a confiar en él. Tiene algo en la personalidad que no implica sospecha o aversión hacia él.

-Por favor, si deseáis algo podéis pedírselo al androide, tengo casi cualquier bebida de la galaxia.-Una sonrisa amable acompañó la frase.-De acuerdo, comencemos de inmediato ya que no sois burócratas y las alabanzas y demás regateos políticos no van con vuestra personalidad. Ni con la mía. Represento al gremio de comercio de Ultaar y por lo tanto, de todos los comercios del planeta. El pirata llamado "El Mynock" han cometido diversas atrocidades en la ruta Lantillian y debe pagar por ello. Desgraciadamente, las autoridades actuales se encuentran en una posición de caos y tienen bastante con mantener una cierta paz y estabilidad en el sector como para perseguir a un escurridizo pirata.-El droide apareció con una bebida de color azul en una bandeja. Heran le dio un sorbo sin dilación.-En los últimos meses se ha convertido en una pesadilla para el gremio que tiene que pagar unas tasas elevadas por una escolta decente. Mata, roba, destruye las naves y los restos de la tripulación superviviente con ella. No podemos tolerarlo y ahí es donde entran ustedes.- 

Ante el silencio que siguió a sus palabras, Heran continúa. Le hace un ademán con la cabeza al androide el cual desaparece por una de las puertas.-Como les habrán comentado, la paga es extraordinaria. Les daremos 2500 créditos ahora mismo y otros 2500 al finalizar la tarea. Deben acabar con el Mynock, sus matanzas, robos y saqueos.-La exclusa se abrió con una descompresión dejando paso al droide. En sus manos en vez de una bandeja tenía un maletín que tendió a su amo. Heran Jorkin abrió el maletín y lo giró hacia vosotros revelando cuatro partes diferenciadas de dinero.-Si aceptan ahora mismo pueden coger el dinero y les explicaré el resto. Si no, les ruego que se marchen para continuar con aquellos a los que le interese. Gracias.-

El dinero permanecía delante de vosotros, en cuatro compartimentos del maletín, con la agradable sonrisa de Heran Jorkin. 

A mi no me mireis. Yo ya he aceptado.- dijo Zendra poniendose juanto al comerciante.

El enorme wookie que se había mantenido tranquilo mientras  se exponía el trabajo. Algo que había aprendido de su temporada como  secuaz de esos piratas estelares que rondan el borde exterior. Ahora, cuando todo estaba dicho, Roorh se acercó a la mesa, ya que había permanecido de pie  mientras el humano hablaba,y gruño:

-¿wooooruuu raaw roooow, guraaag ?.- su mirada  denotaba que no se andaba con rodeos. - wrooor rugar  wuuuur roooog agruuuuw wooor ruuur gruuuu wruoooo... warrg graag ruuuww..- dejo caer  con fuerza ambas manos sobre la mesa, que sonaron de manera contundente. 

-No me malinterpretes. No he dicho que sea un trabajo fácil, mas bien lo contrario, ya que elude todos los controles, escoltas y patrullas. Y no hay truco ninguno.-Heran Jorkin sacó las placas de metal de un compartimento. Eran créditos galácticos, de unos 8 cm de largo y en cada una de ellas se podía ver la cifra que representaban. 500 créditos. El humano se las tendió a Zendra.-Lo prometido es deuda y siempre pago mis deudas. No tengo nada personal contra ese pirata, excepto que represento a aquellos a quienes sí lo tienen. Hace un par de meses sus ataques se volvieron salvajes, agresivos. Antes dejaba supervivientes si no presentaban resistencia. Ahora mata indiscriminadamente. Eso el lo único que tengo contra él. El gremio a ideado un plan para que os hagais amigos suyos, ganaros su confianza y entonces acabéis con el que ha acabado con la vida de 187 almas, incluyendo dos niños.-Heran giró el maletín hacia el enorme Wookie.-¿Aceptas?.